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   En "Destino final 5", la quinta parte de la exitosa saga de terror, la Muerte, una vez más, demuestra ser la perseguidoraDESTINO FINAL 5 final, ya que sistemática e incansablemente acecha a un grupo de amigos que intentan escapar de ella.
   El director Steven Quale dice: “En las anteriores películas de ‘Destino final’, es inevitable que mueran, la pregunta es cuándo y cómo, eso es lo que sube la adrenalina. Sin embargo, en esta película hemos aportado un pequeño cambio: alguno podría encontrar la forma de sobrevivir”.
  “Siempre trabajamos en estas películas con un ojo puesto en cómo llegar al siguiente nivel”, “Una de las cosas que hemos aprendido de los fans es que quieren una historia apasionante y aterradora, que también sea entretenida, así que hemos intentado reforzarla aún más”.
 Sabiendo que los fans querían que la película se rodara en 3D, los productores Craig Perry y Warren Zide ficharon a Quale, experto en el campo, para ponerse a ello.
  “Steve sabe más de 3D de lo que yo nunca sabré”, asegura Perry. “Lleva dedicándose a ello 20 años con Jim Cameron, el gran maestro del 3D y de las películas de acción”.
   Quale ha querido trabajar en una película donde la premisa central sea firme, de esta forma se encontraría ante un reto creativo que reforzaría las bases de la saga. “Hice un maratón viendo seguidas las cuatro películas de ‘Destino final’ con la perspectiva de espectador, apuntando lo que me gustaba más de cada una. Después empecé a pensar lo que iba a hacer una vez estuviera detrás de la cámara”.
   El guionista Eric Heisserer dice que trabajar en “Destino final 5” ha sido el sueño de cualquier escritor, ya que no es necesario pensar el gancho de la historia. “Lo genial de ‘Destino final’ es que se da una de esas raras situaciones en las que, gracias a las cuatro películas anteriores, no tuve que pasar mucho tiempo pensando en cómo el público podría engancharse”.
   “Definitivamente, lo más difícil para mí fue coreografiar las escenas de muerte. Hice varios viajes a varias localizaciones reales donde se situaban nuestros escenarios. Tomé fotos, dibujé diagramas, hice entrevistas... A menudo me sentía como si estuviera en la escena de un crimen, aunque nadie lo hubiera cometido todavía…”, se ríe. “La cadena de pequeños y mundanos sucesos que, cuando se desencadenan en el orden adecuado provocan el desastre para un personaje, lleva una planificación bastante cuidadosa. La otra cara de la moneda es que, cuando una secuencia de muerte era buena, seguramente era lo más divertido de escribir”.
  “Nos propusimos hacer una película que fuera visualmente impresionante y que tuviera secuencias deDESTINO FINAL 5 acción dinámicas, empezando por el puente”, afirma Quale.

