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   En 2012, Blancanieves y la leyenda del cazador revolucionó el género de los cuentos de hadas con una versión mucho más épica y sombría de la clásica historia. La película, protagonizada por Kristen Stewart, Chris Hemsworth y Charlize Theron, encantó a los espectadores recaudando casi 400 millones de dólares en la taquilla mundial.
  Cuando llegó el momento de replantearse el oscuro y fantástico mundo imaginado por sus creadores, los productores se sintieron atraídos por la idea de desarrollar una historia apenas entrevista en la primera entrega, que hacía referencia al gran amor de Eric y a su trágica muerte. El cazador, gracias a Chris Hemsworth, se convirtió en un personaje muy popular, y la posibilidad de crear otra historia en torno a él atrajo a los cineastas.
  Asimismo, la idea ofrecía la posibilidad de cambiar ciertas cosas de la primera entrega: "No queríamos que fuera tan sombría como la primera", explica el productor Joe Roth, que ha llevado a la gran pantalla cuentos como Maléfica y Oz, un mundo de fantasía, y cuya experiencia en el género no tiene igual. "Nos apetecía diseñar la historia de un romance".
  El guión, escrito por Evan Spiliotopoulos y Craig Martin, basado en los personajes de Evan Daugherty, cuenta la trágica historia del primer y único gran amor de Eric, de cómo se conocieron y de cómo el destino se encargó de separarlos. La recreación de un universo anterior también sirve para explicar de dónde procede el cazador, algo que no se hizo en la primera entrega.
  Aparentemente, la malvada reina Ravenna ha sido derrotada y todos viven felices en el Reino bajo el mando de la reina legítima, Blancanieves. Pero de pronto se descubre que el espejo mágico, que ha sido proscrito del castillo, ha desaparecido. El príncipe William sabe que solo puede contar con una persona para encontrarlo, Eric el cazador. Este sale en busca del espejo para atrapar al ladrón e impedir que caiga en las manos equivocadas. A medida que se aleja del castillo, surgen fantasmas del pasado que le obligarán a vivir la mayor aventura de su vida.
  Chris Hemsworth explica que la idea de una precuela le atrajo sobre todo por los temas que explora: "Nadie puede sobrevivir sin algún tipo de amor. Esta película pregunta qué significa el amor para Eric y qué es capaz de hacer por amor". 
  El actor cree que el éxito de la primera película no solo se debió a que casi todo el mundo está familiarizado con la leyenda de Blancanieves, sino también al extraordinario diseño de producción que convirtió a la casta doncella del cuento de hadas en una guerrera decidida a luchar por sus principios. "En esta entrega, a pesar de seguir en el mismo universo, hemos aprovechado para aligerar un poco las sombras en muchos aspectos. Los colores son más claros, luminosos", añade.
  Los productores querían aportar más información al espectador desvelando otra parte de la historia desconocida hasta ahora. "Esta entrega es un maravilloso intermedio. No es un universo completamente fantástico ni tampoco totalmente histórico", dice Cedric Nicolas-Troyan. "Al tratarse de un mundo seudohistórico, puede contener magia, romance y mucho más".
  El cazador Eric creado por Chris Hemsworth es un gran guerrero, un hombre conocedor del bosque, un leal y sincero súbdito, pero no comparte sus sentimientos con nadie. EL CAZADOR Y LA REINA DEL HIELO explora el pasado de Eric y descubrimos que lleva toda la vida luchando. Empezó como guerrero al lado de Freya, la hermana de Ravenna.
  Ravenna es una mujer malévola que devora las almas y utiliza la magia negra para hacerse con la fuerza vital de sus presas, pero su hermana pequeña Freya es todo los contrario. Es la bondadosa reina de la nieve y del hielo que ha construido su helado reino pacíficamente, observando en silencio cómo crecía el poder de Ravenna.
  Cuando la malvada y ambiciosa reina Ravenna traiciona de la peor manera a su hermana Freya, esta huye y empieza a construir un reino tan frío como su corazón de hielo. Nadie volverá a hacerle daño. Se rodea de un ejército de cazadores, niños robados a sus familias a temprana edad que serán educados y entrenados para protegerla, pero que jamás conocerán el sufrimiento que puede causar el amor.
  Eric es uno de esos niños, un pequeño guerrero condicionado para creer en la reina y luchar por ella, aunque demasiado joven para ver el dolor de Freya. Cuando conoce a Sara y ambos se enamoran, algo prohibido en el reino de Freya, no tarda en aprender que hay cosas más importantes que el poder y el dominio.
