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SINOPSIS
Un ex agente de la CIA, se ve envuelto en un conflicto personal con un antiguo alumno, cuando descubre una conspiración donde se encuentran metidos funcionarios de la agencia y hasta el mismo Presidente electo ruso...
INTÉRPRETES
PIERCE BROSNAN, OLGA KURYLENKO, LUKE BRACEY, ELIZA TAYLOR, WILL PATTON, CATERINA SCORSONE, BILL SMITROVICH, PATRICK KENNEDY, AMILA TERZIMEHIC, MILUTIN MILOSEVIC
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INFORMACIÓN EXCLUSIVA
‘La Conspiración de Noviembre es un thriller de espionaje de nuestro tiempo; es una historia oscura, cruda y realista que hunde sus raíces en las películas de espías del pasado. Brosnan explica la complejidad de este hombre, “Devereaux es complicado. Es un hombre que ha estado en ese mundo durante muchos años. Es un hombre instruido e inteligente, y también es un asesino entrenado, un profesional, y eso le ha convertido en un ser torturado y traumatizado. Tiene esta apariencia de normalidad y, sin embargo, está obsesionado con los “pecados” de su vida pasada.”
Cuando la productora Beau St. Clair empezó a considerar hacer un thriller de espionaje, en 2008, sabía que tendría que encontrar algo realmente excepcional para atraer de nuevo a Pierce Brosnan al papel espía. Ni ella ni Brosnan querían repetir material. Brosnan hacía tiempo había dejado su huella en el público interpretando al espía por antonomasia, el seductor y sofisticado James Bond, en cuatro películas. “Las películas de espías son un gran género, me han tratado muy bien,” dice Brosnan. Fue el productor ejecutivo Dino Conte quien le enseñó por primera vez la serie de libros ‘November Man’ del autor estadounidense Bill Granger a St. Clair. Se empezaron a publicar a finales de los setenta, los trece libros de la serie ofrecían un protagonista fuerte, complejo e intrigante en la figura de Peter Devereaux – un hombre que opera en escenarios increíblemente realistas de la época, rodeado de personajes que a su vez representan lo mejor y lo peor de la naturaleza humana en un mundo de luchas de poder, de engaños, intrigas e intereses internacionales. Lo que es más, el tema de la guerra fría como telón de fondo en los libros de Granger podía actualizarse convincentemente para reflejar el clima político global actual. St. Clair consiguió los derechos del séptimo libro de la serie, ‘There Are No Spies’. Además de ser perfecto para una adaptación cinematográfica, en este punto de la serie Devereaux es más maduro, tiene más experiencia y es un hombre que se cuestiona cosas y, habiéndose retirado del servicio, necesita mucha persuasión para volver al juego. Los guionistas Michael Finch y Karl Gajdusek se unieron al proyecto para escribir el guión y St. Clair empezó a buscar un productor independiente que la respaldara desde la creación del guión hasta su llegada a la gran pantalla. El guión tardó unos cinco años en completarse y el siguiente paso fue buscar a un director que se estuviera a la altura. La sugerencia de Brosnan de que fuera Roger Donaldson fue bien acogida. El actor ya había trabajado con Donaldson anteriormente y el director es muy admirado por sus películas de acción y thrillers políticos. Cuando le enseñaron el guión, Donaldson no dudó en aceptar la oportunidad de llevarlo a la gran pantalla. “Al principio me sentí atraído por el guión porque descubrí que era algo extraordinario y sentí que podría hacer una película entretenida y llena de suspense. La oportunidad de colaborar con Pierce Brosnan lo hizo aún más atractivo, ya que sabía que Pierce podría dar una vida al personaje de Peter Devereaux de una manera que nadie podría igualar.”
Los guionistas Michael Finch y Karl Gajdusek empezaron con una gran labor de investigación y desarrollo. Además de leer los trece libros de la serie de Granger para meterse en las mentes de los personajes, observaron la realidad política de los ochenta, cuando el autor estaba escribiendo el libro, para comparar y actualizar la historia de una manera emocionante. Granger había hecho una gran labor de creación con sus personajes sobre papel, pero hubo un momento de revelación a la hora de escribir el guión cuando dieron más relevancia al protegido de Devereaux, Mason, pasando de ser un personaje secundario a ser uno principal y hacer que la película tuviera dos protagonistas, él y Devereaux. Gajdusek dice “A la hora de adaptar la historia para la pantalla se trataba de dar imagen y voz a los personajes tan ricos que había creado Granger. Con Devereaux se trataba de mantenerse fiel a Granger y con Mason encontramos una manera de actualizar la historia.” Como la serie de libros se centraba en el entorno de la guerra fría y los acontecimientos de esa época, Finch y Gajdusek sintieron que era necesario actualizar. “Necesitábamos traer la historia al presente, lo que significaba encontrar una geografía y entorno político que resonara con el mundo geopolítico actual. La historia que usamos como el corazón de nuestro guión es una historia de hoy en día, pero su argumento y lo que nos revela se remonta a la era de la guerra fría y a algunas de las terribles semillas que se plantaron entonces,” dice Finch. Las películas de espías del pasado se han basado en lo fantástico: aparatos imposibles, coches que se pueden conducir en el agua y bombas de relojería digitales. ‘La conspiración de noviembre’ es la película de espías que todo el mundo estaba esperando. Es cruda, realista y trata cuestiones que son relevantes a día de hoy. Sitúa al público en la vida de un espía de verdad y le sigue mientras intenta ser más astuto y manipular a sus enemigos. “Creo que es extremadamente relevante. El mundo en el que vivimos está lleno de secretos e intrigas de políticos ávidos de poder en el escenario global – la situación geopolítica es muy volátil,” dice Brosnan.
