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CRITICA
Por: PACO CASADO
Antonio Gonzalo, logroñés de nacimiento y andaluz de adopción, se extrañó que no se hubiera llevado a la pantalla la biografía de Blas Infante (1885/1936), el padre de la patria andaluza, y se puso a investigar y con la colaboración de Antonio Oneti hizo el guion.
Esta producción intenta condensar su vida y sus ideas.
Fue un pacifista notario, republicano, escritor, pero también hijo, marido y padre.
A lo largo del film el espectador va teniendo una visión global de su figura desde que es detenido hasta ser fusilado y en su itinerario de prisión en prisión, va evocando algunos momentos de su vida en sucesivos flash backs, por los que pasan figuras de la época como los hermanos Álvarez Quintero, Ramón Franco, Pedro Parias, etc.
Hay que elogiar que a pesar del escaso presupuesto y los pocos medios a su alcance, Antonio Gonzalo ha sacado un estupendo partido del amplio elenco de actores andaluces de que dispone, de los escenarios naturales están muy bien elegidos, paisajes, casas señoriales, palacios, centros oficiales y el estupendo vestuario que contribuyen perfectamente a la ambientación de la época, e igualmente la excelente fotografía de Teo Delgado o la inspirada música de Javier Cámara.
A pesar de que los hechos son históricos y los personajes que se incluyen en la cinta son reales, el guion tal vez esté demasiado fragmentado y le falte unidad o haber adoptado un formato que le hubiera hecho más asequible al gran público, pero a pesar de ello no cae en tópicos.
Posiblemente nos falte perspectiva, por quedar demasiado cercana a lo nuestro, a nuestras gentes y a nuestros actores, a la figura que describe, para que podamos hacer un crítica más acertada y objetiva, pero de lo que no cabe duda es del gran esfuerzo que se ha hecho para llevarla a cabo, y eso es de elogiar.
Premio Colón de oro del público en el Festival de cine Iberoamericano de Huelva 2002.
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