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CRITICA
Por: PACO CASADO
En cuanto una película hace dinero, sea del tipo sea, comedia, acción, animación... rápidamente se saca su secuela para aprovechar que ha caído bien en el público a juzgar por la taquilla producida y algo de eso ha sucedido con 'Malditos vecinos' (2014) por lo que ya tenemos aquí la consiguiente nueva aventura de aquellos mismos personajes.
Mac y Kelly Radner están listos para dar el paso a la edad adulta abandonando definitivamente sus años de juerguistas para atender a la educación de su hija pequeña y van a tener su segundo hijo, por lo que han decidido poner su casa en venta y trasladarse a otro lugar en las afueras de la ciudad y cuestionarse su capacidad como padres, pudiendo ver en lo que se convertirá su hija si fracasan.
Pero justo cuando están decididos y tienen un comprador, se enteran que tienen unos nuevos vecinos que han establecido allí una fraternidad femenina, Kappa Nu, dirigida por Shelby, Beth y Nora, que pretenden organizar las fiestas salvajes que no le permiten en la casa de la fraternidad en el ámbito del campus universitario por lo que están más fuera de control que la de los ruidosos chicos anteriores.
Para tratar de desalojarlos van a necesitar la ayuda de su ex vecino y antiguo enemigo, el descerebrado Teddy Sanders, el líder de la referida hermandad juvenil Delta Psi Beta, con el que han hecho las paces para tratar de que vuelva la tranquilidad al barrio.
Secuela de 'Malditos vecinos' (2014) en la que el director Nicolas Stoller repite al mando tras haber realizado la anterior y vuelve a hacerse cargo de esta nueva historia, continuación o secuela de la otra, con humor bastante grueso, en este caso en una hermandad femenina que es más salvaje si cabe que la de los chicos, en la que se repiten los chistes, cambian algunos, con menos gracia, si es que en algún momento la tuvo la primera, menos destructiva, más emotiva, con lo que pierde la fuerza con respecto a la original.
Afortunadamente el tema no daba para mucho más y no se ha alargado demasiado teniendo la duración exacta de hora y media pero conservando el mismo espíritu desmadrado y grosero de la franquicia.
El guion arranca con una escena dentro de lo políticamente incorrecto asquerosamente escalotológica y sexual, en la línea de las comedias de Judd Apatow con ni una pizca de inteligencia, copiando en todo momento el estereotipo, con el mismo esquema de guion, combinando algunos gags verbales y escatológicos llevados al extremo más soez y desvergonzado, con las caídas y golpes de siempre que parecen de dibujos animados, pero resultando mucho más sosa y aburrida que la primera.
Para ello ha contado con la misma pareja protagonista formada por Seth Rogen y Rose Byrne, como no podía ser de otra manera, a la que se añaden ahora varios nombres de actrices como Chloë Grace Moretz y los nuevos descubrimientos Jerrod Carmichael y Abbi Jacobson, a las que se les da cierto protagonismo al tratarse esta vez de una fraternidad femenina.
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