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NOTA DE LOS DIRECTORES...
   Cuando leímos la novela Noche de difuntos del 38 de Manuel Martín, enseguida vimos que contenía los elementos que buscábamos para lanzarnos, por fin, a codirigir una película. El cine de género, y el de zombis en particular, ha sido siempre nuestra pasión; y la posibilidad de hacer una película de aventuras con toques de cine fantástico, terror e incluso fugas al western era una oportunidad única.
  Queríamos también aproximarnos a la Guerra Civil desde un enfoque novedoso y original. Con una estética que se alejara del costumbrismo con el que se ha abordado el conflicto habitualmente y nos adentrara en el género fantástico puro. Se ha requerido para ello de un gran despliegue técnico y artístico, algo que no hubiéramos logrado sin el talento y la experiencia de los equipos implicados. Tanto fotografía y diseño de arte como vestuario, maquillaje y efectos especiales han hecho un minucioso trabajo de investigación y recreación. Creemos que el resultado en pantalla es visualmente espectacular.
  MalnaZidos es sobre todo una película de personajes, de muchos personajes. Una aventura coral en la que no solo queríamos darles a cada uno su espacio para desarrollarse, sino también lograr que fueran personajes icónicos que queden en la memoria del espectador. Hemos tenido la suerte de contar con un numeroso plantel de actores de primer nivel, que se han implicado al 100% en crear personajes con carácter. Rodar de noche en montañas, ríos y cuevas, mientras realizaban complejas coreografías de acción con peleas, tiros y explosiones ha supuesto todo un desafío para ellos y nosotros.
  Ha sido una experiencia intensa y esperamos que el espectador disfrute de esta enorme aventura fantástica. Zombis en la Guerra Civil. ¿Cómo no se nos había ocurrido antes?

NOTA SOBRE LA ADAPTACIÓN DEL ESCRITOR DE LA NOVELA...
   Para un escritor educado en la ficción con los cómics de Marvel y de la línea Vértigo de DC, con las películas de terror ochenteras programadas en Noche de lobos y con los relatos de H.P. Lovecraft, William Gibson y Arthur Conan Doyle, no hay mejor frase para escuchar que «Vamos a adaptar tu primera novela al cine». Bueno, miento.
  Le supera “La película abrirá el Festival de Sitges”.
Creo que el estreno de MalnaZidos en el festival de culto por excelencia es la mejor manera de presentar al público el resultado del magnífico trabajo llevado a cabo durante años por Alberto de Toro, Javi Ruiz Caldera y Cristian Conti. Ellos, junto a todo su equipo, han sabido hacer suya esta historia y, al mismo tiempo, han conseguido que yo pueda sentir su película como mía. He disfrutado del placer de contemplar en la pantalla escenas de mi novela junto a otras que, respetando el espíritu del material original, profundizan en aspectos que mejoran la trama. Reconozco que incluso hay un par de momentos, spoilers que no explicaré, que me desencajaron la mandíbula.
  Por último, quiero mencionar las fantásticas interpretaciones de Miki Esparbé, Aura Garrido, Luis Callejo, Álvaro Cervantes, Manel Llunell y el resto del elenco de MalnaZidos, los mejores rostros que nunca podría haber imaginado para poner en pantalla a mis Jan, Matacuras, el Sargento, Mecha, Decruz y compañía.
Disfrutad de la película. Yo ya lo he hecho y pienso seguir haciéndolo muchas veces más.

NOTA DEL ILUSTRADOR SOBRE EL PROCESO DE STORYBOARD...
  Siendo mi primer trabajo para un largometraje y conociendo las diferencias narrativas entre el cómic y el cine, he de reconocer que la conexión con Javier y Alberto, directores de la película, fue desde un primer momento perfecta. Sabían lo que querían, cómo lo querían y estaban abiertos a lo que pudiese aportar para enriquecer la narrativa del relato.
  La confianza que se generó a la hora de diseñar personajes, planificar el storyboard o trabajar en el logo de la película creo que ayudó en ese duro y complicado día a día que es la realización de una película.

