Título: |
UN BUEN HOMBRE |
Título original: |
UN BUEN HOMBRE |
Nacionalidad: |
ESPAÑA DE 2008 |
Dirección: | JUAN MARTINEZ MORENO |
Guión: | JUAN MARTINEZ MORENO |
Fotografía: |
GONZALO BERRIDI |
Música: |
SERGIO MOURE |
Interpretes: |
TRISTAN ULLOA, EMILIO GUTIERREZ CABA, NATHALIE POZA, ALBERTO JIMENEZ y MIGUEL DE LIRA |
Censura: |
NO RECOMENDADA PARA MENORES DE 13 AÑOS |
Duración: |
97 MINUTOS |
Por PACO CASADO
Últimamente el cine español nos ha ofrecido algunas muestras de cine negro a la antigua usanza, basados en guiones muy sólidos, con una intriga bien construida y con personajes perfectamente definidos.
Vicente es un catedrático de Derecho, en una pequeña localidad gallega, que aspira a ganar la cátedra, apoyado por su amigo Fernando, uno de los profesores más veteranos, aunque tiene la oposición de Daniel, que ha caído en desgracia a los ojos de Fernando.
Vicente pertenece a la burguesía acomodada, está felizmente casado, hombre religioso y de acendrada moral, que quedará resquebrajada el día que ve cómo Fernando asesina a su esposa. Se le plantea así la diatriva de ir a la policía, denunciar a su amigo o callar. Aunque sabe que lo correcto es hacer justicia, se juega la posibilidad de obtener la cátedra.
En su fuero interno debido a su religiosidad es incapaz de perdonar a su amigo. A partir de ese momento sabrá que no sólo hay el bien y el mal, lo blanco y lo negro, sino que también existe lo gris. Surge así la hipocresía, la doble moral, la ambición, la incomunicación en el matrimonio.
En la trama hay confluencia entre el relato policiaco, el drama psicológico, el apunte social y el drama de moral católica.
Tiene un desliz, un fallo de guión, que hace menos creíble la segunda parte del film en el que la tensión va creciendo hasta descubrir de lo que es capaz un hombre de conducta modélica por no perder su posición social.
Está convencido de que la ley debe estar por encima de todo y sufre un dilema moral que acaba por atormentarle al hacerse cómplice.
Hay en la trama ciertas influencias del cine de Alfred Hitchcock especialmente se nos antoja de Yo confieso en el que el drama del protagonista tiene semejanzas aunque por razones bien distintas, uno por el secreto de confesión y el otro por intereses creados.
Martínez Moreno, que hace su segundo largometraje tras debutar con la interesante 'Dos tipos duros', con tintes de comedia, cambia radicalmente al drama psicológico y criminal, llevado a ritmo pausado como corresponde a una cinta de este género.
Cuenta con cuatro actores sólidos, con el mejor trabajo que le conocemos a Tristán Ulloa y una estupenda Nathalie Poza.