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CRITICA
Por: PACO CASADO
Tras hacer 'Demasiado caliente para ti' (1995) y llevarse varios años haciendo televisión, el inefable Javier Elorrieta ha vuelto a la pantalla grande con Pacto de brujas.
Es la versión cinematográfica de la novela de Andreu Martí, La camisa del revés, título que hace referencia a una forma de ponerse la ropa para ahuyentar a los fantasmas.
De eso va esta compleja trama protagonizada por el Dr. Degrás un psiquiatra, que no cree en brujas, que es requerido por la Guardia Civil al producirse un asesinato múltiple en un pequeño pueblo. La única superviviente es la novia del asesino, Ricardo, que después se suicidó, que está en un estado de shock, motivo por el que es requerido el médico para ayudar en la investigación.
Con el transcurso de la misma sabemos de los rencores de dos familias del pueblo, los Chornet y los Forqué, que se odian profundamente, lo que ha motivado la matanza como una forma de venganza.
Un argumento demasiado complejo que mezcla parasicología, asunto policiaco, crímenes, ambientes rurales, pueblo abandonado y una serie de elementos que no dudamos estén en la novela de Martí, pero que a Elorrieta le vienen grande y cuyo guión no acaba de poner en claro, entre otras cosas por una puesta en escena poco clarificadora, que mezcla fantasmas con escenas realistas, sonidos inexistentes, misas negras, etc.
Algunos actores son poco creíbles en los papeles a desempeñar, por ejemplo Carlos Sobera, cuyo rostro está gastado en cometidos televisivos totalmente opuestos al encomendado.
No esperábamos mucho de este film ni de su realizador, por lo que no nos ha decepcionado.
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