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El rodaje empezó el 23 de agosto de 2009 en Kobe y concluyó el 23 de octubre en Ibaragi (una prefectura que se encuentra al noreste del Área del Gran Tokio). Durante las dos semanas que se rodó en Kobe, Kitano y su equipo rodaron muchas escenas clave, como muchos de los intensos enfrentamientos en la oficina del clan Otomo, el primer incidente en el bar yakuza que desata toda la guerra entre clanes y la explosión en la cafetería. Recordando el primer día de rodaje, el actor Takashi Tsukamoto que trabajaba con Kitano por primera vez, dijo “Me impresionó lo rápido que se rodaba y que no hubiera complicaciones en la comunicación del equipo con el Sr. Kitano. Él simplemente no repite las tomas”. Otros actores también manifestaron su sorpresa de forma unánime por las breves explicaciones que Kitano ofrecía a su equipo y al reparto y el ritmo rápido de rodaje. Kitano eligió de forma intencionada a excelentes y renombrados actores. En cuanto comenzó el rodaje, Kitano comentó: “Todos encajan perfectamente en sus personajes y están en forma”, un comentario francamente positivo que no es habitual en el meticuloso director.
El buen ambiente continuó durante todo el rodaje, inspirando a menudo al director a aportar nuevas ideas de forma espontánea en el set. El actor Tetta Sugimoto comentó entre risas: “Le debió surgir una idea cuando estábamos rodando una escena juntos y justo antes de la toma, el Sr. Kitano de repente me susurró algo al oído pero no pude comprender lo que me había dicho. Entonces me entró el pánico. ¡No tenía ni idea de lo que quería que hiciera y mi mente se había quedado completamente en blanco!” Este tipo de inspiración espontánea es lo que termina de completar una película de Kitano. Kitano reescribió el guión justo antes de la preproducción, añadiendo bastantes escenas con el personaje de Ryo Kase, Ishihara: “Fue un gran reto para mi porque se estaba probando mi agilidad como actor”, dijo Kase. “Al Sr. Kitano se le ocurría una escena tras otra para mi personaje y cambiaba constantemente el guión, así que la caracterización de mi personaje también iba cambiando con él. No tuve tiempo de construir al personaje en mi cabeza, para mí fue una experiencia única y maravillosa”. Kitano describió que lo que más le gustó de Kase fue “cómo perdía el control y se volvía loco”. Pero Kase sostuvo que fue Kitano quien le condujo en esa dirección. “Me indicó la dirección precisa, me dijo “tu personaje es más dinámico de lo que parece” y eso fue todo, dijo refiriéndose a una de las escenas violentas y extrañamente catárticas de la película en la que el personaje golpea repetidamente a un traficante.
Como se trata de la dirección de una película en la que todos los personajes son villanos y la violencia tiene lugar a lo largo de todo el metraje, Kitano realizó numerosos ensayos para las escenas violentas hasta que obtuvo exactamente lo que quería. Lo que buscaba era el dolor real y la crueldad. El actor Tomokazu Miura afirmó: “Las escenas violentas son retratadas sin connotaciones heroicas”. También hay auténticas batallas verbales entre los personajes que no se habían visto en anteriores películas de Kitano, para reforzar la descripción que se hace en la película de la crueldad del individuo. El colaborador de 'Zatoichi', Keiichi Suzuki refuerza el ambiente de villanos de la película con una música escalofriante y a la vez extrañamente hermosa.
COMENTARIOS DE TAKESHI KITANO…
SOBRE LAS PELÍCULAS DE YAKUZAS...
Durante mucho tiempo me estuvieron preguntando por qué hacía películas de yakuzas. Entonces, desde que hice 'Brother' en el año 2000 (mi última película de yakuzas) mucha gente me ha ido preguntando por qué outragehabía dejado de hacer películas de yakuzas. Así que supongo que ahora la gente me preguntará, por qué después de una década he decidido volver a hacer una película sobre este tema. Bien, la respuesta es simplemente que quería hacerla. Antes me parecía divertido e interesante y hacía tiempo que no hacía una... y no hay nada malo en hacer una de vez en cuando. Pero, aun así, no lo considero una “vuelta” a las películas yakuza que hice en el pasado. Con cada nuevaOUTRAGE película siempre intento probar cosas nuevas. En 'Outrage' trabajo dentro de la estructura del género yakuza, pero me esforcé en jugar con los giros inesperados en la trama. Y también intenté buscar nuevas formas de orquestar las tácticas violentas y asesinas.
SOBRE FILMAR LA VIOLENCIA...
La gente dice que rodar escenas violentas es una de mis especialidades, y realmente creo que se me da bastante bien. Me siento bastante seguro de poder hacer ese tipo de cosas en cualquier momento. Es como pedirle a un experimentado chef japonés que cocine cada día katsu-don (arroz cubierto por una chuleta rebozada), obviamente pensará que lo puede hacer con los ojos cerrados. Bien, rodar escenas violentas es mi katsu-don. Es un plato que siempre puedo preparar y espero que mi katsu-don sea más delicioso que cualquier otro. Bromas aparte, ruedo la violencia de forma intencionada para que el público sienta el auténtico dolor. Nunca he rodado y nunca rodaré escenas violentas como si fueran una especie de videojuego.
SOBRE LOS DIÁLOGOS...
La mayoría de los papeles que he interpretado en mis películas han sido bastante tranquilos y poseían una cierta frialdad que expresaban con pocas palabras. En OUTRAGE quería que los personajes hablaran más. Toda la película está repleta de sórdidos yakuza hablando sin parar. Lo que me parece interesante es que los yakuza en OUTRAGE no mantienen en absoluto esa frialdad, sino que están constantemente gritándose unos a otros. Dan bastante vergüenza. Hay incluso una parte donde los actores se pisan el diálogo unos a otros con un ritmo muy similar a mi estilo manzai. Nunca había intentado hacer esto en mis anteriores películas, así que fue muy divertido para mi tener a personajes llamándose gilipollas unos a otros.
SOBRE EL EQUILIBRIO DEL CONJUNTO...
Aunque está ambientada en la sociedad yakuza, hay ideas que todo el mundo puede identificar hoy en día. Lo que se desarrolla en OUTRAGE es similar a lo que ocurre en otras organizaciones o clanes dentro de la política, la cultura empresarial o incluso académica. Se trata de un juego de supervivencia entre hombres con intereses. Aunque están comprometidos con un grupo, los personajes actúan de forma independiente, solo piensan en sí mismos. Como la película es una obra en su conjunto sin un solo protagonista central, debía preocuparme especialmente de equilibrar a los personajes. Durante el trabajo de guión estaba constantemente intercambiando diálogos y acciones entre los ellos. De igual manera tenía que prestar especial atención a la variedad en los ángulos de cámara y las tomas. En mi cabeza tenía siempre presente el equilibrio, y estoy seguro de que si me hubiera centrado en un único personaje principal la película habría perdido dinamismo. El resultado es que todos los personajes se entrelazan.