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CRITICA
Por: PACO CASADO
La cinematografía británica es muy dada a contar historias de época en las que dispone de estupendos escenarios para ambientarlas debidamente a todo lujo y generalmente con un buen estilo, corrección y acierto en lo cinematográfico que le caracteriza por lo general.
La acción esta vez se sitúa en la Inglaterra posterior a la Primera Guerra Mundial en Beechwood.
El matrimonio compuesto por Mr. Godfrey Niven y su esposa Clarrie, que pertenece a la aristocracia británica, perdieron a sus dos hijos varones en la guerra pero aún le queda una hija, Emma, que está en edad casadera.
En la casa trabajan dos criadas Milly, una chica poco agraciada, y Jane Fairchild, una joven de 22 años. de una gran belleza, huérfana de nacimiento.
Emma, la hija de los Niven, se va casar con Paul Sheringham perteneciente a otra rica familia, que son vecinos, pero éste está enamorado de Jane Fairchild con la que tiene frecuentes encuentros amorosos.
Por su parte Jane Fairchild, planea en secreto reunirse con Paul Sheringhan, que está estudiando la carrera de Derecho para ayudar a su padre en su despacho, que es el hombre que ama a escondidas desde hace siete años, antes de que se case con Emma.
El 30 de marzo de 1924, en Beechwood, el matrimonio Niven se prepara para celebrar el Día de la madre y en el almuerzo en un restaurante al aire libre, anunciar el compromiso matrimonial de Emma con Paul, cuyos padres de él también asisten a la comida.
Esperan la llegada de Paul, que se retrasa, y no es otro el motivo que está con Jane haciendo el amor en su casa.
Hasta aquí se puede contar, como se diría en el concurso televisivo, que es el principio de esta historia, pero ya es bastante, puesto que la mayor parte del tiempo transcurre en la casa de los Sheringham en el encuentro amoroso que tiene lugar entre Paul y Jane y cuando éste se marcha, en el recorrido que hace ella por la casa, completamente desnuda, curioseando cuanto se encuentra a su alcance.
El film tiene una segunda parte con el destino posterior de Jane que se ha convertido en una escritora de éxito.
El guion de Alice Birch está basado en la novela corta de igual título del escritor inglés Graham Swift, publicada en 2016, y editada aquí con el título de El domingo de las madres, por Anagrama.
Es un drama sobre la soledad de un amor añorado, el dolor de la pérdida, el deseo de superación y de alcanzar un futuro mejor partiendo de la nada, de chica de servicio a escritora de éxito.
La mayor parte del protagonismo corresponde a la guapa actriz australiana Odessa Young que se lleva casi todo el tiempo en pantalla y en pocos momentos luciendo el vestuario, junto con Josh O'Connor, su amante.
Como respaldo de ambos están los veteranos Colin Firth y Olivia Colman y prácticamente un cameo de una muy envejecida Glenda Jackson, que está casi irreconocible.
La realización corre a cargo de la joven guionista y directora francesa Eva Husson, que ha confesado que en esta su cuarta película ha encontrado las tres cosas que más le gustan, el sexo, la literatura y el cine, por lo que no tiene ningún recato en mostrar con naturalidad los cuerpos desnudos de los dos amantes de todas las posturas posibles, utilizando con gran frecuencia los primeros planos y en un formato de pantalla casi cuadrada lo que hace que resalten más al cubrir casi todo el cuadro, que e la primera suya que le vemos en nuestras carteleras, con un ritmo demasiado lento, ya que suceden pocas cosas que contar y mucho que rellenar para conseguir la duración estándar.
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