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   Hace falta fuerza y determinación para ser un boxeador de talla mundial, pero para Adonis Johnson, incluso con el boxeo en la sangre, hará falta algo más: Rocky Balboa. Para escapar de la sombra de Apollo Creed, el padre que nunca conoció, Adonis debe hacer que Rocky vuelva al ring.
Aunque el ex campeón ha estado fuera del mundo del boxeo durante algún tiempo, Adonis le recuerda al duro y joven advenedizo que él mismo fue una vez. Después de pincharle un poco, Rocky accede a entrenarle, a su manera.
  El reto de reimaginar el no va más de las historias de perdedores que comenzó con Rocky ya lo había contemplado el guionista/director Ryan Coogler incluso antes de salir de la escuela de cine. "Crecí viendo las películas de Rocky con mi padre; era algo nuestro", declara. "Rocky es un personaje con el que la gente, simplemente, conecta: aficionados a la acción, al drama, románticos empedernidos, incluso simplemente los aficionados al cine; a todo el mundo le gustan las películas de Rocky porque tienen algo para todos".
  Antes de que Adonis pudiera engatusar a Rocky para su vuelta, Coogler tuvo que recibir la aprobación de Sylvester Stallone para trabajar con el personaje, y el compromiso del actor para ponerse los guantes de nuevo. Stallone, que además es productor del filme, ha interpretado a uno de los personajes más amados y legendarios de la historia del cine en seis películas de Rocky, a lo largo de casi cuatro décadas. Y dice: "La impresión que Rocky ha dejado en la gente me resulta a la vez frustrante y extraordinaria. Siempre he sentido la implacable responsabilidad de mantener el personaje intacto debido a eso. Así que cuando Ryan me vino con la idea de la aparición de Adonis Creed, pensé que era increíble, este realizador que es tan joven y sin embargo está tan fascinado por lo que empezamos hace tantos años. Lo admito, me intrigó".
  Coogler sonríe cuando recuerda su primer encuentro con el símbolo. "Le noté un poco reticente. Yo ni siquiera había hecho un largometraje aún, así que seguramente estaba pensando: "¿Quién es este chico que viene a hablarme de hacer una película de Rocky? Pero también noté que estaba pensando en todas las posibles maneras que habría de que funcionara".
  El cineasta también mencionó la idea a la estrella de su película Fruitvale Station, Michael B. Jordan, durante la producción de la misma. Jordan recuerda: "Ryan tiene tanto talento, es un tipo tan listo y es tan maravilloso trabajar con él, que cuando me mencionó el proyecto por primera vez pensé que sonaba estupendo, y que si acababa saliendo tendría claro que quería hacerlo. Luego con el tiempo, a medida que empezó a hacerse realidad y que yo me involucraba más, empecé a ver la situación pensando: "Guau, es mucha responsabilidad; es el legado de 40 años de Rocky".
  Apoyándose en este legado, Coogler quería que Creed. La leyenda de Rocky evocara el animoso estilo de la vieja escuela de las primeras películas de Rocky al tiempo que forjaba su propia identidad contemporánea. Para él era importante hacer justicia a los personajes, crear una película que pudiera salvar la división entre los Baby Boomers y los Millennials, sabiendo que podría atraer al mismo número de aficionados de ambas generaciones y a todos los que había entre ellas.
  Coogler había concebido la historia, y se asoció con su compañero guionista Aaron Covington para hacer el guion. "Ryan y yo nos conocimos el primer día en la escuela de cine de la Universidad del Sur de California", relata Covington. "Tenemos pasados similares, intereses similares y empezamos a colaborar casi desde el primer día, ayudándonos en el set, lanzándonos ideas el uno al otro. Un día me preguntó si había visto las películas de Rocky de pequeño; por supuesto que las había visto una docena de veces. Así que dijo: "¿Qué tal si continuáramos esa historia con el hijo de Apollo Creed?" Percibí que Ryan tenía una visión leal de la historia así que me subí al barco al instante".
  Para Coogler, el verdadero comienzo fue el ritual de Rocky que compartieron él y su padre. "Yo era un atleta, y él me llevaba a hacer fútbol americano, artes marciales y baloncesto. Y antes de tener que jugar un partido importante, me hacía sentarme para ver juntos Rocky II. Esa fue mi introducción al personaje y a la historia. Acabamos viéndolas todas, y me enamoré de ellas gracias a él".
