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SINOPSIS
Una comisaría de policía de un pequeño pueblo se convierte en el campo de batalla entre un asesino a sueldo profesional, una inteligente policía novata y un estafador, que busca refugio tras las rejas sin ningún otro lugar al que huir...
INTÉRPRETES
GÉRARD BUTLER, FRANK GRILLO, TOBY HUSS, RYAN O'NAN, TAIT FLETCHER, KEITH JARDINE, VANITA KALRA, ROBERT WALKER BRANCHAUD, KAIWI LYMAN, YVETTE FAZIO-DELANEY, ALEXIS LOUDER, DAVID VAUGH
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SOBRE LA PRODUCCIÓN...
Aportando poder, matiz e ingenio a cada personaje que interpreta, Gerard Butler, sin duda se ha establecido como una de las estrellas de acción más destacadas de Hollywood y uno de sus protagonistas más rentables. Sus inolvidables actuaciones van desde el formidable guerrero espartano Leónidas en el hito taquillero 300 hasta el intrépido agente del servicio secreto Mike Banning en Objetivo: La Casa Blanca y sus dos exitosas secuelas.
Ahora, Buttler canaliza su pasión y compromiso en el imperdible papel de asesino a sueldo Bob Viddick en JUEGO DE ASESINOS, el nuevo y explosivo thriller de acción del escritor y director Joe Carnahan.
El interés de Butler en JUEGO DE ASESINOS se remonta al 2015 cuando leyó por primera vez los primeros borradores del guion, en el que se desarrolla un juego de caza del gato y el ratón entre un estafador y un asesino que ha sido enviado para acabar con él. La premisa capturó la imaginación del actor, pero también reconoció que algunas de las ideas del guion tenían un potencial aún no realizado. En las manos adecuadas, él sabía que JUEGO DE ASESINOS podía convertirse en algo verdaderamente memorable e irreverentemente emocionante.
“Podía ver muchas posibilidades con Bob Viddick, un verdadero asesino de asesinos que tiene una profundidad sorprendente”, dice Butler.
Butler y su socio productor en G-Base Productions, Alan Seigel, recurrieron a un escritor director con un excelente historial en lo que respecta a películas originales, llenas de intensidad, Joe Carnahan. Habiendo saltado al estrellato gracias a su debut sin restricciones con Sangre, balas y gasolina, Carnahan ganó un gran reconocimiento gracias a películas como Narc, Ases calientes, El equipo A e Infierno blanco.
Su sensibilidad encajaba perfectamente con el material, e inmediatamente entendió como perfeccionar una fresca y emocionante interpretación de la historia. Inspirada en películas icónicas de los 70 como Bullit, Harry el sucio y Harry el Fuerte, Charnahan aumentó la tensión entre el asesino a sueldo y su presa y también agudizó las interacciones entre ambos hombres y la policía novata tranquila y capaz que se interpone entre ellos.
“Ví la historia como un western muy neo-feminista de los 70 con un poco de noir” dice Carnahan.
Frank Grillo, el socio productor de Carnahan en su marca WarParty Films, estaba igualmente entusiasmado con el proyecto, ya que encajaba perfectamente con la misión de la compañía de crear películas elevadas al género de thriller-acción. Un veterano actor con docenas de créditos de alto perfil a su nombre, incluido el agente HYDRA Brock Rumlow en las películas del Capitán América de Marvel y Leo Barnes en numerosas entradas en la franquicia La Purga, Grillo también estaba ansioso por compartir pantalla con Butler, ya que los dos son amigos desde hace años.
La relación que Carnahan escribió entre los protagonistas les dio a ambos actores mucho para explorar. No hay nada que se acerque remotamente a un héroe convencional, sino que son hombres enfurecidos y poco confiables, cuyo pasado está plagado de todo tipo de pecados. “Bob Viddick no es un buen tipo y señala que ni él ni Teddy Murretto son buenos ni redimibles”, dice Carnahan. “Él entiende eso. Si Teddy entiende eso, es otro asunto. Pero no hay respuestas fáciles. Hay mucha zona gris”.
El productor Eric Gold de Sculptor Media consideró que el borrador de Carnahan era convincente e ingenioso. “Tomó todos los personajes y puso mucha más profundidad en cada uno de ellos” dice Gold. “Añadió un sentido del humor que entra y sale del guion y da al espectador un soplo de aire fresco porque hay mucha oscuridad en esto también. Hay una alegría que le aporta como escritor”.