  "Freya está convencida de que el amor mata", explica el productor Joe Roth. "A pesar de todo lo que se les ha enseñado, Eric y Sara se atraen mutuamente. Una importante parte de la película trata de la pasión que une a Sara y Eric, y de lo que Freya es capaz de hacer para impedir que estén juntos. Pero ya se sabe que en los cuentos de hadas, el amor siempre lo puede todo".
  "Cuando conocimos a Eric en Blancanieves y la leyenda del cazador, era un borracho, un hombre sin rumbo", explica Chris Hemsworth. "Haber perdido a su esposa le sumió en la desesperación y la lástima por sí mismo. Al conocer a Blancanieves, Eric renace, y ahora vive una vida tranquila en el bosque".
  Pero los acontecimientos hacen que la Reina le pida ayuda y se ve obligado a volver a enfrentarse a su pasado.
   Los productores no tardaron en encontrar a un realizador con el optimismo, la visión y la creatividad necesarias para contar la historia de Eric. Hacía tiempo que Cedric Nicolas-Troyan, el respetado supervisor de efectos visuales que diseñó los increíbles efectos de la primera entrega, tenía ganas de dirigir un largometraje.
  "En ningún momento imaginé que tendría la oportunidad de dirigir esta película", dice, riendo. "Jamás soñé con una película de esta envergadura para mi primera dirección. Pero cuando me llamaron, todo parecía encajar. Había participado en la primera, fue como un regreso".
  Chris Hemsworth es un admirador del realizador y no dudó en apoyar la opción cuando los productores se la comunicaron: "En el rodaje de la primera película, enseguida pensé que Cedric sabía contar una historia. No solo se centraba en la estética de la película, le importaba lo que pasaba".
  "Siempre me preocuparon más la historia y los personajes que los efectos visuales en sí. Ahora que trabajo directamente con los actores, las emociones encabezan las prioridades", explica el director.
  Joe Roth confirma que la experiencia y sabiduría que Cedric Nicolas-Troyan aportó al plató no tiene nada que ver con la idea que suele tenerse de un director novel. "He supervisado unos 400 títulos", dice el productor, "y me doy cuenta muy rápidamente de quién está capacitado y de quién no. Cedric siempre me dio la sensación de ser un realizador con muchas tablas. No se sintió intimidado por la importancia de los actores a los que debía dirigir. Es un hombre muy abierto, y el reparto sintió enseguida que podía hablar con él, hacer sugerencias, pero siempre dejó claro su punto de vista y que la película era suya".
  El director piensa que la historia resulta atractiva porque se basa en los sentimientos y en la acción. "No intentamos salvar el mundo, la película no va de eso", explica Cedric Nicolas-Troyan. "Se basa en las emociones, es una historia de amor. Se puede rodar una historia con monstruos y tomas increíbles, pero si no hay identificación con los personajes en la pantalla y sus emociones no conmueven, no hay nada donde agarrarse ni nada que recordar".
  Esta reflexión encaja especialmente bien con el protagonista de la historia. "Lo más importante en esta entrega era aportar un toque de 'je ne sais quoi' al personaje del cazador. Ha cambiado, no es el mismo hombre que conocimos", dice el director. "Me encantaron los enanos en la primera película, pero también quería trabajar más esta parte, aportar un poco más de humor a su mundo".

  EL CAZADOR Y LA REINA DEL HIELO es mucho menos sombría que la primera película. Salimos del oscuro bosque para adentrarnos en un mundo abarrotado de color, magia, romance y aventura.
  Con decorados asombrosos, tremendas secuencias de lucha basada en antiguas artes marciales, un amor tan apasionado como prohibido y una batalla épica entre el bien y el mal, la película ofrece amor y acción a raudales.
  Eric y Sara se adentran en un mundo lleno de duendes ladinos, hadas caprichosas e increíbles criaturas nunca vistas en la pantalla. Y mientras las dos hermanas, Ravenna y Freya por fin se enfrentan, descubrimos un universo mágico.
  EL CAZADOR Y LA REINA DEL HIELO se rodó en los Estudios Shepperton y Pinewood de Inglaterra durante 16 semanas, así como en la famosa catedral de Wells y en el palacio Bishop's, en Somerset. También sirvieron como decorados naturales algunos de los espacios verdes más bellos del Reino Unido, como el Gran Parque de Windsor, y dentro del parque más concretamente Bear's Rails, South Forest, Manor Hill, Johnson's Pond, así como la reserva de Frensham Common y los bosques mágicos de Stockwood y Puzzlewood.