  El hecho de que, por primera vez, una historia sobre Rocky Balboa no fuera escrita por Stallone podría haber sido causa de preocupación en las dos productoras que componen el lema Chartoff Winkler, dirigidas por Robert Chartoff y Irwin Winkler. El dúo produjo el Rocky original, que fue nominado a diez Oscar y ganó tres, incluido el de mejor película. Chartoff falleció este año, y Creed. La leyenda de Rocky está dedicada a su memoria.
  "Todos sentíamos que estábamos pasando de moda con Rocky Balboa, que fue muy bien recibida", dice el productor Irwin Winkler. "Cómo iba a saber que había un joven con una idea para contar esta historia de una manera completamente nueva".
  El productor Charles Winkler creció con la franquicia Rocky en la familia y ejerció de productor ejecutivo y director de la segunda unidad en el sexto film, Rocky Balboa. Y explica: "Creo que la idea de Ryan era tan sólida que todos reconocimos que ésta era la manera de darle un nuevo rumbo a esto y presentárselo a la nueva generación. Ha sido fascinante ver cómo se pasaba el testigo".
  William Chartoff también creció con Rocky; su padre, el fallecido Robert Chartoff, produjo la serie y él trabajó en la cuarta y la sexta películas, y produjo la última. A su vez, él y su padre ejercieron de productores de Creed. La leyenda de Rocky. "Sabiendo lo mucho que Rocky ha significado para mí y mi padre, y tras enterarme de lo importante que habían sido las películas para la relación de Ryan y su padre, eso realmente nos tocó la fibra sensible", declara. "Luego escribió este personaje que es un joven intentando seguir los pasos de su padre, para mantener un nivel (un legado) que es una carga increíble para cualquiera, pero con el añadido de no haberle conocido nunca. Es una historia rica con un viaje personal irresistible de seguir".
  "La idea de Ryan nos sorprendió", dice el productor David Winkler. "Nunca hubo ninguna conversación en ninguna de las películas de Rocky sobre que Apollo tuviera un hijo ilegítimo en alguna parte, así que no estaba haciendo una secuela de un personaje que ya conociéramos, estaba inventando uno completamente nuevo".
  Uno que tiene el boxeo en su ADN, un don de un dios luchador. ¿Quién mejor para ayudar a Adonis a tomar ese don y tallarlo en un talento digno de ese título que otro ex campeón que también fue el mejor amigo de su padre? ¿A quién si no se dirigiría Adonis si no es a la única persona que no solo podría ayudarle con su carrera, sino que le proporcionaría una visión del padre que estuvo ausente pero a la vez fue una presencia casi opresiva en su vida?
   Coogler dice: "Adonis nunca tuvo un padre o una figura paterna; yo quería explorar cómo sería alcanzar eso siendo adulto. Rocky tuvo a Mickey, así que era algo que le resultaría familiar, ese modo en el que un entrenador o instructor puede ser algo como un padre para un joven atleta".
  Si Rocky no planeaba volver jamás al boxeo, desde luego no esperaba que otro Creed se presentara en su puerta, ni siquiera uno reacio a usar el nombre. Pero esa no es la única sorpresa que le espera una vez que deja entrar a Adonis (Donnie, como le llama él) en su vida "Si yo lucho, tú luchas", dice Donnie a su recién descubierto mentor, "tío" y amigo. Pero depende de Rocky decidir cuánta pelea le queda dentro.
  Rodada enteramente en Filadelfia y sus alrededores, Creed. La leyenda de Rocky lleva de vuelta al público a la ciudad donde empezó todo, al tiempo que marca el inicio de una nueva era para los aficionados a Rocky de todo el mundo.

  Paso a paso, puñetazo a puñetazo, asalto a asalto. Entrenando a Adonis, éste es el mantra de Rocky, que repite una y otra vez para ayudar al ansioso y joven boxeador a mantenerse centrado. Naturalmente, para que Rocky pusiera a punto a Donnie, Michael B. Jordan tuvo que fustigarse primero para tener figura de boxeador.    
  "Ponerme en forma para esta película fue un proceso de un año", revela Jordan. "Estuve entrenando lentamente aquí y allá, entre proyectos, hasta que pude ponerme a toda máquina". El actor trabajó con el entrenador de boxeo/asesor técnico Robert Sale en el Powerhouse Gym de Burbank (California), aprendiendo lo básico muy parecido a como lo practica su personaje en el filme.  
