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CRITICA
Por: PACO CASADO
A pesar de que las nuevas tecnologías sobre el género de la animación cinematográfica están ya muy extendidas y en casi todos los países se producen películas, no en todas están tan avanzadas.
Así sucede en este caso en el que nos enfrentamos a la cinematografía de Venezuela y podemos comprobar que no es de las más perfectas en este sentido ya que aunque se producen films animados los diseños de los personajes, como igualmente sucede con los fondos de los paisajes en los que se desarrolla la acción, son todavía muy elementales en cuanto a los detalles de los diseños, expresiones y movimientos de los mismos.
En esta ocasión se nos narra una historia infantil en la que los animales hablan entre sí y con una niña indígena que es la protagonista del cuento, llamada Caribay, que vive en una zona apartada del pueblo, con sus padres y su abuelo, pero cercana al bosque donde habitan los animales.
Es una zona de las altas montañas de la Cordillera Andina, unos campesinos, que cazan por placer, matan a un oso frontino y a su pareja, dejando huérfano al cachorro de osito, que se tiene que ocultar ante la persecución de los cazadores.
Cuando surge un problema con el agua en el pueblo los padres y el abuelo de Caribay van a ver qué ocurre y la niña se pierde siendo encontrada por el osito al que ella le pone el nombre Kaporito, que le cuida en compañía de los animales del bosque.
Todos unidos tienen ocasión de combatir a los cazadores haciéndoles la vida imposible hasta que logran expulsarlos.
A cada paso que da la historia surge una canción en la que se canta lo que sucede apoyando así a las imágenes, cosa que ocurre hasta en ocho ocasiones a lo largo de la narración, todas ellas con ritmos muy sudamericanos.
En los metros finales se introducen unas imágenes reales de los osos frontinos y de fondo una voz ruega que se protejan ya que cada vez quedan menos, así como evitar la tala de los bosques y hacer fuego que los destruye, ya que debemos proteger todos la naturaleza.
En los créditos finales se ofrece de fondo una especie de medley de las canciones y aún al término de los mismos todavía hay una secuencia más de imágenes con una de las canciones cantada a coro por todos los animales.
Premio al mejor guion en el Festival de cine Iberoamericano de Caracas.
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