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INFORMACIÓN
Titulo original: Mommy
Año Producción: 2014
Nacionalidad: Canadá, Francia
Duración: 139  Minutos
Calificación: No recomendada para menores de 16 años
Género: Drama
Director: Xavier Dolan
Guión: Xavier Dolan
Fotografía: André Turpin
Música: Eduardo Noya
FECHAS DE ESTRENO
España: 5 Diciembre 2014
DISTRIBUCIÓN EN ESPAÑA
Avalon


SINOPSIS

Un joven de quince años, sufre un trastorno por déficit de atención conjuntamente a la hiperactividad que posee. La madre es la encargada de él, esforzándose ambos a sobrellevar de la mejor forma posible la convivencia. Con la llegada de una nueva vecina recobrarán la esperanza...

INTÉRPRETES

ANNE DORVAL, ANTOINE-OLIVIER PILON, SUZANNE CLÉMENT, ALEXANDRE GOYETTE, PATRICK HUARD

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NOTAS DEL DIRECTOR...   
   Desde mi primera película, he hablado mucho del amor.
  He hablado de la adolescencia, de la inadaptación, de la transexualidad. He hablado de Jackson Pollock y de los 90, de la alienación y la homofobia. He hablado también de internados, de la palabra “especial”, de ordeñar vacas, de la cristalización de Stendhal y del síndrome de Estocolmo. He hablado argot, he hablado de forma sucia. He hablado en inglés a menudo y otras muchas veces he hablado sin ton ni son.   El tema es que cuando “hablas” de cosas, existe un riesgo inevitable que te hace hablar de muchas tonterías. Es por eso que decidí ceñirme a aquello que conocía, o que me resultaba más o menos cercano. Temas que controlaba totalmente o al menos lo suficiente porque me había criado en el barrio. O porque sabía el miedo que sentía, y sigo sintiendo de otros. Sabía las mentiras que nos decimos cuando vivimos escondiéndonos, o el amor que nos empeñamos en desperdiciar con los ladrones de tiempo. Esos son temas que me han tocado de cerca para hacerme querer hablar de ellos. Pero debería haber uno, solo un tema del que debería saber más que nadie, uno que me inspirara de forma incondicional, y que me gusta más que ningún otro, y desde luego es mi madre. Cuando digo mi madre, me refiero a la figura que representa.   Porque es ella a la que siempre regreso. Es ella la que quiero ver ganar todas las batallas, para la que quiero inventar problemas para ver cómo los resuelve, es ella a través de quien me hago todas las preguntas, a quien quiero oír gritar cuando nadie dice nada, es ella quien quiero que tenga razón cuando todos nos equivocamos, es ella la que tendrá la última palabra, no importa de qué.   De vuelta a los días de Yo maté a m madre, sentía que quería castigarla. De eso solo han pasado cinco años , y creo que con 'Mommy', estoy buscando su venganza. No preguntes.

ASPECTOS VISUALES...
  
  Vimos 'Mommy' como una película oscura en su núcleo, pero pensamos que, en el exterior, debía pulirse con luz y calor. Es el mandato de la audiencia determinar la verdadera naturaleza de la película, no el nuestro. No queremos decirle a nadie qué pensar, o cuándo pensar en ello.
  Teñir 'Mommy' con una tonalidad gris, con una niebla húmeda parecía la solución más sencilla. Soñaba con que Die y Steve vivieran en un lugar alegre, un lugar donde todo fuera posible. Recuerdo haberme jurado a mí mismo que haría todo para que mis personajes fueran y sonaran como la gente del lugar en el que yo me crié. No como una caricatura de sí mismos, que fueran "ellos", realmente.   La fotografía de la película también debía evitar dar una imagen de desaliento. Las puestas de sol y las horas mágicas, durante las cuales rodamos muchas de las secuencias, darían un toque de tonos rojos y amarillos que nos servirían para adornar los exteriores. Y la luz del día nos cegaría con sus destellos.   Para mí, era muy importante, que 'Mommy' fuera, en la medida de lo posible, una historia radiante de coraje, amor y amistad.   No veo razón para hacer, ni para ver, películas sobre perdedores.  Eso no quiere decir que tenga una visión despectiva sobre los perdedores, al contrario. Tengo especial aversión a cualquier documento artístico que pretende retratar a los seres humanos a través de sus fracasos. Creo que las personas no deberían ser definidas por sus dificultades y por etiquetas, sino por sus sentimientos y sueños. Esa es la razón por la quería hacer una película sobre los ganadores, sobre lo que les ocurre al final. Espero haberlo conseguido.

MOMMY VS. YO MATÉ A MI MADRE...   
  Entre mi primera película y 'Mommy' hay varias líneas paralelas. Pero solo en la superficie.   Desde mi punto de vista, desde la dirección hasta el tono, del estilo interpretativo a los visuales, esas dos películas son totalmente diferentes. Una de ellas se desarrolla a través de los ojos de un adolescente caprichoso y la otra se centra en las adversidades de una madre. Además del ya importante cambio en el punto de vista, esta es la razón por la que creo que son dos películas tan diferentes: Yo maté a mi madre se centra en una crisis de adolescencia. 'Mommy' en una crisis existencial.   Por otra parte, no veo el sentido de hacer la misma película dos veces. Estoy encantado con la oportunidad de regresar a casa a través de estas dinámicas entre madre e hijo, puesto que ese tema ha formado siempre parte de mis películas. Pero me alegra aún más poder explorar las novedades dentro de una escala mayor: el género familiar. Eso representa una forma más emotiva de comunicación con el público.   La madre representa el lugar del que venimos, y el hijo, quienes somos, el ser en el que nos hemos convertido. Nunca abandonamos del todo esas preocupaciones Freudianas, son parte indeleble de nosotros.

MÚSICA...   
  Considero que la música de las películas logra, de forma inconsciente, una transacción con cada uno de los espectadores, estimulándoles a participar a través de sus propias historias.   Dido, Sarah McLachlan, Andrea Bocelli, Céline Dion y Oasis, todos ellos tienen una historia con cada cinéfilo; cuando, por ejemplo, Wonderwall, sonaba en 1995, uno de ellos estaba sufriendo por una ruptura amorosa, otro estaba solo en un bar, otro de luna de miel en Playa del Carmen, otro en el funeral de un amigo. Cada uno de ellos tiene un recuerdo muy diferente de cada canción. Eso hace que cuando, dentro de la película, suena un tema, esos recuerdos individuales se integren en la historia y haga que esta vaya más allá de donde nunca pensamos que iría. En la quietud de una sala oscura, observamos, en comunión anónima, y creo que eso es algo beneficioso para cualquier película. Además, el hecho de que casi todas las canciones de Mommy vengan de una mixtape grabada antes de morir por el marido de Die, y no de una de mis listas de reproducción, fue algo nuevo para mí. Recuerdo a Pauline Kael escribiendo sobre Scorsese y diciendo que en sus películas las canciones no sonaban “sobre” la película sino “en” la película; en la radio, en la televisión o en los cafés. Existe, en este acercamiento diegético, una forma de involucrar al público con la autentica verdad de los personajes, que hace que se olviden de las ideas y deseos del director. Eso me gusta.

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