  "Piensas que estás en forma, piensas que eres atlético, pero entras en el ring y te das cuenta de lo mucho que te queda por hacer", admite Jordan.  
  "Una cosa que sabíamos que teníamos que hacer bien es el boxeo", dice Coogler. "Porque si no se hacía bien, estaríamos haciendo un flaco favor a la película, un flaco favor a los fans, y un flaco favor a la gente para la que es su medio de vida".  
  Una vez que empezó a trabajar con Sale, dice Jordan, la cosa evolucionó lentamente hacia el entrenamiento con pesas con su entrenador físico, Corey Calliet, con el que había trabajado en otra película.  
  Calliet no sólo diseñó el programa de entrenamientos de Jordan, sino también su plan nutricional. "Apollo Creed estaba bastante musculado, pero quería ver si podíamos hacerlo mejor", dice Calliet. "Me encanta coger un cuerpo y convertirlo en una escultura".  
  "La dieta era lo primero con Corey", dice Jordan. "Un montón de gente que se está poniendo en forma no se da cuenta de cuánto tiene que ver con su apariencia la comida y la cantidad de comida que introducen en su cuerpo. Él hizo que eliminara los azúcares, el pan, la pasta, los lácteos, el queso. Fuera. Por la ventana".       
  "Llegó un punto en el que Mike me llamaba a la hora de comer y me decía: "¿Qué puedo comer?", ríe Calliet. "No le dejaba comer o beber nada sin consultarlo conmigo primero porque no quise que se arriesgara a cometer ningún error".  
   Una cosa para la que no había límite visible era el agua. "Intenté llegar a cinco litros y medio de agua o más al día", dice Jordan. "Finalmente empiezas a ver los resultados, y eso te motiva para aguantar la disparatada rutina de ejercicios y la dieta estricta".  
  Uno de los dictados de Coogler fue centrarse en la cuerda de saltar, dado que la actividad intervendría en el argumento en varias ocasiones. "Ryan quería que Mike fuera capaz de saltar a la comba realmente bien", dice Calliet. "Lo de Mike es innato, así que una noche le mostré lo que quería que fuera capaz de hacer al día siguiente, y lo hizo, lo cual no pasa casi nunca".  
  Como Jordan tiene pies planos, dice Calliet, hicieron "un montón de cosas diferentes para mantenerle estable: moverse, brincar, saltar, sentadillas, y trabajo pliométrico básico. Sabía que tendría que ser rápido para perfeccionar su boxeo y esos ejercicios se ocuparon de eso".  
  Exactamente igual que Rocky intenta compartir sus años de experiencia con Adonis, Calliet le dijo a Jordan: "El cuerpo no hará lo que la mente no le deje; si puedes pensar antes de hablar, puedes pensar antes de pegar. Eso es lo que te mantiene a salvo. Si te dices que puedes hacerlo, puedes. Hubo días en los que Mike quería parar, y yo le miraba y le recordaba: "Tu mente para primero. Dile a tu mente que siga, porque tu cuerpo hará sólo lo que la mente le diga que haga".  
  El propio Calliet boxeó durante más de ocho años, con un trabajo alimenticio, muy parecido a Adonis en la película antes de partir para Filadelfia. "El boxeo fue mi primer amor. Solía correr 10 kilómetros antes del trabajo, y luego a boxear después. Todo el mundo quería ser como Rocky. Era la ética de trabajo, los discursos motivacionales que pronunciaba los que me hacían seguir. Veía las películas todo el tiempo, así que el hecho de ser parte de algo así me maravilló".  
  Una vez que Jordan estuvo en forma y preparado para rodar, dependía de Coogler y del coordinador de dobles Clayton Barber hacer que todo lo que capturaran en la película pareciera real, y correcto.  
  "Soy atleta desde que tenía seis años, el deporte es algo que puedo entender, pero el boxeo no lo conocía tan bien", dice Coogler. "Tuve que estudiarlo. Tomé clases mientras escribíamos el guion. Quería aprender lo básico para poder meterme en la cabeza de Adonis. Sly le dio el toque profesional, dándonos entradas para combates y acceso a su extensa biblioteca sobre el tema. Y Clay y su equipo se aseguraron de que todo el mundo sintiera que estaba dándolo todo, y al mismo tiempo hicieran que pareciera real".  
