Título:	ALGO PASA CON MARY
Tit. Orig.:	THERE'S SOMETHING ABOUT MARY
Nacionalidad:	EE.UU., 1998
Dirección:	BOBBY FARRELLY, PETER FARRELLY
Guión:	ED DECTER, JOHN J. STRAUSS, PETER FARRELLY, BOBBY FARRELLY
Fotografía:	MARK IRWIN
Música	JONATHAN RICHMAN
Interpretes:	BEN STILLER, CAMERON DIAZ, MATT DILLON, CHRIS ELLIOTT, LEE EVANS, JEFFREY TAMBOR, DANNY MURPHY, SARAH SILVERMAN
Censura:	NO RECOMENDADA PARA MENORES DE 13 AÑOS
Duración:	117 MINUTOS

 Por  PACO CASADO

    La mejor manera de orientarles acerca de lo que es esta película es decirle que sus directores son los hermanos Bobby y Peter Farrelly, los responsables de 'Dos tontos muy tontos' (1994) y 'Vaya par de idiotas' (1996), que con esta nueva producción continúan por idéntico camino superándose a sí mismos.
 Un chico estudiante, el día que va a llevar al baile a la más guapa del instituto es víctima de la cremallera de sus pantalones.
 Trece años después sigue obsesionado con la chica y encarga a un detective que la busque, pero al descubrir éste lo guapa que es trata de quitársela.
 Esta historia, que podía dar lugar a una sana y divertida comedia, se transforma desde el comienzo en un basurero de groserías, de gags de mal gusto, que convierten a los Farrelly en los directores más bordes del universo cinematográfico norteamericano.
 Sus chistes se basan en burlarse de minusválidos, en el sexo o sus fluidos sexuales convertidos en fijador orgánico, masturbaciones y otras situaciones groseras.
 Éstas deben ser las nuevas tendencias de la comedia, los estímulos para las carcajadas en su más moderna renovación, a requerimiento de los públicos adictos a la telebasura, ya que su inesperado taquillazo le sitúa entre las favoritas de los espectadores, sobre todo jóvenes.
 Sus recursos son tan viejos como los que se empleaban en las revistas teatrales de antaño, a base de frases de doble sentido, aunque aquellas eran más inteligentes y a veces hasta refinadas en su humor e intención.
 Aquí se va a la sal más gruesa posible, que es lo que funciona, aunque la fórmula consista en usar viejos y previsibles trucos del cine mudo y en pasarse de rosca en la mayoría de las ocasiones.
 Hay que decir con respecto a las dos cintas anteriores que el guion es un poco mejor y que algunas situaciones consiguen hacer reír, aunque no sea a base de mal gusto.
 La simpatía de Cameron Díaz, a la que dan réplica Matt Dillon y Ben Stiller, pone el resto para la comercialidad de este film.
 Tuvo dos nominaciones a los Globos de oro, como mejor comedia y a Cameron Diaz, que ganó el premio a la mejor actriz de los Críticos de Nueva York.