INFORMACIÓN EXCLUSIVA

NOTAS DEL DIRECTOR...
   Una buena película de animación es capaz de transportarte a otro mundo. 10 VIDAS, nos traslada a la Riviera inglesa – a la costa de Dorset, donde el cielo es azul, la campiña te envuelve con su verde manto de pastos y bosques y el azul del mar golpea con fuerza los acantilados blancos de la costa.
  Aquí es donde encontramos a nuestro peculiar héroe, Beckett, un gato egoísta y malcriado que ya ha malgastado 8 de sus vidas siendo despreciable Beckett tiene a los humanos controlados; ellos cubren todas sus necesidades alimenticias, y nunca se queda mucho en el mismo sitio, jugando la carta del gatito perdido y yendo en busca de mejores oportunidades y mayores festines que darse acosta de personas cada vez más inocentes.
  Al principio de nuestra historia creemos que eso es lo que ha encontrado en Rose, veinteañera estudiante de posgrado de ciencias que investiga el preocupante declive de la población mundial de abejas. En Rose encuentra al humano perfecto, la mejor dueña y la casa más maravillosa que podría desear. Todo es perfecto hasta que aparece Larry, el compañero de Rose, y Beckett estalla en un ataque de celos.
  Como no le gustan los ménage à trois, Beckett se propone deshacerse de Larry de diversas formas malvadas y cada vez más peligrosas, pero al final sus planes le salen mal y pierde su novena vida en el proceso.
  Y aquí es donde empieza realmente la película: Beckett se presenta al Departamento de Reasignación del Cielo. Tras proclamar su amor eterno por Rose, a Beckett le conceden su deseo y le envían de vuelta a la Tierra con la promesa de 9 vidas más, pero con un giro....
  La pregunta central de la película es: ¿cómo vivirías tu vida si tuvieras la oportunidad de volver a vivirla? Y el camino de Beckett es aprender que, cuando vives y amas con todo tu corazón, una vida es realmente suficiente.

ENTREVISTA AL DIRECTOR...
¿Cuál ha sido la mayor inspiración de la película?...
Mi amor de toda la vida por los animales, además de la larga lista de mascotas que he tenido, me sirvieron de inspiración para un cómic de un gato arrogante que se convierte en muchos animales diferentes. La gracia iba a ser que el gato se mantuviera impasible ante cualquier circunstancia, pero la conexión que tienen los dueños con sus mascotas le dio un enfoque más profundo a la historia. Los animales que acogemos en nuestros hogares permanecen poco tiempo, pero su presencia tiene un impacto enorme en nuestras vidas.

Las películas son un legado permanente, ¿qué quieres que transmita la tuya?...
La historia de un gato que tiene múltiples oportunidades de vivir una vida "mejor" contiene muchos mensajes de esperanza. En realidad, el mensaje de 10 VIDAS es muy sencillo: "Solo tienes una vida, así que vívela bien y ama mejor".

¿A quién quieres que llegue esta película?...
10 VIDAS tiene algo que permite que cualquier familia y generación pueda ver y disfrutar junta. Dicho esto, la alegría que me produce a nivel personal ver a niños pequeños morirse de risa no tiene precio. Ser capaz de alcanzar ese tipo de alegría es pura magia.

¿Por qué pensaste que era necesario contar esta historia ahora?...
A primera vista, ver a un gato enfrentarse a la deshonra de convertirse en un animal "inferior" es una comedia muy divertida. En un plano más profundo, creo que en una época de tanto cinismo como la nuestra, 10 VIDAS toca descaradamente de la fibra sensible y plantea un mensaje de esperanza desinteresada.

¿Cómo quieres que se sienta la gente después de ver la película?...
Me gustaría que cuando la gente salga del cine se sintiera emocionalmente conmovido, humorísticamente satisfecho y con ganas de volver a verla.

Cuéntanos alguna anécdota sobre el casting o el trabajo con su(s) actor(es)...
No es tarea fácil encontrar grandes nombres para una película de animación independiente, y estábamos volviéndonos locos para ver quién ponía voz a Beckett. Un buen día, Robyn Klein y Jeremy Ross, nuestros maravillosos directores de casting, sugirieron al increíblemente talentoso cómico Mo Gilligan, a quien, en ese momento, barajaban para un papel más pequeño. Tres minutos después de escuchar el monólogo de Mo, ya tenía claro que debía interpretar a nuestro protagonista masculino, el gato Beckett. Aparte de sus maravillosas dotes cómicas, su característica voz cálida desprende, en cada sílaba, una alegría contagiosa, lo que, combinado con su gran capacidad de improvisación y (quién lo iba a decir) su gran talento interpretativo, convirtieron a Mo en la elección perfecta. Cada jornada de trabajo tenía la sensación de "pellízcame, me pagan por esto".

¿Tu parte favorita del rodaje? ¿Algún recuerdo especial?...
Es una pregunta difícil porque son muchos y muy buenos los recuerdos, incluidas TODAS las grabaciones del reparto. Pero creo que reescribir la historia para que tuviera lugar en Inglaterra (país que echo desesperadamente de menos), y con un reparto inglés de actores brillantes, fue un sueño hecho realidad.

¿Cuál fue el mayor reto al que os enfrentasteis haciendo 10 VIDAS?...
Fue un enorme reto creativo planificarlo todo de antemano para que no hubiera sobrecostes. Mientras reescribía la película, tuve que imaginar lo que me gustaría ver y pelearme conmigo mismo para conseguir todo manteniendo un presupuesto relativamente pequeño. La suma de muchas pequeñas decisiones dio lugar a una película que cuenta una hermosa historia sin tratar de impresionar con fuegos artificiales y efectos especiales. Cosa nada habitual en el mundo de la animación.

Cuéntanos cómo y por qué te metiste en el mundo del cine...
Crecí en Gales, la parte occidental del Reino Unido. El adosado de mis padres, Miner's Cottage, estaba rodeado de minas de carbón y montañas. Aunque las minas de carbón iban desapareciendo una a una, el paisaje seguía siendo el de un mundo en blanco y negro, así que cuando, gracias al cine local, descubrí la animación, el tecnicolor de las películas me abrió los ojos a algo "más allá".
Al mismo tiempo que descubría ese nuevo mundo, la forma de contar historias de mi padre me descubrió el humor y la narrativa, y las sonrisas de mi madre reaccionando a mis interminables dibujos me animaron a seguir creando.
Un poco más tarde, como estudiante de arte que estudiaba ilustración en Londres, me encontré en el lugar adecuado en el momento oportuno cuando Walt Disney Feature Animation estaba contratando personal para trabajar en ¿Quién engañó a Roger Rabbit?.
Soy ilustrador por naturaleza y por formación. Me convertí en animador de efectos por casualidad, pero pronto cogí gusto a dar vida a los dibujos. En La Sirenita animé muchas burbujas, olas rompiendo, y arcoíris celestiales. En La bella y la bestia me deleité con tormentas y relámpagos. En Aladdín tuve la oportunidad de animar magia, fuego y lava, y en El jorobado de Notre Dame creé una Esmeralda bailando en llamas. Toda la maravillosa formación y entrenamiento que recibí en Disney ha dejado huella en todos mis trabajos.
Para mí, lo más importante es la atmósfera en la narración. Nunca he recibido formación como guionista, pero desde que me sentaba en el regazo de mi padre para escuchar sus bonitas historias, llenas de color y de humor, siempre he querido escribir mis propios trabajos.

¿Qué harías si no fueras cineasta?...
Estaría haciendo guitarras en una pequeña carpintería en algún lugar de Oregón.

GALERÍA DE FOTOS