  Para Barber, lo primordial es la historia. "Cuando hablé por primera vez con Ryan, eso es todo de lo que hablamos. No de la coreografía, solo la historia", dice Barber. "Luego retomamos la historia de Rocky para encontrar los aspectos que queríamos meter en el boxeo de este universo que estábamos creando. Hay cuatro peleas en la película, y todas ellas cuentan una parte diferente del viaje de Adonis, de la primera a la última".   
  Coogler y Barber animaron a Jordan a elegir un boxeador real cuyo estilo pensara que podía imitar, y a que viera todo el material disponible del mismo. "Eligió a un boxeador llamado Timothy Bradley, que pelea en el Sur de California, y eso le ayudó un montón", dice Coogler.  
  El hecho de que Jordan, actor, se enfrentara con boxeadores reales en la película era un reto único para Barber. "Era interesante pensar en cómo casar a un boxeador real que está aprendiendo a actuar con un actor que está aprendiendo a boxear, porque trabajan en direcciones opuestas cuando les juntamos", dice. "Durante una de las primeras conversaciones que mantuve con Ryan, me dijo que quería un ballet violento. Enseguida hizo clic. Entendí exactamente lo que él quería, y esa fue la inspiración, eso es lo que perseguimos dentro del ring".  
  "Había cierta presión para hacerlo natural", admite Coogler. "Creativamente, queríamos capturar la esencia de Rocky, pero dando a la gente algo que no haya visto antes, para mostrar a este personaje, que es parte de la cultura estadounidense, de un modo diferente".  
   Incluso aunque buscaran un nuevo giro en el deporte ficticio, la ventaja de tener a Stallone, que coreografió casi todas las peleas de Rocky, en el set la percibieron todos. "En honor a Ryan, le di mi esquema, lo analizó, y lo tomó por si servía de algo", dice Stallone. "También le dije que en realidad hay dos películas en un filme como este: el drama, y las peleas. Y tienes que atestar las peleas con tanto drama como el resto de la película, en unos nueve minutos. Es muy complicado, muy abrumador. Y lo hizo, sin problemas".  
  Coogler y Barber, trabajando estrechamente con el director de fotografía Maryse Alberti, determinaron que la coreografía y la cámara buscarían mostrar perspectivas diferentes en el ring a las que uno normalmente ve en las películas. Utilizaron un estabilizador de cámara durante todo el filme, especialmente en las escenas de pelea, y la pelea entre Adonis y Sporino se grabó en una toma única, de dos minutos.  
  La seguridad durante las peleas siempre fue lo primordial, mano a mano con ofrecer una experiencia visceral a los cinéfilos. "Sí que mantuvimos una zona de alta seguridad, y fuimos muy selectivos sobre cómo golpear el cuerpo, incorporando la cámara, sin perder nunca una cierta interpretación explosiva", detalla Barber. "Puedes ser igual de impactante si lo haces bien. Cada acción tiene una reacción; la acción es fuerte, la reacción es lo que la vende al público. Se vende visualmente, y eso es en lo que trabajamos".  
   Coogler añade: "Debido a que tratábamos de capturar para el público lo que se siente en el momento, en el ring, tuvimos la idea de hacer una toma circular. Así que hicimos una toma de detalle continua que da vueltas mientras Adonis está clavado con su espalda contra las cuerdas, sin lugar donde escapar".  
  Utilizando un aparejo para cámaras Movi, que les permitió hacer una toma de 360 grados, Coogler recuerda que dieron una vuelta por encima de las cuerdas mientras los dos boxeadores están justo yendo el uno contra el otro. Fue una locura conseguirlo porque era una instalación realmente compleja para una toma que es sólo unos segundos de la película, pero creo que fue efectiva; creo que el público se hará una idea de cómo es estar ahí".  
  En todas las peleas, la clave que Barber le dio a Jordan fue la actitud. "Adonis tiene una cierta disposición vital, así que le dije a Mike que se asegurara de que todas las acciones fueran una expresión de esa actitud. Justo igual que una palabra tiene significado cuando hablas, el actor traduce eso en el personaje. Así que le decía: "No es sólo un puñetazo, el puñetazo tiene un sentido. Dame la actitud que hay detrás". Así es como se traduce de vuelta en el personaje y hace que la audiencia sienta lo que le está pasando a él".

