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Para la realización de la pelicula Fontaine se ha rodeado de un nutrido grupo de profesionales entre los que destaca Christophe Beaucarne, director de fotografia que ha trabajado a las ordenes, entre otros, de Cèdric Klapisch y en palabras de la directora del filme, es capaz de conseguir cualquier reto que le asigne reuniendo una extraordinaria combinación de humor e inteligencia.
En cuando a la mùsica, Alexandre Desplat, un reputado compositor que ha ido abriendose un hueco en la èlite a traves de estos años y el cùal ya ha sido nominado al Oscar en varias ocasiones y que ha creado mas de 60 bandas sonoras.
Para llevar a buen puerto la realización de este ambicioso proyecto y siendo lo màs fiel posible a los años de formación de Coco Chanel, la directora estaba muy decidida a reunir a responsables expertos y aclamados para el departamento creativo.
Como afirma la propia directora “Era la primera vez que me embarcaba en la realización de una película de época, por eso quería trabajar con técnicos que tuvieran experiencia en sus respectivos campos».
Un punto a tener en cuenta en la pelicula y realmente importante es el vestuario de època requerido, para ello la directora recurrio a Catherine Leterrier, con quien ya trabajo en su anterior largometraje.
Segùn la encargada del vestuario, el objetivo marcado no era hacer una pelicula sobre la moda, aunque un elemento fundamental era mostrar las influencias que dieron forma al propio estilo Chanel.
Para captar todo el esplendor necesario de las diferentes èpocas a las que nos lleva el filme, la directora Anne Fontaine trabajo largo tiempo con los principales miembros de su equipo proponiendo un estudio exhaustivo de las distintas peliculas de la època en la que se desarrolla el filme. “Desde el principio, tuvimos que adoptar una actitud radical contra los graves inconvenientes pintorescos del cine de época.», afirma Anne Fontaine.
Para empezar, la directora queria que los decorados iniciales apareciesen enmarcados en planos màs bien hermèticos para crear una sensación de opresión.
La directora tenia muchos motivos para la preocupación ante el rodaje del filme, y uno de ellos era el encontrar los exteriores perfectos en Francia para el rodaje.
La pelicula se rodo con dos camaras simultaneamente, para asi mantener el ritmo y la velocidad deseada a las imágenes ademàs de cierta modernidad.
Fontaine colaboró con el director de fotografia para reflejar siempre el punto de vista de Chanel en la cinematografía. “La película tenía que ser como el personaje de Coco Chanel”, explica. “Se trataba de una mujer joven que nunca estaba quieta. El rodaje tenía que vibrar y el enfoque requería una determinada sensualidad y un determinado movimiento. Solíamos utilizar una cámara portátil para rodar.”
Christophe Beaucarne, director de fotografia, confiesa que se inspiró en la calidad extremadamente fotogénica de Audrey Tautou.
«Jugué con el contraste entre la luminosidad de su piel y la oscuridad de sus ojos y de su cabello», reflexiona. «Sus ojos acaparan toda la atención… Evité poner la luz directa sobre ella para hacer hincapié un cierto aspecto delicado a la vez que contrastado, un toque sutil que también me permitió obtener los contornos que quería para el vestuario y los materiales. Audrey se identificó profundamente con su personaje, apoderándose totalmente del espíritu fuerte y decidido de Chanel. Fue un verdadero placer filmarla, porque, además de su fantástico físico, Audrey presta gran atención a la técnica. Sus cambios de gestos y movimientos a la hora de actuar son extremadamente precisos.