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Titulo original: Love The Coopers
Año Producción: 2015
Nacionalidad: EE.UU
Duración: 107 Minutos
Calificación: No recomendada para menores de 7 años
Género: Comedia
Director: Jessie Nelson
Guión: Steven Rogers
Fotografía: Elliot Davis
Música: Nick Urata
FECHAS DE ESTRENO
España: 25 Diciembre 2015
DISTRIBUCIÓN EN ESPAÑA
Tri Pictures


SINOPSIS

La nochebuena se acerca y cuatro generaciones de la familia Cooper se dan cita para esa noche tan especial, pero una serie de visitas inesperadas así como algunos imprevistos harán que la noche no salga como estaba pensada...

INTÉRPRETES

AMANDA SEYFRIED, OLIVIA WILDE, MARISA TOMEI, ED HELMS, DIANE KEATON, JOHN GOODMAN, ANTHONY MACKIE, JAKE LACY, ALEX BORSTEIN, ALAN ARKIN, TIMOTHÉE CHALAMET

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   La Noche Buena, cuando se reúnen los Cooper todo se desmorona. “Los Cooper quieren pasar la noche sin que nadie de la familia se entere de lo que realmente pasa (en sus vidas individuales), y con suerte se crean las versiones ideales de ellos mismos que todos presentan,” dice la directora Jessie Nelson. “Lo que consiguen es mucho mejor: la verdad, conexión real e intimidad.” Nelson añade: “son todos esos fantasmas de Navidades pasadas que nos visitan a través de nuestra memoria. Traemos tantos recuerdos a las fiestas. O nos estamos preocupando por el pasado o proyectando nuestros miedos sobre el futuro. Con mucha frecuencia no vivimos el presente. ¡Creo que el mundo verá la locura de su propia familia reflejada en esta película!”
 
Nada da pie a la comedia y la tensión mejor que una historia contada en un tiempo limitado. “Esta película es complicada y caótica,” dice Nelson. “Todo gira alrededor de un día que cambia todo, Noche Buena. Cada miembro de la familia Cooper está en un momento crítico de su vida ese día – todo me pareció tan real, sin edulcorar. Todos están intentando presentar una versión de si mismos que no tiene nada que ver con lo que les sucede realmente.” El productor Michael London (La joya de la familia) dice que Nelson se enamoró de los Cooper desde el momento en que leyó el guión original de Steven Rogers. “Se convirtieron en su familia para ella y les dio vida como si estuviera emparentada con todos ellos. Ella quería que el humor siempre surgiera del personaje. Hay un montón de momentos desternillantes, pero siempre surge por emociones reales entre los personajes. Era especialmente importante para Jessie que cada uno tuviera una vida interna que pudiéramos sentir en pantalla. Y hay un elemento constante que tiene que ver con la memoria, tanto con los recuerdos de infancia como los de distintas Navidades. Trabajando con el director de fotografía Elliot Davis, Jessie entretejió flashbacks en la historia para que viéramos qué ocurre en el presente y el peso que el pasado ejerce en cada personaje. Está hecho de una manera preciosa y es un elemento distintivo de la película.”
 
London dice que le atraen proyectos como 'Navidades ¿bien o en familia?' y 'La joya de la familia' por que “me encantan las historias sobre familias – las alegrías de estar en una familia, especialmente cuando todos luchamos para que nuestras familias encajen con como creemos que deben ser las familias. El momento más maravilloso del año… cuando la presión para tener una familia perfecta es más grande que nunca. Cuando las cosas salen mal, e inevitablemente salen mal bajo tanta presión, eso da pie a mucho humor. Pero también aporta mucha emoción genuina si la gente es capaz de superar los problemas del pasados y encontrar una manera de conectar.”
 
Gran parte de la película va sobre el “tiempo”, dice el guionista Steven Rogers. “La gente pasa mucho tiempo pensando en el pasado o disgustándose por el pasado, ya sea por algo que hizo otra persona o algo que hicieron ellos mismos, o preocupándose por el futuro y se pierden el presente. Es muy generacional. Cuando eres más joven, te esfuerzas tanto en intentar que se te reconozca. Cuando te haces mayor, te das cuenta de que lo importante es estar en el momento.”
 
Por ejemplo: a Roger le encanta el amor no correspondido que el personaje del viejo viudo Bucky siente por la joven camarera Ruby, también por cuestiones de tiempo y memoria. Bucky echa de menos a su mujer y Ruby le recuerda a ella en muchos sentidos, pero también quiere a Ruby por ella misma.
 
A Arkin le encantó el guión porque le pareció “tan literario, los personajes eran tan ricos.” De Nelson dice que ha hecho una amiga para siempre y que todos pensaban en ella como la madre de este proyecto familiar.
 
Arkin describe a Bucky como un antiguo profesor que amaba su trabajo, sus estudiantes y la enseñanza. Está loco por Ruby y disfruta siendo su mentor. Según Arkin, a Bucky “le gusta considerarse un páter familias. Creo que, de una manera sutil, Ruby le recuerda a su mujer, que ya no está. Es una hermosa molestia hasta que se entera de que le va a dejar y eso le trastoca.”
 
Amanda Seyfried dice que su personaje ha tenido una vida dura. Se hace amiga de Bucky que va dos veces al día al restaurante donde trabaja como camarera. “Realmente conectan, son dos almas que están un poco perdidas,” dice, añadiendo que ella y Arkin se convirtieron en buenos amigos en la vida real. Estos dos personajes son personas, como dice ella, “intentando encontrar una parte de ellas mimas que sienten que les falta.”
 
