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SINOPSIS
Kelly y Mac vuelven a estar embarazados y piensan que al mudarse comenzarán a ser unos adultos decentes. Pero para marcharse deben antes vender su casa. El problema llega que justo cuando ponen en venta la vivienda se dan cuenta de que una fraternidad femenina se ha hecho con la casa de al lado por lo que ahora más que nunca será imposible vender y las chicas están aún más descontrolados que la fraternidad de chicos que anteriormente habitaba en el lugar...
INTÉRPRETES
SETH ROGEN, CHLOE GRACE MORETZ, ROSE BYRNE, SELENA GOMEZ, ZAC EFRON, KIERSEY CLEMONS, DAVE FRANCO, LISA KUDROW, CARLA GALLO, BILLY EICHNER, ELISE VARGAS
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INFORMACIÓN EXCLUSIVA
Estrenada en 2014, ‘Malditos Vecinos’ dio en el clavo haciendo disfrutar enormemente al público con la divertida batalla librada por una joven pareja contra los miembros de la fraternidad de la casa vecina. La espléndida taquilla y las buenas críticas empujaron a sus creadores, el director Nicholas Stoller y los productores Seth Rogen, Evan Goldberg y James Weaver, a considerar la posibilidad de realizar una segunda entrega.
Los cuatro estaban de acuerdo en una cosa: la película no sería una repetición empalagosa de la primera entrega. Estaban decididos a hacer que fuera incluso mejor. Seth Rogen, protagonista y productor, comenta: "Nunca hablamos de ir más lejos, ese es el error de muchas secuelas. Se trataba de evolucionar. No queríamos hacer una versión mayor de la primera, sino ver qué otra cosa podía pasar en la vida de nuestros protagonistas".
Para evitar los peligros y trampas habituales que acechan a las segundas partes, el equipo se puso a estudiar secuelas con temas similares y acabaron encontrando la inspiración en el lugar menos esperado. "Es como una versión grosera y para adultos de Toy Story, pero sigue siendo Toy Story", explica Nicholas Stoller. "Nuestros héroes deben crecer, madurar; es un proceso divertido y agridulce a la vez que implica a todos los personajes de la película".
Un par de años después de vencer a la fraternidad vecina, los exjuerguistas Mac y Kelly entran en una nueva fase de su vida. Un segundo hijo viene de camino y se preparan para abandonar el barrio universitario y mudarse a una urbanización a las afueras de la ciudad, el último bastión de la vida adulta.
Al ver que la pequeña Stella (ELISE VARGAS) empieza a entender el significado de la palabra "no", Mac y Kelly se dan cuenta de que, algún día, su preciosa hija se transformará en una adolescente rebelde y les mirará con el mismo desdén con el que ellos contemplaban antaño a los adultos. "La película habla del miedo que sienten los padres de no estar a la altura, o no saber criar a sus hijos, por lo que estos les odiarán cuando crezcan", dice el director. "En la primera entrega, Mac y Kelly querían seguir siendo adolescentes, pero ahora les toca controlar a una niña".
En cuanto al exvecino de los Radner, Teddy Sanders, ha pagado un alto precio por la primera aventura. Después de ser expulsado de la universidad por el comportamiento de los miembros de Delta Psi, encontró trabajo como vendedor, pero su vida carece de sentido y de dirección.
Sus amigos llevan vidas de adultos, han madurado emocional y profesionalmente, pero Teddy empieza a tener la impresión de que va a quedarse atrás. "Teddy se encuentra en un estado de fragilidad", dice Zac Efron. "Está en plena crisis de los veinte y pico. Sus amigos se han ido, tienen buenos trabajos, pero él está estancado, no progresa".
Mientras Teddy reflexiona en qué usar sus conocimientos (aparentemente no sirven de nada), Mac y Kelly se preparan para dar un gran paso. Un comprador está muy interesado en su casa y ellos han depositado una fianza para otra vivienda. Todo va sobre ruedas, pero se derrumba cuando alguien alquila la casa de al lado. "Mac y Kelly están a punto de convertirse en auténticos adultos responsables cuando, por mala suerte, una fraternidad de chicas se muda a la casa vecina", explica Rose Byrne. "De pronto, todo cambia. Si el comprador se echa atrás, perderán la fianza que han depositado para la nueva casa. Hay mucho en juego".