NOTAS DE LA DIRECTORA DE PRODUCCIÓN...
  Desde la primera lectura de guion de MalnaZidos el primer reto del equipo de producción era encontrar una serie de localizaciones que parecía imposible en Cataluña. Dichas localizaciones debían encajar con la época en la que se desarrolla la historia manteniendo una coherencia estética y una continuidad entre ellas que acompañen al guion en ese viaje. Una vez diseñada esa parte, trabajo realizado junto al diseñador de producción y el equipo de localizaciones, procedimos al diseño de un rodaje muy complejo con gran cantidad de secuencias que debíamos “inventarnos” cómo resolverlas a nivel técnico. La logística diaria para coordinar todas las necesidades técnicas, las intervenciones del equipo de arte para adecuar los espacios a la época en la que transcurre la película, acompañados por un equipo artístico muy amplio conformado, además de por los actores, por un gran número de especialistas y figuración continuamente caracterizados, resultó bastante compleja debido a la apuesta de la producción por rodar en localizaciones naturales que aportaran la riqueza visual que tiene la película. Este despliegue llevado a cabo en medio de montañas, ríos, bosques, etc… generó unas necesidades logísticas mucho más complejas de lo habitual.
  El diseño de los zombis de MalnaZidos fue uno de los desafíos que, junto al equipo de dirección, ocupó una parte importante de la preparación. Definir sus movimientos, los sonidos que emitían, qué tipo de ataques realizaban, su caracterización en cuanto al vestuario, maquillaje, fases de la evolución desde la infección inicial, etc… se ha llevado a cabo con la implicación de varios departamentos desde el diseño del proyecto hasta la postproducción.
  El diseño de la combinación de efectos especiales, tanto físicos como visuales, para determinadas secuencias de acción, así como para resolver los retos técnicos que presentaba la historia han sido otro de los desafíos del equipo de la película para dotar de verosimilitud y espectacularidad a la historia.
  El hecho de tener dos directores también parecía una dificultad añadida a la película, ya que aunar dos voces en un proyecto tan difícil podría parecer un extra de complejidad, pero resultó una parte muy positiva que incorporó una suma de talentos desde el trabajo sobre el guion hasta el final de la postproducción. El hecho de que Javier y Alberto hubieran trabajado juntos, aunque en distintas posiciones, en casi todos sus proyectos previos hace que entiendan el cine del mismo modo y se convirtieron en una única voz que aunaba lo mejor de cada uno de ellos.
  MalnaZidos no habría sido posible sin la cohesión que hubo entre todos los departamentos, muchos de los cuales ya habíamos colaborado en diferentes proyectos juntos, apostando por llevar a cabo una película de aventuras ambiciosa a nivel estético y técnico.

VALOR DE PRODUCCIÓN...
  Distintas localizaciones de Cataluña acogieron el rodaje de las complejas escenas de explosiones, enfrentamientos armados, huidas por el bosque y ataques zombis que forman parte de un proyecto de la envergadura de MalnaZidos.
  Recrear un universo bélico creíble ha sido el reto de Pepe Domínguez, diseñador de Arte, que ha apostado por la construcción de más de 200 metros de vías de tren para manipular y movilizar los dos trenes blindados que necesitaba la película.
  Más de 20 vehículos militares de época, perfectamente funcionales y en activo, se usaron para soportar la acción de la película.
Mostrar con realismo las transformaciones físicas ha sido determinante para el equipo de maquillaje, liderado por Montse Sanfeliu, jefa de Maquillaje, Jesús Martos, jefe de Peluquería, y Pablo Perona, jefe de Maquillajes Especiales. Han sido necesarias semanas de preparación y pruebas de luz con el director de Fotografía, Kiko de la Rica, para crear los personajes y conseguir que las transformaciones fuesen creíbles, tanto en secuencias con luz día como en secuencias de interior.
  Especial mención merece la recreación del mundo zombi y la coordinación en la investigación de los equipos artísticos implicados en crear cortes o mordidas, sangre y texturización de las pieles.
  Con el objetivo de hacerlos perceptibles a los ojos del espectador, se elaboraron elementos propios de trasformación: desde la sudoración inicial, pasando por el ojo rojo y la trasparencia cutánea, hasta llegar al uso de lentillas especiales.
  El coach de zombis Oscar Valsecchi ha sido el encargado de dotar de identidad y de su esencia más “bestial” a estos seres, trabajando con cada uno de los figurantes, minuciosamente elegidos por su fisonomía y gestualidad. Todo coordinado con el jefe de Especialistas y Efectos, Lluís Rivera, y el coordinador de Acción, Sergi Subirà.
  Más de 1.000 figurantes y más de 200 especialistas, entre zombis y soldados, ha tenido que vestir la figurinista Cristina Rodríguez, conjugando la ropa ambientada y de época con protecciones para las escenas de acción. La propuesta de vestuario de los protagonistas ha sido su otro gran reto, teniendo que dotar de carácter y personalidad a sus personajes con un único cambio de ropa capaz de transmitir aventura, época, comedia y amor en un escenario infectado de zombis.