Bucky es el padre del personaje de Diane Keaton, Charlotte Cooper, y de su hermana Emma (interpretada por Marisa Tomei).
 
London dice que Keaton se unió al proyecto “desde el principio, como actriz y como productora ejecutiva. Diane es el eje de la familia Cooper y el eje de nuestro reparto,” comenta. “Cuando tienes una actriz del calibre de Diane en la película es mucho más fácil conseguir un gran reparto. John Goodman fue la siguiente pieza clave. Trae una naturalidad y humor al papel de Sam que complementa a Diane. También tiene una cualidad paternal maravillosa. ¿Quién no querría que John Goodman fuera su padre? Y con Alan Arkin, Marisa Tomei, Olivia Wilde y Ed Helms tenemos unos actores que son expertos en comedia pero también creando personas reales en pantalla. Los personajes de Amanda Seyfried y Anthony Mackie son los extraños que se ven inmersos en las aventuras del clan de los Cooper durante la Noche Buena. Ambos aportaron mucha emoción a sus interpretaciones. Y Jake Lacy casi roba la película como el falso novio que el personaje de Olivia Wilde trae a rastras para que conozca a la familia.”
  ¿Qué fue lo que atrajo a Keaton al proyecto?
 
“Me pareció una historia encantadora,” dice. “Soy una persona muy familiar y me encanta como la imperfección de esta familia refleja como son las familias de hoy. Incluida la mía. Además el trabajar con Jessie Nelson otra vez es un plus.” (Nelson ya había producido una película protagonizada por Keaton).
 
Desde luego que para Keaton fue el atractivo de cómo las fiestas sacan la alegría y el caos de la mayoría de las familias: “Es un tiempo de recogimiento,” añade Keaton. “Creciendo, mis padres nos llevaban de viaje en la carretera. Nos encantaba juntarnos en la cocina y mi madre cantaba canciones y hacíamos los coros. No éramos nada sofisticados y honestamente tampoco lo son los Cooper.”
 
Y tener a John Goodman interpretando a su marido de hace 40 años fue otra alegría. “Había visto A propósito de Llewyn Davis y ¡Me flipó! Es engañosamente brillante. Es un actor consumado. Lo da todo, un actor tan versátil y maravilloso. ¡Fue un privilegio trabajar con él!”
 
En cuanto a Goodman, él dice de Keaton: “Diane es maravillosa, graciosa, generosa – una gran actriz. Lo pasamos maravillosamente.”
 
Del resto del reparto comenta: “Todo el mundo es maravilloso, toda la familia. Ed, que hace de mi hijo, es genial, gracioso y generoso. Olivia Wilde que hace de mi hija, también es graciosa, absolutamente genial. Alex Borstein interpreta a mi nuera… es tronchante… me mata. Es un gran reparto.”
 
Sobre su personaje, Ed Helms dice que este padre de tres niños está sin trabajo y pasando una mala racha. Está intentando adaptarse a estar divorciado de su mujer Angie. “Hank es muy apasionado cuando se trata de hacer lo correcto, quiere ser fuerte y estar ahí para su familia y sus hijos,” explica Helms. “Se convirtió en padre de adolescente. Tuvieron a su primer hijo cuando estaban en el instituto.”
 
Helms describe a Hank como alguien que es un poco desastre, que intenta enderezar su camino y añade: “quise ser parte de esta película porque el guión era desternillante y también un poco dramático.”
 
A Olivia Wilde, que interpreta a la hermana de Hank, Eleanor, también le encantó el guión. “Me llamó mucho la atención lo emocional que me hizo sentir el guión. Me reí, claro, pero al final acabé al borde de las lágrimas,” dice. “Eleanor es la típica hija caprichosa, desordenada y emocional que no se ha casado y que no ha alcanzado el éxito. Eleanor tiene una especie de bloqueo. La dejó su prometido y se siente poco valorada.”
 
Wild añade: “Y la idea de hacer de hija de John y Diane era demasiado irresistible. Además, conocí a Jessie y tuvimos una conversación tan maravillosa, (al final) realmente fue Jessie quien hizo que quisiera hacer la película.”
 
“Me gusta Joe porque tiene ese pasado accidentado, algo que está intentando superar, haciendo lo que puede para ser el hombre íntegro que quiere ser y que no siempre ha sido,” dice Lacy. “Joe y Eleanor conectan, y parte de eso es discutiendo. Son tal para cual aunque tienen visiones distintas de las cosas. Hay mucha alegría en los juegos de palabras, ¡es una gran oportunidad para sonar como un idiota amanerado total!”
 
Hay una relación que cuenta con un toma y daca menos lúdico, la de las hermanas Emma y Charlotte. Marisa Tomei, que interpreta a Emma, dice que ve a su personaje como alguien que trae mucha carga emocional a la mesa de Navidad: “Está picada, amargada, excluida, mohína, peleona, se siente sola y lo tiene especialmente presente en esta época del año,” dice Tomei. “Y está celosa de la situación familiar de su hermana. Se ha propuesto no dejar pasar ni una.”
 