Además, las chicas obligan a Mac y a Kelly a enfrentarse al hecho de que su hija llegue a ser como ellas y a odiarles. "Es fácil aceptar que somos adultos, pero casi nadie acepta que, algún día, los hijos también crecerán, ya no nos querrán tanto y se convertirán en personas parecidas a las nuevas vecinas", dice Seth Rogen.
Mientras desarrollaban el proyecto, surgieron muchas posibilidades e ideas (¡Delta Psi regresa! Hay una fiesta mítica en un dormitorio llamado Dormopolis), pero el equipo técnico acabó teniendo la idea de una fraternidad de chicas muy juerguistas que alquila la casa de al lado. Fue entonces cuando descubrieron algo totalmente inesperado. "Alguien en la oficina estaba en una fraternidad de chicas y nos oyó hablar de las juergas", recuerda Seth Rogen. "Sin darle mayor importancia, nos dijo que no se les permite dar fiestas. Lo comprobamos, y efectivamente, las chicas no pueden dar fiestas en la casa de la fraternidad en el campus. Era perfecto".
Bastó con indagar un poco en Google para descubrir que las fraternidades de mujeres tienen prohibido beber alcohol en su edifico. Semejante caso de desigualdad aportó a los creadores el tema perfecto para abrir el horizonte de MALDITOS VECINOS 2. "Cuando investigamos el funcionamiento de las fraternidades femeninas, nos sorprendió mucho descubrir lo sexista que es el sistema", dice Evan Goldberg. "Seth y yo somos canadienses, dimos por sentado que también organizaban tremendas fiestas como los chicos. Al enterarnos de que no era así, comprendimos que la película sería mucho más interesante si incluíamos una corriente feminista en la historia".
Obviamente, cuando las chicas llegan a la Universidad de Braxton, están más que dispuestas a catar la cultura universitaria en todas sus facetas. Por fin, sus padres no las controlan, ya no están en el instituto. Pero cuando se dan cuenta de que no pueden divertirse como los chicos, deciden luchar por su ideal. Cualquier chica que se precie lucharía por su derecho a pasarlo bien.
De pronto, Teddy se encuentra atrapado entre una pareja desesperada por vender su casa y tres chicas desesperadas por salir de un sistema restrictivo para las mujeres. A medida que las tácticas de las féminas escalan a niveles insospechados, nuestro héroe se verá obligado a escoger entre el alfabeto griego y sus años locos... o pasarse al otro lado y ser la ruina de la nueva fraternidad.
Seth Rogen, James Weaver y Nicholas Stoller unieron sus fuerzas con los creadores de los personajes de la primera entrega, Andrew Jay Cohen y Brendan O'Brien para escribir el guión. Juntos imaginaron a Mac y a Kelly enfrentándose a un grupo de chicas decididas a derribar un sistema sexista.
En cierto modo, la nobleza de la causa de la fraternidad permite que vayan mucho más lejos y borra la frontera entre el bien y el mal. "Las chicas de Kappa Nu saben lo que quieren y por qué lo quieren", explica Seth Rogen. "Siempre se ha dicho que los mejores villanos son los que caen bien. Por eso las chicas se pasan mucho más y dan más miedo que los chicos de Delta Psi".
Como en cualquier guerra, los códigos éticos se ponen a prueba cuando se lucha por el progreso y el cambio. "El objetivo de las chicas es valiente y noble", dice Nicholas Stoller. "Incluso cuando se portan realmente mal con Kelly y Mac, es imposible no apoyarlas porque luchan contra el sistema establecido".
El equipo creativo consideraba de suma importancia que los personajes estuvieran construidos, fueran realistas y no se limitaran a ser chistes. Las mujeres de Kappa Nu luchan por un ideal. Esta película refleja cómo la mayoría de películas cómicas muestran a las mujeres y se esfuerza en borrar esas diferencias. En el universo de MALDITOS VECINOS 2, las mujeres están liberadas, son lo suficientemente libres como para reírse de sí mismas... como los hombres.
"Un chiste habitual en la película es que hay unos cuantos personajes un poco obtusos hablando de feminismo", explica Nicholas Stoller. "Me parece bastante feminista hacer el idiota. En la mayoría de comedias, las mujeres no pueden hacer el idiota como los hombres".
