|
CRITICA
Por: PACO CASADO
En el año 1850, llega al puerto de San Francisco la goleta La peregrina de Salem, capitaneada por Jonathan Clark, más conocido como El hombre de Boston.
El barco viene totalmente repleto de pieles de focas cazadas furtivamente en la Alaska rusa, un cargamento que vale una gran fortuna.
En la ciudad, el capitán conocerá y se enamorará de la hermosa condesa rusa Marina Selanova, que huye de un matrimonio que ha sido concertado con un príncipe ruso Semyon por el mismísimo Zar en contra de su voluntad.
Pero el día en que ambos van a casarse, llegará a San Francisco el novio despechado de ella, dispuesto a recuperar a su dama.
Una película de aventuras característica de la época, cuyo guion escrito por el prestigioso Borden Chase adapta una novela de Rex Beach llena de romance, de acción y aventuras, que en principio estaba destinado a ser interpretado por John Wayne y al final tuvo que adaptarlo para Gregory Peck que en este caso le da un tono de cierta elegancia al personaje.
Está dirigida por Raoul Walsh, todo un especialista en el género de acción que marcó su cine con el sello de la aventura, en el que desplegó toda su sabiduría como realizador, ya fuera en films del Oeste o de aventuras como sucede en este caso.
Walsh se enfrentó a 'El mundo en sus manos' (1952) y se la planteó como si fuera un auténtico western.
No se pudo olvidar así de su género favorito en el que realizó posiblemente sus mejores obras.
El capitán Jonathan Clark se comporta como un vaquero y la condesa representa a la rubia de turno, aunque en este caso no importe que sea una morena, que busca refugio en los brazos del héroe, como ocurría en los primeros tiempos del cine.
Igualmente podemos decir de la estructura y del planteamiento: Raoul Walsh disfruta con sus clásicas y divertidas peleas y la persecución que en este caso se produce entre dos goletas, logrando una de las mejores secuencias de acción de esta interesante producción.
Salvó de forma muy aceptable los escollos que le planteaba la realización, aunque le faltara un poco de más viento en las velas de la creación, quedando en una clásica cinta de aventuras mezclada con algunas gotas de humor, típica de la Universal de los años cincuenta, que se beneficia de su acertado reparto en el que destaca el trío formado por el apuesto Gregory Peck, la guapa Ann Blyth y el pícaro Anthony Quinn, destinada a la simple diversión de los espectadores, lo cual está garantizado.
MÁS INFORMACIÓN DE INTERÉS
TRÁILER'S
BANDA SONORA
CLIPS
CÓMO SE HIZO
VIDEO ENTREVISTAS
AUDIOS
PREMIERE