  La producción de Destino final 5 comenzó a principios de septiembre de 2010 en Vancouver, Columbia Británica, el mismo lugar donde se rodaron las tres primeras películas, la primera hace más de 10 años. 
  “Parecía una reunión del instituto”, se ríe Perry. “Una de las grandes ventajas de volver a Vancouver es que hay un equipo fantástico de personas que han trabajado en las películas anteriores. Estas películas son muy difíciles de sacar adelante. Requieren de muchos conocimientos técnicos y contar con gente que ha pasado por ello una o dos veces ya, hace que todo sea mucho más fácil. De hecho, ha sido el rodaje más fácil de toda la saga”.
   Quale también opinaba que contar con el equipo veterano no tenía precio. “Era fantástico tenerles con nosotros porque yo soy nuevo en esta saga, así que poder contar con su experiencia y su intuición servía de muchísima ayuda.
   El director continúa: “Rory y Ariel trabajaban muy bien juntos, lo cual es muy importante, porque en este tipo de películas necesitamos llegar digitalmente hasta donde es imposible llegar físicamente. Creo que lo logramos gracias a la combinación de todos los efectos, visuales, especiales y de maquillaje. En la medida de lo posible, no utilizamos imágenes generadas por ordenador ni muchos trucos; quisimos ser más prácticos y lo hicimosDESTINO FINAL 5 siempre que pudimos, afortunadamente, todo salió bien. El equipo de especialistas de J.J. trabajó mucho para que las secuencias de acción parecieran reales y ofreció a nuestros actores un gran apoyo”.
   Asegurándose de que las muertes mostraban todo su sangriento esplendor, encontramos a Lindala y su maquillaje, que también se encargó del tema de la sangre en Destino final 3”. 
   “Mi equipo y yo estábamos muy emocionados de volver a hacer una película de ‘Destino final’, porque es un sueño para los que trabajamos en efectos de maquillaje. Aquí es realmente donde podemos demostrar lo que somos capaces de hacer”, afirma.
   Las modernas cámaras de 3D intensifican cada detalle, por lo que la sangre se convierte en otro reto. El equipo de Lindala pasó interminables horas probando nuevos aparatos y preparando inventos que parecieran reales en la gran pantalla, por ejemplo, una receta de sirope de chocolate y vodka, entre otros ingredientes. “Llevó tiempo conseguir la mezcla correcta”, dice Lindala. “Fue un poco difícil trabajar en 3D, pero me alegro de haberlo hecho ahora y no hace 10 o 15 años, ya que nuestro trabajo ha evolucionado mucho. En esta ocasión también hemos utilizado mucha silicona y masilla bondo, y adhesivos Pros-Aide traslúcidos que se integran con la piel y dan una textura muy real. Sin este material nuevo, nuestro trabajo podría haber parecido maquillaje en vez de heridas reales”.
   Habiendo trabajado con el director de películas innovadoras James Cameron durante 20 años, Steven Quale no solo se “crió” con el desarrollo del 3D, sino que también participó en su evolución técnica y cinemática. Además de las películas de Cameron, Quale trabajó con su mentor en documentales y proyectos IMAX, adquiriendo así una amplísima experiencia en el uso del 3D en todo tipo de medios y entornos.
   “Pronto aprendí lo que se podía hacer y lo que no con 3D”, comenta Quale. “Aprendí cómo utilizarlo como una herramienta de narración y no como un truco, no recurro al 3D a menos que sirva para la historia, porque, en definitiva, la historia y los personajes son la esencia de la película, no solo las imágenes”.
   Además del elemento 3D, los cineastas fotografiaron la película utilizando “Alexa”, una cámara digital de alta definición de Arriflex. El director de fotografía Brian Pearson dice: “En preproducción, Steve y yo hablamos mucho sobre la apariencia de la película. Queríamos que esta entrega tomara una dirección diferente, que tuviera escenas en 3D que potenciaran el dramatismo, y que incorporara un gran angular, además de usar objetivos más grandes para determinadas escenas, algo que normalmente no se considera en una producción en 3D. Queríamos que hubiera un claro contraste en los fotogramas en cuanto a la dinámica y el color. No solo trabajamos en un arco profundo de 3D, sino también un arco de color en la película. Utilizamos muchos tonos cálidos, dorados, ámbar y colores de fuego, pero incorporamos colores fríos en ciertas ocasiones para poder distinguir bien y enfatizar las escenas más dramáticas”.
   Lo que se repite en todas las películas de “Destino final”, y lo que las diferencia de otras películas de terror, son las escenas de desafío a la muerte que abren la película. Los cineastas están seguros de que la catástrofe que da comienzo a la película dejará satisfechos incluso a los fans más pertinaces, que creen que ya lo han visto todo.
   El guionista Eric Heisserer afirma: “La idea de que se derrumbara un puente fue el resultado de una larga sesión creativa con Craig Perry y Sheila Hanahan Taylor. Empezamos a ver en Internet vídeos de desastres naturales y provocados por humanos, buscando una escena que quedara bien para la película. Craig me enseñó un vídeo de la caída del Puente de Tacoma Narrows y me obsesioné con ello. Empezamos a apuntar todo lo que podría fallar en un puente. Justo cuando pensamos que ya habíamos agotado todas las ideas, a alguien se le ocurrió una cosa. Finalmente, después de tres meses planeando, comiéndonos la cabeza, escribiendo y rescribiendo, di con la escena paradigma de ser el comienzo de una película de ‘Destino final’. Pero lo mejor de la caída del puente vino de la mano de Steve Quale, porque consiguió la apertura que todos habíamos imaginado durante meses y la mejoró en términos de experiencia cinética y cinemática de una forma que jamás hubiéramos creído posible”.
   Convertir lo que estaba en papel en una realidad para la gran pantalla en 3D fue un proceso intenso y complicado, para el que eran necesarios cuatro lugares diferentes: el puente real Lions Gate de Vancouver, el Brunswick Pit, un puente elevado construido en un aparcamiento al aire libre, y la construcción de un puente con cardán de más de 36 toneladas y de 18 x 15 metros, localizado en las cercanías de los estudios Mammoth Sound Stages.
   “Para conseguir lo que queríamos, teníamos que ser muy creativos en la forma de utilizar los recursos”, comenta Quale. “En general, todas las escenas del derrumbe del puente corresponden al puente Lions Gate Bridge. Tomamos imágenes aéreas, y nos dieron permiso para cerrar por un breve espacio de tiempo uno de los carriles un domingo por la mañana temprano, pero solamente durante cuatro horas. Para aprovechar el tiempo, utilizamos cuatro cámaras que rodaban de forma simultánea para captar las imágenes.
   “Después la producción se mudó a Brunswick Pit”, continúa, “donde teníamos una parte de la construcción del puente. Este lugar era increíble, porque tenía unas vistas maravillosas que se unían con el paisaje del mar del puente Lions Gate, así que podíamos entrelazar perfectamente lo real con esta parte construida. Llamamos a la tercera localización el puente elevado, y allí elevamos una parte del puente 9 metros en el aire para que pudiéramos rodar por arriba y por abajo. Ahí es donde los actores se caen del puente y se quedan colgando de las rejas rotas. Por último nos fuimos al estudio, donde hicimos una gran parte del puente con cardanes hidráulicos. Allí es donde hicimos la mayor parte del trabajo del croma”.
   Conceptualizando la escena del puente, el diseñador de producción David R. Sandefur confió en su experiencia arquitectónica para elaborar los complejos planos. Fue necesario hacer una profunda excavación en los alrededores de la ladera de Brunswick Pit para preparar un lugar que pudiera ser manejable para la producción, un escenario que incluía andamios de 15 metros de altura con pantallas verdes, dos pantallas blancas enormes de 12 x 18 metros en lo alto y al menos 12 grúas.
   “Encontramos Brunswick Pit solo tres semanas antes de comenzar la producción y teníamos mucha infraestructura que completar”, añade Sandefur. “La verdad es que cambiamos mucho la topografía de la tierra, no solo nivelando el nivel de la tierra en algunos lugares, sino también añadiendo terreno en otras zonas para que soportara la base para el puente de asfalto y el perímetro. También tuvimos que solucionar los temas relativos a la seguridad y al medioambiente con una escorrentía adecuada, para que así no hubiera movimientos de tierra que se llevasen nuestro plató montaña abajo. Una vez que el puente empezara a derrumbarse, Steve necesitaba rodar por encima y por debajo de él y yo sabía que nunca encontraríamos un escenario lo suficientemente alto para hacerlo. Así que pensé: “¿Por qué no cogemos un trozo de asfalto, lo arrastramos hacia arriba y lo ponemos sobre varios contenedores?” Así es cómo creamos el puente elevado”.
  Craig Perry, veterano de las cinco películas, afirma: “Eso es lo que hace que esta saga funcione, que las cosas más horribles que se puedan imaginar ocurran de la forma más simple y rutinaria. Parece de locos sentarse y preguntarse: ‘¿Cómo matamos a esta persona? ¿Qué podemos hacer que provoque lesiones corporales graves que no hayamos hecho antes?’ Creo que el público estará de acuerdo en que nos las hemos arreglado para hacerlo lo mejor posible una vez más”.

