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CRITICA
Por: PACO CASADO
Esta película representa en el western la preocupación por los temas sociales.
Al principio de la historia del cine del oeste el género se ocupaba de la actividad de los personajes.
Pero ya en los años cuarenta se rebuscó en el espíritu de los héroes a través de la acción psicológica.
En la Virginia del año 1864 Charlie Anderson, un agricultor viudo y su familia compuesta por siete hijos y una nuera embarazada, es uno de los granjeros más importantes del valle de Shenandoah, que vive una vida pacífica y tranquila.
Charlie no deja que sus hijos se unan al ejército para luchar en la Guerra Civil, porque no considera que sea guerra.
Una de sus hijas, Jennie, se casa con su amando teniente Sam, pero no tienen luna de miel porque tiene que regresar al frente.
Aunque la Guerra de Secesión está llegando a las puertas de ese lugar donde se encuentra su hogar, Charlie insiste en mantenerse neutral, al margen de ella, porque ni tuvo, ni tiene esclavos o deberes con el estado como para meterse en ese conflicto bélico.
Pero cuando por una confusión los nordistas hacen prisionero a Boy, su hijo menor, Charlie y su familia deciden que a partir de ese momento la guerra ya les concierne a ellos y se lanzan al rescate del chico.
La historia es una sucesión de trágicas tramas personales culminadas con un final feliz para esta excelente producción de corte familiar.
El guion se adaptó posteriormente para crear un musical de Broadway.
En 'El valle de la violencia' (1965) se utiliza la Guerra de Secesión para reflejar los argumentos que inquietaban en los años sesenta: la integración racial y la repulsa de la guerra.
Es un film que transcurre con el estilo de los de John Ford, aunque la epopeya y la crítica social difícilmente se pueden mezclar, sin embargo Andrew Victor McLaglen lo logra, a pesar de que no sea de la manera más perfecta, pero alcanza un notable tono en su realización.
Dramáticamente posee algunos efectos que son impresionantes sin llegar al folletín, salvándose algunas de las situaciones. Técnicamente es una cinta muy madura, que no parece la obra de un hombre joven y sin aún mucha experiencia en la dirección.
La película posee ideas positivas que la convierten en una constante denuncia de los males de la sociedad, hoy aún vigentes en nuestros días.
El director Andrew Victor McLaglen realiza este estupendo drama protagonizado por James Stewart con los jóvenes actores Katharine Ross, Rosemary Forsyth y el agraciado hijo de John Wayne, Patrick Wayne, junto al veterano George Kennedy entre otros.
Fue nominado al Oscar al mejor sonido, al Globo de oro Rosemary Forsyth y al Laurel de oro al mejor drama.
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