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SINOPSIS
Armado con una sola palabra, Tenet, y luchando por la supervivencia del mundo entero, el protagonista viaja a través de un mundo crepuscular de espionaje internacional en una misión que se desarrollará en algo más allá del tiempo real...
INTÉRPRETES
AARON TAYLOR-JOHNSON, ROBERT PATTINSON, KENNETH BRANAGH, ELIZABETH DEBICKI, MICHAEL CAINE, CLÉMENCE POÉSY, HIMESH PATEL, ANDREW HOWARD, JOHN DAVID WASHINGTON, MARTIN DONOVAN, KATIE McCABE, DIMPLE KAPADIA
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LA PRODUCCIÓN...
La mayoría de la gente ve el tiempo como una dinámica inalterable de nuestra existencia, pero en manos del realizador Christopher Nolan, se convierte en un hilo que puede manipularse a placer, doblarse, retorcerse, yuxtaponerse... o invertirse. Nolan, que ha escrito, dirigido y producido “Tenet”, afirma: “La historia asume ideas sobre la noción de tiempo y cómo lo experimentamos. De esta forma, el componente de ciencia ficción interactúa con los elementos clásicos del género de espías”.
Nolan revela que "Tenet" era un concepto que llevaba contemplando hace tiempo, y señala: "Creo que, como realizador, tienes un conjunto de ideas, cosas en el fondo del cajón que pueden tardar décadas en concretarse. Y el momento de sacarlas a la luz tiene que ser el adecuado en todos los aspectos. Para mí fue una combinación de recuperar un sentido más amplio de la realización cinematográfica después de 'Dunkerque' y llevar al público de todo el mundo a lugares en los que no habíamos estado. También me sentía preparado para enfrentarme al género de espías, algo que siempre había querido hacer. Siempre me gustaron las películas de espías; es una rama de la ficción tremendamente interesante y divertida. Pero no quería hacer ese tipo de película a menos que pudiera aportar algo nuevo. La forma más sencilla de explicar nuestro enfoque es decir que lo que hicimos con 'Origen' para el género de los atracos es lo que 'Tenet' intenta aportar al género de las películas de espías”.
Emma Thomas, que se asoció con Nolan para producir este thriller de acción, comenta: “'Tenet' supuso un auténtico desafío. No creo que hubiéramos podido hacerlo hace diez años, así que creo que esta historia surgió del cerebro de Chris en el momento adecuado. No solo es la película más ambiciosa que Chris ha hecho desde el punto de vista de la producción, también lo es en su forma de abordar la narrativa más allá de los límites de lo que ha hecho anteriormente. Si te fijas en sus películas, tienes la impresión de que cada una de ellas se basa en la anterior, por lo que esta película es, sin lugar a dudas, un producto de los muchos años de experiencia que atesoramos en este momento”.
Nolan es conocido por ocultar sistemáticamente los detalles de la historia. Prefiere que el público descubra los giros y vericuetos de la trama a medida que se van revelando en la pantalla grande. Así que, a la hora de describir la historia, el director afirma: “'Tenet' es un thriller de espionaje con un Protagonista que es el centro de la historia y que se introduce en una organización súper secreta con el nombre de Tenet. A menudo, este tipo de personajes suelen ser muy duros y cínicos. Sin embargo, existe un grado de abnegación y autosacrificio en lo que hacen y lo que se espera de ellos que habla de un tipo diferente de valores éticos y de una responsabilidad hacia sus semejantes. John David Washington y yo creímos que era una oportunidad para aprovechar más esas cualidades, como una motivación que le llevar a hacer las cosas más extremas, todo por un bien superior”.
Washington, que interpreta al personaje conocido solo con el nombre de Protagonista, dice que, "aunque en el fondo 'Tenet' trata de un hombre que intenta salvar el mundo", la intrincada trama también explora algunos de nuestros preceptos más arraigados. “La película pone en cuestión nuestras maneras tradicionales de interpretar el tiempo, interpretando lo que percibimos como real, nuestros comportamientos aprendidos”, continúa diciendo. “Suceden muchas más cosas. Nunca había leído ni visto nada como esto. Y nadie lo ha hecho. Chris aborda frontalmente nuestra forma de comprender la física del tiempo, todo a través de la lente de este personaje. No sé cuál es su fascinación por el tiempo, pero me encanta cómo juega con ella en sus películas”.