Mientras Emma y Charlotte discuten acerca de casi todo, la visión de Emma sobre su relación queda clara en una frase: Es como si fuéramos alérgicas la una a la otra…
 
“Sabes que cada familia tiene su Fredo de El padrino,” comenta Nelson. “Piensas ‘¿Qué va a hacer mi hermana esta vez?’ Marisa representó eso y lo hizo brillantemente.”
 
También sobre la historia de Marisa, Nelson dice: “Creo que durante las fiestas a veces te encuentras a estos extraños, que con un gesto o una palabra, cambian tu vida de algún modo.” Un encuentro de este tipo surge cuando Emma intenta robar un broche para regalárselo a Charlotte por Navidad, y le pilla y arresta el oficial Williams.
 
“Soy como el ángel de las Navidades del presente,” dice Mackie del oficial Williams. “Entro en la vida de una persona particular de esta familia y le alegro con un poco de información y dejo que siga su camino.”
 
Nelson comenta que es recíproco, Emma y el oficial Williams se influyen profundamente. “Este encuentro la cambia, y le cambia a él también.”
 
Alex Borstein interpreta a Angie, la ex mujer de Hank. Sus personajes se casaron muy jóvenes, aún estando en el instituto, y casi no se conocían cuando se quedó embarazada. Ahora, “es casi como si fueran hermanos. Han crecido juntos,” dice Borstein de su relación. “Han tenido experiencias y se han convertido en adultos al mismo tiempo. Estas dos personas están tan unidas, creo que es muy dulce cómo lo retrata la película. Con cualquier ruptura nunca os dejáis realmente si tenéis hijos, pero especialmente en el caso de Hank y Angie.”
 
Por último, está la tía Fishy, la tía de Sam que va completamente a su rollo y nunca deja de añadir una chispa de risas, e incluso algún que otro paso de baile, a la reunión festiva. “Está llena de alegría,” comenta Squibb. “Le encanta la música. Si oye música empieza a bailar.”
 
Hay un miembro adicional al reparto: Steve Martin, el narrador de la película.
 
Martin dice que se sumó al proyecto por la directora, Jessie Nelson, y por la historia del narrador (que no se revelará aquí). Lo que sí podemos contar es lo que Martin espera que el público se lleve de la película: “Creo que el público puede llevarse un sentimiento de tolerancia por los miembros de su familia y darse cuenta de que los recién llegados a la familia también crean una vida más rica para cada individuo de esa familia.”
 
A la hora de desarrollar el guión, lo más importante para Nelson era que, a pesar de que hay mucha tensión en las relaciones familiares, pudieras comprender a todos los miembros de la familia: “Nadie está equivocado”, dice Nelson. “Eleanor tiene razón, su madre se preocupa demasiado por ella. Y Charlotte tiene razón, su hija está pasando por algo que preocuparía a cualquier madre. Sam tiene razón, su matrimonio se ha vuelto rutinario y necesitan darle vida y enfocar más el uno en el otro. Y Charlotte tiene razón, los hijos lo están pasando mal y puede que realmente necesiten ayuda ahora.” Es una verdadera exploración de familias tolerando las diferencias de todos.
 
Keaton está de acuerdo. “Tolerancia. Muchas risas y alegría…y” añade “que no puedes regalar a tu familia.”
 
Decir que preparar la cena de Noche Buena en casa de los Cooper fue una tarea hercúlea es quedarse corto.
 
Simplemente pregunta a los cineastas y Melissa McSorley, la estilista de comida de la película, que ya demostró ser una experta con la deliciosa cocina del éxito Chef, su trabajo resultó tan seductor que la directora Jessie Nelson sabía que tenía que contar con ella.
 
“Trabajamos muy duro con Melissa para que en la película diera la sensación de que esta comida no era como algo que pudieras pedir en un restaurante, sino algo que alguien ha hecho con mucho esfuerzo para la cena de Navidad, comida preciosa y recetas que han sido pasadas a través de las generaciones de la familia, y que se sirven en bandejas que han estado ahí desde hace años y años,” explica Nelson. “Pobre Melissa. Teníamos que hacer toma tras toma. Ella tenía que sacar otra cena de Navidad y otra bandeja llena de comida. Cuando echaba un vistazo me daba cuenta ‘¡Oh, Dios mío! ¡Se han comido todo el relleno!’ Para la toma 12 de la cena de Navidad, miraba a los actores y pensaba ‘¿Dónde está la energía en esta escena?’ ¡Estaban empachados! A la gente le encantó especialmente el relleno.”
 
McSorley, añade Nelson, fue capaz de “capturar la belleza de la fiesta en el hogar. Hizo un trabajo extraordinario con eso, especialmente la preciosa mesa navideña (de Charlotte Cooper).”
 
Williams describe el festín como “una de las escenas más grandes de nuestra película. Pasamos cuatro días rodando esa escena y en ese momento me di cuenta del trabajo tan fantástico que había hecho Melissa, los actores seguían comiendo la cena navideña cuando no estábamos rodando. Les decíamos, ‘¡NO! ¡Esperad hasta que estemos rodando para comerlo!’ Amanda (Seyfried) respondía ‘es que está delicioso… ¡Voy a comer todo el rato!’ Así que todo el mundo estuvo comiendo cena de Navidad durante cuatro días, rodásemos o no. Es un trabajo hercúleo mantener la comida durante 12 horas al día para que siga caliente, rica, apetitosa, que haga que el público salive cuando la vean. Hubo que cocinar constantemente. Y Melissa lo cocinó todo en esta oficina pequeña y modesta sin aparatos de cocina de verdad. Lo consiguió y no la vimos estresada, disgustada o enfadada en ningún momento. Simplemente estaba feliz.”
 
