PREMIOS Y FESTIVALES

- Festival de Málaga 2016: Biznaga plata a la Mejor película, actor y guion
- Brussels film festival: Premio del jurado
- Festival de San Sebastián 2016: Sección "Made in Spain"
- Festival de Sitges 2016: Sección "Sorpresa"
- Festival de Mar del Plata 2016: Sección oficial
- BFI London 2016
- Festival Cinespaña de Toulouse 2016: Premio Mejor guion
- Festival de cine español de Marsella 2016: Premio Mejor guion
- Festival de Begur 2016: Corall D'Or Mejor película

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INFORMACIÓN EXCLUSIVA

NOTAS DEL DIRECTOR...
Presentación:
   En Estados Unidos la mayoría de la población sigue creyendo en el llamado Sueño Americano. Tal cosa siempre me ha fascinado y fue la razón esencial que me empujó a hacer esta película.
  Durante mi periodo viviendo allí, me costaba creer lo que tan a menudo se escucha en televisión o en los discursos políticos: “América es el país en el que cualquier persona, independientemente de su origen, raza o condición social, puede conseguir todo aquello que se proponga”.
  Con este punto de partida, Martín Bacigalupo -coguionista y actor protagonista del filme- y yo desarrollamos la idea inicial dando forma al personaje de Larry de Cecco. Un individuo desequilibrado inmerso en la lucha por perseguir ese sueño, en el que su precaria condición de mozo de mudanzas no le impide aspirar a convertirse en un actor profesional de anuncios publicitarios.

Tras la sombra de la identidad:
  Siempre tuvimos claro que la acción debía desarrollarse en Nueva York. El concepto del fracasado (loser) está muy extendido en la sociedad estadounidense, donde transmitir la imagen “correcta” es fundamental para alcanzar el éxito social y laboral.
  Larry se ha construido un personaje para conseguir sus objetivos. Y en un intento desesperado por encajar en la comunidad, se ha convertido en un ferviente cristiano que busca respuestas en los sermones de un pastor evangelista (Timothy Gibbs), cuya retórica patriótica y ultraconservadora le refuerza en sus planteamientos: «Nadie puede poner un límite al Sueño Americano».
  Todos estos ingredientes conforman el universo de Larry, el cual colisiona de frente con su incapacidad para relacionarse y adaptarse en sociedad.

La cara sombría del sueño americano:
  'Callback' surgió de la estrecha conexión entre Martín Bacigalupo y yo. Nuestros caminos se cruzaron mientras me encontraba en Nueva York trabajando en otro guion. Cuando surgió la idea de hacer la película, dejé de lado mis otros proyectos para concentrarme en éste.
  Por su parte, él ya llevaba 8 años en Nueva York trabajando como actor. Había experimentado en su propia piel las dificultades a las que se enfrenta cualquier extranjero -Martín es chileno- que emprende de cero una carrera como actor en Estados Unidos.
  Nuestra visión escéptica sobre la sociedad americana dio forma al embrión de 'Callback' y a la figura de Larry de Cecco: un perdedor estructural un residuo del Sueño Americano.
  En lo que se refiere a su interpretación, el hecho de haber coescrito el guion junto a Martín permitió que durante el rodaje apenas tuviera que darle indicaciones, él sabía perfectamente lo que tenía que hacer. Su trabajo como actor es de una solidez aplastante, un hecho que el Festival de Málaga reconoció en su pasada edición, otorgándole la Biznaga de Plata a Mejor Actor.

Una mirada incómoda:
  Siempre me han interesado los personajes que se resisten a adaptarse a lo establecido, aunque sea a costa de quedar desplazados o abocados a la locura.
  Con 'Callback' he querido provocar emociones contradictorias en el espectador, invitándole a seguir a un personaje que provoca rechazo.

ENTREVISTA AL DIRECTOR...
El guion de 'Callback' lo escribes a cuatro manos con Martin Bacigalupo, el actor protagonista. ¿Cómo surge en proyecto?...
.- Fue en Nueva York, donde Amadís de Murga, protagonista de mi anterior largo, Open 24h, me presentó a Martin. Él hacía ocho años que estaba allí, tratando de abrirse camino como actor. Compartíamos una cierta visión escéptica de la sociedad americana, i los dos éramos outsiders que intentaban buscarse la vida en los Estados Unidos. De estos puntos de contacto surge el embrión de 'Callback'. Pronto concebimos juntos el personaje de Larry de Cecco, el protagonista de 'Callback'. Martin no tenía experiencia como guionista pero, como había hecho bastante teatro como actor, pensé que podría trabajar muy bien escribiendo diálogos, mientras yo me ocupaba de la estructura del guion.

Desde que llevaste Open 24h a Sitges en 2011 han pasado cinco años. ¿A qué se debe este tiempo de silencio?...
.- En realidad, son dos años y medio los que pasan desde Open 24h hasta que, el 2014, rodé 'Callback'. En este tiempo produje American Jesus, de Aram Garriga, y también me marché a Nueva York a trabajar en otro proyecto que todavía no ha visto la luz por cuestiones presupuestarias. Además, desde que rodamos 'Callback' el 2014 hasta su estrena, el 2016, al Festival de Málaga, estuve inmerso en la postproducción. Mi montador, Emanuele Tiziani, y yo remontamos la película varias veces hasta tener la versión definitiva. Ha sido un proceso largo y complejo.

