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CRITICA
Por: PACO CASADO
Los productores han pensado que si La Lego película (2014) fue un éxito al basarse en esos famosos juguetes, por qué no probar con estos otros.
Es la historia de una fábrica de muñecos de peluche en la que los que no salen perfectos los tiran o los mandan a un lugar de desguace, donde se ha creado la ciudad de los UglyDolls.
Hace muchos años se fabricaron los muñecos para dar felicidad a todos los niños del mundo, que viven en una ciudad mágica donde todo es perfecto.
Por el contrario los peluches UglyDolls, los muñecos imperfectos, viven libres de prejuicios en ese otro mundo en el que nadie les critica y en el que están felices y protegidos, pero sin la posibilidad de llegar a manos de los niños.
Un día, una de ellos, Moxy, la protagonista de esta historia, una muñeca que desea que las niñas jueguen con ella, se pone al frente de un grupo compuesto por sus amigos Ox, Lucky Bat, Babo y Wage que intenta visitar la ciudad mágica de los muñecos perfectos y juntos emprenden un viaje lleno de dificultades ocasionadas por Lou, el líder perverso y manipulador del Instituto de la Perfección.
En el film los muñecos viven en una ciudad mágica en la que todo es ideal, pero no hace falta ser bonito para ser increíble.
Pero los UglyDolls, los peluches imperfectos, de espíritu libre, que viven apartados en una ciudad distinta, donde nada es perfecto, buscan ser queridos por los niños.
A pesar de no poder vivir con el resto de los muñecos que tienen todos los niños, los muñecos de peluche imperfectos, los UglyDolls, son felices, porque habitan en un mundo aparte donde nadie les juzga ya que todos son iguales al tener algún defecto.
Es una cinta de animación en la que se reivindica lo diferente que se basa en los juguetes de peluche creados por el matrimonio David Horvath y Sun-Min Kim en el año 2001, que ensalza la diversidad, la amistad y la aceptación de cada uno ser como es.
Está dirigida por el experto en animación Kelly Asbury, a quien se le deben entre otros títulos Spirit, el corcel indomable (2002), Sherk 2 (2004), Gnomeo y Julieta (2011) y Los pitufos, la aldea escondida (2017), siendo éste el quinto título de su filmografía.
La película tiene el tono adecuado pero tan sólo logra las expectativas en contadas ocasiones con algunos gags no muy divertidos, con varios mensajes, pero en el fondo a veces resulta algo estirada con un guion bastante complicado para las mentes infantiles y por demás puesto en escena de manera embarullada, ya que hay momentos en que no se sabe donde andan los personajes de esta historia.
Hay otro aspecto que es el musical, ya que comienza con una canción a la que sigue casi una decena de ellas y eso, por lo general, aburre a los más pequeños, lo que puede que sea uno de los motivos por los que no haya funcionado como se esperaba, a lo que hay que añadir una animación algo elemental y torpe.
Si por algo interesa es porque toca el tema de que alguien que no sea como el resto no significa que no pueda ser guapo o interesante.
Por otra parte hace una reflexión educativa acerca de la belleza interior, la familia y la amistad, entre otras virtudes, lo que significa que siempre se puede ser mejor, pero especialmente que no todos somos iguales y aunque se sea diferente lo importante es ser uno mismo.
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