Según McSorley, Nelson dijo que la comida tenía que ser “al estilo de Martha Stewart” con un aspecto hogareño y reconocible para el público. Como ese plato especial de verduras de Navidades, pero que no es como el que haría tu abuela.” Los platos iban desde el relleno, hasta el pavo y el jamón, pasando por el puré de patatas, zanahorias, coles de Bruselas, judías verdes, una suculenta cesta de pan y salsa de manzana. “Era para que el espectador se diera cuenta de que la relación del personaje de Diane con la comida era un rasgo de su personalidad y que el hacer esta maravillosa comida era su manera de cuidar y unir a su familia.”
 
Preparando la comida, dice que tuvo que tener en cuenta las alergias, los gustos y manías, y lo que podía comer el perro que interpreta a Rags. “Todo lo que se puso sobre la mesa se comió,” comenta, “algunas cosas más que otras.”
 
McSorley dice que tuvo “un cocinero o dos con ella todo el día en la cocina, que estaba justo al lado del escenario para que todo se mantuviera fresco.”
 
En cuanto a los que más disfrutaron de su cocina, dice “se trata más de quién comió el que más de qué. Timothy, que interpreta a Charlie, se comió casi todo el jamón. June Squibb parece que se decantó por la salsa de arándanos y sorprendentemente, Amana Serfried tiene un gran apetito para esa figura tan esbelta que tiene, ¡probablemente comió más relleno que nadie!” Los Chefs sí lo cuentan todo.
 
Un gran favorito fue el puré de patatas. Y, ¿el actor al que más le gustó ese plato? Bolt. Su entrenador dice que no tuvo ningún problema en zamparse el puré de patatas… en múltiples tomas.
 
“Tuvimos que tener cuidado,” recuerda McSorley de la entrada de Bolt al set. “Rags estuvo mucho por ahí cuando la cena estaba sobre la mesa, así que teníamos que tener mucho cuidado de no dejar platos muy cerca del borde de la mesa. Desafortunadamente, se llevó más porciones de lo que creo que querían que tomase. El perro llegaba a la mesa antes de que nadie pudiera pararle. Consiguió comer algo de pavo y el puré de patatas.” En cuanto a los dulces, las galletas de Navidad se hicieron con galletas de perro para que Rags pudiera comerlas sin problema.
 
Para Charlotte, el personaje que siente más apego y concede más importancia a la comida como el centro de la reunión familiar, la comida era más que un reflejo de su personalidad. Digamos que parte de la comida salió volando en la escena de la cena.
 
“¿Una pelea de comida? ¡Yo quiero! No me importó que se me pegara el puré de patatas en el pelo,” dice Keaton. “¡Fue muy divertido! Y ver a Rags comer la ensalada fue graciosísimo.” ”¡La comedia es lo más!”
 
“Me gustaría decir que los Cooper son los Von Trapp de esta Navidad. Son los Von Coopers,” dice la directora Jessie Nelson.
 
Puede que no desciendan de la Familia Cantante Von Trapp (Sonrisas y lágrimas), pero qué sorpresa se llevó Nelson cuando se dio cuenta del rango de talento musical de esta familia. Sobrepasó cualquier expectativa.
 
Alan Arkin, que ha sido músico folk, podía tocar cualquier cosa en el ukelele. Ed Helms le dio tres opciones a Nelson: piano, guitarra o banjo. John Goodman es un gran músico y cantante, y desde hace mucho tiempo domina la harmónica. Diane Keaton ya ha cantado en films anteriores y agradeció la oportunidad de cantar sus canciones navideñas favoritas. June Squibb también tiene un gran talento para cantar, y se ponía a armonizar con Keaton. Y Alex Borstein aprovechó la oportunidad para compartir sus nuevas habilidades con el chelo junto al resto. Nelson vio como se materializaban todos estos talentos cuando le pidió a su amigo de toda la vida T Bone Burnett, músico y productor veterano (A propósito de Llewyn Davis), ganador del Grammy, que le ayudara con la música de la película.
 
“(T Bone y yo) llevábamos tiempo queriendo hacer algo con música navideña. A él le encanta la música de Navidad tanto como a mí. Las melodías son tan bonitas,” añade Nelson. Cuando le dijo que habría una escena en la que la familia iba a cantar villancicos y quienes eran los actores, “de hecho conocía el trabajo de Alan Arkin de cuando era un cantante folk en Nueva York, muy al principio de su carrera. Y sabía que Diane tenía una voz preciosa (su debut como cantante fue en Días de Radio de 1987 dirigida por Woody Allen) y había trabajado con Ed Helms.”
 
Trabajando como archivista musical, Burnett fue a casa de Nelson y juntos trabajaron con los actores, guiándoles con las canciones de Navidad que les gustaban para la película. Según avanzaba la noche, los actores se fueron soltando. Arkin incluso sugirió una canción que conocía bien, “Born in Bethlehem”, que se convirtió en un tema central en la escena de villancicos. Fue un día maravilloso para que los miembros del reparto se sintieran cómodos juntos y convertirse en una familia.
 
Después de la producción, Burnett envió a Nelson casi 100 canciones mientras editaba la película para probarlas con distintas escenas de la película.
 