NOTA DEL PRODUCTOR GHISLAIN BARROIS...
  MalnaZidos es un filme que se enmarca en la línea de las grandes películas épicas del cine de la era dorada de Hollywood, no solo por el género de acción y aventura que hoy en día casi no se ve, sino también por la envergadura del proyecto y la ambición de la producción. MalnaZidos es el Apocalypse Now del cine español: una locura quetan solo el talento y la pasión de dos directores (no podía ser menos para un proyecto de esta dimensión) arropados por un equipo de profesionales de primera y servidos por un elenco de actores en estado de gracia podía llevar a buen puerto.

NOTA DEL PRODUCTOR CRISTIAN CONTI...
  MalnaZidos nace de una larga colaboración profesional con Alberto de Toro que fue quien me trajo el libro de Manuel Martín. Desde el momento en que leímos la novela nos dimos cuenta que el tema de la Guerra Civil nunca se había tratado así. Como productor sentí que era una oportunidad para tomar un género tradicionalmente tratado con cierto costumbrismo o sobrecargado de drama y darle un tratamiento nuevo y rejuvenecido. Pensé que es un periodo tan rico en conflicto que si conseguíamos acercarlo al público desde un nuevo ángulo, podíamos tener un éxito entre manos.
  Jaime Marques capturó ese espíritu en el guion a la primera, y teniendo a Javier y a Alberto que son fans del cine de acción, de zombis y de cómic, sabía que teníamos todos los ingredientes que necesitábamos. Telecinco Cinema enseguida supo identificar el potencial y en cuanto se dio la coyuntura interna, nos ayudaron a sacar el proyecto adelante.

NOTAS DE LA DIRECTORA DE VESTUARIO...
  Llevo muchos años diseñando el vestuario de películas y series; cada proyecto es siempre muy estimulante. Cuando Javier Ruiz Caldera y Alberto de Toro me llamaron para hacer una peli de zombis me entró un escalofrío por el cuerpo: ¡qué maravilla! Ahí no quedó la cosa: MalnaZidos transcurre en la Guerra Civil española... Oh My God!!! Estuve a punto de salir corriendo por miedo, pero como nunca he sido cobarde me tiré a la piscina junto a mis directores para diseñar el vestuario de MalnaZidos.
  Decidimos hacer una peli de zombis y de Guerra Civil, pero con un punto visual que convirtiera a los protagonistas en superhéroes. Hemos contado una historia con hombres y mujeres que se unen, a pesar de sus ideologías dispares, para luchar contra un mal mayor.
  En este proceso creativo, he llegado a considerar a nuestros protagonistas unos superhéroes y, con esa premisa, creamos para ellos una imagen icónica y atemporal. MalnaZidos es una historia absolutamente contemporánea y actual; además, tiene una estética que se podría ubicar tanto en el año 1936 como en el 2036.
  Cada diseñador de vestuario pone su sello en cada proyecto y el mío fue tratar la época en que se desarrolla la historia como si fuera un film futurista. Me interesa arriesgar y los directores me dejaron volar.
  Usamos litros y litros de sangre artificial para ambientar la ropa que confeccionamos. Los looks, que diseñamos para los protagonistas potenciaban sus personajes y los elevaban a la categoría de superhéroes. Vestimos a miles de zombis y, sobre todo, disfrutamos con MalnaZidos.
  La verdad es que nunca te llegan proyectos así de especiales, de jugosos y a mí con este proyecto me ha llegado. GraZias.

