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SINOPSIS
Hannah Arendt, exiliada en EE.UU., es enviada a Jerusalén por el periódico en el que trabaja para que cubra el jucio del nazi Adolf Eichmann, quien es juzgado y condenado a muerte. A lo largo y ancho de cuatro años se dedica a escribir un libro que provoca un escándalo a nivel internacional...
INTÉRPRETES
BARBARA SUKOWA, AXEL MILBERG, JANET McTEER, JULIA JENTSCH, ULRICH NOETHEN, NICHOLAS WOODESON, MICHAEL DEGEN, VICTORIA TRAUTTMANSDORFF
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INFORMACIÓN EXCLUSIVA
NOTAS DE LA DIRECTORA...
El punto de vista que surge de la obra de una persona entra directamente al mundo y permanece después que la persona haya fallecido. Sea importante o banal, transitoria o duradera depende del mundo y de sus costumbres. Lo juzgará la posteridad. La verdad sobre una persona, palabras, gestos, amistades, sobrevive únicamente en los recuerdos. Si debe entrar al mundo, debe encontrar una nueva forma. Una historia debe de ser formada por muchos recuerdos y muchas historias.
UNA PELICULA SOBRE HANNAH Y POR QUÉ...
El conocimiento que trae la obra de Hannah Arendt al mundo sigue brillando. Su obra es convocada por una cantidad creciente de personas, y cada día ilumina a más gente. En unos tiempos donde la mayoría se sentía obligada a seguir una ideología específica, Arendt fue un ejemplo brillante de alguien que se mantuvo fiel a su perspectiva singular sobre el mundo. En 1983 quise realizar un film sobre Rosa Luxemburgo porque estaba convencida que fue la mujer filosofa del último siglo. Estuve entusiasmada de poder comprender la mujer detrás de la luchadora revolucionaria. Pero ahora que empezamos el siglo XXI, Hannah Arendt es una figura aún más importante. Su visión y sabiduría solo comienzan ahora a ser comprendidas y abordadas. Cuando Arendt empezó a formar el concepto de “la banalidad del mal”, un término que ella acuñó en el testimonio del juicio de Eichmann, fue atacada y criticada como si fuera el enemigo de los judíos. Hoy en día, este concepto se ha convertido en un componente esencial para cualquier debate que busque juzgar los crímenes de los Nazis. De nuevo, me interesé en encontrar a la mujer detrás de esta gran filosofa independiente. Nació en Alemania y falleció a Nueva York. ¿Qué la trajo hasta allí?
Y como judía, desde luego no se fue de Alemania de forma voluntaria, y por esta razón su historia plantea una pregunta que me he hecho en muchas de mis películas: ¿cómo se comporta una persona ante eventos históricos y sociales que él o ella no pueda influenciar o cambiar? Como muchos otros judíos, Arendt podría haber sido una víctima del Nacionalsocialismo. Pero fue rápida en reconocer el peligro y huyó de Alemania a Paris. Cuando Francia fue invadida, se fue de Marsella y viajo a través de España y Portugal para llegar finalmente a Nueva York. Mientras huía, pensó amargadamente de los muchos amigos que habían elegido apoyar a los Nazis. Estuvo profundamente decepcionada cuando observó lo fácilmente que se adaptaron a la “nueva era” y describió este fenómeno en una entrevista como "Zu Hitler fiel inhen was ein”. Esto significa que para poder justificar su decisión, “se inventaron ideas sobre Hitler”. El exilio fue su “segundo despertar”. La primera transformación en su vida vino mientras estudiaba filosofía con Martin Heidegger. En ese momento estaba segura de que su vocación perseguiría el pensamiento puro. Pero después de su exilio forzoso, no tuvo otra elección más que abordar eventos de la vida real y actual. Hacia 1960, cuando finalmente se instaló en América, estaba preparada para enfrentarse a uno de los capítulos del siglo XX más trágicos. Ella vería cara a cara al hombre que causó las muertes de millones de