Thomas apunta que, en cierto sentido, todos comparten la fascinación de Nolan por el tiempo. “Todos estamos un poco obsesionados con el tiempo, ¿no? Es algo que, sea quien seas, de donde seas, sea cual sea tu experiencia vital, sabes que no puedes hacer nada al respecto. Te gobierna. No puedo hablar en nombre de Chris, pero esa es mi perspectiva. Es interesante porque, dado que el tiempo es universal, también es algo que experimentas de manera muy subjetiva. De hecho, los niños sienten el tiempo de manera muy diferente a los adultos. Creo que se está acelerando inconmensurablemente. Además, durante esta pandemia, nuestra percepción del tiempo ha sido totalmente diferente... los días parecían semanas y los meses parecían minutos. Ha sido realmente extraño”.
Curiosamente, resulta que la noción de invertir el tiempo no está fuera del ámbito de lo posible para los físicos modernos, y tiene que ver con la ley de la entropía, que, explicado de forma básica, establece que todas las cosas tienden al desorden. “Todas las leyes de la física son simétricas; pueden avanzar o retroceder en el tiempo y ser las mismas, salvo en el caso de la entropía”, explica Nolan. “La teoría es que, si pudieras invertir el flujo de entropía de un objeto, podrías invertir el flujo de tiempo de ese objeto, por lo que la historia se basa en una física creíble. Hice que (el físico) Kip Thorne leyera el guion y me ayudó con ciertos conceptos, aunque no vamos a justificar que esto sea científicamente exacto. Pero se basa aproximadamente en la ciencia real”.
Thomas admite que cuando leyó el guion por primera vez, “estaba un poco intimidada por su envergadura, pero la premisa era tremendamente original e interesante. Algunas de las películas de Chris son bastante difíciles de analizar si solo lees el guion, pero sabes que todo va a tener sentido cuando las veas visualmente”.
De hecho, señala Nolan, el medio visual del cine es, en términos muy reales, la única manera en que se podrían haber realidad facetas concretas de la historia. “Lo que pasa es que la cámara ve realmente el tiempo. Antes de que existiera la cámara de cine, la gente no podía concebir cosas como la cámara lenta o la cámara inversa. De hecho, el cine es en sí mismo una ventana abierta al tiempo que ha permitido que este proyecto se hiciera realidad. Es, literalmente, un proyecto que solo existe porque existe la cámara de cine”.
Sin embargo, la singular capacidad de la cámara para representar variaciones temporales no sería suficiente. El director sabía que hacer realidad su visión exigía “un conjunto de reglas que no fuera tan sencilla como dar marcha atrás a la cámara o ir al revés. Existe una interacción entre la dirección del tiempo y el entorno en el que nos encontramos: cómo se mueven las cosas a nuestro alrededor e incluso el aire que respiramos”, aclara. “La noción de inversión es asimétrica, por lo que el conjunto de reglas era complicado y tenía que abordarse de forma más complicada. Eso implicaba la adopción de diferentes técnicas. El reparto y los especialistas debían realizar escenas de lucha y correr y andar en diferentes direcciones, los vehículos tenían que desplazarse hacia adelante o hacia atrás en diferentes configuraciones para que pudiéramos, toma a toma, cambiar completamente la técnica que estábamos usando para crear esa imagen en particular. Algo que hemos aprendido a lo largo de los años: Si puedes contar con un abanico de técnicas diferentes que te permitan seguir cambiando el truco que estás usando de un plano a otro, al público le resultará mucho más difícil apartar los ojos de la pantalla. Es mucho más inmersivo”.
Para amplificar esa experiencia cinematográfica inmersiva, Nolan volvió a confiar en las cámaras IMAX y en la película de gran formato. “Llevo años trabajando con el formato IMAX”, dice el director. “Tiene un extraordinario poder a la hora de llevar al público a una percepción mucho más profunda de la historia. Con una historia tan entretenida y divertida como esta intenta ser, queríamos que la película envolviese al público y los llevase a dar un paseo”.