Basta con pasar por cualquier universidad durante "Rush Week" (semana previa al comienzo del curso cuando las fraternidades buscan y aceptan a nuevos miembros) para ver a legiones de universitarios noveles considerando las opciones disponibles. Shelby, recién llegada al campus de Braxton, no tarda en descubrir que la vida social desenfrenada que imaginaba en la fraternidad Phi Lambda, la más solicitada por las chicas, era solo un sueño.
Le basta con encender un porro en la reunión para toparse con la fría realidad: las fiestas solo están permitidas en las fraternidades masculinas. "Shelby llega a la universidad convencida de que por fin podrá hacer lo que quiera, lejos de papá y mamá", explica Seth Rogen, "y descubre que es un sistema muy controlador y lleno de reglas".
En el instituto nunca tuvo muchas amigas, pero conoce a Beth y a Nora en el campus, y las tres deciden enfrentarse al sistema fundando una fraternidad fuera del campus. Kappa Nu es muy importante para ellas; será una fraternidad sin reglas, libre de todos los condicionantes sexistas, un club nada exclusivo abierto a quien quiera apuntarse y donde las chicas puedan comportarse tal como son, sin trabas, sin necesidad de pedir permiso. Shelby y las chicas de Kappa Nu han decidido hacerse con el poder.
Los cineastas empezaron a buscar a una actriz capaz de dar vida a la apasionada e intrépida líder de Kappa Nu para trabajar con el trío ganador formado por Seth Rogen, Zac Efron y Rose Byrne. Escogieron a Chloë Grace Moretz por su inteligencia y por sus dotes interpretativas. "Chloë solo tiene 19 años, pero sus conocimientos están muy por encima de esa edad", dice Nicholas Stoller. "Su energía es parecida a la de Zac, y ha trabajado en dramas intensos y en películas de acción. Aporta fuerza al personaje. Aunque se trata de una comedia, siempre es muy intensa como actriz, además de desternillante".
Shelby fue una atleta fuera de lo común durante los años del instituto y usa la concentración requerida en cualquier deporte para defender su causa; no duda en hacer uso de todos los medios disponibles para proteger los principios de Kappa Nu. Chloë Grace Moretz se entusiasmó con la fuerza de la heroína y con la posibilidad de encarnar a un personaje femenino tan fuerte. "Shelby sabe defender lo que quiere y es increíblemente tenaz", dice. "Es fuerte, no le da miedo decir 'no' y no permite que nadie la pisotee ni le dé órdenes, hombre o mujer".
El papel le dio la oportunidad de poner a prueba sus dotes de improvisación. "Ha sido algo totalmente nuevo para mí", explica la actriz. "La mayoría de las películas que he hecho son dramas y su enfoque no tiene nada que ver con esta. En el plató nos alentaban a cambiar los diálogos, a ser espontáneos. Por primera vez he podido sobreactuar, en vez de controlar mi tendencia a hacerlo".
Shelby conoce a Beth y a Nora durante su visita a la fraternidad Phil Lambda. Las dos chicas se quedan tan sorprendidas como ella al enterarse de las descaradas reglas sexistas, que parecen hechas para dar más poder a las fraternidades masculinas. Beth, que acaba de romper con su novio de siempre, esperaba que la universidad fuera una oportunidad de descubrir más sobre el sexo.
La joven actriz Kiersey Clemons, que se dio a conocer en la película Dope, supo apreciar la bondad y el recorrido de Beth, su personaje: "Beth cae bien a la gente. Ahora busca su camino. Sabe lo que está bien y lo que está mal, pero quiere probar cosas nuevas".
Nora, el tercer miembro fundador de Kappa Nu, también vive sola por primera vez. Nunca ha bebido alcohol ni ha probado drogas. La actriz Beanie Feldstein tampoco tenía mucha experiencia personal que aportar al personaje. "Debía hacer auténticas locuras en la película, pero no sabía nada de porros; hasta el punto de que debieron enseñarme a usar un mechero", dice, riendo.
La intérprete acaba de terminar la universidad y no le fue difícil entender el lazo que une a las chicas. "Intentan saber adónde van y se apoyan mutuamente", dice. "Shelby y Beth fuman, y Nora las imita. Aterrizar de pronto en un lugar nuevo donde no se conoce a nadie puede ser aterrador, y entiendo que quieran hacer algo especial juntas".