Desde los momentos iniciales de JUEGO DE ASESINOS, la historia apasionante de Carahan avanza rápidamente, confundiendo las expectativas a medida que pasa de la acción trepidante a la emoción aterradora y viceversa. La historia sale disparada por la puerta con una increíble persecución en automóvil en la que Murretto se desvía bruscamente a lo largo de un tramo de la carretera en las afueras de Reno buscando algún tipo de salida que le ayude a escapar de los poderosos intereses en los que se ha equivocado. Saltando de un Crown Vic robado, se abre camino hacia una pelea fuera de un casino, donde golpea a la novata policía Valerie Young y recibe un cargo por agresión.
La sensata Young lleva a Murretto a la tranquila comisaría donde trabaja junto a colegas con diversos grados de competencia. Su oficial al mando, el sargento Duane Mitchell (Chad L. Coleman), está constantemente detrás de los oficiales Kimble (Robert Walker-Branchaud), Barnes (Kaiwi LymanI) y Huber (Ryan O`Nan), quienes no muestran el mismo tipo de iniciativa que Young. Huber es el peor delincuente y parece incapaz de manejar con precisión las pruebas recopiladas de un robo de drogas reciente, aunque eso podría tener algo que ver con el constante redoble de llamadas amenazantes y mensajes de texto que recibe. Está claramente en la cabeza de algunas personas peligrosas.
Al investigar los antecedentes de Murretto, Young encuentra una serie de arresto previos en su archivo, pero ni una sola condena. Pero antes de que pueda investigar más a fondo sus antecedentes, la policía estatal trae a un sospechoso de conducir borracho sin identificación. Para darle tiempo a recuperar la sobriedad, John Doe es detenido con otro borracho (Marshall Cook) en una celda adyacente a la de Murretto. Pero el hombre misterioso no es un malhechor cualquiera. Es el asesino a sueldo Bob Viddick, que ha venido a ejecutar a Murretto. Y no dejará que nada se interponga en su camino hasta que termine el trabajo.
“Terminan en esta obra con un estilo de Samuel Beckett con dos tipos en celdas de prisión opuestas”, dice Carnahan. “Es como una obra de teatro: el 50 por ciento de la película tiene lugar en una celda. Entonces, es en gran parte una película de policías, pero también es un thriller donde no estás seguro de quién está mintiendo, o quién dice la verdad. De esa manera, encaja en un género probado y verdadero que me gusta mucho”.
Pronto, Viddick ideó un plan para arrebatarle el arma al sargento Mitchell, pero el sonido de los disparos atrae a Young a la celda. Se las arregla para rescatar a Mitchell y someter a Viddick, pero cuando comienza a interrogar a los dos prisioneros, un segundo asesino, el desquiciado Anthony Lamb (Toby Huss), llega a la comisaría. Lamb también está detrás de Murretto, y está feliz de eliminar a todos los policías que se interpongan en su camino para hacerlo.
Evaluando rápidamente la situación, Viddick se da cuenta que necesitará ganarse la confianza de Young si espera completar la misión y sobrevivir al caos. Pero Murretto confía en que todavía le quedan algunos ángulos por jugar…
“Mira, la película es una olla a presión”, dice Gold. “Es un espacio confinado. Todo el mundo tiene una perspectiva. Hay vidas en juego y, en algún momento, se desata el infierno. Crees que entiendes lo que está pasando en la película, y crees que sabes quién es el malo, quién es el bueno, y luego, en el tercer acto, todo se incendia, literalmente. Te das cuenta de que estás en un mundo en el que no puedes predecir lo que vendrá después. Sigue escalando, y lo que está en juego sigue aumentando”.
Con dos protagonistas dinámicos y un grupo de productores que estaban ansiosos de apoyar la visión creativa de Carnahan, JUEGO DE ASESINOS pronto se puso en marcha, con Carnahan en la silla del director, justo donde le pertenecía.
Rodada en Atlanta y Nuevo México en tan solo cinco semanas, JUEGO DE ASESINOS fue una de las primeras producciones que tuvo lugar tras el inicio de la pandemia COVID-19. La naturaleza contenida de la historia, que se desarrolla en una sola ubicación y se centra en una pequeña cantidad de personajes principales, ayudó a mitigar el riesgo, al igual que la implementación estricta de protocolos de salud y seguridad diseñados para proteger a cada miembro del elenco y equipo.