Kenneth Branagh, que encarna al malévolo antagonista de la película, Andrei Sator, ha había trabajado con Nolan en “Dunkerque”. El actor comenta: “'Tenet' es un thriller espeluznante y de alto riesgo de un realizador extraordinario. Creo que Chris firma dos contratos con el público. Uno es entretenerlos absoluta y positivamente; de ese no hay duda. Pero creo que el otro contrato es lo que hace con la inteligencia, el interés y la pasión del público. Es un hombre que se trata de contar una historia a través del cine. Me da la impresión de que este proyecto es una reafirmación, una declaración de lo emocionante que puede ser estar en una habitación a oscuras, con imágenes alucinantes, con una historia que merece este tipo de tratamiento. Emma y un par de productores muy inteligentes saben logísticamente cómo hacer que una película tan ambiciosa funcione”.
“Esto solo puede ser una película de Chris Nolan”, añade su compañero de reparto Robert Pattinson, cuyo personaje, Neil, se asocia con el Protagonista. “Todas sus películas entrañan una visión muy particular y hacer esta fue una hazaña descomunal en todos los sentidos. Es sorprendente... no se puede comparar con nada”.
El rodaje de “Tenet” llevó a los realizadores, al reparto y al equipo a Estonia, Italia, India, Dinamarca, Noruega, Reino Unido y Estados Unidos. Nolan dice que la escala mundial del rodaje encaja con la historia. “La componente internacional de 'Tenet' es muy importante porque se trata de una amenaza para el mundo entero, para su existencia como un todo, y esos riesgos son una parte esencial del drama. Así que creo que esa escala global es crucial para el ritmo de la película y la comprensión del alcance y la escala”.
Los escenarios son esenciales para el director, que durante mucho tiempo ha preferido capturar la acción con la cámara, evitando la pantalla verde, decantándose por escenarios físicos y confiando más en los efectos especiales que en los efectos visuales. El director señala: “Me gusta difuminar los límites entre la fotografía de los actores, las situaciones en las que se encuentran y los elementos más improbables de la película, ya sea un avión que se estrella contra un edificio o una sensación de distorsión del tiempo. Si no existe esa división entre lo fantástico y la naturaleza de los personajes, se consigue un tono mucho más uniforme en la película y se puede mantener la atención del público”.
El enfoque de Nolan también consiguió que los actores mantuvieran mucho más la atención. Elizabeth Debicki, que encarna a Kat, la esposa separada de Sator, lo explica: “Como artista, es una gran satisfacción ver realmente dónde te vas a meter y al personaje que vas a habitar. Hubo momentos en los que me di cuenta de lo extraordinario que era estar allí y creo que eso me ayudó muchísimo. ¿Cómo podría no ser útil sentir el impacto de algo que se agita a tu alrededor o sentir que el barco se mece debajo de ti? Es cierto que nuestro trabajo es actuar, pero eso aviva de forma orgánica la autenticidad de la actuación. Tiene un valor incalculable”.
"Llevo mucho tiempo haciendo películas y soy muy consciente del medio en el que trabajo”, dice Nolan. “Es lo que me inspira y afecta a mis decisiones creativas en todos los sentidos: mientras escribo el guion, cuando pienso en cómo que va a ser, mientras busco a los actores... Todo lo hacemos para ofrecer al público una experiencia que supere cualquier comparación con la realidad. Cada decisión se toma con la idea de que el público se reúna en una sala de cine para verla en una pantalla grande. Eso afecta cada decisión que tomamos y a todo lo que hacemos”.
“Es evidente que el rodaje fue un auténtico desafío”, afirma Thomas. “Pero estábamos rodeados por los mejores profesionales y nos sentimos muy afortunados de contar con esos grandes talentos que nos estaban ayudando a trasladar la historia y a dar vida a los personajes”.
ZONAS HORARIAS...
Hace más de una década, Christopher Nolan fue el primero en emplear cámaras IMAX para filmar un gran largometraje, y continúa abriendo nuevos caminos con las cámaras de gran formato. Nolan y el director de fotografía Hoyte van Hoytema filmaron la mayor parte de la acción de “Tenet” con cámaras IMAX, utilizándolas más que en cualquier otra producción anterior y, según sospecha van Hoytema, más que nadie lo ha hecho hasta ahora. “Filmamos alrededor de 480 kilómetros de película IMAX, así que hemos superado nuestro propio récord. No lo puedo asegurar, pero me sorprendería que hubiera otra película que haya utilizado más película que esta”.
