Título: | KUNG FU PANDA 2 | |
Tit. Orig.: |
KUNG FU PANDA: THE KABOOM OF DOOM | |
Nacionalidad: | EE.UU., 2011 | |
Dirección: | JENNIFER YUH | |
Guión: | JONATHAN AIBEL, GLENN BERGER. Argumento: RYAN GREGO, ED GOMBERT, ROBERT KOO, SIMON WELLS | |
Fotografía: | En color | |
Música | JOHN POWELL, HANS ZIMMER | |
Interpretes: | Animación | |
Censura: | AUTORIZADA PARA TODOS LOS PÚBLICOS | |
Duración: | 93 MINUTOS |
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Por PACO CASADO
En la competencia con Pixar, DreamWork ha encontrado dos series de películas rentables, las de "Shrek" y la de "Madagascar", frente al fracaso de "Megamind", pero de nuevo halló otro argumento con "Kung Fu Panda" que va camino de convertirse en la más comercial de todas ya que esta secuela lleva más de 200 millones de dólares recaudados hasta el momento. La primera hace tres años salvó al estudio.
En ella se hacía una parodia de las películas de kung fu protagonizada por Po, un oso gordo, torpe, gracioso y patoso, que ayudaba a su "padre" el ganso Mr. Ping en su restaurante de fideos, que terminó convertido en Guerrero del Dragón.
En esta nueva aventura se trata de salvar a China del ambicioso Lord Shen, un orgulloso pavo real, que ha descubierto un arma poderosa con la que trae en jaque al Valle de la Paz.
Po en compañía de los Cinco Furiosos tratará de resolver el problema siguiendo el consejo de su maestro Shifu de buscar la paz interior y al mismo tiempo de resolver esa otra incógnita que le atormenta sobre su pasado ya que no hace más que preguntarse cómo un ganso puede ser su padre, tratar de superar su orfandad y encontrar su identidad. Lord Shen tendrá algo que ver en ello.
Una vez más es una historia de superación destinada a toda la familia en la que continúan buena parte de los principales protagonista y la novedad recae en el malvado Lord Shen que desea ser el amo de la China imperial.
El avance cada vez mayor de la tecnología digital ayuda a la creatividad y a hacer cada vez más perfecto la consecución en ambientación, las escenas de persecuciones y acción que se prodigan bastante en esta ocasión a un ritmo trepidante, que abusa de un montaje demasiado rápido.
Todo esto unido al humor hace las delicias del público infantil que se identifica bien con los animales que protagonizan la historia, muy en la línea tradicional de los cuentos populares de Walt Disney.
El sencillo guión pierde la superficialidad de la primera y se lo toma más en serio, continuando el relato con dignidad y viéndose enriquecido por el aspecto sentimental de la trama paralela sobre el lado oscuro de la traumática infancia de Po, que desea conocer a sus padres biológicos, con las relaciones paterno-filiales, con su crisis de identidad y con un mejor universo estético.
El film sigue la receta del anterior que tan buen resultado dio, en la que se defiende bien su directora Jennifer Yuh en esta su ópera prima. La cinta aporta algunas ideas válidas en torno a la amistad, la libertad personal y el amor a su padre. Aunque ya no depare la sorpresa de la original, pero deja la puerta abierta para una tercera.