NOTA DEL DIRECTOR DE ARTE...
  Cuando me enfrenté al reto de diseñar los decorados de MalnaZidos y tras hablar con Javier Ruiz Caldera y Alberto de Toro, mi mente se fue de inmediato a buscar en ese imaginario común que tenemos de las grandes películas de aventuras y género con las que hemos crecido y con las que nos hemos formado visualmente. Combinar todos los conocimientos adquiridos sobre una época tan concreta de nuestra historia reciente y pasarlos por el filtro de MalnaZidos ha sido muy estimulante. Disfrutar de componer y rodar con objetos y espacios tan sugerentes es, sin duda, muy enriquecedor.
  Trabajar con trenes de época, con todas las complicaciones que suponen su tamaño y movilidad, ha supuesto un gran reto y se ha convertido en uno de los decorados más complejos de mi carrera y al que tengo mucho cariño. Sin duda fue una gran muestra del poderío y saber hacer de todo el equipo de MalnaZidos; no solo de mi departamento, que hizo un trabajo espectacular, sino del resto de departamentos que, trabajando todos a una, conseguimos uno de esos espacios en los que suceden las grandes cintas, como es MalnaZidos.

NOTAS DEL EQUIPO DE MAQUILLAJE...
  Trabajar a las órdenes de Javier Ruiz Caldera y Alberto de Toro ha sido todo un privilegio; derrochan tanta buena energía que nada puede salir mal. El día que me leí el guion pensé: “Esto es el sueño de toda maquilladora: una película de época, zombis y nazis”.
  Fue un rodaje muy duro, con mucho volumen de trabajo, pero ha sido en el que más me he divertido creando todos los personajes que luchaban contra los malvados nazis.
  La película cuenta con un reparto increíble: Miki Esparbé es un encanto y todo le sienta bien. Aura Garrido es una combatiente con el pelo corto, que le da mucha personalidad y atractivo. Todos los miembros de la banda debían tener aspecto de cansados, pero con mucha personalidad.
  Hubo días duros en el rodaje porque para caracterizar a más de 200 zombis teníamos que arrancar a las 5 de la madrugada. Por suerte, contábamos con un equipo excelente y con las mejores maquilladoras que aportaron profesionalidad y creatividad a un proyecto complejo.
  Para los zombis creé una base de maquillaje transparente y muy resistente que durase todo el día. Hicimos muchísimas pruebas hasta encontrar la fórmula y el color ideal para nuestros muertos vivientes. Para su caracterización, nos ingeniamos con prótesis, lentillas y sangre artificial de varias texturas y colores que recrean mordeduras, arañazos, cortes y heridas.
  Realizamos miles de venas y mucha ambientación para lograr transmitir el deterioro de la piel. Finalmente, usamos docenas de lentillas esclera, que cubren prácticamente todo el ojo con el objetivo de recrear la mirada de terror.
  MalnaZidos ha sido para mí una de las experiencias más enriquecedoras y creativas a lo largo de mi carrera. Y, además, rodamos en localizaciones de Cataluña que son una maravilla.

NOTA DEL COORDINADOR DE ZOMBIES...
  Gerard Verdaguer, con quien había trabajado en la película Eva, me contactó porque necesitaba una persona que pudiese crear un mundo zombi. Cuando conocí a Javier Ruiz Caldera y Alberto de Toro me contaron que estaban buscando un estilo de zombi diferente de lo que ya se había hecho: un reto no muy fácil pero interesante. Así empezó mi aventura con MalnaZidos.
  El zombi que ha nacido para esta película es una mezcla entre un zombi “tradicional”, un hombre lobo y King Kong.
Para poder construir este nuevo personaje ha sido fundamental trabajar, con actores y figuración, la emoción de la rabia. Pero esta rabia no podía ser negativa porque los zombis de MalnaZidos son incapaces de odiar; atacan solo para sobrevivir, es su instinto, su naturaleza.
  Cada actor/figuración, a su manera, tenía que gritar, rugir, atacar y, en algunos casos, “comerse” a sus víctimas.
Ensayando los gritos rabiosos o los rugidos pasaba una cosa curiosa con casi todos los actores: sentían una sensación de liberación, de alivio al poder exteriorizar una emoción que en nuestra sociedad se tiende a reprimir. Y así hemos descubierto lo interesante que es trabajar un personaje tan ajeno desde una acción muy humana: gritar.

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