Título: | NO CONTROLES | |
Tit. Orig.: |
NO CONTROLES | |
Nacionalidad: | ESPAÑA, 2010 | |
Dirección: | BORJA COBEAGA | |
Guión: | DIEGO SAN JOSÉ, BORJA COBEAGA | |
Fotografía: | AITOR MANTXOLA | |
Música | ARÁNZAZU CALLEJA | |
Interpretes: | UNAX UGALDE, ALEXANDRA JIMÉNEZ, JULIÁN LÓPEZ, MIGUEL ÁNGEL MUÑOZ, SECUN de la ROSA, MARIVÍ BILBAO, MARIAM HERNÁNDEZ, RAMÓN BAREA | |
Censura: | AUTORIZADA PARA TODOS LOS PÚBLICOS | |
Duración: | 98 MINUTOS |
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Por PACO CASADO
Borja Cobeaga con su ópera prima "Pagafantas" (2008), tras ganar la biznaga de plata al mejor guión y el premio de la crítica en el Festival de Málaga, parecía que estaba llamado a revolucionar la comedia española cuando en realidad no era más que una película con pretensiones comerciales, sin borderías, dirigida a la juventud, que no tenía ni el ingenio, ni la comicidad que se pretendía que tuviera, que fue sobrevalorada por un determinado sector de la crítica.
Tras clausurar el Festival de cine de Gijón nos llega ahora su segundo largometraje, "No controles" (2010), con el que se ratifica lo que algunos nos temíamos, que no hay tal hallazgo, que lo único que hace es volver a utilizar la misma fórmula y que los resultados son similares, o peores, que en la anterior por repetidos.
Sergio es llevado por su padre al aeropuerto el día de noche vieja en compañía de su novia, Bea, a la que pretende reconquistar. Ambos van a tomar el avión pero con distintos destinos. Los vuelos se han suspendido debido a una gran nevada y han de pasar la noche en un hotel de carretera cercano al aeropuerto, donde vivirán la más cutre de la entradas de año entre los pasajeros y un amigo, el llamado Juancarlitros, que pretende ser humorista y es el tío más pesado del mundo.
En este personaje se pretende basar toda la comicidad y el desmadre de este film que no tiene pretensiones, ni la más mínima gracia y que nunca logra la complicidad del espectador treintañero al que se supone que va dirigido.
La cinta termina desinflándose por falta de fuerza, como las gaseosas, y sumida en la nostalgia de la trama amorosa.
El arranque no está claro, ni nos pone en antecedentes de las relaciones de la pareja que el espectador ha de ir averiguando.
Está falta de un buen guion, de nuevo escrito en colaboración con Diego San José, sin el ritmo necesario que necesita una comedia y más si se desarrolla casi toda ella entre las paredes de un hotel de carretera, con situaciones poco graciosas que no terminan de funcionar debido a una dirección que hace una anodina puesta en escena.
Flojea también por parte de los actores con un Unax Ugalde un tanto insulso, un insoportable Julián López en el personaje de Juancarlitros y en el lado positivo el buen hacer de una encantadora Alexandra Jiménez.
Borja Cobeaga se ha de hacer mirar cambiar de género y así sabremos mejor de lo que es capaz de dar de sí.