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SINOPSIS
Ben es un viudo de setenta años el cual está hastiado de su jubilación, así que decide volver a trabajar convirtiendose en el becario de una empresa de modas online...
INTÉRPRETES
LEA VAN ACKEN, FRANZISKA WEISZ, FLORIAN STETTER, LUCIE ARON, MORITZ KNAPP, MICHAEL KAMP, GEORG WESCH, CHIARA PALMERI, LINUS FLUHR, BIRGE SCHADE
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BSO
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COMENTARIOS DEL DIRECTOR...
El tema de esta película no se parece nada a lo que he hecho hasta ahora. Formalmente, retoma algo que utilicé en el pasado y de hecho existen ciertas conexiones entre los contenidos.
¿Por qué este formato?.- Trabajar con cuadros fijos que llegan a los 15 minutos de duración fue una de las experiencias más gratificantes que he hecho desde que debuté con la película NEUN SZENEN en 2006. Aquella película funcionó como una comedia y cosechó un inesperado éxito en el público de los festivales. Así que tuve claro que era algo que podía retomar y desarrollar en el futuro. Aparte del hecho de que esta es la manera más maravillosa y concentrada de pasar un día de rodaje, también esconde un tesoro artístico. La mirada sin concesiones de una cámara inmóvil, un espacio que uno percibe siempre como un todo, un grupo de actores que sigue una coreografía propia del teatro y que puede imponer este espacio a través de una cámara que lo cubre todo, desde el plano largo hasta el primer plano. No necesitamos coger a los espectadores de la mano a través de la resolución y el montaje; en cambio, les permitimos que sus ojos vaguen y perciban todo en su simultaneidad. Luego está el trabajo con los actores que exige una concentración totalmente diferente a una película convencional a través de las tomas largas... La presión que se puede acumular lentamente en una toma larga, única. Todos ellos son aspectos que quería retomar de alguna manera.
¿Por qué este tema?.- El tema de "Camino de la cruz" es, si se quiere, una versión de "Neun Szenen" vista desde su lado oscuro. Entonces nos hicimos una pregunta: ¿Qué pasa entre los jóvenes de 20 años y sus padres? ¿Cómo se consigue cortar el cordón umbilical? ¿Cuántas maneras hay de aferrarse a tus hijos o para darles su libertad? Esta vez, empezamos unos años antes y nos preguntamos: ¿qué sucede en una familia profundamente religiosa que reza a un Dios que se toma más en serio a sí mismo que a cualquier otra cosa? Por supuesto, nos encontramos frente a un par de problemas muy importantes que hemos "desglosado" en preguntas individuales. Mientras que a finales del siglo XX aun así podíamos creer que la religión se había vuelto más o menos irrelevante, hoy vemos lo opuesto en todas partes: la multiplicación de los cristianos evangélicos en Estados Unidos, la presencia permanente del Islam militante en los medios de comunicación... La Sociedad de San Pío X, que sirvió de inspiración para la Sociedad de San Pablo en la película no es, en comparación con otras sociedades, un movimiento de masas a pesar de que tiene sus seguidores. Y lejos de estar al margen del catolicismo, ocupa en realidad el corazón de la Iglesia. Según ellos, la Iglesia se vació de contenido en la década de los 60, y sólo la Sociedad de San Pío X se mantuvo fiel a la verdadera esencia de la fe. Su incuestionabilidad plantea algunas preguntas incómodas a la Madre Iglesia: ¿Hasta qué punto se lo toma en serio? ¿Está difundiendo la fe con compromiso y coherencia o es una especie de compañía moderna de servicios especializados que ya no interesa a nadie?
¿Por qué ahora precisamente?.- Hace mucho tiempo que no oíamos hablar de la Sociedad de San Pío X. De vez en cuando te encuentras con artículos divertidos o bien intencionados sobre los "fundamentalistas religiosos". Pero fue con la elección de Joseph Ratzinger como Papa de que el catolicismo - incluyendo los tradicionalistas- volvió a ser protagonista del debate público. En 2009 el Papa revocó las excomuniones de los obispos de San Pío, y, al mismo tiempo, también salió a la luz que uno de ellos, el obispo Richard Williamson, mantuvo negó repetidamente el Holocausto, lo que produjo grandes convulsiones en la Iglesia. Una página web agitadora y repleta de odio llamada kreuz.net comenzó a atraer a un público cada vez más numeroso hasta que el año pasado generó tantas protestas que fue retirada de Internet. Mientras investigábamos para la película, nos dimos cuenta de que la Sociedad de San Pío -que parece tener muchos seguidores- había dejado de celebrar sus servicios en almacenes y otro tipo de edificios industriales; dondequiera que miramos, habían encontrado sedes en iglesias bien construidas, muchas de ellas nuevas. Todos estos aspectos sugerían que era el momento adecuado. Por otra parte, percibí en mis propios círculos una especie de regreso a la religión. Nuestras vidas están tan fragmentadas, nadamos en un mar de accionismo sin sentido. Estamos a un paso de empezar a soñar con un monasterio, viendo películas en las que la práctica silenciosa de la fe adquiere todo su valor. Añade esto a lo anterior, al resurgimiento mundial de los que practican una fe radical. Pero antes de hacer una película sobre baptistas o musulmanes radicales, prefiero observar este fenómeno desde el punto de vista de sus manifestaciones locales, tal y como aparece aquí, en la sociedad en la que vivo.
ué es lo que no queremos?