  Para Coogler, no hubo ninguna duda que ‘Creed. La leyenda de Rocky’ se situaría en Filadelfia, donde todo empezó. Y para los realizadores, no hubo ninguna duda de que la fotografía principal se llevaría a cabo allí también. "Rocky es el vínculo de Adonis con su pasado y su futuro", dice Coogler. "Sólo había un lugar al que le podía llevar su historia, y era allá donde estuviera Rocky. Y ese lugar es Filadelfia. De hecho, usamos un montón de las localizaciones del Rocky original que los fans van a reconocer, pero usamos un montón de otras nuevas también, para hacerla nuestra".
  El equipo creativo de Coogler en la película incluyó a las diseñadoras de vestuario Emma Potter y Antoinette Messam, así como a varios miembros de su equipo de Fruitvale, incluidos los montadores Michael P. Shawver y Claudia Castello, y la diseñadora de producción Hannah Beachler.
  "Ryan fue muy claro sobre lo que quería que fueran, visualmente, los ambientes", dice Beachler. "Así que volví a los primeros filmes y averigüé cómo integrar lo que necesitábamos de ellos con lo que queríamos para 2015, juntándolo todo. Confió en mí y en que lo haría con autenticidad, y en que caracterizaría nuestros tres diferentes escenarios, Filadelfia, Los Ángeles y Liverpool".
  Dos elementos obligados en la película eran la estatua de Rocky y el largo tramo de icónicos escalones del Museo de Arte de Filadelfia, y Coogler los incorporó de un modo que él creía que tendrían sentido para la ciudad, y para el personaje de Rocky, actualmente. Rodar allí fue un asunto completamente diferente.
  "Incluso Sly está algo asombrado de cuánta gente ves allí", dice Coogler. "El día que rodamos, me dijo sinceramente: "No puedo creer que la gente suba corriendo estos escalones, es una locura". Pero es cierto, la gente se vuelve loca por él, las calles se llenan, y le hablan como si Rocky fuera real. Es un personaje, pero es mucho más. Fue fantástico estar allí con Sly y verlo".
  "Tiendo a perderme en los acontecimientos del día a día y se me olvida", confiesa Stallone. "Cuando vuelvo a Filadelfia y me doy cuenta de que la ciudad aún acoge de verdad a este personaje, es realmente reseñable".
  Jordan dice: "Es surrealista, todos los gritos y el cariño de los fans. Quiero decir, hay una estatua de este hombre (este hombre real como personaje de ficción) delante del museo, y gente de todo el mundo viene a hacerse fotos junto a ella y a recorrer sus pasos".
  Para mantener la continuidad de "Rocky" en los escenarios, Beachler hizo una lista de elementos de diseño para incorporarlos cuando fuera necesario. "Quise asegurarme de que todos los Rockys estuvieran representados en la casa, así que volví a encontrarme con ciertos artículos; por ejemplo, el póster de Marciano que está en el sótano en Creed. La leyenda de Rocky estaba en su apartamento en Rocky. Hay toques de Adrian, allá donde se podría pensar: "OK, ella tiene que haber hecho algo aquí", pero él no ha cambiado nada en todos los años que han pasado desde que no está, el tiempo se ha detenido. Hicimos pequeñas cosas como esa para asegurarnos de que el público viera el alcance de la vida de Rocky en esta película".
  Beachler siguió para la casa de Rocky (en el Sur de Filadelfia) el ejemplo de su casa en Rocky Balboa, y sintió alivio al dar en el blanco. "Stallone entró, y estaba muy nerviosa al respecto porque era importante tener su bendición. Echó un vistazo y dijo: "Vale, este lugar es un montón de porquería. Tiene un aspecto magnífico". Ahí es cuando supe que lo habíamos hecho bien".
  Para evocar los temas familiares y generacionales de la película, la casa de Rocky está en primer lugar, según la describe Beachler, "a dos segundos de ser realmente triste. Pero al mismo tiempo, tenía que ser confortable y cálida, como si solo necesitara un poco de amor, para que cuando entrara Adonis, pudiéramos explayarnos. Luego es un poco más clara y un poco más luminosa, y empieza a perder esa sensación de cueva. Y más tarde, la cocina se convierte en el lugar en el que se reúnen y se convierten en una especie de familia improvisada".