“Tuvimos muy poco tiempo de preparación, lo cual prefiero porque se desperdicia mucho tiempo en reuniones sobre reuniones”, dice el guionista y director Joe Carnahan. “También trabajamos con muchos menos miembros del equipo. Ayudó inmensamente que el equipo de Atlanta fuera tan bueno. También trabajé con muchos de ellos antes, así que teníamos una clave. Cada uno tenía sus órdenes de marcha. Cedimos, cumplimos con el horario e incluso adelantamos cosas”.
Para JUEGO DE ASESINOS, Carnahan se reunió con el equipo creativo de su anterior producción de WarParty Boss Level: el director Juan Miguel Azpiroz, el diseñador de producción Jon Billington y la diseñadora de vestuario Jayna Mansbridge. Tener un profundo entendimiento del enfoque del director para hacer películas hizo que las difíciles tareas de construir escenarios, establecer el tono y dar forma a los personajes fueran enormemente manejables.
Para la propia comisaría, Billington diseñó un decorado inspirado en los interiores de los edificios gubernamentales de la década de 1960 que se construyeron al estilo brutalista: modulares, imponentes y utilitarios y construidos con vidrio y hormigón incoloro. Billington imaginó un gran espacio central que se ramificaría en áreas más pequeñas, incluida la oficina de Mitchell, la armería, la enfermería y la sala de pruebas.
“Tenía que abrir la comisaría de alguna manera” dice Billington, cuyos créditos también incluyen Bad Boys para siempre, Pacific Rim: Insurrección y Geostorm “Rara vez sales de la comisaría, así que lo que intentaba era casi crear una especie de noche y día dentro de la comisaría. Tus asuntos nocturnos eran las celdas de la cárcel. Luego, cuando estás en la celda y todos esos otros espacios, ese fue casi tu escape al mundo real durante el día.
Carnahan añade: “Era como esos viejos westerns donde los personajes nunca abandonan el salón, pero siempre hay mucho espacio para la acción. Era un espacio muy limitado, pero incluso con las limitaciones de la comisaría, la película nunca parece pequeña. No encerramos a nadie”.
Billington se encargó de centrar una atención especial en las celdas de la cárcel donde se desarrolla gran parte de la película. “Lo más importante era hacer que cada aspecto de las celdas pareciera absolutamente 100 por ciento real”, dice Billington. “Una gran parte del realismo se manifiesta con las texturas y los acabados de las paredes. Cada una de las 2,000 tejas que pusimos fueron fabricadas y pintadas una por una. También estaban recubiertas con una resina que formaba una onda reflectante cuando les daba la luz”
También instaló una serie de ventiladores en las paredes y celdas para ayudar a crear una sensación de movimiento y añadir intensidad a las escenas.
Para el vestuario, Mansbridge trabajó en estrecha colaboración con Billington y Azpiroz para usar la paleta de colores inspirada en la década de 1970 que habían desarrollado, mientras buscaba formas de hacer que esos colores se sintieran contemporáneos en lugar de anticuados. Para desarrollar el look de Viddick, Mansbridge eligió una camisa con un estilo de 1970 y lo vistió con capas que podía quitarse a medida que se desarrollaba la historia y la acción se intensificaba.
“Queríamos transmitir que era una persona muy voluntariosa en todo lo que hacía”, dice. “Tenía que ser capaz de moverse rápidamente de su disfraz de borracho y desastre para estar completamente armado”.
Por el contrario, la estética de Murretto era mucho más llamativa: el personaje vestía un traje de tres piezas bien entallado con grandes solapas y un par de botas de piel de serpiente hechas a medida.
Para los agentes de policía, Mansbridge quería diseñar trajes que encajaran en el mundo de la película y hablaran de la actitud soñolienta y poco profesional que mostraban algunos policías.
“Joe me dijo desde el principio que no se trataba de la típica película de policías”, dice. “Descubrí en mi investigación que la uniformidad de la indumentaria de la policía realmente está dictada por lo bien que funciona una comisaría. Entonces, para JUEGO DE ASESINOS, los personajes de policías estaban haciendo lo suyo. Algunos de ellos iban un poco desabrochados, un poco desaliñados. Mostraba que había desacuerdo en la oficina”.
