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   ‘Los Guardianes de la Galaxia’, creados por Arnold Drake y Gene Colan, se dieron a conocer en 1969 como un equipo de héroes del siglo XXXI en el que cada miembro es el último de su especie. La idea de crear un proyecto cinematográfico a partir de ese concepto tenía mucho a su favor y no sólo por el fantástico grupo de personajes que pueblan este universo espectacular. Además era una magnífica oportunidad de explotar otra faceta del Universo de Marvel, contemporáneo con ‘Los Vengadores’, conservando la envergadura, la acción y el humor, así como esa sensación de que hay mucho en juego, que hizo que la película fuera un éxito tan enorme.

  En Marvel Studios estaban muy interesados en hace una epopeya espacial y que su Universo Cinematográfico emprendiera una nueva senda, a pesar del riesgo que esto implicaba. El productor Kevin Feige afirma: “‘Guardianes de la Galaxia' es la película más arriesgada que hemos hecho desde ‘Iron Man’ pero en muchos sentidos es la más interesante desde que hicimos ‘Iron Man.’ Significa que podemos sorprender al público y superar sus expectativas. Y me gusta la idea de aportar cierta originalidad, a pesar de que todo está basado en el excelente trabajo que se hizo en los cómics, aunque poca gente lo sepa. Espero que el espectador tenga la sensación de ver algo muy nuevo y muy fresco”.

  Dar con el tono adecuado era fundamental para los realizadores que querían una mezcla bien equilibrada de humor, emoción y acción. Y con ese objetivo en mente se pusieron a buscar al director que encajase mejor. Feige lo explica: “Para nosotros es importante que un director aporte su visión y comprenda a los personajes. De esa forma puede insuflarles vida de una forma única, inesperada y tridimensional”.   Después de reunirse con Kevin Feige, el director James Gunn se quedó enganchado.  “Tenía la película en la cabeza, el aspecto que podría tener y cómo sería el estilo de la fotografía”, dice Gunn.

  Aunque se han realizado varias representaciones de los Guardianes a lo largo de los años, Marvel quiso, desde las primeras fases de desarrollo, inspirarse e basarse en la colección de cómics creados por Dan Abnett y Andy Lanning en 2008. A Gunn le gustó ese enfoque y señala: “Estamos utilizando los personajes que utilizaron Abnett y Lanning. Tienen un tono tanto humorístico como oscuro, una mezcla interesante que también veremos en la película”.

  El rodaje empezó el 20 de junio de 2013 en el Reino Unido. Durante un largo y tórrido verano y hasta el otoño, el reparto y el equipo técnico hicieron piña para hacer realidad la visión de James Gunn, mientras en el plató se escuchaba la música de la película a todo volumen. Gunn hizo que el compositor Tyler Bates finalizara algunos trozos antes del inicio del rodaje y la puso para que el ambiente en el plató fuera más agradable y estimulante, además de marcar la pauta para las escenas. Junto con pistas de banda sonora original de la película, Gunn también hizo que el departamento de sonido pusiera temas de los 70, que Peter Quill escucha en su Walkman Sony en la película. Además de crear un ambiente estimulante, ayudó a los actores a mantener el ritmo en las escenas.

  El diseñador de producción Charles Wood se encargó de diseñar y crear los extravagantes entornos en los que se desarrolla la acción. Para Gunn era muy importante contar con platos físicos en los que rodar, un auténtico regalo para todos los integrantes de la película que trabajan en muchas producciones que sólo utilizan enormes pantallas verdes para crear sus grandiosos platós.

  Gunn tenía una visión muy clara de la película, con la que el equipo creativo se identificó totalmente. Y aunque las posibilidades parecían ilimitadas, era importante que los espacios fueran lo más creíbles posible.

  Una de las naves que diseñaron Wood y su equipo fue el Milano, la nave espacial de Quill. Construida como un plató de dos niveles, con una cubierta de vuelo y zonas de vivienda en la parte inferior, se tardó 14 semanas en realizarla y en su construcción se vieron implicados varios departamentos. Wood y su equipo siguieron las instrucciones del director James Gunn de forma que el entorno de Quill recordara la Tierra y tuviera un aspecto tangible, mecánico, con cromo y cuero, y ese look de los cochazos americanos de los 50 y 60.       Wood y su equipo también construyeron el Dark Aster, la nave espacial de Ronan, que parece un mausoleo volador. El diseño es de estilo ‘minimal’, sin ninguna floritura, y un mundo gris, crudo y descarnado desprovisto de cualquier atrezzo. Su fuerza se basa en su arquitectura de cemento, sólida y pesada.

  El Kyln, la prisión espacial donde los Guardianes se conocen y se forma, fue la construcción más grande de la película. Se trata de un plato de 360 grados, una hazaña de la ingeniería compuesta de 160 toneladas de acero en tres niveles, y que en la postproducción se amplía hasta alcanzar 61 metros.

  El planeta de agua de Xandar, sede de Nova Corps, es uno de los entornos más brillantes en la película. En realidad, el plató es sólo una base de un decorado virtual gigante inspirando en la arquitectura de Santiago Calatrava, y el monumental arco de cemento blanco, cristal y acero de la estación de tren de Lieja en Bélgica sirvió de telón de fondo.

  Wood y su equipo también construyeron Knowhere, un puerto de escala y un observatorio para viajeros intergalácticos de todas las especies y de todos los tiempos, que se encuentra dentro de la cabeza decapitada de un Celestial, en el límite del universo. Knowhere recuerda un pueblo minero industrial y es donde el Collector tiene su museo. Wood y su equipo también realizaron el extraordinario decorado de la Bota de Jemiah y Morag, un planeta oceánico submarino donde Quill descubre el orbe en su templo hundido.

  Cuando Alexandra Burne, la diseñadora de "Guardianes de la Galaxia" de Marvel comenzó la ingente tarea de crear el vestuario no sólo para los protagonistas, sino también para los artistas de segundo plano que pueblan los numerosos ambientes extraños y maravillosos, estudió primero los cómics para comprender los mundos. Después trabajó en tándem con el director James Gunn para interpretar su visión y la versión de la historia que quería contar.

  Para algunos de los protagonistas y sus dobles, bajo la supervisión del diseñador de prótesis David White y de la maquilladora y peluquera Elizabeth Yianni- Georgiou, la rutina diaria de preparación empezaba cuando otros miembros del reparto y del equipo volvían a casa después de tener la noche libre. A White le encargaron crear looks para Gamora, Drax, Nebula, Yondu y Korath. El trabajo con las prótesis comenzó meses antes del rodaje. Se hicieron moldes de la cabeza y el cuerpo de los actores y se elaboraron los materiales que se iban a utilizar. Se necesitaba un equipo de cinco maquilladores cinco horas al día para aplicar el maquillaje de Drax, compuesto de 18 piezas para el cuerpo y la cara. Al final del rodaje, David Bautista había pasado siete días enteros en la sala de maquillaje.

   Además del reparto principal, había muchos extras alienígenas. Se realizaron más de 2.000 moldes de alienígenas humanoides, y todas las piezas se coloreaban antes (amarillo, azul o rosa). Al final del rodaje, el departamento de efectos especiales de maquillaje había realizado cerca de 1.250 aplicaciones de prótesis de maquillaje.

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