Incluso mejor, “su amigo Charles Duncan escribió una nueva canción de Navidad para la película llamada ‘The Light of Christmas Day’ que es la canción que se oye durante los créditos del final. No es el típico villancico alegre y jovial, es una canción tierna y apropiada para esta historia. Es mi nueva canción de Navidad favorita, es una manera preciosa de acabar la película.” Alison Krauss y Robert Plant grabaron la canción para la película. La última vez que los artistas colaboraron con Burnett, que fue quien les propuso que grabaran el tema, fue en el disco ganador del Grammy en 2007 “Raising Sand”, producido por Burnett.
 
“La música es una parte muy importante de las fiestas y es fundamental para las emociones y el ambiente de esta historia,” comenta el productor Michael London. “Jessie quería hacer una película llena de alegría navideña, pero quería captar el espíritu de las fiestas de una manera que la gente normalmente no ve, a veces es una celebración y a veces es agridulce o melancólica. La música que eligió hace eso y es una base emocional maravillosa para toda la película. Trabajó con T Bone Burnett ,que ayudó a dar vida a la música.”
 
Nelson es conocida por su gusto excepcional a la hora de elegir la música para sus películas. Yo soy Sam, su film de 2001, que escribió, dirigió y produjo, recibió una nominación al Grammy como mejor álbum de banda sonora para película, televisión u otro medio visual. Esta banda sonora era una compilación de versiones de los Beatles, por parte de un elenco impresionante de artistas, entre los que se incluyen Eddie Vedder, Sheryl Cow, The Black Crows y Ben Harper, entre muchos otros.
 
Para Arkin, la posibilidad de tocar el ukelele en la película fue emocionante. “Sabes, durante 50 años fue un guitarrista mediocre. Nunca conseguí tocar lo que escuchaba y acabé pensando ‘¿por qué he de seguir frustrándome?’ Así que dejé la guitarra y cogí el ukelele y soy increíblemente feliz,” comenta Arkin. “Debería añadir que tocar el ukelele mediocremente es igual que tocarlo bien.”
 
Lo que le gustó a Arkin de que la familia cantara en la película “es que es como en la vida,” dice. “Es la armonía… y toma y daca. Nos lo pasamos tan bien con esas canciones. Hicimos una especie de versión jazz de ‘We Three Kings’, y otra cosa con cierto ritmo latino. Puede que sea 10 segundos en la película pero fue divertido. Creo que (la música) merece la pena.”
 
Helms cuenta: “Yo quería ser parte de esta película porque el guión es graciosísimo y también un poco dramático. Y después… este reparto… un montón de mis héroes. Me toca sentarme a la mesa con Diane Keaton y John Goodman y June Squibb y Alan Arkin. ¡Aún mejor! Toqué junto a Alan Arkin. Es una locura, ¡una locura total! Ni siquiera puedo creer que lo esté diciendo ahora.”
 
“Me encantan todos los villancicos,” continua Helms. “Pero ‘Silent Night’ es una de las piezas musicales más hermosas jamás escritas, punto. Cantamos un par de villancicos convencionales y un par de villancicos más raros, que es guay porque hace que sea específico de esta familia. Hay canciones que surgieron de ensayos. Alan estaba como ‘¡Hey! ¿Conocéis esta canción ‘Children of Israel’? No.’ Entonces empezaba a tocarla y en cuestión de unos minutos nos uníamos todos. Es una especie de canción antigua, muy divertida, que va a ser genial en la película.”
 
Tocar con Helms, Arkin, Keaton, Squibb y Borstein fue divertidísimo para Goodman: “Ed y Alan son músicos con mucho talento. Así que fue un puntazo.”
 
Armonizar fue muy divertido para el reparto, sin embargo fue todo un reto para la editora Nancy Richardson. “Siempre que tengas voces reales cantando en vivo en cámara va a ser muy difícil. Cuando es en vivo, cada toma y cada ángulo tiene voces diferentes y mantiene relaciones diferentes con la cámara. En algunas oyes un instrumento más alto, o la voz de una persona estará más alta en unas tomas que en otras, así que no puedes juntar las tomas tan fácilmente. Es mucho más complicado.”
 
En cuanto a la selección de canciones, “T Bone Burnett mandó un montón y estoy sorprendida, por ejemplo, con todas las versiones que hay de ‘Little Drummer Boy’, algunas son deprimentes, otras triunfalistas, algunas son graciosas y algunas siniestras. Es fascinante el que puedas encontrar una canción de Navidad con 10 contextos emocionales diferentes. Así que estamos usando muchas de las versiones de villancicos que juegan con los distintos niveles emocionales a lo largo de la película.”
 
Transmitir emoción “ha sido una parte muy complicada a la hora de hacer esta película porque tiene que navegar distintos matices,” añade. “La música ha sido muy importante en ese sentido. ¿Cómo empezamos con la música en esta escena donde nos reímos y literalmente tres segundos después todo es muy triste?”
 
Por ejemplo, el conmovedor dueto de Charlotte y Sam cantando “Have Yourself a Merry Little Christmas.” Irónicamente, tanto para Keaton como para Goodman la oportunidad de hacer ese dueto supuso que pudieran cantar su villancico favorito. Sí, dice Keaton, ese es mi favorito: “Me encanta ‘Have Yourself a Merry Little Christmas’… Y después, ¡poder cantar en la película!”
 