Nolan añade: “Hemos logrado refinar nuestra metodología de trabajo con nuestros socios de IMAX y Panavision y hacer las cosas más fáciles y versátiles. En esta película, Hoyte y su equipo pudieron colocar esas cámaras en todo tipo de lugares. Pudimos colocarlas en entornos muy reducidos quitando las cámaras y colocando cabezales remotos que eran lo suficientemente fuertes para llevar la cámara IMAX, pero lo suficientemente pequeños como para entrar en algo como un automóvil, de modo que pudiéramos entrar de inmediato en la acción. Hoyte comprende mi deseo de estar siempre ahí con los personajes porque tiene un cerebro de ingeniería maravilloso, así como un gran ojo fotográfico, y siempre está buscando y proponiendo formas de romper las barreras entre dónde puede colocarse la cámara y dónde están los personajes en una escena”.
Además del uso sin precedentes de cámaras IMAX, las características de la historia exigieron un gran avance en la tecnología IMAX. Van Hoytema lo explica: “Uno de los mayores desafíos técnicos fue que queríamos que la cámara IMAX pudiera funcionar marcha atrás para lograr ciertas físicas en la cámara que no son posibles si la película solo va hacia delante. Las cámaras IMAX tienen motores muy potentes, pero al mismo tiempo requieren una precisión extrema y no fueron diseñadas para retroceder. IMAX fue muy útil. Trabajaron con nosotros en un nuevo proyecto de ingeniería para reconstruir la mecánica en sus revistas y rehacer la electrónica para permitirnos filmar en ambos sentidos”.
Las cámaras IMAX tienen un gran inconveniente: son considerablemente más ruidosas que las cámaras tradicionales. Pero con la última generación de los llamados dirigibles (carcasas que reducen el sonido de la cámara IMAX), van Hoytema pudo aplicarlas de manera más extensa que nunca. Sin embargo, reconoce que: “Hubo momentos de diálogos íntimos que no pudimos conseguir con la cámara IMAX, así que volvimos a la cámara de 65 mm”.
A los miembros del reparto les impresionó la destreza de van Hoytema a la hora de manejar la cámara IMAX, que es relativamente voluminosa, como si fuera una cámara de mano. “Tiene muchísimo mérito", reconoce Washington. “Esas cámaras no son nada ligeras, pero él siempre estaba ahí, en medio de la acción. Él y Chris no se sienta nunca, así que pensé: 'No puedo estar cansado, no puedo sentarme si estos chicos no se sientan’. era contagioso; querías seguir adelante y darlo todo”.
“Chris tiene una de las constituciones más asombrosas que he visto en mi vida, y parece sobrevivir a base de té Earl Grey”, dice Pattinson riendo. “Ha sentado un precedente de fortaleza”.
Los actores también respondieron a la preferencia del director por realizar todo lo que fuera posible delante de la cámara. “Te provoca; te obliga a asumir que estás tratando con realidades”, afirma Washington. “Estar ahí y hacer que todo fuera tangible enriqueció muchísimo mi trabajo. Ver que todo el set era real me facilitó muchísimo las cosas”.
Aunque van Hoytema comparte esa creencia, también reconoce que, en este proyecto, la curva de aprendizaje fue diferente. “Yo creo mucho en la metodología de Chris, ya que te mantiene conectado a la realidad y el público lo siente en sus huesos. Pero hubo momentos en los que me preguntaba cómo diablos íbamos a lograrlo, y eso hacía que fuera aún más gratificante cuando lo conseguíamos. Todos los días había algo que no había hecho antes y tenía que aprender a hacerlo. Todos los días tienes que esforzarte para subir el listón. Cuando llegas al final comprendes que te has vuelto un poco más rico por todas las cosas que has aprendido”.
Además de reunirse con Hoytema, Nolan volvió a asociarse con el diseñador de producción Nathan Crowley, el diseñador de vestuario Jeffrey Kurland, el supervisor de efectos visuales Andrew Jackson y el supervisor de efectos especiales Scott Fisher. “Tenet” también representa su primera colaboración con la montadora Jennifer Lame y el compositor Ludwig Göransson.
“En cada equipo de realización que formas, buscas ese equilibrio entre experiencia y un nuevo punto de vista”, dice el director. “Las personas para las que todo es nuevo y emocionante te transmiten mucha energía”.