  Todos ellos lugares únicos donde se rodó en caminitos y formaciones rocosas naturales. Era el sitio perfecto para el bosque de los duendes, donde culmina el viaje de Eric en busca del Espejo Mágico.
  Distinto, pero familiar. Eran las palabras clave usadas para definir la estética de la precuela. "Es diferente de la primera película, pero es el mismo mundo", explica Cedric Nicolas-Troyan. "Rupert Sanders y yo tenemos los mismos gustos en cuanto al estilo, pero también conté con la valiosa ayuda del director de fotografía Phedon Papamichael, que aportó nuevas ideas".
  El productor Joe Roth habla de la influencia islandesa en el diseño, producto de la imaginación del realizador y del diseñador de producción Dominic Watkins, que ya se había ocupado de la primera película. Efectivamente, en vez del típico patio de estilo medieval en el castillo, encontramos una construcción totalmente nórdica. "Cedric me dijo que quería salir del bosque y estar en medio del hielo", explica el productor. "Cambiamos la gama de colores, nos alejamos de los tonos de verde que suelen dominar en este género".
  El director artístico Frank Walsh añade: "Se trataba de colocar la película en la perspectiva establecida por Blancanieves y la leyenda del cazador, y crear un nuevo mundo a la vez. El mundo de Freya ocupa gran parte de la película y los elementos de construcción más importantes pertenecían a ese universo".
  El hogar de la reina Ravenna, al principio de la película, está hecho sobre todo de madera esculpida con muchos detalles que embellecen los grandes salones.
  El mundo de hielo de EL CAZADOR Y LA REINA DEL HIELO no es el primero que aparece en un cuento de hadas, pero este debía ser especial. El reto residía en cómo convertir el hielo, que suele poseer una cualidad mágica en la fantasía, en algo amenazante y peligroso. "Debíamos tener cuidado para que no fuera demasiado bello", explica el director artístico. "La película, a pesar de ser una fantasía, está anclada en cierto realismo, y decidimos usar el hielo de forma agresiva en vez de optar por 'las maravillas invernales'".
  Siempre se contó con la experiencia en efectos visuales de Cedric Nicolas-Troyan en el diseño de producción, pero para dar más realismo y para que los actores trabajaran en decorados reales, muchos fueron construidos desde cero. "Un decorado real, aunque no sea completo, es una magnífica referencia para los efectos visuales", dice el supervisor de efectos visuales Paul Lambert. "Si solo se trabaja delante de pantallas verdes, es mucho más difícil para los actores y la posproducción".
  "Construimos el patio del castillo hasta una altura de unos 10 metros", dice Frank Walsh. "El castillo es altísimo, tremendo. Diseñamos la construcción y luego decidimos qué construir realmente en el estudio. Cuando la imagen pasó al departamento de efectos visuales, ya disponían del diseño y de una referencia real".
  Paul Lambert disfrutó de la experiencia de trabajar con un director que sabía tanto de efectos visuales. "Cedric sabe exactamente lo que quiere, y en esta película hay un poco de todo", dice, riendo, "criaturas animadas por ordenador, enormes espacios y efectos mágicos. No había trabajado con él antes. Su estilo visual es alucinante. Vive, respira y sueña con imágenes maravillosas".
  Aunque, como ha dicho previamente, Cedric Nicolas-Troyan prefiere no realizar una previsualización de las escenas más emotivas, tratándose de secuencias de acción como la batalla con el rey de los duendes, el storyboard es absolutamente necesario. La lucha entre los duendes, Eric, Sara y los enanos se previsualizó en su integridad en animación básica para poder estudiarla en el plató, ofreciendo a los actores y a los técnicos una referencia real en la que basar la acción. "Eso nos permitió saber con total exactitud la cantidad de tomas que necesitábamos hacer", dice Paul Lambert.
  Para los actores, trabajar en verdaderas construcciones, en decorados reales, hizo que la experiencia fuera aún más memorable. "Me encanta trabajar en decorados espectaculares, me han permitido sentirme en otro mundo y otro tiempo", dice Jessica Chastain con entusiasmo. "Estoy impaciente por ver qué hará Cedric con los efectos especiales, y los trajes que diseñó Colleen eran simplemente maravillosos".

  No hace falta presentar a la diseñadora de vestuario Colleen Atwood, ganadora de tres Oscar por Alicia en el país de las maravillas, Chicago y Memorias de una geisha. Sus vestuarios suelen ser altamente creativos y no lo son menos en este caso. Se superó a sí misma en el diseño de los trajes para la trágica reina del hielo, Freya, y para su siniestra hermana Ravenna.