Para Nelson, la canción capturaba la evolución de los personajes: “Cuando Sam y Charlotte cantan esa canción…no pueden acabarla. Se te parte el corazón.” Precioso. Conmovedor. Tierno. Auténtico.
 
Al igual que los otros miembros del reparto estelar, Nelson dice que Bolt (el actor animal) “estuvo a la altura de las circunstancias” con su interpretación como el perro de la familia, Rags.
 
“Es el Marlon Brando de los perros,” dice. “Un actor extraordinario, realmente se integró con el reparto. Todos estaban enamorados de Rags. Y la relación que tiene con la tía Fishy era bastante especial. A ambos les encanta comer.”
 
“Me gustan los perros,” comenta Nelson. “Lo que tienen los perros es que aceptan nuestra humanidad. Cada personaje está escondiendo algo de los demás. Pero Rags puede ver sus defectos y flaquezas y no les juzga.”
 
Nelson dice que buscó entre muchos perros para el papel de Rags, “pero supe el minuto que vi el video de Bolt que era él. Tiene un ritmo excepcional y su entrenador es extraordinario.”
 
Bolt se puede cubrir la cabeza, puede levantar la cabeza, y tiene un apetito increíble. “Durante la escena de los villancicos se comió un plato prácticamente de un bocado,” recuerda.
 
Es medio san Bernardo (por parte de madre) y medio pastor australiano (por parte de padre). Los pastores australianos son muy hacendosos, así que trabajar en esta película fue genial para él.
 
Según su entrenador, Gary Mui, Bolt nació en un parque animal en Osaka, Japón. Aunque los oficiales del parque decían que su madre era demasiado mayor para procrear y, por lo tanto, para separarla de los machos cuando tenía celo, pronto se dieron cuenta de lo determinados que pueden ser los pastores australianos. Una mañana se encontraron al padre de Bolt con la madre, que unos meses más tuvo una camada de nueve cachorros. “Bolt fue el primero y el más grande,” dice Mui. Le ficharon para Navidades, ¿bien o en familia? por su aspecto y su expresividad.
 
Bolt fue nombrado así en honor del atleta olímpico Usain Bolt. Nació el verano de 2008 durante los Juegos Olímpicos. “De cachorro siempre estaba corriendo de un lado a otro,” dice Mui. Bolt y su entrenador actualmente trabajan para Birds & Animals Unlimited.
 
Estaba trabajando en otra película cuando Nelson, que le había visto en el anuncio de Volkswagen de la Superbowl de 2012 y en el “making of” del anuncio, pidió que viniera a hacer una prueba. Además de numerosos anuncios, Bolt ha aparecido en las películas Beverly Hills Chihuahua 3, Super Buddies, Star Treck: En la oscuridad, el piloto para TNT de Scent of the Missing, Noche en el museo: el secreto del faraón (como tiger) y The Gift (la película que estaba protagonizando cuando se interesó por él Nelson). También protagonizará The Choice (2016).
 
Como es mitad pastor australiano, necesita mantenerse activo mental y físicamente, sino se vuelve destructivo. “Si pasa demasiado tiempo sin un papel, puede destrozar mi jardín,” comenta Mui. “Recuerdo una mañana en particular cuando apenas tenía tres años, le dejé salir por la mañana y en lo que tardé en darme una ducha, había excavado un agujero de un metro cuadrado. Lo que le ayudó en su trabajo en Navidades, ¿bien o en familia? fue que venía directamente de otro rodaje, porque hace que Bolt siga en la ‘honda’ del trabajo. A veces cuando empezamos una papel nuevo después de un descanso, Bolt está muy nervioso durante la primera semana o así.”
 
Todo el reparto y el equipo fueron muy considerados y cariñosos con Bolt. “Diane Keaton y Amanda Seyfried se esforzaron y le mimaron siempre que estaban en el set juntos. Pero si hay una favorita, tendría que ser June Squibb. Tenían mucha química juntos. Definitivamente ayudó que en cada escena que salen juntos June tiene que darle de comer o darle mimos,” dice Mui. “Una cosa con la que nos esforzamos mucho con Bolt es que la dirección de su mirada no distraiga. Durante la escena en la que la familia canta villancicos (nuestro primer día en el set) Bolt no dejaba de mirar a la derecha, aunque yo estuviera a su izquierda. Cuando me metí en el set para ver qué pasaba, parece que estaba mirando fijamente a Alan Arkin.”
 
“Supongo que tiene una conexión intensa con Alan Arkin,” recuerda que dijo Mui. “A lo cual John Goodman respondió ‘Totalmente comprensible. Todos a todos nos pasa.’”
 
En cuanto a la directora, Mui dice que Nelson trató a Bolt como a cualquier otro miembro del reparto. Realmente se le dedicó tiempo y planeó sus escenas. Fue muy colaborativa conmigo y discutimos distintas posibilidades para conseguir lo que quería en pantalla. El resultado fue una actuación muy matizada, gracias al tiempo y la atención que Jessie dedicó a esas escenas. Al mismo tiempo, siempre se preocupó de su bienestar dentro y fuera del set.”
 