El film habla de un inmigrante en los Estado Unidos. ¿Cuál es vuestra visión sobre este país de acogida?...
.- Estados Unidos es una tierra de oportunidades y son líderes mundiales en algunos aspectos, muchos de ellos positivos, pero a la vez es un país de contradicciones y de desigualdades extremas. A menudo oyes defensas encarnizadas del llamado “sueño americano” que te provocan incredulidad. La sociedad americana tiene un lado muy oscuro, que se ha explorado en films como 'Happiness', de Todd Solondz, una película de cabecera para mí. 'Callback' es mi visión, escéptica y perpleja, de esta sociedad.

Nos gustan mucho los tonos grises, de un realismo apagado, que definen la estética de la película. ¿Cómo trabajasteis la imagen?...
.- La idea era aprovechar la luz natural de los mismos espacios y usar solo la luz artificial cuando pudiera reforzar ese naturalismo. El director de fotografía (Sebastián Vasquez) y yo teníamos muy claro que queríamos: tonos pálidos y monocromáticos para crear una atmósfera enfermiza. Después de hacer algunas pruebas nos decidimos por una cámara con sensor de 16mm. Era la que nos daba un resultado más semejante a aquello que teníamos en la cabeza. Después, en la fase de corrección de color, con Aram Garriga, conseguimos potenciar el contraste y sacarle todo el jugo a este concepto de “falso naturalismo”, con resultados impresionantes. Le felicito por su trabajo.

¿Cómo levantasteis la película por lo que respecta a la producción?...
.- La levantamos de forma muy independiente a través de mi productora, Zabriskie Films. De hecho, empecé a rodar yo solo, con mis recursos, sin ningún tipo de financiación. No tenía ninguna duda que los resultados serían espectaculares. Cuando ya teníamos bastante material rodado entraron TV3 y el ICEC. También he tenido la ayuda de Visualsuspects, la productors de Aram Garriga; de Glass Eye Pix, de Larry Fessenden; y de The Alkeme Company, de Timothy Gibbs. Los dos últimos actúan en la película.

Háblanos de Larry, el protagonista. Tanto de el actor que lo interpreta como del personaje en sí...
.- Larry es un residuo de la sociedad americana. Un personaje frustrado y resentido que reclama su trozo del sueño americano, y puede reaccionar de manera brutal si no consigue aquello que quiere. El hecho de ser extranjero lo hace muy interesante, que se avergüence de su origen y trate de mimetizarse con el entorno, razón por la cual se hace evangélico ultraconservador. También me interesaba el tema de la identidad: en los Estados Unidos, ir al mercado negro a hacerse unos documentos falsos para poder trabajar es una cosa totalmente habitual. Yo mismo lo he tenido que hacer. Este tema me fascina: el hecho de no saber quien es Larry en realidad, y que a lo largo de la película vayan cayendo todas las capas de este personaje tan desagradable, y que el público pueda entenderlo. En el fondo, es un personaje muy humano. Eso lo hace aterrador y divertido a la vez.

Cuando la violencia estalla, lo hace rotundamente. ¿Cómo te planteaste la cuestión, fundamental en cine de género, de mostrarla o no mostrarla?...
.- Con mucha austeridad. Los estallidos de violencia en la película no duran más de veinte segundos, que es como pasa en la vida real, de forma inesperada, seca y contundente. Sin que tengas tiempo a reaccionar. Esto es lo que he intentado reproducir de manera cinematográfica. En ciertos momentos, como se ve en la película, también he probado de distanciarme, recurriendo a planos generales y aprovechando el fuera de campo. No me gusta el cine que se recrea en la violencia de forma gratuita; lo encuentro pornográfico, en cierta manera, y me hace dudar de las intenciones del realizador.

Como catalán residente en los Estados Unidos, ¿como lees todo lo que está pasando allí ahora mismo en términos políticos?...
.- 'Callback' se ve muy relacionada con el momento en que se vive actualmente en los Estados Unidos, que están sumidos en un terror irracional. Se teme al lobo solitario, sobretodo si es extranjero, alguien que puede atacar a ciudadanos norteamericanos. Es un discurso que ahora ha popularizado Donald Trump y que, incomprensiblemente, ha calado en buena parte de la población. Por eso, también me gustaba mostrarlo de manera sarcástica mediante un personaje como Larry, que a pesar de que es peligroso no deja de ser un tipo patético y ridículo. Tengo mucha curiosidad por ver cómo reacciona el público norteamericano.

¿Crees, en este sentido, que 'Callback' es una película política?...
.- Totalmente. Allí donde se ha visto, la película despierta un cierto debate sobre si es cine de género o de autor. Me gusta que nadie se ponga de acuerdo. 'Callback' funciona como thriller pero a la vez como una comedia negra, como un psicodrama oscuro, como una película política… No soy un amante del cine de género porque no me gustan las etiquetas. En el momento de crear, no me ayuda nada tener que adaptarme a las pautas o códigos propios de un género. 'Callback' no respeta las normas de ningún género pero funciona a muchos niveles y es aceptada entre muchos tipos de públicos. Creo que esto es de lo que estoy más satisfecho.