  "Si llego a pedirle a Colleen que mejorase sus diseños, habría acabado en el hospital", dice el productor Joe Roth, riendo. "Ha sido nominada a once Oscar y ha ganado tres. Bastó con decirle que la gama de colores era diferente de la primera y que había mucho hielo".
  La estética de la diseñadora es incomparable fusionando lo moderno con lo clásico. "Cedric y yo hablamos primero del mundo de Freya", dice la diseñadora. "Me explicó el tema del hielo y el del búho para que los incorporara a mis ideas".
  Las actrices reconocen que ponerse un traje diseñado por Collen Atwood es un placer. "Son trajes maravillosos", dice Emily Blunt. "No solo soy una reina, soy la Reina de las Nieves. Colleen presta una enorme atención a los detalles, es una auténtica artista. Incorporó materiales a mi vestuario para imitar el hielo a base de metal y plata. Creó algo que no había visto nunca".
  Charlize Theron, que ya ha llevado los trajes de la diseñadora, estaba impaciente por ver cómo vestiría a Ravenna en esta ocasión. "Hay algo en la ropa que diseña Colleen", dice la actriz. "Basta con ponérsela para que algo cambie. Es imposible no sentir que controlo el mundo cuando la llevo. Sus trajes casi moldean el personaje".
  La diseñadora se puso a la cabeza de un equipo de unas 120 personas, sin contar los recursos externos, para preparar los trajes. Su equipo incluía diseñadores de patrones, modistas, artesanos y todo un grupo dedicado únicamente a la armadura de cuero del cazador".
  La tecnología ha avanzado en los cinco años desde el rodaje de la primera entrega, lo que fue una gran ayuda para los trajes de los enanos, ya que deben hacerse dos idénticos, uno para los actores y otro para sus dobles. "Siento mucho cariño por los enanos, sobre todo por el grupo de mi equipo que se ocupa de sus trajes", explica Colleen Atwood. "Les basta con un trozo de tela y otro de cuero, una aguja e hilo para crear los dobladillos del traje de Nion. Esos pequeños detalles aportan un realismo primitivo".
  Y hablando del vestuario de los enanos, sigue diciendo: "El reto siempre está en la escala. Hay trajes a escala completa y otros, exactamente iguales, a una escala de dos tercios. Las medidas de los hombros son idénticas. Técnicamente se trata de falsear el ancho y el largo, pero ha sido mucho menos complicado en esta película que en la anterior".
  La diseñadora siempre incorpora los rasgos individuales de los personajes a los trajes que crea. "Para Freya, pensé en una reina dulce escondida detrás de una capa de hielo", explica. "Se ha escondido detrás de una fachada blindada, pero a medida que la historia avanza, empezamos a descubrir su mundo interior".
  Los trajes de Ravenna son sencillamente grandiosos. "Es un personaje operístico, que regresa a través del espejo", dice. "Decidí diseñarle un traje que fuera como oro fundido alrededor de su cuerpo. Nadie puede llevar un traje así como Charlize".
  Sara es una guerrera y su traje refleja su actividad. "Nació en el seno de una familia unida, esa era mi sensación", sigue diciendo la diseñadora. "He querido mantener una cualidad femenina y, a la vez, reflejar su fuerza física en el traje".
  El traje de Jessica Chastain debía darle la libertad de movimientos requerida por las numerosas escenas de acción. La actriz, que estudió Krav Maga cuando trabajó en La deuda, estaba encantada con la oportunidad de demostrar sus habilidades. "Disfruté mucho aprendiendo y me encantan las armas que uso. Fui bailarina, por eso me gustan tanto las escenas de lucha, son como una coreografía, como si bailara de nuevo".

  Reunir a los conocidos intérpretes que estuvieron en la primera película fue un reto, pero el reparto estelar de EL CAZADOR Y LA REINA DEL HIELO lo ha sido aún más. Chris Hemsworth, Charlize Theron y Nick Frost regresan al universo que ayudaron a construir, y se les unen Jessica Chastain, Emily Blunt, Rob Brydon, Sheridan Smith y Alexandra Roach.
  "Son auténticos artistas", dice Cedric Nicolas-Troyan. "Cuando se habla de un personaje con un intérprete de este calibre, no hay dudas, lo da todo. Para un director es fascinante trabajar con personas así. Prefiero no incluir las escenas emocionales en el story-board, y dejar a los actores que fluyan con la escena para ver cómo se desarrolla. Eso es pedir mucho de un intérprete, y hay pocos que sean capaces de hacerlo. Con este reparto parecía fácil".
