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CRITICA
Por: PACO CASADO
El argumento más simple puede dar la mejor comedia si se tiene un buen guión que le saque partido a las situaciones de los personajes y que tanto la dirección como los actores estén acordes con los más mínimos principios.
Algo así sucede con esta comedia americana en la que en un encuentro casual entre un ejecutivo de Manhattan y una pobre chica mexicana, que vive en Las Vegas y es fotógrafa, tras una noche de amor queda embarazada, contándole a él tres meses después lo sucedido.
Deciden casarse a pesar de las diferencias y sin contar con las familias, lo que origina el enfado de ambas y más de una cómica situación.
A pesar de las desavenencias que surgen con el vivir cotidiano, debido a sus diferentes culturas, maneras de pensar, de religión y de ver la vida de cada uno de los suyos, la cosa llega a feliz puerto, como es preceptivo en toda comedia.
La película está llevada a buen ritmo, posee un guión interesante que saca partido a los momentos cómicos, todo en un tono amable, que hace pasar un rato agradable, a lo que contribuye el buen hacer y el gracejo de los actores, una rica banda sonora plagada de canciones, que ilustran muy bien las distintas secuencias cómicas.
En Matthew Perry puede haber un buen actor de comedia y si se le añade la belleza y simpatía de la mexicana Salma Hayek, que demuestra tener buenos resortes para el género cómico, el conjunto resulta divertido. Andy Tennat con su ágil dirección logra un aceptable resultado.
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