Título:	MAD MAX, FURIA EN LA CARRETERA
Tit. Orig.:	MAD MAX, FURY ROAD
Nacionalidad:	AUSTRALIA, EE.UU., 2015
Dirección:	GEORGE MILLER
Guión:	NICK LATHOURIS, BRENDAN McCARTHY, GEORGE MILLER
Fotografía:	JOHN SEALE
Música	JUNKIE XL
Interpretes:	TOM HARDY, CHARLIZE THERON, NICHOLAS HOULT, ROSIE HUNTINGTON-WHITELEY, ZOË KRAVITZ, RILEY KEOUGH, NATHAN JONES, JOSH HELMAN
Censura:	NO RECOMENDADA PARA MENORES DE 16 AÑOS
Duración:	120 MINUTOS

 Por  PACO CASADO

    El director australiano George Miller vuelve a retomar el mundo de' Mad Max' que es el que mejor conoce ya que con este personaje inauguró su carrera en la dirección de largometrajes con 'Mad Max. Salvajes de autopista' (1979) que se convirtió en una producción de culto, llena de violencia, protagonizada por Mel Gibson, actor al que le sirvió de lanzamiento para obtener la carrera que todos conocemos.
 Tras el éxito de esa primera entrega hubo dos secuelas más, 'Mad Max 2, el guerrero de la carretera' (1981) y 'Mad Max, más allá de la cúpula del trueno' (1985). Las dos primeras han sido repuestas recientemente con motivo del estreno de esta cuarta.
 Treinta años después de esa última entrega y sin dedicarse al cine de acción, con un guion escrito hace quince años, Miller vuelve a poner en la pantalla a su personaje favorito, Max Rockatansky, a pesar de haber dicho que no volvería a él.
 No se trata de ningún remake sino una vuelta a ese mundo como justificación para hacer una película de acción, ya que como ha dicho en Cannes, donde ésta arrancó aplausos a mitad de la proyección, "El cine de acción es cine puro".
 Dificultades de producción hicieron que se pospusiera hasta hace dos años en que fue rodada y ahora, tras ser la elegida para inaugurar el Festival de cine de Cannes, llega a las pantallas mundiales esta cuarta entrega 'Mad Max Furia en la carretera' (2015) en la que ofrece una persecución casi constante que comienza con Max convertido en esclavo por un dictador misógino.
 El film, que apenas si tiene historia, sitúa al personaje en un mundo desolado tras el hundimiento de la sociedad tal como la conocemos hoy en día, aterrorizada por bandas de personajes trastornados.
 Imperator Furiosa, una mujer luchadora, huye de la Ciudadela con el tesoro de Immortan Joe, el personaje que la gobierna, que tiene atemorizada y sedienta a la población, entre la que hay un cierto fanatismo religioso que recuerda el yihadismo a cuyos autosacrificados se les promete el Valhala, y sale en su persecución, con Max que ha sido capturado y utilizado como bolsa de sangre, que lucha contra sus propias pesadillas del pasado.   En la persecución Max, tras escapar, se une a Furiosa para luchar contra el tirano.
 Esto es en esencia el leve argumento, y con ello no descubrimos nada, ya que todo el metraje es una perpetua persecución a través del desierto plena de furia, ruido, disparos, una tormenta de arena y las luchas que tienen que sostener con las huestes del tirano y otras bandas salvajes motorizadas que les salen al paso que pelean por la posesión del agua y la gasolina que, como los alimentos, escasean en un mundo donde la civilización no es más que un simple recuerdo del pasado.
 Furiosa, con un grupo de mujeres, va en busca de la libertad y de una tierra verde, un paraíso que recuerda de su niñez como símbolo de su redención.
 Todo se convierte en un puro espectáculo de explosiones, fuego, abrumadoras persecuciones, agotador y extenuante lleno de violencia en una lucha sin cuartel, sin reparos en los medios utilizados, entre ellos el llamado camión de guerra, una cisterna con capacidad para once mil litros de gasolina, y un buen número de imaginativos vehículos de gran cilindrada con enormes ruedas para no quedar atrapados en las arenas del desierto y motos tuneadas. El espectador resopla cuando hay una breve pausa entre tanta acción.
 El escenario es un paisaje devastado, apocalíptico, donde situar una huida desenfrenada, reducidos diálogos y unos insólitos personajes sin alma que no conceden tregua en la acción.
 Fue rodada casi sin guion como una larga escena de persecución donde Max y Furiosa vuelan por el desierto escapando de una banda de psicóticos personajes.
 El protagonismo se lo lleva Charlize Theron, mientras que Tom Hardy, que encarna a Max, permanece en un segundo plano.
 La cinta no engaña a nadie que sepa lo que va a ver y esos saldrán satisfechos por el grandioso espectáculo de efectos especiales, el dinámico montaje, el ritmo de las imágenes; los que busquen algo más que ruido, furia, atronadora y excesiva música electrónica con timbales y guitarra eléctrica a ritmo de heavy metal y persecuciones sin fin, como el alma de los personajes, saldrán saturados y algo decepcionados.