El rodaje de “Tenet” llevó a Nolan y a sus equipos de producción a siete países diferentes en tres continentes separados: de Estados Unidos al Reino Unido, de Estonia en Europa del Este a la costa amalfitana en Italia, y de India a los países escandinavos de Dinamarca y Noruega.
Estonia:
La acción en “Tenet” se activa en el prólogo de la película, cuando un equipo fuertemente armado irrumpe en el teatro de la ópera de Kiev. La secuencia se rodó en Tallin, Estonia, en Linnahall, un lugar construido originalmente para los Juegos Olímpicos de Moscú de 1980 cuando Estonia formaba parte de la antigua Unión Soviética. Nathan Crowley afirma: “Creo que es uno de mis edificios favoritos en los que hemos rodado. Tiene vistas al mar Báltico y la arquitectura es una mezcla de brutalismo y templo maya. Es enorme y sigue siendo grandioso. Cumplía con todos los requisitos tanto de Chris como míos. Es totalmente cinematográfico”.
A pesar de su grandiosidad, señala Crowley, “el edificio no está en buen estado de conservación; llevaba 10 años abandonado. Las butacas estaban en muy mal estado, las alfombras habían desaparecido y había muchos daños en el hormigón. Había graffiti y cristales rotos por todas partes, y no funcionaba ninguna luz. Devolverle la vida fue un trabajo de titanes.
“Lo limpiamos todo, reconstruimos el escenario, pulimos el hormigón y reconstruimos algunas de las paredes exteriores que se habían deformado con los años. Tuvimos que reparar las puertas y reemplazar muchísimos cristales. Arreglamos la iluminación existente y añadimos algunas propias para poder filmar. Invertimos mucho tiempo en las butacas y las alfombras, y todo eso se quedará allí. Para nosotros, se trataba de recrear el estilo de lo que había sido y añadirle algo; y el resultado fue muy gratificante. Es un edificio magnífico y espero que Tallin lo conserve”.
Sin lugar a dudas, una de las secuencias más complicadas fue un elaborado atraco que se desarrolla en Laagna Tee, una concurrida autopista del centro de Tallin, con coches que avanzan y retroceden. El primer paso fue no solo obtener permiso para usar un largo tramo de la carretera, sino además asegurarlo durante varias semanas de rodaje. El productor ejecutivo Thomas Hayslip lo explica: “Estábamos cerrando ocho kilómetros de una autopista de seis carriles en medio de una de las zonas más densamente pobladas de Estonia”. Incluso después de que recibieran el visto bueno, confiesa que: “Todos los días me preocupaba que nos cerraran la carretera, pero al final, nos dieron el tiempo necesario para terminar la secuencia. Hay mucha gente a la que debemos agradecer su cooperación y apoyo, desde las autoridades locales hasta el público”.
Con tantas partes móviles, la planificación cuidadosa fue clave para capturar la acción. El departamento de efectos especiales visuales de Andrew Jackson fue esencial en ese proceso ya que creó una pre-visualización de toda la secuencia para que Nolan, los actores y todos los departamentos tuvieran una referencia.
Van Hoytema lo explica: “En la persecución de coches, por ejemplo, hay acontecimientos que avanzan y acontecimientos que retroceden, y en ciertos puntos esas diferentes cronologías interactúan entre sí y tienen consecuencias, así que tuvimos que desentrañar la secuencia como un rompecabezas. El equipo de Andrew pudo conceptualizar todo en el ordenador, exponiéndolo a vista de pájaro o desde la perspectiva de cualquier persona en un momento dado. Con esa hoja de ruta, podíamos echar mano de un ordenador portátil para saber si era posible o si no lo era porque se supone que él debe seguir quieto”
“Lo más gracioso es que cuando hacíamos una pregunta sobre la persecución del coche, nuestra primera suposición siempre era incorrecta”, recuerda Nolan. “Era sorprendente hasta qué punto, cuanto tu instinto te decía algo y estabas absolutamente convencido de poder hacerlo, comprendías que estabas equivocado y tu instinto te había llevado por un camino totalmente equivocado. Así que, en todas esas escenas tan complicadas, teníamos que consultar constantemente la pre-visualización”.