  Mientras que Rocky ha mantenido bajos sus gastos, Adonis ha estado viviendo en condiciones lujosas en la mansión Creed, en la zona de Baldwin Hills, Los Ángeles. Aunque suplieron la zona del guion con una casa de Huntingdon Valley, también en Los Ángeles, Beachler realizó un montón de investigación en Baldwin Hills. Y apunta: "Ray Charles vivió allí, un montón de atletas afroamericanos viven allí. Así pues, ahí es donde Apollo Creed habría vivido. Apollo era un personaje desbordante, y debíamos mostrarlo".
  "También necesitábamos que pareciera que se había comprado la casa en los 80, y en realidad es casi así: mármol y oro y luz, exuberante y bella", continúa. "Usamos una paleta muy neutral, así que todo el lugar es de colores crema y marrones, con cuero y muebles caros. Era una manera de distinguir Los Ángeles de Filadelfia, y el estilo de vida de Apollo (que Adonis ha experimentado ya durante muchos años) del de Rocky. Dos hombres que estuvieron muy cerca, pero al final, sus vidas fueron dos cosas completamente diferentes. Lo llevamos al siglo XXI, pero en realidad se trata de 1983".
  El edificio del apartamento de Adonis y Bianca se rodó en una localización en el Norte de Filadelfia, y la producción encontró una localización cercana viable para la primera "cita" de Adonis y Bianca, filmada en el popular restaurante Max's Steaks. Los locales de música en los que ella canta también eran reales: Johnny Brenda's en Fishtown, una zona hipster del Norte de Filadelfia; y The Electric Factory. El compositor Ludwig Goransson y su colaborador habitual Moses Sumney aparecen en el filme como músicos acompañantes de Bianca.
  Tres gimnasios distintos aparecen de forma prominente en el filme, dos de los cuales les resultarán familiares a los fans: la Academia Delphi de Boxeo, hogar de Apollo Creed, donde llevó Creed a Rocky para entrenarle en Rocky III y donde Adonis se enfrenta a Danny Especialista Wheeler; y Mighty Mick's Boxing, donde Rocky se entrenó con Mickey y donde entrena Leo El León Sporino. Los interiores de Mick's se rodaron en el Gimnasio Must Fight en Chester (a 30 kilómetros de Filadelfia), mientras que para los exteriores se usó el mismo lugar de North Front Street utilizado en filmes anteriores.
  El tercer gimnasio que interviene en la película es el Gimnasio Front Street de Kensington, barrio del Norte de Filadelfia, donde Rocky entrena a Adonis lejos de distracciones y ojos entrometidos.
  "Tan pronto como vimos Front Street, Ryan dijo "Es esto, aquí es donde lleva Rocky a Adonis", recuerda Beachler. "Y gracias a su historia y a su textura, no hubo mucho que tocar. Y otra cosa buena, es que nunca se había rodado allí, así que era emocionante. Creamos algunos pósteres adicionales para colgarlos, pero desde los cubos de pintura colgando del techo para captar agua, hasta la manera en que tenían atado el saco ligero de boxeo, y los sacos pesados que colgaban de una vieja cadena enganchada a un tablón... Inmediatamente me evocó una forma diferente de entrenar".
  Para distinguir claramente un gimnasio de otro, Beachler creó tres combinaciones de colores diferenciadas para ellos. "Delphi es nuestro gimnasio rojo y negro de Los Ángeles; Mickey's es dorado y negro; y Front Street es prácticamente todo rojo, blanco y azul", dice. Para un cuarto gimnasio, el Holiday Gym de Liverpool donde entrena Bonito Ricky Conlan, Beachler también usó rojo, blanco y azul. "Pero hay una gran bandera Union Jack al fondo", apunta.
  La mayor parte de las escenas de Liverpool se llevaron a cabo en localizaciones de Chester, y el gimnasio de Conlan, rodado en Shuler Gym, se pretendía que recordara al aspecto de Front Street. "Queríamos mostrar que Adonis y Ricky venían de un lugar parecido, en esencia, así que esos dos gimnasios son un reflejo mutuo en el color, pero en lo demás son diferentes".
  Para recordar los filmes anteriores, Beachler menciona que usaron el Victor's Café en el Sur de Filadelfia para hacer del restaurante de Adrian, el mismo que se usó en Rocky Balboa. Sabiendo que Rocky no lo habría actualizado demasiado por sí mismo, tampoco lo hizo Beachler, aparte de unos pocos toques artísticos aquí y allá.