Las tres jóvenes de Kappa Nu no solo están unidas en la gran pantalla, esa unión se hizo notar en el plató. "Fue genial trabajar con chicas de mi edad, tienen talento, son divertidas, lo pasamos bien dentro y fuera del plató", dice Kiersey Clemons. "Hablamos de chicos, nos dimos consejos e hicimos las típicas tonterías".
Conocimos a los miembros de Delta Psi cuando estaban a punto de graduarse y lanzarse a la vida profesional, pero las chicas de Kappa Nu acaban de llegar y no se imponen límites. "Tienen 18 años, los chicos tenían 22. Están mucho más locas que ellos porque no se han desarrollado social y moralmente", dice el director. Y añade, riendo: "No tienen ningún remordimiento cuando fastidian a Mac y a Kelly, por lo que esta película roza el género de terror".
Son muy jóvenes y tienen un objetivo claro que, en su opinión, justifica cualquier táctica para llegar a la meta. "Las chicas saben perfectamente lo que quieren y, además, su objetivo es del todo legal. Se permiten ir mucho más lejos, son realmente temibles", dice Seth Rogen. "Personalmente, me dan mucho más miedo Chloë, Kiersey y Beanie del que me daban Zac, Dave, Jerrod y Chris".
Los actores Dave Franco, Jerrod Carmichael y Christopher Mintz-Plasse regresan para encarnar a Pete, Garf y Scoonie respectivamente. Siguen siendo muy amigos y han empezado a ocupar un lugar en el mundo. Todos excepto Teddy, claro. "Han madurado, pero siguen viéndose", dice Jerrod Carmichael. "Salen juntos, toman copas, se llevan bien, ya son adultos. Por desgracia, Teddy aún no lo tiene nada claro".
Para Dave Franco, que encarna a Pete, el mejor amigo de Teddy, volver al plató con sus compañeros de reparto ha sido una experiencia muy grata. "Creo que nunca me había divertido tanto en un plató como cuando rodamos la primera", dice. "Tener la oportunidad de volver a trabajar con ellos ha sido maravilloso. Nos conocemos, nos caemos bien, lo que nos da mayor libertad, y no tenemos miedo de meter la pata, damos lo mejor de nosotros".
Jimmy y Paula, los grandes amigos de Mac y Kelly, siguen en el vecindario y también traman cómo vencer a las nuevas letras griegas. "Jimmy y Paula están a punto de tener su primer hijo, y se encuentran en el mismo estado de nerviosismo que Mac y Kelly en la primera entrega", explica Seth Rogen. "Eso sí, son igual de monstruosos y los más groseros del mundo".
El realizador Nicholas Stoller añade: "Jimmy y Paula se aburren, y ayudar a Mac y a Kelly les permite revivir sus días de gloria".
Posiblemente, Jimmy y Paula no sean brillantes, pero lo compensan con una total entrega. "Carla y yo lo pasamos realmente bien en la primera", dice Ike Barinholtz. "Han conseguido que seamos aún más tontos en esta entrega. Puede decirse que el tema principal de la película es pasar al siguiente nivel, como hacen Mac y Kelly, pero Jimmy y Paula parecen estar en regresión. Nuestros personajes no se enteran de nada, son realmente tontos".
Carla Gallo reconoce que siente debilidad por la pareja de sosos, y al igual que Ike Barinholtz, estaba encantada de volver a encarnar un personaje insulso que siempre masca chicle. "Ha sido tremendamente divertido", dice la actriz. "Nos pasamos más de la mitad del tiempo riéndonos. Quiero que esta película sea genial para que podamos hacer cinco más".
"El personaje dice cosas realmente chocantes, pero cuela porque lo hace con un encanto especial", dice Rose Byrne. "Carla es brillante, tiene un enorme sentido del humor. Posee el don de encontrar la perspectiva más extraña en cada escena, es incomparable".
Todo el reparto era consciente de que el dúo Barinholtz-Gallo se haría con las escenas y conseguiría arrancar las carcajadas del público. "Hay que intentar no escucharlos porque dicen las cosas más locas del mundo sin inmutarse", añade Zac Efron. "Son irresistibles, al principio no paraba de reírme en las escenas, nunca me había pasado".
