Título: | GLADIATOR | |
Tit. Orig.: |
GLADIATOR | |
Nacionalidad: | EE.UU., 2000 | |
Dirección: | RIDLEY SCOTT | |
Guión: |
DAVID FRANZONI, JOHN LOGAN, WILLIAM NICHOLSON |
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Fotografía: |
JOHN MATHIESON |
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Música |
HANS ZIMMER, LISA GERRARD |
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Interpretes: |
RUSSELL CROWE, JOAQUIN PHOENIX, CONNIE NIELSEN, OLIVER REED, DEREK JACOBI, RICHARD HARRIS, DJIMON HOUNSOU, DAVID SCHOEFIELD, JOHN SHRAPNEL |
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Censura: | NO RECOMENDADA PARA MENORES DE 13 AÑOS | |
Duración: |
151 MINUTOS |
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Por PACO CASADO
Ridley Scott demostró en su primera película, Los duelistas (1977), que en él había un gran director y lo reafirmó en sucesivos éxitos posteriores como Alien, el octavo pasajerolien, el octavo pasajero (1979), Blade Runner (1982), etc. aunque en los últimos tiempos hubiera tenido un bajón en su filmografía.
Ahora, cuando hace más de treinta años que el género de romanos no se hacía en plan espectacular, otra cosa son las parodias, se lanza a resucitarlo y filmar a lo grande, a la antigua usanza, aunque añadiendo los recursos propios y las técnicas de que se dispone en el cine en la actualidad, este buen ejemplo logrado con Gladiator.
El argumento no es muy original, e incluso se pueden ver en él, influencias de Espartaco (1960) de Stanley Kubrick y sobre la base histórica, aunque reformada con la ficción, de La caída del imperio romano (1964) de Anthony Mann.
El esquema es tan simple como el de un western: la venganza. Máximus no vive para otra cosa que para vengar a su familia muerta y a su emperador Marco Aurelio asesinado por su propio hijo Cómodo, que había depositado en él toda su confianza.
La envidia de su inútil hijo le manda a la muerte de la que escapa, convirtiéndose en esclavo, posteriormente en gladiador hasta llegar a Roma y poder llevarla a cabo.
Esta historia, casi un remake de La caída del imperio romano (1964), hubiera sido otra cosa de no haber llegado a las manos de Ridley Scott, un director que demuestra tener la fuerza y el vigor en sus imágenes para con este esquemático soporte, hacernos vibran durante dos hora y media, aunque abusa del montaje en corto para lograr mayor violencia en las escenas de acción y conseguir en suma un bello espectáculo.
El guion combina bien las secuencias espectaculares, como la batalla del inicio o las de la lucha en el circo, con las escenas más íntimas, para mantener el ritmo y no aburrir.
A ello contribuye el estupendo reparto, muy acertado en la elección de Rusell Crouse, que encuentra un excelente oponente en el joven Joaquin Phoenix, que se destapa como un auténtico descubrimiento con muchas posibilidades; Connie Nielsen está muy ajustada a su papel, así como el respaldo de dos veteranos como Richard Harris y Oliver Reed, éste último fallecido durante el rodaje y a quien va dedicado el film.
Un capítulo aparte para la estupenda música de Hans Zimmer y Lisa Gerrard o la fotografía de John Mathieson.
Globo de Oro a mejor película dramática y música 2001. Bafta a mejor película, fotografía, montaje, producción y el del público. 5 Oscar: película, Russell Crowe, vestuario, sonido, efectos visuales.