John Ford, el famoso director de cine, fue a dar una charla a una pequeña ciudad norteamericana. No era todavía muy famoso cuando aquello sucedió, como se demostró al final. Porque al fina, pese, a que, por lo dicho, podía haberse traslucido a lo que se dedicaba, hubo quien le preguntó si era actor. A todo ello, el propio Ford dijo: "No. No soy actor de cine. Y, con una sonrisa añadió: Ni fabrico coches".