Uno de los rasgos de personalidad particulares de Bolt es que le encanta robar comida, comenta Mui. “Montamos la escena de manera que él piensa que se está saliendo con la suya. En un momento dado, todos los perros con experiencia en cine (especialmente uno entrenado por mí) aprenden que realmente no hay consecuencias serias cuando te portas mal en el set. Puede que diga ‘no’ con una voz firme pero, aparte de eso, no ocurre nada. Aprenden la diferencia entre el ‘no’ que significa que han hecho algo mal en el set y el ‘no’ que significa que han hecho algo inaceptable socialmente. Es un perro muy bueno y el 99,9% del tiempo quiere hacer lo que le pido, pero a veces le gusta sentir que él es quien manda, especialmente si hay comida por medio. En esa situación, usamos esa tendencia para que sirva a nuestros fines. Él hubiera hecho el doble de tomas (con la comida).”
 
La escena favorita con Bolt de su entrenador “es cuando corretea por el salón buscando comida. Era la tarde en el día y era una escena que Jessie había pensado rodar con una steadycam. No la habíamos ensayado y no había ningún sitio donde me pudiera poner para guiarle porque la cámara le seguía continuamente sin cortar. Así que tenía que entrar en el salón desde el pasillo, rodear la mesita de centro, echar un vistazo a un bol con snacks, coger un juguete con la boca, salir del salón y subirse de un salto a su cama con el juguete. Lo dividimos por partes y le mostramos lo que queríamos que hiciera, practicamos unos diez minutos y lo rodamos. Lo hizo varias veces. Ese día en particular me quedé muy impresionado.”
 
Nelson: “Rodamos en Pittsburgh (en febrero) y es tan bonito cuando cae la nieve… con sus ríos…los puentes… es una ciudad preciosa. Queríamos aprovecharnos de ello, de ahí todos esos momentos de exteriores naturales en el guión en los que van en trineo o cogen un tren. Con lo que no conté fue con la tormenta de nieve, ¡a menos 23 grados! Un día el camión de la cámara se congeló, y otro día llegó tres horas tarde porque se había congelado su combustible.”
 
“Nuestra pieza de atrezo clave era una bola de nieve de juguete. Se congeló y explotó. Así que fue genial salir a la calle pero suponía una serie de retos.”
 
Charlotte Cooper colecciona bolas de nieve de juguete. Son más que una pasión, es una afición que mantiene desde hace años. De alguna manera, representan como ve el mundo. “Me gustaba la metáfora de la bola de nieve, la idea de que se trataba de recuerdos, de hacer memoria a través de la nieve,” dice Nelson.
 
A Nelson también le gustó que la nieve limitaba a los personajes a quedarse en ambientes reducidos y como eso intensificaba sus relaciones.
 
“La incesante nieve hace que Joe se tenga que quedar en el aeropuerto recluido. Cuando estás en un ambiente así, atrapado por la nieve, de alguna manera te puedes encontrar compartiendo muchas intimidades con extraños.”
 
Es una dinámica que te limita en todas partes, no sólo en casa de los Cooper y en el aeropuerto. “Está Emma y el oficial Williams en el coche de policía moviéndose súper lento. El tráfico está colapsado por la nieve. Bucky y Ruby en el restaurante, puedes ver como cae sin parar desde las ventanas. Sientes su presencia continuamente.”
 
Irónicamente, la nieve puede recluir a la gente en ambientes limitados donde “a veces te sientes más cerca de un extraño y le cuentas más que a alguien con quien has crecido toda la vida,” dice Nelson. “Es por lo fácil que resulta cuando no les vas a volver a ver o porque no vas a tener que enfrentarte a los juicios de un familiar.”    El director de fotografía Elliot Davis clasifica la película como “una película del tiempo.” Rodar con elementos climatológicos dramáticos “fue una gran oportunidad para transmitir una especie de vulnerabilidad,” dice. “Pero también te sentías como una especie de bola de nieve, viendo cómo caía la nieve en este mundo contenido, ese sentimiento de estar atrapado en una historia que ha sido comprimida, la presión de sus vidas juntándose en un día.”
 
“Así que cuando ves cómo el tiempo determina los acontecimientos sientes esa tensión,” explica Davis. “Cogí de todas las películas que tenían relacionadas con el tiempo que ya había rodado, incluyendo Las fuerzas de la naturaleza y Un romance muy peligroso. En la composición de las escenas siempre tenía que ser consciente del tiempo. En las escenas cálidas se trataba siempre de transmitir la sensación de estar en un lugar seguro.”
 
Nelson le dio varias fotos de la paleta de colores para las escenas de interior y de exteriores. “Para los exteriores era una paleta poco saturada, de grises y blancos sobre todo, y en el paisaje destacaba el abrigo rojo de Santa Claus,” dice. “Se trataba de establecer una estética que partiera de una premisa invernal, este ambiente pálido de sentirte fuera en el frío… pero también de estar bajo presión, en este día tan especial del año, cuando se siente la presión. Les obliga a lidiar consigo mismos en todas partes, ya sea en el coche, en el aeropuerto, el centro comercial, la cafetería o en casa.”
 
Davis dice que rodó la escena de los villancicos al estilo de un documental con dos cámaras siguiendo a los actores en todo momento. Se rodó de manera amplia para que todos entraran en el encuadre.
 
Y después estaba la escena de la cena…
 
“Teníamos una orden del estudio de hacer que la comida realmente pareciera apetitosa, porque son las Navidades y la comida nos reúne a todos,” añade. “Hubo MUCHA comida.”
 
