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La producción de este filme se iniciaba en el sur de California allá por 2007 y cuando cayó en manos de Lara Shapiro ya venia incorporada la presencia de Lindsay Lohan en el proyecto.
Uno de los productores dice que en un primer momento dudaron en contratar a Lindsay, «Se ha escrito tanto de ella en la prensa amarilla que resulta difícil separar la realidad de la ficción. Existen legítimas organizaciones de noticias que han informado de su personalidad tipo ‘chica mala de Hollywood’. Pero con lo que nos encontramos es con alguien que es una profesional consumada y muy buena en su arte. Con la misma facilidad puede afrontar comedia y drama.»
En cuanto a las localizaciones, al equipo le vino muy bien el trabajar en el Valle de San Fernando ya que estaban habituados a trabajar en localizaciones muy lejos de casa. El empleo de una multitud de localizaciones del sur de California se evidenció no sólo conveniente sino también de coste asimilable. El sur de California posee muchos platós de estudio, pero la producción pudo hallar almacenes y edificios vacíos que se podían usar.
Lohan describe la película como una «comedia romántica con elementos de drama. Toda comedia contiene drama para propulsar hacia adelante a los personajes y la historia, afirma la actriz.
«La relación romántica entre Thea y Nick evoluciona con toda naturalidad» —dice Grobman—. «Ambos tinen una necesidad, y sin percatarse de la del otro, logran el objetivo. Ninguno de los dos se ha formado una idea romántica del otro. Lo que quiero decir es que Thea está aparentemente embarazada con el niño de otro hombre. Nick quiere demostrar a su hermano que sus ideas son dignas de consideración, mientras Thea suspira por mantener el ingreso del cheque de paga.»
Finalmente, Thea acaba creyéndose demasiado su propia mentira, por lo que Lisa tiene que recordarle que no está embarazada. Tras varios meses agotadores, la verdad acerca de Thea y de su creciente vientre acaba saliendo a la luz. Nick queda petrificado y a Thea se le cae el mundo encima, independientemente de todos esos artículos de bebé que tendrá que devolver.
Mientras su falso embarazo evoluciona, Thea aprende muchas lecciones importantes. Junto a cómo cuidar las estrías, los tobillos gruesos, y las permanentes ventosidades, toma conciencia de que se siente atraída por Nick y quiere ayudarle. Trabaja con tenacidad para que él logre el libro y que su división de libros para la familia devenga un éxito. A lo largo del trayecto, se halla a sí misma y encuentra su lugar en el mundo. Muy parecido a como sucede con la maternidad.