Completan el elenco de MALDITOS VECINOS 2 una serie de inolvidables personajes secundarios, como la antipática decana Carol Gladstone, a la que da vida Lisa Kudrow; el cómico Hannibal Buress, como uno de los grandes de la ciudad de Ardendale; Liz Cackowski, como Wendy, la agente inmobiliaria, y Brian Husky, como Bill Wazakowski, el jefe de Mac y de Jimmy.
Los productores y el director consiguieron a los mejores cómicos incluso para un simple cameo. "Algo aprendimos de la primera película, y es que cada papel, por muy pequeño que sea, es importante y debe ser interpretado por el mejor actor si está dispuesto a hacerlo", dice Seth Rogen.
La actriz y cantante Selena Gomez no había trabajado nunca en una comedia para adultos. Interpreta el papel de la presidenta de la fraternidad Phi Lamba, a la que acuden corriendo Chloë, Beth y Nora nada más llegar al campus. "La presidenta de Phi Lambda simboliza la sociedad remilgada a la que se enfrentan las chicas", explica el productor James Weaver. "Nos lo pasamos realmente bien con la preciosa y encantadora Selena en el papel de la chica perfecta por excelencia".
"Soy una fan total de la primera película y no dudé ni un momento en aceptar el papel", dice la actriz. "Me gusta la comedia porque me obliga a no sentirme tan cómoda conmigo misma, y al mismo tiempo se pasa muy bien. Te sueltas el pelo, pero nadie te juzga. Siempre es agradable pasarse el día riendo con los mejores cómicos del momento", añade. "Me encanta la frase que utilizaba Nick para indicarme cómo debía actuar: 'Sonríes, pero por dentro estás muerta'".
"El personaje que interpreta Selena es uno de mis favoritos, no me lo esperaba", dice el productor Evan Goldberg. "Es divertida, tranquila y simpática. Estuvo muy poco tiempo en el plató por culpa de su agenda, pero hizo un montón de cosas. Estaba dispuesta a colaborar".
La atmósfera en el plató era más parecida a una reunión familiar que a un rodaje. "Reencontrarme con todo el equipo ha sido una de las mejores experiencias que he tenido", dice Zac Efron. "Después de que la primera película funcionara tan bien, deseábamos regresar y esforzarnos aún más. Estábamos llenos de energía y decididos a hacer una gran película".
Los nuevos personajes y actores han aportado una nueva dinámica al proceso. "Con las tres jóvenes actrices hay mucha más energía. Gracias a ellas, este rodaje ha sido aún más divertido que el anterior", dice Seth Rogen.
Ya se sabe que cualquier película de Nicholas Stoller incluye una fuerte dosis de improvisación, pero debe basarse en un guión muy trabajado y sólido. "El guión es un poco como los cimientos", explica el actor y guionista. "Le dedicamos mucho tiempo, pero es imposible saber de antemano si toda la teoría funcionará en la práctica, y la improvisación añade frescura y realismo al momento".
Nicholas Stoller está totalmente a favor de que los actores y los productores colaboren: "Siempre estoy escribiendo diálogos mientras rodamos, pistas para probar cosas diferentes. Los guionistas de esta película son geniales, divertidos, inteligentes, y eso nos permitió improvisar con mayor seguridad mientras rodábamos".
El proceso creativo que transcurre en el plató puede describirse como una frenética carrera de obstáculos. Los actores, productores y guionistas daban rienda suelta a su imaginación. Armados con una pila de libretas y puñados de bolígrafos, el equipo creativo, compuesto por los productores, los guionistas y cualquier actor que no estuviera rodando en ese momento, se dedicaba a apuntar ideas y chistes mientras se filmaba la escena. Al cabo de unas cuantas tomas, Nicholas Stoller leía rápidamente las notas y pasaba algún diálogo a los actores.
El proceso se repetía durante todo el día. Observar, apuntar, correr, reír, repetir. "Era un ambiente muy colaborativo, gracias a Nick. Es la persona más abierta a la colaboración que conozco, pero siempre tiene toda la película en la cabeza", dice James Weaver.
Ike Barinholtz, un maestro de la improvisación, dice: "Nick es superdivertido, un gran guionista. Se le ocurren diálogos desternillantes. Y le encanta reír, eso también cuenta. Si se te ocurre una buena idea y controlas al personaje, es importante trabajar con un director lo bastante seguro como para dejarte probar dicha idea".