“El hecho de que no solo pudiéramos ver todos los elementos, sino también la relación entre ellos en momentos concretos del tiempo y comprender la física y la logística, fue extremadamente útil. Andrew y su equipo fueron un eslabón sumamente importante de la cadena”, añade van Hoytema.
La secuencia también exigió la estrecha colaboración entre el supervisor de efectos especiales Scott Fisher y George Cottle. “Hablamos mucho sobre cómo se controlarían los coches en marcha atrás”, dice Fisher. “Hicimos algunos experimentos con George para descubrir cómo podíamos convertirlos y después, el equipo de Picture Car hizo un gran trabajo configurando los vehículos reales para la película, incorporando cosas que habíamos probado”.
“Nos mostramos inflexibles desde las primeras pruebas que hicimos: si el coche va hacia atrás, tiene que ser un coche de verdad a 80 o 90 km/hora”, añade Cottle. “No íbamos a engañar al público con un truco. Necesitamos algo de práctica, pero lo conseguimos”.
Cottle reunió a un equipo de 20 grandes pilotos de Los Ángeles, muchos de los cuales habían trabajado en varias películas de Nolan, como es el caso de Jim Wilkey, que se hizo famoso por voltear en el aire el camión de Joker en “El caballero oscuro”. Cottle afirma: "Cuando llegamos a Estonia, ya llevábamos mucho hecho”.
En Estonia, se les unieron conductores especialistas experimentados de Estonia, de Praga, del Reino Unido y de otros lugares. Antes de rodar la secuencia, Cottle recuerda: “Fuimos a una pista de aterrizaje en desuso y lo ensayamos todo, porque sabíamos que iba a haber unas cuantas”.
A los actores se les permitió conducir por su cuenta durante una parte, y para Pattinson fue “extraordinariamente divertido". Soy un conductor bastante conservador, pero abrirte paso en zigzag entre los coches con una cámara IMAX colocada en una plataforma delante del coche fue increíblemente emocionante”.
Thomas lo cuenta así: “Rob no nos había contado qué tal conductor era; de hecho, actuaba como si apenas supiera conducir y no fuera un profesional. Pero cuando el equipo de especialistas evaluó lo que podía hacer, se quedaron impresionados, así que acabó conduciendo mucho en la película”.
A pesar de las habilidades de los actores, y teniendo en cuenta los problemas de seguridad, el equipo de especialistas tomó el control de los coches en las maniobras más difíciles. Cottle lo explica: “Todos los coches de nuestros héroes podían llevar plataformas de carga dentro o sobre los vehículos, así que podíamos situar a un conductor especialista en lo que se asemeja a una pequeña jaula atada al techo o escondida en algún lugar del automóvil. Parece que el actor está conduciendo, pero en realidad es el piloto especialista el que lo hace”.
Cottle ya ha formado parte de los equipos de especialistas de seis películas dirigidas por Nolan, así que afirma: “El rigor de Chris cuando se trata de seguridad es insuperable; lo vive y lo respira. Me preguntaba constantemente: '¿Qué te parece esto? ¿Vamos bien? ¿Es seguro? ¿Necesitas más tiempo?' No permitía que nadie se apresurara si eso ponía en peligro su seguridad. Para mí y para mi equipo, y para el resto de los miembros del set, fue muy gratificante”.
Las localizaciones en Estonia también incluyeron el Museo de Arte Kumu en Tallin, que se convirtió en el vestíbulo del puerto franco de Oslo; el interior de un almacén, que albergó el puerto franco de Tallin; una estación de ferrocarril; y el puerto de Estonia al que llega el Protagonista.
Italia - Costa Amalfitana:
En Italia, el "escenario" principal se encontraba en las aguas azul celeste de la pintoresca costa amalfitana: un superyate de lujo, que era la casa de Andrei Sator. El coordinador marino Neil Andrea, responsable de adquirir la gran variedad de barcos que se ven en “Tenet”, encontró el yate, llamado Planet Nine. Con algo más de setenta y tres metros (240 pies) de eslora, el yate tiene seis cubiertas y su propia plataforma para helicópteros, “lo que fue muy importante para algunas de las escenas que teníamos que hacer y una de las razones por las que nos gustó”, dice Crowley. “El casco reforzado color gris acero también lo hacía parecer más industrial, lo que encajaba con este personaje”.