Davis, que ya había colaborado con Nelson en Yo soy Sam, tenía una buena relación de trabajo con la directora. “Confió mucho en la cámara y trabajaba muy estrechamente conmigo. Sabía exactamente lo que quería,” dice.
 
Comenta que la producción se rodó rápidamente, en 45 días. En el pasado, habríamos tardado 60 días. Se rodó digitalmente en un formato anamórfico de 2.35.
 
Para los interiores, Nelson dice que su inspiración fue el pintor renacentista holandés Pieter Brueghel el Viejo. (Piensa en “Cazadores en la nieve”, un paisaje congelado y duro pero que resulta cálido por los habitantes humanos.)
 
“Me encantó la paleta con la que trabajamos en los interiores, con ese azul de inverno y azul gris en las paredes, algo que repetimos y usamos en el vestuario de Diane,” dice Nelson. “Era importante que el vestuario mostrase que Diane y Marisa, a pesar de estar distanciadas como hermanas, inconscientemente visten igual. Son variaciones de un mismo tema. Cuando son pequeñas visten igual. Y luego de adultas lo hacen sin darse cuenta.”
 
Tanto la diseñadora de producción, Beth Rubino, como la diseñadora de vestuario, Hope Hanafin, estuvieron de acuerdo en mantener ese color tanto en los interiores como en el vestuario.
 
Rubino, que ha recibido nominaciones al Premio de la Academia por sus diseños de los sets de American Gangster (2008) y Las normas de la casa de la sidra (2000) y es conocida por crear las inolvidables casas de ensueño en las películas de la directora Nancy Meyer, entre ellas la casa del personaje de Keaton en Cuando menos te lo esperas (2003), se aproximó de una manera más modesta al hogar de los Cooper.
 
La casa de los Cooper es un punto de encuentro atemporal para todos, un lugar donde se hacen y se recuperan los recuerdos. Cuando Rubino y Nelson se reunieron para hablar de la casa de los Cooper, y se pusieron de acuerdo. “Actual. Acogedora. Nostálgica. Accesible para todos,” explica Rubino. “Lo que quieres lograr es que la película no parezca diseñada en exceso. No quieres que parezca forzada. Esa es la meta dorada para mí. Se basa en que resulte familiar y no delicada. Son momentos de recuerdos navideños acumulados.” Localizando, Rubino cuenta, “encontramos una casa con un exterior fabuloso… pero, ¿cómo retratarla como un personaje? ¿Cómo podemos hacer que realmente sea parte del proceso creativo?” En su búsqueda se dieron cuenta de que tenía que haber mucho vidrio alrededor. Ligaba con las referencias de la bola de nieve del guión. Reforzaba la idea de que nuestros mundos se ven agitados y en reposo al mismo tiempo. Eso se convirtió en el tema central de nuestra narrativa… una estética general… la idea de que realmente estamos viendo todo lo que ocurre a través de un cristal. Todos nuestros sets están basados en la idea de mirar a través de un cristal, de la misma manera que miras el interior de una bola de nieve.”
 
En cuanto a la paleta de color, también “es uno de los rasgos de la historia,” añade Rubino. Tenemos muchos temas y todos existen dentro de esta bola de nieve cohesionada que es este mundo, así que el esfuerzo de aunar todo ha sido un éxito maravilloso. Fue un reto, porque estábamos intentando crear una visión de la Navidad y hacer que fuera extravagante pero sin pasarnos… sólo un poquito exagerado.”
 
La cocina era un set crítico, el corazón del hogar. Evidentemente, es ahí donde la comida se prepara y donde la casa de los Cooper se llena más de la esencia de las fiestas. “La comida es una parte tan importante de nuestra historia. Así que seleccionamos la textura de los platos y la mesa que queríamos, y la comida era el remate, la joya sobre la mesa,” describe Rubino. Desde la porcelana, hasta la decoración de las paredes y los muebles, lo que nos guiaba era una paleta de color y una ambiente que nos diera una sensación constante de simplicidad, quietud y sofisticación. Pero la intensidad de la conexión a través del color no acababa en la casa.
 
“Realmente lo sientes con Emma y Charlotte porque su rivalidad es muy fuerte, pero por debajo resiste una conexión más profunda,” añade Hanafin. “Es esa intensidad de identidad de hermanas.”
 
“Una de las cosas que hicimos fue evitar clichés como que la familia vistiera rojo y verde. Nos mantuvimos bastante alejados de la típica ropa de Navidad. De nuevo los colores de las pinturas de Brueghel, nada brillante, de neón, ni blanco y negro. Son colores ricos, profundos. Pero alrededor de ellos hay trazos rojos y verdes.”
 
Cuando Nelson mira atrás y piensa en el rodaje, hay un día en particular sobresale.
 
“Rodamos en un hospital, un hospital real. Ves a Bucky pasar por la zona de neonatos y resulta que siete bebes han nacido en Noche Buena. No dejaba de decirles a las enfermeras ‘realmente espero que nazcan muchos bebés el día que rodemos para que pueda haber un montón de bebés en sus cunitas.’ Así que una enfermera me dijo ‘Asegúrate de rodar esa escena después de la luna llena y tendrás por lo menos siete bebés. Es entonces cuando nace todo el mundo.’ Y así fue, antes del día del rodaje sólo había un bebé, y después de la luna llena había siete.”
 
“Lo interpreté como una buena señal.”

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