judíos: Adolf Eichmann. Nuestra película se centra en los cuatro años turbulentos donde las vidas de Arendt y Eichmann se cruzan. Este enfoque ofrecía la oportunidad de contar una historia que daría pie a la comprensión del impacto tanto histórico como emocional de esta confrontación explosiva. Cuando la filósofa inflexible y poco convencional tuvo que enfrentarse al burócrata sumiso y diligente, tanto Arendt y el Holocausto cambiaron para siempre. Ella veía en Eichmann un hombre cuya mezcla fatal de obediencia e inhabilidad de pensar por sí mismo (“Gedankenlosigkeit”) le habilitó a transportar a millones de personas a las cámaras de gas. El retrato de Hannah Arendt se hace casi de forma exclusiva durante el periodo de la captura de Eichmann y termina poco después de la publicación de su libro. “Eichmann en Jerusalén. Informe sobre la Banalidad del Mal” hizo posible que no sólo se investigara su trabajo revolucionario, sino que también reveló su carácter y su personalidad. Podemos conocerla como una mujer, como amante, y sobre todo, como amiga. Existen pocos flashbacks que nos llevan a los años veinte y a los años cincuenta, revelando el amor que la joven Hannah tiene por Martin Heidegger, además de su reunión años después del fin de la guerra. Ella nunca logró deshacerse de su conexión con Heidegger, a pesar de que él se unió al Partido Nacionalsocialista en 1933. Estos flashbacks son importantes para poder entender el pasado de Arendt, sin embargo la película trata principalmente de su vida en Nueva York, con su marido, Heinrich Blücher, quien conoció mientras estaba exiliada en Paris, y de sus amistades americanas y alemanas, como la autora Mary McCarthy y su amigo más antiguo, el judío alemán Hans Jonas. Este largometraje muestra a Hannah Arendt como una persona luchando con sus pensamientos y sus emociones, alguien que elimina su inteligencia de sus emociones. La podemos ver como una profesora y filósofa apasionada, como una mujer capaz de mantener amistades durante una vida entera (De hecho, fue considerada un “genio de la Amistad”) pero también como una luchadora que con su coraje defendió sus ideas y que nunca se apartó de las confrontaciones. Sin embargo su meta siempre fue el de entender. Su famosa declaración fue “Quiero entender” y esta frase es la que mejor la describe. Precisamente es su búsqueda para entender a las personas y al mundo lo que me atrajo de ella. Como Arendt, yo nunca quise juzgar, solo entender. En este film, por ejemplo, quiero entender lo que Hannah Arendt pensaba sobre el totalitarismo y el colapso moral en el último siglo, sobre autodeterminación y sobre la libertad de elección. Finalmente lo que ella logró comunicar, sobre el mal y sobre el amor. Espero que la audiencia llegue a comprender, como yo lo hice, porqué es importante recordar a esta gran filosofa. La clave para entender su vida está en el deseo de Arendt por sostener lo que ella llamaba “amor mundi” el “amor al mundo”. Aunque su exilio forzoso la obligó a pasar por la vulnerabilidad y la alienación, ella continúo creyendo en el poder que tienen los individuos a resistir la cruel fuerza de la historia. Su negación a ser abrumada por la desesperación e impotencia la hace, para mí, una mujer extraordinaria cuya “luz sigue brillando” hoy en día. Una mujer que puede amar y ser amada. Una mujer que una puede, como dijo ella, “pensar sin barreras”. Eso es ser un filósofo independiente. Para poder ofrecer una visión autentica de Arendt como persona, tuvimos que movernos más allá de la montaña de archivos escritos y audiovisuales. Por lo tanto, después de un largo periodo de investigación tradicional, mantuvimos entrevistas extensivas con personas contemporáneas que habían formado parte de la vida de Hannah Arendt durante muchos años.