Título: | CHICO & RITA | |
Tit. Orig.: |
CHICO & RITA | |
Nacionalidad: | ESPAÑA, INGLATERRA, 2010 | |
Dirección: | FERNANDO TRUEBA, JAVIER MARISCAL, TONO ERRANDO | |
Guión: | IGNACIO MARTÍNEZ de PISÓN, FERNANDO TRUEBA | |
Fotografía: | En Color | |
Música | BEBO VALDÉS | |
Interpretes: | Animación | |
Censura: | AUTORIZADA PARA TODOS LOS PÚBLICOS | |
Duración: | 93 MINUTOS |
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Por PACO CASADO
Fernando Trueba, es un director que reconoce su amor por la música latina y el jazz, como ya lo demostró con dos títulos de su filmografía, "Calle 54" y "El milagro de Candeal". Precisamente Trueba y Mariscal colaboraron en el lanzamiento del disco de" Calle 54" y desde hace tiempo se habían propuesto hacer un film de dibujos animados, hasta que por fin se han dado las circunstancias adecuadas para realizarlo y aquí está para que lo podamos disfrutar.
Ese es el verbo que mejor le cuadra a esta cinta en la que la música de esos géneros es la protagonista que adoba una historia de amor clásica a la que le sirve de marco.
Chico Valdés es un viejo betunero de La Habana que rememora sus tiempos jóvenes, cuando en 1.948 era un pianista que trataba de abrirse camino como músico. Un día conoce en un cabaret a una joven cantante, Rita Labelle, en la que encuentra a la pareja ideal para presentarse a un concurso de noveles de una radio local, comenzando así la ascensión en el mundo de la música y el amor entre ambos, con sus avatares, sus desmanes, encuentros, equívocos y desencuentros como en cualquier pareja.
La historia tiene las características de las películas de los años cuarenta y cincuenta como en los melodramas románticos, que recuerda a grandes títulos del cine americano, algunos de los cuales les hace un homenaje, caso de Casablanca, o musicales como Un día en Nueva York, entre otros.
El personaje de Chico está inspirado en el gran músico cubano Bebo Valdés, aunque no se trata de su autobiografía.
El film es un homenaje a los músicos de aquellos años como Dizzy Gillezpie, Charlie Parker, Thelonius Monk, Nat King Cole o Chano Pozo del que se escenifica su muerte o actual, Estrella Morente.
También hace una crítica a la censura cuando, pasado el tiempo, llega a Cuba la revolución de Fidel, aunque en ningún momento pretende hacer política con ello, ni tomar partido, siendo únicamente un apunte.
La cinta tiene un guion interesante, bien llevado por Fernando Trueba desde la dirección y con estupendos dibujos de Javier Mariscal, que hace una perfecta reconstrucción de La Habana o el Nueva York de los años 50 en ambientes y decorados, uso de la iluminación, vestuario, grandes coches descapotables, etc..
Hay quien ha dicho que es como un bolero de hora y media, siendo posiblemente la definición más exacta, con su tratamiento de cine clásico, con una notable técnica tanto en los dibujos como en su estructura dramática o en los adecuados diálogos.
La banda sonora incluye conocidas canciones de la época que vienen bien al relato amoroso, en estupendos arreglos e interpretaciones, que hacen las delicias de los buenos aficionados a este género musical y a los cinéfilos amantes de las películas de animación para adultos, apartado por el que ganó el Goya.