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SINOPSIS
Marieme es una adolescente que se encuentra en un callejón sin salida. Por un lado, vive una difícil situación familiar y por otro se encuentra con la ley de los chicos de su barrio. Un buen día decide cambiar su vida y comenzar un nuevo ciclo, cuando conoce a una serie de chicas de espíritu más bien libre. A partir de ese momento se harán latentes los cambios en Marieme...
INTÉRPRETES
DAMIEN CHAPELLE, DJIBRIL GUEYE, DIABATE IDRISSA, LINDSAY KARAMOH, CYRIL MENDY, RABAH NAIT OUFELLA, TATIANA ROJO, ASSA SYLLA, MARIETOU TOURÉ
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NOTAS DE LA DIRECTORA...
Los personajes en sí mismos fueron los que generaron el proyecto. Veía a adolescentes rondando en las cercanías del centro comercial de Les Halles de París, o en el metro o en la estación de Gare du Nord. Siempre en grupo, ruidosas, animadas y muy a menudo bailando. Quise profundizar y busqué en sus blogs fascinándome por su estética y estilo.
Más allá de su energía irresistible, sus perfiles reflejan todos los temas que son de mi interés como cineasta: la construcción de una identidad femenina en el marco de la presión social, las restricciones y los tabúes 
sociales, cuestiones en las que la imagen personal y la identidad son fundamentales. Mi intención era seguir profundizando en la cuestión de la juventud y las narrativas iniciáticas pero en un contexto contemporáneo dentro de la realidad francesa de hoy en día.
Estos personajes proporcionan un retrato realista así como la necesaria dinámica ficticia para crear una narrativa con tensión. Aunque la historia es generacional y muy arraigada en la sociedad francesa, también pertenece al reino de la mitología cinematográfica: jóvenes sometidas a restricciones sociales y a tabúes. Es una historia muy propicia para ser situada en la Francia de hoy, que se sustenta en mujeres jóvenes que han crecido en las áreas más desfavorecidas.
La película es un retrato íntimo, iniciático. No es un film acerca de las minorías de la clase obrera, sino sobre un género de personas que con sus propias normas y códigos ha surgido hace unos 20 años en Francia. Películas impactantes centradas en el realismo social como 'El odio' o en un lenguaje como 'La escurridiza o cómo esquivar el amor' sumergen al público en los rituales de estos suburbios pobres.
Con sus personajes modernos, sus nuevos rostros y actitudes, 'Girlhood' puede ser calificada como un manifiesto ficticio con un nuevo y 
prometedor enfoque narrativo.
La historia se desarrolla en barrios de las afueras de París: los suburbios de Bagnolet y Bobigny. Se retratan estas zonas y cómo la gente se desenvuelve en ellas. Todos los diseños de interiores se crearon en un estudio, en los que los colores fueron elegidos y pensados muy cuidadosamente. Girlhood se rodó en CinemaScope, el formato ideal para filmar como interactúa este grupo de chicas. Utilizamos planos estáticos con mucha perspectiva en contraposición a la ‘steadicam’ y muy a menudo travellings y los planos secuencia. Es una narrativa episódica, con aceleraciones dramáticas.
ACERCA DEL CASTING...
El casting tuvo lugar durante cuatro meses. Al principio, Christel Baras, el director de casting, recorría las calles de París y los suburbios de clase obrera.
Tuvimos la oportunidad de conocer a cientos de mujeres jóvenes en las calles, centros comerciales y parques de atracciones. Buscábamos chicas con una presencia física potente y de gran alcance. Era esencial para 
componer un grupo con fuertes afinidades pero a la vez con contrastes. Con el uso de la improvisación como base para elegir a nuestras actrices, introducimos el texto y diálogos de la película. Karidja Touré, Assa Sylla, Lindsay Karamoh y Marietou Touré destacaron del resto. Sin embargo me gustaría señalar que encontramos por lo general chicas con gran presencia y energía además de Inteligencia, humor, ingenio y estilo: el proceso de casting reafirmó mi idea de que era absolutamente vital filmar la historia de estas chicas.
Más aún porque rara vez hemos visto esta clase de personajes en la gran pantalla. Una de las ideas centrales de este proyecto y mi cine en general, es mostrar rostros que nunca vemos en la pantalla. Cuando vemos a estas actrices en la pantalla no nos centramos en el individuo sino en el personaje como parte de una diversidad aunque todos los actores, masculino y femeninos son de color.
ACERCA DE LAS ACTRICES...
Teníamos claro que Karidja Touré era perfecta para el papel de Marieme/Vic. Fue el papel más difícil de encontrar, porque requiere alguien que fuera increíblemente sólido. El personaje aparece en todas y cada una de las escenas de la película. La dificultad radicaba en la paradoja de que el personaje tenía que ser único e inolvidable pero se requería una actriz que fuera una pizarra en blanco. Alguien al que poder situar inmediatamente pero que tuviera la capacidad de ir cambiando durante la narración. Marieme pasa por varios cambios, múltiples etapas y debe mostrar muchas caras. Empieza como una niña y a medida que avanza la historia se reafirma como una mujer joven y fuerte. Es un enorme desafío para cualquier actriz, y más para Karidja, que nunca había actuado antes.
Trabajamos mucho antes de filmar, construyendo las diferentes etapas de su personaje, a través de los trajes y peinados. Es muy trabajadora, con una gran concentración y una maravillosa capacidad de escuchar. Se dedicó en cuerpo y alma al papel, confiando mucho en sus posibilidades.
Para encarnar a las compañeras de Marieme/Vic escogimos a Assa Sylla, que con su carisma, su cuerpo y su elegancia de bailarina era perfecta para el papel. Sabía cómo irradiar la autoridad necesaria para convertirse en la líder de la banda pero a la vez emanaba mucha sensibilidad, muy necesaria para plasmar la ambigüedad de su rol.
El sentido del humor de Lindsay Karamoh me encantó. Tiene una dicción e inteligencia rara en una chica de su edad. Su personaje precisaba de un gran sentido de la improvisación y de salidas agudas y graciosas, cosa para las que tiene un talento natural.
Marietou Touré desempeña el papel del personaje más enigmático de la pandilla, habla muy poco por lo se requería alguien con gran presencia física. Tiene algo milagroso: una actitud honesta en cada situación.
Todas las chicas demostraron ser muy combativas, con una gran energía junto a un lado mucho más infantil. Nos proporcionaron melancolía, fragilidad y ternura, que es el equilibrio exacto que yo buscaba.
Nos conocimos y nos reunimos muchas veces antes de empezar el rodaje de la película. Pusimos énfasis en el desarrollo de la energía del grupo, expresando emociones y estados diferentes. Nos hicimos amigas y desde el primer día de rodaje ya habíamos formado un grupo con un vínculo sólido.
ACERCA DE LA MÚSICA...
Cuando empecé a escribir el guion contacté con el grupo Para One, que ya crearon la música para “Lirios de Agua (La Naissance des Pieuvres)”. Estuvimos de acuerdo que preferíamos limitar la banda sonora a un único tema que fuera repitiéndose durante la película, cada vez más rico (en composición y longitud) y por lo tanto, siguiendo evolución del personaje. El tema musical se desarrollaría según cómo la historia y el personaje avanzaban.
Otro desafío fue insertar una fuerte presencia musical dentro de la historia y en particular durante las secuencias de baile. El punto álgido, así como la tarea más difícil era obtener los derechos de la canción de Rihanna, Diamons. Nos dio la autorización una vez que vio la secuencia en la que aparecía la canción.
