| Título: | COMO LA VIDA MISMA |  |
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Tit. Orig.: |
LIFE AS WE KNOW | |
| Nacionalidad: | EE.UU., 2010 | |
| Dirección: | GREG BERLANTI |  |
| Guión: | IAM DEITCHMAN, KRISTIN RUSK ROBINSON | |
| Fotografía: | ANDREW DUNN | |
| Música | BLAKE NEELY | |
| Interpretes: | KATHERINE HEIGL, JOSH DUHAMEL, CHRISTINA HENDRICKS, JOSH LUCAS, JEAN SMART, MELISA McCARTHY, FAIZON LOVE, HAYES MacARTHUR, ANDREW DALY | |
| Censura: | AUTORIZADA PARA TODOS LOS PÚBLICOS | |
| Duración: | 112 MINUTOS |
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Por PACO CASADO
El guionista Greg Berlanti escribió el guión de "El club de los corazones rotos" (2000) sobre un joven y su salida del armario para lo que se basó en sus propias experiencias y terminó siendo convencido para que fuera él quien lo dirigiera.
Contó con un bajo presupuesto y con actores casi desconocidos para esa su ópera prima. El resultado no nos convenció.
Diez años después con "Como la vida misma" (2010) hace su segunda realización de un largometraje, esta vez con un guión ajeno, en el que se nos cuenta la relación entre Holly Berenson y Eric Messer, los mejores amigos por separado de Alison y Peter Novak, a los que hacen coincidir en una primera cita que termina fatal al comprobar que no tienen nada en común y que se llevan fatal. Cuando la pareja fallece en accidente, deja en su testamento la casa a Holly y Eric para que cuiden de su hija Sophie de pocos meses. (El papel de Sophie está interpretado por unas trillizas).
Tras este leve inicio argumental ya se puede observar que esta comedia se ajusta a los cánones clásicos en los que la pareja protagonista comienza mal y acabará, previsiblemente, bien, descubriendo tras una pelea y la consiguiente petición de perdón mutua, que están hechos el uno para el otro.
Para llegar a ello los noveles guionistas se toman demasiado tiempo, poniendo a los protagonistas en dificultades y tratando de sacar comicidad de las circunstancias que viven ambos, debido a su falta de experiencia a la hora de cuidar bebés y teniendo que atender a sus respectivos trabajos.
La película no ofrece nada nuevo que no hayamos visto con anterioridad en otros títulos de este género de comedia romántica con algunas gotas dramáticas.
El film nos hace una demostración de la idea que tiene la juventud actual acerca del matrimonio y de las responsabilidades que conlleva la paternidad.
El título español no hace honor a lo que dice ya que no es frecuente que dos personas solteras convivan bajo el mismo techo porque lo diga un testamento y por medio haya un bebé.
En este sentido el argumento es poco imaginativo y muy convencional, ya que habría otras soluciones para este problema.
Aunque esté bien rodado, como suele ser bastante habitual en el cine americano, el director Greg Berlanti no acaba de darle el ritmo adecuado que necesita una comedia de esta clase.
Los actores cumplen con sus cometidos a pesar de lo sosas que son las situaciones. 