Para las jóvenes actrices de la fraternidad Kappa Nu, la dinámica y el buen ambiente en el plató les permitió unirse al coro. "¿Cómo puede haber un comentario social sobre mujeres en una película escrita y pensada solo por hombres?", dice Chloë Grace Moretz. "Pero se quitaron la armadura y nos alentaron a dar nuestra opinión... y añadieron lo que queríamos decir".
La actriz nunca había trabajado en una película cómica con improvisación y reconoce que el apoyo de los compañeros es muy importante. "No hay nada como la improvisación para poner a prueba tu conocimiento del personaje y tu interpretación", sigue diciendo. "Es muy gratificante cuando se hace bien y oyes las carcajadas en el plató".
Los actores que trabajaron en la primera película aprovecharon la confianza mutua y el afecto que se había desarrollado entonces. "Esta película es más sólida que la primera porque sabemos cómo funcionamos, cuáles son los puntos fuertes y débiles del resto de compañeros y de los personajes", explica Rose Byrne. "Nick se ha concentrado en todo lo que funcionó mejor la primera vez. Cada día nos esforzábamos en conseguir que las escenas llegarán al punto deseado por todos".
El antiguo enemigo de los personajes de Seth Rogen y Rose Byrne es un fan de los dos: "Ver a Seth y a Rose lanzarse diálogos es tremendo, tienen una química increíble", dice Zac Efron. "Forman la pareja más divertida que he visto en mucho tiempo, incluso me entran ganas de ser padre. Cuando trabajo con ellos, debo hacer un esfuerzo sobrehumano para no reírme a carcajadas todo el tiempo".
Rose Byrne es la primera en decir que estaba encantada de volver a trabajar con Seth Rogen: "Seth es un genio de la comedia, es algo innato en él, saca provecho de cada situación. Es muy generoso, nunca intenta hacerse con las escenas, pero es el pilar que las sostiene".
Seth Rogen estaba presente en el rodaje como productor incluso los días que no tenía que rodar. "Seth es muy serio y no faltó ni un solo día", dice el realizador. "Me gusta mucho trabajar con él, tengo la sensación de que formamos un potente equipo creativo con Evan y James. Conocí a Seth cuando tenía 18 años, y a veces olvido que es un auténtico genio cómico".
Ike Barinholtz resume el pensamiento del reparto: "Seth siempre va por delante de todos. Trabajar con él es como trabajar con un increíblemente inteligente osito de peluche judío... al que le sale humo de maría por los poros".
Dado que gran parte de MALDITOS VECINOS 2 transcurre entre el hogar de Mac y de Kelly y la casa de la fraternidad Kappa Nu, los productores decidieron regresar a la escena del crimen... más o menos. Mientras que la primera se rodó íntegramente en Los Ángeles, en dos casas vecinas, la mayor parte de esta se ha filmado en dos casas colindantes en Atlanta, Georgia. "Es interesante producir una película que transcurre en el mismo sitio que la anterior, pero rodarla en un lugar diferente", dice James Weaver, con una sonrisa. "Tuvimos que ser creativos".
El rodaje empezó en agosto de 2015 y duró nueve semanas en Atlanta, que hacía las veces de Los Ángeles, que en la primera había hecho las veces de la ficticia ciudad de Ardendale. La diseñadora de producción Theresa Guleserian y su equipo recrearon las dos casas íntegramente. "Los interiores de la primera película no correspondían a las casas, se rodaron en otro lugar", explica la diseñadora. "Aquí, la dificultad fue encontrar la forma de unir interiores y exteriores para que pudieran verse desde las ventanas. Rediseñamos el plano interior de ambas casas para conseguirlo".
El departamento artístico tardó varios meses en construir los decorados en tres platós diferentes. En uno de ellos se encontraban las paredes exteriores laterales de las dos casas, el espacio intermedio y casi toda la planta baja de la casa de Mac y Kelly. En el segundo plató levantaron las paredes exteriores y toda la planta baja de la fraternidad, donde transcurren sus épicas fiestas y sus reuniones. Finalmente, en el tercer plató estaban las habitaciones del primer piso de ambas casas, la de Mac y Kelly, la de la niña Stella y el dormitorio de Shelby en Kappa Nu.