Branagh está de acuerdo. “Sator lo diseñó y construyó para que fuera su palacio, su escape, su refugio, y te da una pista sobre cómo reacciona ante el mundo, tanto defensivamente como agresivamente. El barco en sí era una construcción escultórica y estructural asombrosa. Es cierto decir que en ninguna película hay tomas casuales, pero en cada fotograma de una película de Chris Nolan tienes la impresión de que todo lo que añade está siempre al servicio de la historia. Así que este barco —su carácter militar, su color, su angulosidad— te sumerge en la mente de Andrei Sator, proyectando una imagen siniestra y amenazadora”.
Para amplificar esa imagen, Crowley dice que contó con un equipamiento distinto instalado en la parte posterior del Planet Nine. “Añadimos un lanzacohetes para resaltar ese aspecto medio-militar que dice: 'No te acerques a este yate', y también reforzamos la idea de que no puedes llegar a este tipo”.
Tuvieron mucho cuidado a la hora de realizar cambios en el barco para el rodaje. Crowley afirma: “Cuando alquilas un superyate gigante, tratas de no provocar ningún daño, por eso cuando el equipo se subió a bordo con todos esos equipos, era importante que las esquinas o cualquier superficie que pudiera astillarse estuvieran protegidas”. De hecho, se asignó a cuatro miembros del equipo de rodaje que protegieran el yate de cualquier daño potencial.
Crowley y su equipo realizaron algunas modificaciones en el yate: se construyó una plataforma encima de una plataforma existente para elevarla más, y se añadieron elementos de atrezzo para adaptarse al personaje de Sator. Sin embargo, mover o quitar la decoración existente resultó un poco más complicado. “Teníamos que poder mover las cosas para colocar las luces y las cámaras”, dice Crowley, “y al menos en una habitación sacamos la mayoría de los muebles para que hubiera suficiente espacio para que los actores se movieran”. Despejar el espacio significaba que los muebles tenían que desatornillarse literalmente de la cubierta, por lo que, como medida de precaución, la tripulación del Planet Nine se encargó de retirar los muebles.
Había una característica del yate que no se podía modificar: su helipuerto no se había construido para soportar el peso del helicóptero de turbina doble Mil Mi-8 de fabricación rusa de Sator, que superaba la capacidad máxima de peso de la plataforma. Hayslip lo explica: “Tuvimos que averiguar cómo terminar la secuencia del helicóptero sin que aterrizara de verdad. Encontramos en Europa del Este un magnífico equipo que se dedica a realizar búsquedas y rescates. Hicieron algunas pruebas y cuando llegó el momento de rodar la escena, trajeron el helicóptero y lo dejaron flotando casi a ras del suelo, así que parecerá que las ruedas están posadas en el yate, aunque no fuera así. No más del ancho de un trozo de papel; fueron así de precisos”.
Aunque las escenas cruciales en el yate están ambientadas en las aguas de Vietnam, los realizadores sabían que no era factible que el Planet Nine navegara hasta el sudeste asiático. Así que la costa amalfitana hizo las veces de las aguas de Vietnam. “Hay algunos acantilados y áreas cercanas que están libres de toda arquitectura italiana”, comenta Crowley, “así que pudimos recrear la escena de Vietnam. Es una toma de lente bastante larga, por lo que solo necesitábamos cambiar su apariencia desde lejos. Construimos un pequeño muelle en la playa y volvimos a transformar algunos barcos de pesca italianos para que parecieran barcos de pesca vietnamitas. Bienvenidos a Vietnam”, dice sonriendo.
El rodaje en la costa amalfitana también tuvo lugar en la ciudad de Ravello, incluso en un restaurante donde el Protagonista se encuentra por primera vez con Sator.
Reino Unido - Southamton y Londres:
El Planet Nine puede servir para recrear el hogar marítimo de Andrei Sator, pero para disfrutar de la emoción en alta mar, posee dos catamaranes F50 de última generación. El perfil que caracteriza al F50 es su vela rígida de 24 metros de alto, similar al ala de un avión, que dobla el viento a su alrededor, generando más fuerza. Varias hidroalas debajo del casco elevan el barco por encima del agua, lo que le da menos resistencia y mayor velocidad. El F50 puede alcanzar velocidades punta de más de 50 nudos y más de 90 km/hora, por lo que pilotarlo exige nervios de acero y un gran dominio: si te elevas demasiado puedes volcar; si vas demasiado bajo pierdas velocidad.