Aunque se escribió con Berlín en mente, el coste de rodar ahí llevó a los productores a considerar otras localizaciones, por lo que el productor Sriram Das se encontró visitando numerosas capitales de Europa del este. Su visita a Belgrado (Serbia) en 2012 acabó siendo una revelación. La hermosa y cosmopolita ciudad a penas ha salido en películas internacionales y la variedad de localizaciones que ofrecía, junto con la generosa cooperación de la ciudad y gobierno serbio, eran incomparables. Además, el hecho de que contara con una industria cinematográfica asentada significaba que podrían contar con un equipo de calidad y con experiencia. El director Roger Donaldson estaba tan impresionado con Belgrado que no tardó en ver la ciudad como un verdadero y tangible personaje de la película y se propuso aprovechar la rica variedad que ofrecía la ciudad como telón de fondo. El objetivo era disipar la imagen de una metrópolis ex comunista gris y deprimente y presentarla como es en realidad: colorida, vibrante y con una gran mezcla y oferta cultural y variedad arquitectónica. Con un argumento que incluye una brutal y sistemática caza humana y mucha acción, se usaron muchas localizaciones por todo Belgrado. Éstas incluyeron uno de los principales mercados de la ciudad, estaciones de tren, cafés y restaurantes, así como callejones y un aparcamiento. La producción también tuvo el enorme privilegio de poder usar algunos lugares emblemáticos como el Palacio Blanco, el Parlamento Serbio, el ayuntamiento y la famosa fortaleza de la ciudad. También rodaron en apartamentos privados, usando y complementando estructuras existentes para dar la sensación de un hogar serbio real. El diseñador de producción, Kevin Kavanaugh, cuenta “Realmente queríamos mezclarlo y no limitarnos a un estilo, así que usamos muchos edificios con personalidad, de distintas paletas cromáticas y combinando lo antiguo con lo nuevo para dar vida a los sets.” Según iban rodando en digital, las últimas lentes anamórficas se usaron para suavizar y dar volumen a las imágenes. El efecto es parecido a las lentes de 35mm que se usaban hace 30 años y parecía totalmente apropiado para una película que remite al estilo de la guerra fría. Otro efecto visual se consiguió con lentes “tilt and shift”, que daban una cualidad onírica a las imágenes. Para esta película tan rápida y basada en la acción, se recurrió mucho a la steadicam, así como a cámaras montadas en coches y quads. A la película no le falta acción trepidante, así que tanto el equipo de dobles de acción como el equipo de efectos especiales estuvieron muy ocupados en el set. El galardonado coordinador de escenas de acción Mark Mottram, que trabajó con Pierce en tres películas Bond, también trabajó como su doble de acción. Tenía un equipo básico de cuatro personas, que incluían a dos dobles adicionales, un “stunt rigger” y un especialista en motos y coches. Algunas escenas eran tan complejas que contaron con 30 especialistas serbios y rusos adicionales, especialmente para las persecuciones en coche, que necesitaban gran precisión a la hora de conducir a través de las, en ocasiones estrechas, calles de Belgrado. El equipo de dobles trabajó con los actores para ensayar y perfeccionar las escenas de lucha, así como las caídas de balcones y la simulación de explosiones y disparos. A pesar de que la mayor parte de la acción de la película es de naturaleza física, se usaron efectos especiales algo más complicados para el set, en concreto para dos explosiones de vehículos y un accidente de coche. Una de las secuencias más complejas en cuanto a efectos especiales fue la explosión de una furgoneta a 10 metros del edificio más cercano… mientras Pierce Brosnan y Luke Bracey se alejan andando ilesos. El vehículo se preparó para que tuviera dos detonaciones, una a cada lado y, por razones de seguridad, el vehículo se apañó para que no salieran restos volando. La explosión se preparó para que saltara dos veces.