  Chris Hemsworth admite que le intrigó y atrajo explorar el pasado de Eric. "¿Por qué estaba borracho, en un estado lamentable, cuando le vemos al principio de Blancanieves y la leyenda del cazador?", pregunta. "Descubrirlo me empujó a hacer la precuela".
  Desde el estreno de la primera película hasta hoy, la fama de Chris Hemsworth se ha multiplicado en gran parte gracias a las entregas de Thor y de Marvel Los vengadores. "La primera vez que vi a Chris, supe que estaba destinado a ser una estrella", dice Joe Roth. "Tiene un halo de bondad, da la sensación de que es agradable estar con él, y es verdad".
  Charlize Theron no dudo en unirse a Chris Hemsworth y volver a encarnar su papel de mala. "Parece mentira, pero no es habitual reunirte con un compañero de reparto varios años después y sentir que nos hemos visto hace dos días", explica. "Es una persona consistente, es tal como parece, o sea, un hombre maravilloso que sabe hacer su trabajo y disfruta haciéndolo bien. Es genial".
  Puede que el mayor reto para los productores residiera en encontrar a una intérprete que estuviera a la altura del actor para interpretar a Sara, el gran amor de Cedric, alguien con una personalidad magnética.
  Sara no puede creer que Eric le haya sido fiel durante todos estos años y rehúsa perdonarle por lo que cree que hizo. No le queda más remedio que unirse a él en su búsqueda, pero por nada del mundo volverá a confiar en él. "Intenta descubrir si de verdad merece la pena ser amado", explica Jessica Chastain, que encarna a la poderosa guerrera. "Además, debe aprender a volver a confiar, y eso le cuesta".
  La actriz reconoce que el personaje le gustó inmediatamente. "Me atrajo el punto de partida y hasta dónde llegaba el personaje", explica. "También me llamó la atención que tuviera secretos, que no todo estuviera a la vista. No había interpretado un personaje así antes. Además, he hecho muchas películas tenebrosas, serias, y me apetecía pasarlo bien con la parte física. Creo que jamás me había divertido tanto haciendo una película".
  El primer tanteo fue durante la gala de entrega de los Premios del Círculo de la Crítica de Londres. Chris Hemsworth y Jessica Chastain tienen el mismo agente, y el actor habló del proyecto con Jessica Chastain y prometió mandarle un guión. Al parecer, según Chris Hemsworth, la primera pregunta de la intérprete fue: "¿Podré dar puñetazos y patadas?"
  "Da muchos más puñetazos de los que ha dado nunca", recalca el actor. "La mayoría de mis escenas son con Jessica. Tiene un enorme sentido del humor, y nos picamos mutuamente, un poco como dos hermanos. Lo pasamos realmente bien".
  "Jessica sabe adaptarse, tiene un enorme abanico de posibilidades interpretativas", explica Cedric Nicolas-Troyan. "Sara es un personaje totalmente diferente de los que había interpretado, pero Jessica se entregó totalmente. Se empeñó en entrenarse antes, quería estar preparada. Llegó al plató en perfecta forma, había aprendido a usar las armas, a pelear, y lo hizo de verdad. Mueve, gira y lanza los cuchillos. Nos lo pasamos muy bien rodando esas escenas".
  Jessica Chastain dice que todo es más fácil cuando se trabaja con un director tan abierto y dispuesto a escuchar como Cedric Nicolas-Troyan: "Me preocupaba mucho que en una película de fantasía como esta se pudiera perder el realismo del personaje. Para mí, lo más importante es anclar el personaje en la realidad. Cedric me escuchó y me tranquilizó, me dio una base en la que apoyarme. Me dio pistas para lanzar a mi personaje en otra dirección. Siempre que le hacía una pregunta me escuchaba y me contestaba".
  Charlize Theron aterró al mundo con su interpretación de la terrible reina Ravenna en el primer capítulo y no era fácil encontrar a una actriz que diera vida a Freya, su joven hermana, que no tarda en revelarse como la antagonista de Eric. Los productores se inclinaron por Emily Blunt, que aceptó el papel con entusiasmo.
  "Freya es una mala muy interesante porque su maldad no es innata. La persona que conocemos al principio no tiene nada que ver con lo que acabará siendo", explica la actriz. "Al principio es una joven con un enorme corazón. Se ha enamorado del hombre equivocado, y cuando pierde al bebé, el dolor puede con ella, su corazón se endurece y descubre que tiene tremendos poderes. Su cabello se vuelve blanco, palidece casi hasta ser transparente y aprende a congelar lo que está a su alrededor".
