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De adolescente, el guionista y director Rick Famuyiwa nunca imaginó que sus vivencias de instituto en un conflictivo barrio de Los Ángeles acabarían inspirando una de las cintas más comentadas del año. Y eso es precisamente lo que ha vivido el creador de este éxito de Sundance titulado 'Dope', un filme rodado íntegramente en Inglewood, California, y sus alrededores, localizaciones que Famuyiwa conoció de primera mano en sus años mozos. «Crecer en Inglewood influyó decisivamente en quién soy», afirma. «Para bien o para mal, tu entorno te define, así que para hacer 'Dope' era muy importante para mí volver a visitar ese mundo».
Famuyiwa, hijo de inmigrantes nigerianos, ya había rodado otra cinta autobiográfica, Colegas, en 1999. Esta vez, explica, quería revisitar el lugar en el que creció bajo la perspectiva de una nueva generación. «DOPE es como el Risky Business de la generación de las redes sociales», declara. «A través de una serie de circunstancias descabelladas, Malcolm y sus amigos deben encontrar la forma de salir de un atolladero, y lo hace del mismo modo en que cualquier chaval de hoy en día podría hacerlo, y al final sale airoso gracias a sus ansias de triunfar».
Después de las buenas críticas y los galardones cosechados con el drama realista Fruitvale Station, los productores Forest Whitaker y Nina Yang Bongiovi buscaban un nuevo proyecto en el que embarcarse con Significant Productions, cuando su agencia les presentó a Famuyiwa y su guión.
«Nos sentimos muy identificados con el material», declara Bongiovi. «Yo también crecí en un barrio urbano, y solo unos pocos conseguimos salir de sitios como La Puente, Pomona y el Este de Los Ángeles. Me pareció muy original ver ese tipo de entorno retratado con parámetros de hoy en día. Siempre buscamos cosas que destaquen entre el resto, y el guión que Rick había escrito para 'Dope' era algo que no habíamos visto en el mercado. Algunos estudios pueden mostrarse reticentes o temerosos de embarcarse en un proyecto así, pero a nosotros, como productores independientes que somos, nos encantó que este guión fuera algo auténtico, original y diferente».
Whitaker, quien además de producir el filme también presta su voz como narrador, señala que 'Dope' se sirve de su ambientación tan específica para poner en escena un viaje iniciático con el que pueden sentirse identificados los espectadores de cualquier extracción social. «La idea central de 'Dope' es universal», afirma. «Puedes coger la historia de Rick y situarla en cualquier entorno social, porque se trata de un chico que no encaja, que quiere encajar y que busca la forma de alcanzar el éxito, de tener una vida normal, de pasárselo bien y de encontrar a una chica».
Al igual que Bongiovi, Whitaker se siente íntimamente identificado con el viaje de Malcolm. «Estos chicos no encajan en el entorno que les ha tocado vivir, y hay mucha gente así. Yo, de niño, me crié en South Central, y era igual en bastantes aspectos. Pero luego encontré mi camino, igual que lo encuentran los demás».
Una vez que Whitaker y Bongiovi se decidieron a producirla, presentaron el proyecto a varios estudios y distribuidoras, pero ninguno de ellos quería arriesgarse a apostar por el original argumento de la película, así que se liaron la manta a la cabeza y decidieron financiar la producción de manera independiente con capital privado.