INVITACIÓN DE BODA

INFORMACIÓN

Titulo original: Wajib

Año Producción: 2017

Nacionalidad: Palestina, Francia, Colombia, Alemania, Noruega. Qatar, Emiratos Árabes

Duración: 96 Minutos

Calificación: No recomendada para menores de 7 años

Género: Drama

Director: Annemarie Jacir

Guión: Annemarie Jacir

Fotografía: Antoine Héberlé

Música: varias canciones

INTÉRPRETES

Saleh Bakri, Mohammad Bakri, Tarik Kopty, Monera Shehadeh, Lama Tatour, Samia Shanan, Jalil Abu Hanna, Ossama Bawardi

CRITICA

Por: PACO CASADO

Esta película es un retrato de las tradiciones palestinas acerca de los preparativos de una boda.
Abu Shadi es un hombre de 60 años, padre divorciado y profesor de una escuela primaria, que vive en Nazaret. Cuando su hija Amal va a contraer matrimonio, su padre Abu tiene que repartir las invitaciones de boda, como manda la tradición, visitando uno por uno a las personas a las que van dirigidas, entregándolas en mano, ya que mandarlas por correo se considera una falta de respeto, cosa que hace en compañía de su hijo Shadi, un arquitecto que vive en Roma en compañía de su novia Nadia, desde hace años, que ha vuelto para asistir a la boda de su hermana y de camino ayudarlo en esa ingente tarea.
De esta manera la relación entre padre e hijo, tan desconectados desde hace tantos años, se verá puesta a prueba, ya que brotarán la tensiones existentes en la familia, lo que supondrá un gran reto para sus frágiles y diferentes maneras de ver la vida.
La película cuenta la relación que se establece entre padre e hijo contada a través de esta especie de road movie urbana en ese recorrido que realizan ambos en coche en ese quehacer durante un día mediante el cual vamos conociendo la relación entre ambos y al mismo tiempo otros detalles de la vida del padre, cuya mujer se marchó a Estados Unidos donde vive con otro hombre, a la que esperan que acuda para la boda de su hija.
Pero también existe esa otra relación con los distintos parientes y amigos a los que visitan para entregarles sus invitaciones o Ronni, el compañero de trabajo del padre, que influirá para que lo asciendan, al que el hijo se niega por considerarlo sospechoso de realizar espionaje en favor de los enemigos de Palestina.
En el último tramo hay unos momentos de respiro cuando se añade la hija, futura novia, que va a elegir el traje que ha de llevar en la ceremonia.
La censura otorgada a este film es no recomendada para menos de 7 años, lógico, porque a qué niño le puede interesar este tema, pero por otra parte también nos preguntamos a qué espectador le puede cautivar una trama tan plana, tan poco interesante, como no sea pariente de la familia que se nos presenta en la pantalla.
Hoy día se hace una historia de cualquier cosa y nada más anodino y falta de originalidad que este reparto de invitaciones, aunque en el ínterin nos vayamos enterando de algunas cuestiones que se ocasionan en esta familia, la mayoría de las veces con un leve tinte dramático y con un cierto suspense en otro aspecto que no desvelamos para no quitarle interés.
Esto no quita para que tenga una correcta realización y un buen trabajo interpretativo de padre e hijo.
La directora palestina, nacida en Belén, una de las pocas cineastas que ha logrado mostrar su trabajo fuera de su país, de la que ya se vio en España su ópera prima 'La sal de este mar' (2008), nos ofrece ahora su segundo largometraje de ficción con esta 'Invitación de boda' (2017), la historia de este padre que vive con su hija en Nazaret, pero que en un mes, cuando ella se case, se quedará solo.
La interpretación corre a cargo de Mohammad Bakri y Saleh Bakri, padre e hijos respectivamente en la vida real, que hacen una interpretación bastante convincente dentro del reducido espacio de su coche en el que se llevan buena parte del tiempo, que asumen los mismos papeles en la ficción, representando a dos generaciones y con una concepción y manera de entender la vida muy distintas, el padre más tradicional y apegado a la tierra, mientras que el hijo posee un horizonte mucho más abierto.
Como curiosidad digamos que la palabra Wajib que supone el título original significa deber social y apuntar también que llama la atención que para nada aparezca el conflicto palestino-israelí. Fue la representante de Palestina a los Oscar.
Premio Muhr a la mejor cinta de ficción y mejor actor (Mohammad Bakri, Saleh Bakri) en el Festival de Dubai. Mejor película en los F. de Kerala y Montpellier. Cinco Premios en el Festival de Locarno. Premio al mejor film y una mención del jurado en el F. de Londres. Cuatro premios en el festival de Mar del Plata.