  Después de la traición de su hermana, Freya decide que el amor es malo e innecesario, y decide erradicarlo del mundo. Para eso, secuestra a niños pequeños, los lleva a su reino y les enseña que el amor es el mayor de los peligros. "Está convencida de que hace lo que debe", explica Emily Blunt. "Cree que salva a los niños convirtiéndolos en soldados y educándolos sin amor. Los salvaguarda del terrible dolor por el que ella tuvo que pasar".
  Cedric Nicolas-Troyan está de acuerdo: "No es malvada porque quiera poder o anhele dominar. Es mucho más complejo que eso. Cree que salva a esos niños al convertirlos en espléndidos guerreros. No ve que la crueldad de sus acciones, los aleja de todo lo que conocen y aman".
  Emily Blunt, añadiendo un toque de humor a la terrible reina, dice, riendo: "Freya tal vez sea la figura maternal más aterradora que exista para un niño".
  No era el primer papel de acción que interpretaba Emily Blunt después de películas como Al filo del mañana, pero le apetecía meterse en la piel de un personaje tan diferente como este. "El guión era muy bueno y Freya es malvada, pero también es muy compleja emocionalmente", dice, entusiasmada. "Sabía que era un papel al que podía agarrarme y que me obligaría a esforzarme".
  Chris Hemsworth cree que Freya es muy diferente de su hermana: "Toda la actitud de Ravenna es amenazante, despiadada, no perdona a nadie, no tiene ni una pizca de humanidad en su interior. Pero Emily muestra que Freya todavía posee un atisbo de corazón, a pesar de hacerlo todo para ignorarlo. Se esfuerza desesperadamente en enterrar sus sentimientos y seguir el camino que su hermana le inculcó desde pequeña".
  En cierto modo, esos rastros de humanidad la hacen todavía más peligrosa. "También es amenazadora, pero en otro sentido", explica el actor. "Es una manipuladora y siempre pilla desprevenido a todo el mundo porque aparenta ser la bondad personificada un momento, y a los dos segundos es aterradora".
  La reina Ravenna creada por Charlize Theron fue una malvada muy aplaudida y  popular en la primera entrega. A pesar de que la creíamos muerta, todos estaban de acuerdo en que debía regresar en la precuela, y quien más lo deseaba era Charlize Theron. Reconoce que lo pasó realmente bien dando vida a la malvada reina: "Me gusta que Ravenna sea un enigma. A medida que avanzamos en la historia, vamos conociéndola mejor, pero es alguien que nació en unas circunstancias en las que este tipo de vida, esa forma de actuar es lo más normal del mundo. En realidad, ella es su peor enemiga".
  La naturaleza retorcida de Ravenna atrae a la actriz, que explica su personaje: "Es alguien que funciona basándose en el miedo que habita en lo más profundo de su ser".
  Traer de nuevo a Ravenna no fue tan difícil como pueda parecer, ya que esta nueva entrega transcurre antes de los acontecimientos de Blancanieves y la leyenda del cazador, aunque empiece después. "Los guionistas tuvieron la brillante idea de hacerla volver", dice Charlize Theron, "lo que me interesó inmediatamente".
  "En esta película, Ravenna es en realidad dos personajes diferentes", explica el realizador. "La vemos antes de la primera película, en el pasado, y nos damos cuenta de que su maldad tiene una vertiente humana, es una Ravenna más cercana. En la segunda parte regresa del más allá y es totalmente diferente. Ha muerto, pero su oscuridad y su magia siguen vivas".
  Hablando de la relación profesional con su compañero de reparto Chris Hemsworth, dice: "Nos llevamos muy bien durante el primer rodaje y no nos costó nada seguir donde lo habíamos dejado. Estaba encantada de volver a encarnar el personaje".
  "Charlize es deliciosamente malvada en las dos películas", dice Joe Roth con admiración. "Al situar parte de la historia antes de la primera entrega, no solo puede ser deliciosamente malvada con desconocidos, sino también con su familia".
  "Ha sido maravilloso trabajar con Charlize", dice Emily Blunt. "Es muy dinámica y cualquier actor que comparta el plató con ella debe alegrarse. Pasamos muy buenos momentos juntas y creo que el vínculo que creamos fuera del plató se refleja en la pantalla".
