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CRITICA
Por: PACO CASADO
'The Square' llega a las pantallas españolas tras haber pasado por el Festival de cine de Cannes, inaugurar el Festival de cine de San Sebastián y el Festival de cine europeo de Sevilla, con el respaldo de la crítica y tras conseguir la Palma de oro en el certamen francés y cuatro nominaciones a los premios del cine europeo enunciadas en el de Sevilla.
El director sueco sitúa esta historia en el mundillo del arte del que hace una sátira de la sociedad occidental en una cinta en la que conviven personajes muy dispares entre si.
Es un conmovedor drama satírico que refleja nuestro tiempo, el sentido de la comunidad, el coraje moral y la necesidad de ego de la gente adinerada, en un mundo cada vez más incierto.
Es una película de este director sueco Ruben Östlund del que ya vimos 'Fuerza mayor' (Turist) (2014), que presentaba un interesante dilema moral en una familia y ahora cambia el chip y nos ofrece la historia de un director de un museo de arte contemporáneo que está preparando una nueva exposición sobre el altruismo que se llama 'The Square', de donde toma el título este film, pero un desconocido le roba el móvil y la cartera y ello provoca que a partir de ese momento no se ajuste a lo que está predicando, dado el sistema que emplea para intentar recuperarlos.
Otra de las líneas que toca es la polémica que se origina con el video de lanzamiento de la exposición, que se hace viral en los medios digitales, por lo fuerte que son algunas de sus imágenes, que es lanzado sin el permiso y la aprobación del director del museo lo cual le trae problemas.
Es una reflexión sobre los límites morales y el arte moderno en torno a lo cual ironiza, ya que uno de los motivos de la exposición lo constituye una serie de montones de arena en el suelo, que en parte barre una máquina limpiadora, o la pregunta que se hace una entrevistadora, visto lo visto, que si deja su bolso en el suelo en el museo se convierte en una obra de arte, dado el caso, con lo que se plantea qué es el arte moderno.
Tiene unas imágenes potentes y otras polémicas, por el hecho de haberse llevado la Palma de oro en el Festival de cine de Cannes y estar nominada a los premios del cine europeo en cinco de sus apartados.
Es un catálogo de situaciones inesperadas, sorprendes y algo surrealistas y performances que hacen dudar entre la ficción y la realidad y eso sí, son muy imaginativas ya que es difícil de adivinar qué nos deparará minutos más tarde, algunas son imprevisibles y otras hasta ridículas como las del hombre fiera.
En determinados momentos el humor sueco hasta provoca alguna que otra sonrisa, pero como suele ocurrir últimamente le sobran bastantes minutos dado su excesivo metraje.
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