Queremos distinguirnos de las críticas habituales que se dirigen contra la Iglesia. Personalmente, no tengo nada contra la religión, ni tampoco contra la Iglesia católica. Dejemos a la gente que forme comunidades, funde coros y se ayude mutuamente. Este es uno de los subsistemas que da a luz a nuestra sociedad como tal, y tiene su legitimidad. Tampoco me interesan los escándalos de abusos; ya tenemos suficiente información sobre ese tema y el interés que despierta siempre deja un regusto amargo de sensacionalismo morboso. Pero me gustaría plantear una pregunta más radical: ¿Dónde está el abuso del sistema? ¿Qué sucede cuando nadie puede cruzar sus fronteras firmemente delimitadas? Cuando el párroco da clases de confirmación y los padres educan a sus hijos de acuerdo con lo que les dicta su conciencia, ¿no es esto un abuso de por sí, no un abuso esporádico o sexual, sino global y espiritual?
¿Por qué precisamente nosotros?
Anna y yo conocemos este entorno ya que nuestra propia familia perteneció a los círculos de la Sociedad de San Pío en la década de los 90. En aquel entonces, nuestro padre opinaba que estaba bien. Después se fue relajando. Nuestra familia era bastante atípica, y las razones son complejas. La película no representa para nada a nuestra familia, ni busca resolver cuestiones pendientes. El punto decisivo es: Gracias a esta situación, hemos obtenido información que hubiera sido muy difícil de conseguir de otra forma. Yo estoy siempre a favor de los cineastas sepan de lo que están hablando. Y ese es el caso en esta película.
NOTAS DE LA COGUIONISTA...
Las sociedades religiosas fundamentalistas no pueden quejarse ya que sus adeptos han aumentado considerablemente en los últimos años. Aparentemente, hay una demanda muy fuerte de valores inquebrantables y de sinceridad. Pero, ¿qué se hace con un niño al que se la ha dicho que un ser superior puede escudriñar en todos los rincones de su corazón para encontrar pecados? ¿Cómo puede una adolescente enfrentarse al mundo cuando le han enseñado a desconfiar de él? Y no sólo del mundo, sino también de sus propios sentimientos. ¿Cómo se espera que reprima sus instintos? En cierto sentido, un sistema que no permite otras verdades que las suyas, ya se trate de religión o ideología, siempre va en contra de la vida. No se deja nada al azar, incluyendo el mundo interior de los propios hijos. De niño, puedes escoger: o rompen tu voluntad y te sometes ciegamente a ese sistema, o te rebelas y centras tus energías en ti mismo. Queríamos hacer una película que mostrara a modo de ejemplo cómo una idea prevalece por encima de los seres humanos, y cómo los niños no cuentan con la confianza de sus padres. Queríamos retratar a una persona joven dotada de una gran voluntad que encuentra una solución drástica por aunar la fe estricta en la que ha sido educada, y su deseo -reprimido pero que sigue muy vivo- de llevar otro tipo de vida. Una chica joven que logra por fin el amor de su madre pero que también se libera de ella para siempre.
NOTAS DEL PRODUCTOR...
En la primavera de 2013, Anna, Dietrich y yo llevábamos año y medio desarrollando. Fue entonces cuando me reuní con algunos inversores importantes para hablarles de CAMINO DE LA CRUZ. Antes de nuestra reunión les había enviado el guión y nuestro concepto. Esperaba convencerles de la viabilidad de nuestro proyecto. Ya habíamos trabajado juntos en muchas ocasiones con excelentes resultados. Pero esta vez, la respuesta que me dio uno de ellos fue directa: “Jochen, te doy un consejo de amigo: "¡No hagas esa película!”
Desde que conozco a Anna y Dietrich Brüggemann, hemos hablado a menudo de religión. Los tres nos hemos enfrentado en nuestra infancia a formas extremas de la fe, así que conocíamos bien este tema. Después de nuestras experiencias mutuas en MOVE, la colaboración con Anna y Dietrich Brüggemann se hizo más cercana, más interesante. Desarrollar esta historia con los dos y llevarla a la gran pantalla ha sido una de las experiencias más gratificantes e intensas de mi vida profesional. Todos estábamos impresionados con la intensidad con la que Lea van Acken, Franziska Weisz, Florian Stetter y el resto del reparto encarnaban a sus personajes frente de la cámara, y les dieron vida con magníficas interpretaciones. Todos los que hemos estado delante y detrás de la cámara hemos hecho un esfuerzo considerable y espero que el público se sentirá interpelado personalmente por este tema tan importante y con tanta repercusión social y que irán al cine a ver CAMINO DE LA CRUZ. Estoy muy satisfecho de haber ignorado los consejos de mis colegas porque ahora puedo presentar CAMINO DE LA CRUZ a todo el público.