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NOTAS DEL DIRECTOR...
En el año 2014 estuve en México trabajando con la “COLECTIVA CEREZA”. Esta organización ayuda a mujeres presas con sus casos y con su reinserción posterior. Allí conocí a la madre de Rocío y Alejandro que me llamó la atención por ser una persona positiva y enérgica en un ambiente muy difícil.
Más tarde conocí a sus hijos y tuve la misma sensación y en el momento en el que puse la cámara delante de ellos tuve la sensación de que podía comunicarme de una manera muy cercana. Tienen una clase muy especial de honestidad y madurez.
A medida que les fui conociendo descubrí más sobre su historia.
Desde muy jóvenes han tenido una vida llena de obstáculos y situaciones muy difíciles, pero aún así la familia siempre se ha mantenido firme y unida. Esto me hizo sentir verdadera admiración por ellos.
CASO LEGAL DE LA MADRE...
La madre de Alejandro y Rocío (Rocío Rico) llevaba varios años regentando un pequeño comedor en Palenque, ciudad de México conocida por sus ruinas arqueológicas y por el elevado número de hoteles y turistas que alberga cada año. Pero también es una ciudad peligrosa para los inmigrantes ya que por allí pasa “la Bestia”, una red de tren de mercancías utilizada por inmigrantes de mayoría centroamericana para atravesar rápidamente México hacia Estados Unidos. La ruta de Palenque es la de mayor incidencia de secuestros y extorsión de inmigrantes, por un lado por el crimen organizado y por otro lado por la propia policía.
Rocío, dado que eran clientes de su negocio, tenía contacto directo cada día con muchos inmigrantes que viajaban en la Bestia y con personas vinculadas a la extorsión de los mismos. Un día la policía le propuso formar parte de una rueda de reconocimiento para saber si había visto habitualmente a las personas que tenían detenidas. Pero lo que realmente hicieron fue encarcelarla y vincularla al crimen organizado. Su hijo Alejandro acudió a la comisaría a ver lo que pasaba y la policía le ofreció la opción de dejar libre a su madre a cambio de una cierta cantidad de dinero. En ese momento la familia no tenía el dinero que les pedían ni manera de conseguirlo. Tampoco tenían recursos para poder demostrar la inocencia de Rocío a través de abogados.
Rocío Rico fue encarcelada preventivamente en Abril del 2013. Durante un año a Rocío nadie le informó de cuánto tiempo tendría que estar en prisión preventiva ni cuando se iba a celebrar su juicio. En ningún momento salió de la cárcel para ir al juzgado ni nunca habló ante un juez. Sin embargo, su juicio se celebró y tras haber pasado un año en prisión preventiva, un día le notificaron su sentencia: 10 años de cárcel por extorsión y pertenencia a grupo delictivo.
Tras dos años y cuatro meses en prisión y solo dos días después de que el equipo de filmación de esta película la fuese a visitar a la cárcel la notificaron que su caso se iba a reabrir. Esta noticia llegó completamente por sorpresa. Mayor sorpresa todavía fue cuando unos días más tarde la notificaron que quedaba libre de todos los cargos debido a la ausencia de pruebas.
MUJERES PRIVADAS DE LIBERTAD EN CHIAPAS...
El empobrecimiento, la exclusión social y la violencia de género, así como la discriminación hacia la mujer en todos los ámbitos sociales y que repercute el acceso desigual a la justicia, son factores determinantes para la situación de cárcel de las mujeres, además existe un elevado número de mujeres en prisión con bajo nivel de escolaridad como consecuencia de no haber tenido acceso a la educación, lo que representa menos posibilidades a la hora de poder reinsertarse en l sociedad. Los datos ponen de manifiesto que la justicia es mucho más dura para las mujeres que para los hombres ante un mismo delito. Sufren mayor riesgo de indefensión jurídica. Las mujeres de la cárcel son mucho más rechazadas por la sociedad que los hombres, siendo abandonadas por sus familias en un alto porcentaje de casos y no pudiendo regresar a sus comunidades o lugares de origen incluso por riesgo de su integridad física. El 60% de las mujeres privadas de su libertad en Chiapas son indígenas y el 10% centroamericanas.