  El Temple University Music Hall se utilizó para la pelea con Sporino, y para el combate de Liverpool entre Adonis y Conlan, el rodaje se realizó en Sun Studios, al sur de Filadelfia, que se vistió de Goodison Park, hogar del Everton Club de Fútbol. Las escenas de allí incluyeron hasta 1.000 extras y una gigantesca pantalla verde; el equipo de efectos visuales añadiría el resto de la multitud en post-producción. La conferencia de prensa previa al combate se rodó en la finca Elkins Estate, en Elkins Park (a 20 km de Filadelfia), y las escenas de vestuario que tienen lugar antes del combate se grabaron en el estadio de fútbol del Philadelphia Union, de la Major League Soccer de fútbol.
  Para la pelea culminante del filme, Conlan se pone un par de shorts tipo-kilt. Aunque Bellew normalmente opta por pantalones de boxeo sencillos, explica Coogler, "ambos llevan la insignia del equipo favorito de Tony, el Everton".
  Coogler y sus diseñadores de vestuario Potter y Messam eligieron el kilt para el personaje porque, apunta el director: "Sabía que Adonis llevaría bermudas tradicionales, así que quería asegurarme de que las de Conlan fueran de estilo extravagante. Miramos un montón de diseños, y nos inspiramos en Ricky Hatton y Adrien Broner, boxeadores ostentosos del tipo de los que saldrían con un look de falda espartana".
  Aunque los shorts de Adonis eran tradicionales, los guantes de Jordan no lo fueron tanto. "Contamos con guantes especialmente diseñados que eran del mismo tamaño que los guantes de boxeo normales, pero hechos con un material que le daba un poco más de amortiguación", revela Coogler.
Una de los aspectos favoritos para el director de rodar en la Ciudad del Amor Fraternal fue... el amor fraterno. "Me gustó el ambiente, era muy similar a Oakland, donde la gente está muy orgullosa de sus equipos deportivos, muy orgullosa de dónde es. La cultura musical también es muy fuerte, y conseguimos darle vida en la película por medio del personaje de Bianca, gracias a Tessa y a nuestro compositor".
  Ludwig Goransson, que también trabajó con Coogler en su anterior filme, orquestó Creed. La leyenda de Rocky y escribió varios temas para que las interpretara Thompson caracterizada. "Crear un disco de un par de temas para una artista emergente de ficción es un reto, pero sabiendo lo que Ryan tenía en mente para el personaje, Tessa y yo pudimos entrar en el estudio tan pronto como fue elegida", dice. "Escribimos y grabamos unas ocho canciones y Ryan eligió sus favoritas para la película. Fue una experiencia muy especial tanto para Tessa como para mí porque podíamos ver y oír cómo se iba formando Bianca a través de su música".
  El compositor adoptó además un enfoque singular para componer la música. "Siempre sentí que Ryan me animaba a pensar con originalidad y crear algo en lo que realmente creyera. La primera cosa que hice fue grabar sonidos de un boxeador durante su rutina de entrenamientos, con el propósito de transformarlos en elementos musicales que hicieran de base para la partitura", explica. "Después de experimentar con esos sonidos, rehíce uno de los temas de amor que había escrito y le di un sonido orquestal mayor y más enérgico con algunos elementos modernos y un fuerte tema melódico".
  Desde luego, había que tratar la historia musical de las películas de Rocky. "Estudié la música de Bill Conti a fondo y me inspiró la manera en la que combinó jazz y armonías clásicas", sigue Goransson. "No tenía intención de usar ninguna música de Rocky más allá de una sola escena culminante, pero Ryan y yo hablamos de cómo musicar un Rocky más viejo, y sugerimos usar el tema de amor de Adrian".
  Tras pasar gran parte de su vida influido por los filmes de Rocky, y decidido a ser parte de ellos, Coogler está entusiasmado con llevar por fin este nuevo capítulo de su adorada serie a la pantalla, y espera que los cinéfilos estén tan impacientes por ver la historia como él ha estado para contarla. "He sido un fan de Rocky desde que recuerdo", dice. "Conozco esas películas como la palma de mi mano. Creo que capturamos ese espíritu y también brindamos algo nuevo para que lo disfruten los fans

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