También ayudó a Young a destacar. “Es una de las únicas mujeres en la comisaría y queríamos que se sintiera un poco diferente”, dice Mansbridge. “Así que nosotros le acortamos las mangas, añadimos algunos accesorios. Queríamos que sintiera que se había desviado un poco de las normas. Lleva su uniforme un poco diferente”.
Con sus protagonistas carismáticos y su singular combinación de intriga, suspense y masacre total, JUEGO DE ASESINOS es el tipo de producción de género muy original que solo podría provenir del cineasta Joe Carnahan. El guionista-director dice que está emocionado de poder ofrecer al público una razón para volver a las salas de cine y disfrutar de una gran noche.
“Este tipo de películas son geniales, palomitas, películas para desconectar, y creo que especialmente ahora, con lo que nos enfrentamos como sociedad a nivel mundial, la gente necesita estar entretenida”, dice Carnahan. “Dar a la gente una razón para reírse o sonreír o desconectar incluso por un para de horas es una noble causa en este momento”
Añade el productor y la estrella Frank Grillo: “JUEGO DE ASESINOS es realmente puro entretenimiento. Es por eso por lo que vamos al cine. Puedes sentarte, comer tus palomitas y es un paseo divertido”.
BOB VIDDICK/GERARD BUTLER...
Bob Viddict es un hombre que vive su vida en las sombras, y el código que sigue es claro: hacer el trabajo, pase lo que pase. De esta manera, el papel encaja con los hombres que el actor Gerard Butler ha interpretado en el pasado, personajes complejos con fuertes valores. Sin embargo, no hay duda de que el asesino a sueldo moralmente ambiguo le ofreció a Butler la oportunidad de estirar sus músculos creativos de una nueva forma, y eso, dice, fue una parte clave de la atracción. “Bob Viddick fue un poco diferente para mí”, dice Butler. “Es improvisado y un poco original”
En el set, el actor escoces dijo que se sintió desafiado, en el buen sentido, no solo por el personaje sino también por el enfoque de alta energía de Carnahan. “Joe alentó la espontaneidad y las improvisaciones”, dice Butler. “No es el tipo de trabajo al que estoy acostumbrado, lo que lo hizo enormemente divertido. Ayudó que yo también hubiera querido trabajar con Frank Grillo durante algún tiempo. Desarrollamos un ritmo y nos dejamos llevar por él”.
Carnahan dice que los dos actores formaron una pareja ideal. “Gerry tiene esa forma increíblemente cautivadora de que hace que un chico malo sea intensamente simpático” dice. “Frank también tiene esa intensidad. Siempre existe este encanto e ingenio subyacentes, y simplemente les respaldas. Realmente funciona para la historia porque necesitas estos tótems opuestos entre los que poner al joven policía impresionable”.
TEDDY MURRETTO/FRANK GRILLO...
Teddy Murretto nunca se ha enfrentado a una situación de la que no haya podido hablar para salir, hasta ahora. Un timador desde hace mucho tiempo con vastas conexiones a través del inframundo, Murretto ha ganado (y perdido) millones gracias a años de realizar estafas, pero cuando sobreestima enormemente sus talentos e intenta estafar a sus jefes, se queda corto. No solo está su propia vida en peligro, sino que también pone en peligro a su exesposa e hijo.
Al escribir el guion del personaje de Murretto, el cineasta Joe Carnahan pensó en los personajes interpretados por John Cazale, el difunto actor que apareció en la pantalla en cinco clásicos cinematográficos: El padrino, La conversación, El Padrino II, Tarde de perros y El cazador, antes de su prematura muerte a la edad de 42 años en 1978.
“ Murretto no es el tío macho que normalmente interpreta Frank”, dice Carhahan. “Siempre disfruto de los actores que van en contra de tus expectativas”.
Por un lado, el aspecto del personaje, que lleva el pelo a la altura de los hombros recogido en un moño, es bastante distinto para Grillo. “Teddy tiene una cola de caballo y un traje elegante y botas de piel de serpiente; Teddy es un personaje”, dice el actor. “Es un jugador. Es vendedor de coches usados y jugador. Se mete en problemas porque va en contra de las personas que lo cuidan. Y es un personaje muy peligroso porque puede hacer caer a mucha gente, no solo a la mafia, sino también a políticos, policías, etc. Entonces, es un elemento muy peligroso en la historia, y hay que lidiar con él”.