CINCO ESCALOFRIANTES DATOS VERDADEROS ACERCA DE DESTINO FINAL...
1) Cuando el primer borrador del guión de la primera entrega de la saga Destino final 1 llegó a New Line Cinema, el ejecutivo de proyectos se lo llevó para leérselo durante un vuelo a Nueva York. Cuando abrió el sobre, vio que los guionistas habían titulado el ejemplar “Vuelo 180.” Luego miró su billete de avión y se dio cuenta de que su vuelo era ¡el vuelo 180 de Los Ángeles a Nueva York! No hace falta decir que no se lo leyó. Lo volvió a meter en el sobre y se puso a rezar para que el vuelo llegara a su destino sin ningún incidente. Y así fue.

2) Cuando Destino final 5 necesitó un inmenso soporte de acero para soportar la gran sección de puente que se estaba construyendo en un escenario para aportar intensidad al rodaje práctico de un puente suspendido de Vancouver, B.C., el plan consistía en fabricarlo partiendo de cero. Entonces, el equipo de efectos especiales encontró a alguien que vendía un gran soporte que llevaba años cogiendo polvo en su trastero. Inmediatamente lo compraron y descubrieron que, de hecho, era el soporte original fabricado para soportar el fuselaje del avión que aparecía en la primera entrega de Destino final. Llevaba desaparecido desde hacía años.

3) Durante la producción de Destino final 5, uno de los extras que no estaba trabajando pasaba el rato merodeando entre unas cajas llenas de papeles. Dentro de una de ellas encontró una hoja de ambientación y una serie de páginas del guión original de Destino final 1…, película en la que había participado como extra hacía once años.

4) Durante el rodaje de Destino final 3, el plan de rodaje obligaba a montar a todo el reparto en una montaña rusa de verdad para una toma importante. Cuando estaban subiendo la primera rampa, el coche de pronto se paró a mitad de camino, y se quedaron colgados durante casi 30 minutos. Ya no fue tan emocionante rodar el resto de la secuencia después de eso.

5) Los guionistas de la primera película, Destino final 1, de 1990, dieron nombre a varios de sus personajes basándose en personajes reales de la historia del cine de terror, entre los que se incluye a Lon Chaney y Tod Browning. Desde entonces, los nombres de los personajes rinden tributo al "quién es quién" del terror, desde William Castle a Roger Corman o George A. Romero.

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