  El reparto de tres papeles femeninos fundamentales para la película demuestra que los productores querían personajes fuertes y complejos, sobre todo para las protagonistas. "Una de las razones por las que quería hacer esta película, aparte de trabajar con Chris Hemsworth, era los tres increíbles papeles femeninos", dice Jessica Chastain. "Sabía que Charlize y Emily ya habían aceptado formar parte del reparto y, sinceramente, estaba cansada de ser la única mujer en el plató. Las historias, incluso tratándose de una fantasía como esta, deben representar el mundo en el que vivimos, y me alegré muchísimo al ver que había papeles fabulosos para varias mujeres en esta película".
  "Nunca había rodado una película con dos mujeres tan positivas y fuertes como Jessica y Emily", explica Charlize Theron. "Verlas a las dos trabajar me ha obligado a sacar lo mejor de mí misma, ha sido una experiencia memorable. Es un placer encontrar guiones en los que las mujeres son retratadas con realismo. Creo que el cine actual ha perdido contacto con las películas de mujeres que podían llevar grandes historias, mujeres tan complejas y conflictivas como los hombres. Por suerte, en los últimos diez años, estas protagonistas están volviendo poco a poco y los espectadores parecen conmoverse con este tipo de historias".
  Cedric Nicolas-Troyan está de acuerdo con la actriz: "Esta película se apoya en los personajes femeninos, incluso más que la primera. Lo mejor del personaje de Jessica es que no necesita que el cazador la salve. Se apoyan mutuamente y luchan juntos; los dos son igual de fuertes, pero mucho más poderosos cuando están unidos".

  Los siete enanitos están, sin duda alguna, entre los personajes más queridos de Blancanieves y la leyenda del cazador. Interpretados por actores de la talla de Ray Winstone, Ian McShane y el lamentado Bob Hoskins, entre otros, fueron muy populares, y la decisión de incluirlos de nuevo en el relato y así saber más acerca de los usos y costumbres de enanolandia fue aprobada con unanimidad.
  La inclusión de los enanos en el siguiente capítulo estaba garantizada y los productores decidieron hacer regresar a Nick Frost, que interpretó al muy querido Nion en la película original. "Desde el punto de vista de un enanito, todo cambia", apunta Nick Frost. "En este capítulo aparecemos desde el principio".
  Nion, un enanito extrovertido y cómico, la mano derecha de Beith en la primera película, es un ferviente defensor de la supremacía de la raza de los enanos, y jamás se ha fiado de Eric ni de sus motivos. Sin embargo, atraído por la promesa de un tesoro, decide unirse a Eric para recuperar el Espejo Mágico.
  Rob Brydon encarna a un nuevo enanito llamado Gryff. Puede decirse que Nion se ha ablandado un poco con el paso de los años, pero no es el caso de su compañero de viaje. Malhumorado, maleducado, hipócrita y avaricioso, Gryff se esfuerza en dar mala fama a los enanos.
  Rob Brydon y Nick Frost son conocidos cómicos británicos y no les costó mucho trabajo formar el dúo perfecto para aligerar el tono de la película. "Ha sido muy divertido trabajar con Rob y Nick", dice Chris Hemsworth con una gran sonrisa. "Tienen un enorme sentido del humor y han aportado una energía totalmente inesperada al plató. También me han obligado a sacar algo más de mi personaje. Nos damos toda una serie de réplicas geniales".
  Y añade, con gran modestia: "Eso sí, siempre voy a la zaga de los dos. Tengo la impresión de que capto el chiste segundos después que ellos, siempre van lanzados como motos".
  Rob Brydon, que ha trabajado en numerosas películas dentro y fuera del Reino Unido, habla de lo que supuso el rodaje para él: "Lo que más me sorprendió desde el principio fue el humor que reinaba entre Chris y Jessica. No parecían tomarse nada en serio. Nos reímos mucho fuera del plató, y es una suerte en una película como esta porque se pasa mucho tiempo esperando mientras preparan los decorados. Pasarlo bien ayuda".
  Nick Frost recuerda que le encantó su papel en la primera película... cuando por fin se acostumbró a las largas horas necesarias para transformarse en enano. Volver a encarnar el personaje fue como reencontrarse con un viejo amigo. "Es un enano muy sencillo, no tiene muchos planes", explica. "Se preocupa sobre todo por los amigos y la familia, y quiere encontrar el amor. Pero no piensa mucho; quizá sea mejor así".
  Los enanos no solo se encargan de aportar humor, sus flirteos y dobles juegos reflejan los de los seres humanos. "En esta película se aprende que los enanos son seres solitarios", dice Nick Frost. "Tienden a quedarse con los de su mismo sexo, pero cuando Nion conoce a Doreena, a la que encarna Alexandra Roach, se enamora perdidamente. Nunca ha sentido nada igual, está abrumado, pero no tiene miedo".