El departamento artístico recreó y duplicó hasta el más mínimo detalle, los ladrillos gastados, la pintura descascarillada y las grietas del camino al garaje. "Rodamos la mayoría de las escenas en un plató, lo que nos obligó a ser muy puntillosos con la construcción y decoración de las casas", dice Theresa Guleserian. "Buscamos árboles idénticos a los de la primera película, ya que solo se filmaría una mínima parte en los decorados auténticos".
Al final del rodaje, todos se trasladaron a Los Ángeles para filmar durante tres días delante de las casas que sirvieron de decorado en la primera entrega. Estas tomas eran necesarias para que el montador Zene Baker pudiera unir las imágenes sin cortes.
Ambas casas tenían diversas modalidades durante el rodaje (modalidad vacía/se vende, modalidad juerga, modalidad destrucción, modalidad rápida), y el departamento artístico estuvo muy ocupado con los constantes cambios. El interior de la vieja casa de los Delta Psi se convirtió en algo más femenino, muy alejado de los símbolos fálicos y de las pipas de agua que se veían por doquier.
"Decidimos dar un toque femenino a la casa y empezamos a elucubrar acerca de cómo la decorarían tres jóvenes sin grandes recursos económicos", explica la diseñadora. "¿El resultado? Menos penes, más móviles brillantes colgados por todas partes, muebles pasados de moda y una pared con calcomanías. Si los Delta Psi tenían una "pared de la fama", las Kappa Nu no se quedan cortas y en otra pared han colocado fotos de mujeres fuertes como Serena Williams, Rhonda Rousey y Theda Bara, la actriz del cine mudo. "Lo llamamos la pared de las cabronas", dice Theresa Guleserian, riendo.
Mac y Kelly se enfrentan a la ruina, y las chicas de Kappa Nu no están dispuestas a dejar de luchar por sus derechos. Las dos partes van a poner toda la carne en el asador. Hay varias escenas en las que se necesitó la ayuda de auténticos especialistas, como por ejemplo el concurso de saltos por encima de la barbacoa (encendida, claro), el lanzamiento de parabrisas, la aparición de secuaces realmente patosos y el regreso del viejo truco del air-bag. "Es una auténtica locura, nos adentramos en el territorio de Buster Keaton y de Charlie Chaplin", dice Nicholas Stoller.
La secuencia con más figuración en MALDITOS VECINOS 2 tiene lugar en la fiesta de la Universidad Braxton. Para conseguir alquilar la casa, las chicas compran toda la maría a los camellos de la zona y la revenden a un precio desorbitado desde su coche. Mac, Kelly, Teddy, Jimmy y Paula les roban la hierba, dejándolas sin negocio, lo que desemboca en una alocada persecución entre los alegres y ebrios estudiantes.
Nicholas Stoller y el director de fotografía Brandon Trost se enorgullecen de haber mejorado las fiestas que simbolizan la vida universitaria actual. "Tuvimos que estrujarnos los sesos y esforzarnos porque las fiestas en la primera película eran asombrosas", explica el director. "El picnic desde los coches es nuestra primera fiesta diurna. Decidimos llenarla con muchas barbacoas y humo de diferentes colores, al estilo Mad Max".
El rodaje de la fiesta duró cuatro días con cientos de figurantes, una fanfarria, efectos especiales y una persecución mucho más al estilo de Jason Bourne que al de Mac Radner. "Es una persecución tremenda, complicadísima", dice el productor Evan Goldberg. "Había especialistas pegando saltos usando la bandera americana como pértiga, otros pasando por encima de las barbacoas, todos corriendo entre un humo denso... Era genial".
"Brandon se encarga de acercarnos a los personajes. El público disfrutó con las fiestas por la forma en que estaban rodadas", sigue diciendo el productor. "Esta vez debía hacer lo mismo, pero desde la perspectiva de tres chicas".
Chloë Grace Moretz, que ha trabajado en numerosas películas de acción, disfrutó rodando la escena. "El picnic es una gigantesca secuencia de acción", dice. "Corríamos, intercambiábamos golpes. Yo tumbaba a quien se me ponía delante como un defensa en un partido de fútbol americano". Y concluye: "A todos nos salieron los instintos más básicos, fue bastante intenso".