Ponerse en la piel de Murretto fue bastante agradable, pero trabajar junto a Gerard Butler como Viddick hizo que el tiempo de Grillo en el papel fuera aún más emocionante desde el punto de vista creativo, dice el actor. “La dinámica con el personaje de Gerry es genial”, dice Grillo. “Gerry es amigo mío, así que es divertido actuar con tus amigos. Son estos tipos jugando al gato y al ratón. Se trata de insistir y pinchar y empujar y tirar, y tenemos que hacerlo dentro de los límites de estas dos celdas de la cárcel. La forma en que está filmada es muy interesante y aterradora y espeluznante. Es un verdadero thriller psicológico, por un lado, hasta que se convierte en una película de acción”.
VALERIE YOUNG/ALEXIS LOUDER...
Valerie Young puede ser una policía novata, pero ya ha visto algunas cosas en su tiempo. Una exmédica del ejército, es una gran tiradora que puede mantener el autocontrol en una crisis, cualidades que le sirven bien después de que, sin saberlo, se ve envuelta en el tira y afloja entre el estafador Teddy Murretto y el asesino a sueldo Bob Viddick.
“Valerie tiene una sed insaciable de justicia”, explica la actriz Alexis Louder. “Ella es una novata, pero todos tienen cierto nivel de respeto por ella y por su inteligencia e ingenio. Ella sabe que es joven. Sabe que no es la oficial más experimentada, pero eso la hace estar dispuesta a aprender. No creo que tenga un área gris: si cometes un delito, vas a la cárcel. Es así. Su objetivo es mantener a la gente mala fuera de las calles”.
Dada la naturaleza fundamental del papel, el cineasta Joe Carnahan sabía que necesitaba encontrar a la actriz adecuada para que se defendiera como la joven que sigue las reglas junto a Butler y Grillo. Cuando descubrió a Louder, cuyos créditos anteriores incluyen Watchmen y La guerra del mañana, reconoció al instante que ella era la elección perfecta.
“Lo supe la primera vez que me senté con ella”, dice Carnahan. “Simplemente tiene todas las características que buscábamos, además de tener un gran sentido del humor. Ella aporta su tremenda bravuconería y confianza a la película. Es genial tener esa energía y esa juventud. Necesitamos esa exuberancia”.
“Ella tiene algo interesante”, agrega Frank Grillo de Louder. “Hay algo de ella en su vida real, es un poco arrogante y con mucha seguridad y eso es lo que necesitamos que sea el personaje. Ella destaca y puede valerse por sí misma. Tenía esa cualidad innata en su personalidad”.
ANTHONY LAMB/TOBY HUSS...
Viddick puede ser un asesino a sueldo, pero para el profesional taciturno, cumplir un contrato es parte de un día de trabajo. El asesino psicópata interpretado por el actor Toby Huss tiene una visión mucho más caprichosa del trabajo. Cuando entra a la comisaria en la película en busca de Murretto, llega con un ramo gigante de globos, lo mejor para ocultar su rostro de las cámaras de seguridad.
“Es solo un vendedor de globos de buenos modales que se deja atrapar por un mundo de intrigas”, se ríe Huss. “En un momento afirma que está en el negocio del asesinato”. Y el negocio, como dicen, es bueno. Conocido por su trabajo en series como Halt and Catch Fire, ¡Reno 911! y Dickinson, Huss ofrece una actuación inolvidablemente demente como el segundo sicario que busca a Murretto. En la película, Lamb y Viddick tienen una historia, sus caminos se han cruzado muchas veces. Viddick está decididamente disgustado cuando aparece Lamb, sádico y de gatillo fácil.
“Él está allí con el mismo trabajo esencialmente”, dice Huss. “Es una situación bastante fluida. Hay mucho juego de armas. Disparan a la gente. La gente es eliminada”
Mientras se concentra en su objetivo, y en los oficiales de policía con los que se encuentra en el camino, Huss empuña una Walther PPK y un arma semiautomática con una cantidad aparentemente ilimitada de municiones. Es justo decir que vino preparado para causar el caos.
“La Uzi hace mucho ruido, aterroriza a mucha gente” dice Huss. “No es muy preciso, pero es divertido”.
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