  Hablando de su papel, Rob Brydon dice: "La relación entre Nion y Gryff es interesante. Gryff es el mayor de los dos y se comporta como un padre o un hermano mayor con Nion". El actor galés añade: "Es un chulo, habla mucho, pero nos damos cuenta rápidamente de que en el fondo tiene miedo de todo. Nion, al contrario, hace caso a su corazón, no a su cabeza".
  Gryff también cae presa de los encantos de la Sra. Bromwyn, a la que encarna Sheridan Smith, cuando esta aparece en la historia. Se conocen y empieza a preguntarse si no habrá encontrado la horma de su zapato en cuanto a dobles juegos. "Tradicionalmente, la relación entre enanos y enanas es de desprecio y hostilidad mutua", explica el actor. "El personaje de Sheridan se siente atraído por Eric nada más verle, pero no tarda en fijarse en Gryff".
  Una de las mejores rastreadoras del mundo encantado, la Sra. Bromwyn, solo se interesa por dos cosas: los tesoros y cómo encontrarlos. Ha preferido las aventuras y la búsqueda del oro a los placeres y la comodidad, pero Eric le atrae. Su flirteo con Gryff puede convertirse en el romance del año o puede ser el final del enano.
  La Sra. Bromwyn no está sola, la acompaña Doreena, una joven y dulce enana de sonrisa inocente. Pero no se dejen engañar por las apariencias, es tan dura y fuerte como su compañera. Sin embargo, el amor se apodera de Doreena en cuanto ve a Nion, y la pareja está a punto de demostrar que no todos los enanos y enanas se odian.
  Rob Brydon no había trabajado en la película anterior y tuvo que hacerse con la técnica precisa para convertirse en un enanito de cuento, lo mismo que Sheridan Smith y Alexandra Roach. Los tres se apuntaron a un curso especial impartido por Peter Elliott para asegurarse de que se moverían correctamente. "Convertirse en un enano de cuento es un trabajo más complicado de lo que parece, desde efectos digitales de última generación, hasta simples trucos", explica el actor. "Nuestro maestro fue Peter Elliott, que ya trabajó en la primera entrega y ha aparecido en un millón de créditos por enseñar a moverse a los actores".
  Los productores sabían que los papeles de los cuatro enanos debían ser interpretados por conocidos actores de la pantalla británica. "Les conté a mis amigos que iba a un curso para aprender a ser enana de cuento, y ninguno me creyó", comenta la actriz Sheridan Smith. "Peter es un auténtico maestro y nos enseñó cómo debíamos andar. Cuando una empieza a andar así, cuesta mucho dejarlo. Me di cuenta una vez que bajé del coche camino de casa y andaba contoneándome".
  "Me sorprendió lo mucho que me costó conseguirlo", añade Rob Brydon, "y lo mucho que me dolía. Basta con cambiar un poco de manera de andar para te empiecen a doler las rodillas".
  Sheridan Smith describe a su personaje con el adjetivo de peleona. "Lleva mucho tiempo viviendo en el bosque, solo le importa el dinero y los tesoros", explica. "Nunca había interpretado a una enana, pero lo he pasado realmente bien. Teníamos que llegar al plató a eso de las tres y media de la mañana y sentarnos en maquillaje. Aumentaban nuestra frente para que la nariz pareciera más pequeña. Colleen Atwood me diseñó un traje extraordinario, una especie de corsé de cuero con una falda muy primitiva. Me hacía sentir genial".
  La actriz también disfrutó de la camaradería reinante en el plató. "Es perverso", dice, hablando de Rob Brydon. "En la película, la Sra. Bromwyn es la más fuerte y vapulea un poco a Gryff, pero en la vida real es al revés. Es imposible no reírse al oírle hablar. Nadie se aburre cuando está él, su buen humor recorría todo el plató".
  Enanos y realeza, cazadores y traidores, todos los intérpretes están de acuerdo en que tuvieron a un gran capitán. Chris Hemsworth describe cariñosamente a Cedric Nicolas-Troyan como un niño grande: "Su energía es contagiosa. Siempre quiere ir más lejos, explorar un poco más allá. Nunca se pone en primer plano, y está dispuesto a oír cualquier sugerencia. Algunos directores noveles creen que deben ser capaces de contestar a todas las preguntas, pero Cedric es humilde y perspicaz. Es posible colaborar de verdad con él".
  "Me gusta que el ambiente sea relajado", dice el director. "Si todo el mundo disfruta con el rodaje, si todos se alegran de encontrarse en el plató, la película saldrá ganando".

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