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CRITICA
Por: PACO CASADO
Película turística acogida al crédito sindical diciendo desde el principio que en la Costa del Sol hay que reservar habitación con seis meses de adelanto.
Así se podría definir el film, porque todo lo demás, la trama argumental es casi tan bonita como estas afirmaciones.
Desde el principio nuestras ilusiones de encontrar un film medianamente distraido, con los habituales valores espectaculares intrascendentes de este género, resultan totalmente fallidos.
Los guionistas parece que han trabajado para televisión, por algo que está allí, por la superficialidad con que tratan el argumento, muy pretencioso y poco extenso, que es tipicamente televisivo.
Los personajes quedan para nosotros totalmente ocultos en sus intenciones y acciones. O, mejor dicho, resultan monigores, torpísimamente manejados por un montón de señores guionistas, que se habrán hecho un lío tremendo.
Como Armiñán escribe tantas y tantas historias puede que se le hayan entremezclados los folios de unas y otras.
En cuanto a la realización también es de una fealdad que causa risa, y pena. German Lorente no sabe describir situaciones, ni contar acontecimientos.
Hay ausencia de tirmo y falta del más mínimo sentido artesanal al dejar al descubierto los trucos cinematográficos. Juega tan mal con el tiempo como el alumno más atrasado de la Escuela de Cinematografía, a la que, por cierto, debía ir.
Los intérpretes están a la altura del director, es decir, lamentables.
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