Después de que el Protagonista contacte con él, Sator lo sube a uno de sus F50, compitiendo contra el otro. Tanto para el personaje como para el actor que lo interpreta, fue la definición de un viaje trepidante. “Fue muy intenso”, reconoce Washington. “Volaban muy alto y yo pensaba: '¿De verdad quieren que haga esto?' Pero no podía mostrarme temeroso, sobre todo al ver a Chris y a Hoyte atados al palo, filmándonos. Estaban en el séptimo cielo, disfrutando de cada minuto. Fue divertidísimo. ¡Viento en popa!”
Debicki añade: “Cuando los tres estábamos colgados de un lado y el barco se hizo a la mar, sentí algo que nunca había experimentado. Fue estimulante, pero bastante aterrador en realidad... sobre todo para personas que no son marineros entrenados. Pero ese es uno de los regalos de una película de Nolan: te encuentras en situaciones en las que, si no estuvieras, nunca habrías aprendido a navegar, habitar o incluso presenciar”.
Manejar el F50 requería una destreza especial, así que el equipo de producción contacto con el equipo SailGP, pero estaban en medio de su circuito de carreras, y durante el tiempo que “Tenet” estaría filmando en Amalfi, ellos estarían compitiendo en Niza. Afortunadamente, pudieron reunirse con ellos en Southampton, Reino Unido, justo después de la regata Cowes Week, la mayor regata de vela de esta categoría. Pero tuvieron muy poco tiempo para rodar ya el equipo tuvo que reparar sus barcos al volver de la última carrera y prepararlos para otra carrera después de su trabajo en la película.
Incluso con las personas más experimentadas al timón, los realizadores no tardaron en descubrir que existen parámetros establecidos de velocidad del viento en los que el F50 puede navegar de manera segura: el viento tiene que soplar como mínimo a cinco nudos y como máximo a dieciocho. “Estábamos a merced de lo que es y no es posible con estos barcos”, dice van Hoytema. “Fue difícil porque, cuando formas parte de un equipo de rodaje, estás acostumbrado a marcar el ritmo. Estábamos rodando, cogiendo en ritmo, encontrando tomas interesantes… y de repente el viento se levantaba y teníamos que volver. Estos barcos son increíbles y, en muchos sentidos, fue una experiencia maravillosa, pero también era frustrante porque no éramos nosotros los que marcábamos el ritmo. Eran los elementos los que se encargaban de eso”.
Hubiera sido imposible que cualquier otra embarcación estuviese a la altura del F50 cuando iba a toda velocidad, así que Nolan y van Hoytema emplearon un helicóptero para rastrear tomas y utilizaron un barco donde colocaron una cámara IMAX en un brazo del borde para atrapar al F50 cuando le rozaban. Para los primeros planos y el diálogo, construyeron un "buck", una réplica del casco de un F50, que se podía atar a un barco más grande. Los actores trabajaban en el buck mientras Nolan, van Hoytema y el equipo de cámaras estaban en el barco atado.
En el Reino Unido, algunas escenas también se rodaron en Londres en lugares como Shipley's Auction House, donde el Protagonista se encuentra por primera vez con Kat; un colegio privado, al que asiste el hijo de Sator y Kat; y un club privado, donde el Protagonista se encuentra con Michael Crosby, el personaje de Michael Caine.
India - Mumbai:
Los realizadores, el reparto y el equipo aterrizaron en Mumbai, India, al final de la temporada de los monzones, y las lluvias a veces torrenciales hicieron que, una vez más, los elementos tuvieran la voz cantante en el rodaje. Hayslip lo recuerda: "A veces, nos preparábamos para rodar y el sol estaba donde lo necesitábamos, y entonces Chris decía: 'Vale, chicos, listos para empezar’. Y entonces mirábamos y veíamos como se acercaba una nube gigantesca, así que lo tapábamos todo y nos quedábamos allí bajo la lluvia torrencial. Pero en cuanto se iba, volvíamos a empezar... completamente empapados”.
Rodar después del anochecer exigía mucha iluminación, lo que incluía grandes lámparas en todos los tejados de los alrededores porque necesitábamos iluminar un área grande”, dice van Hoytema. “La cantidad de agua que brota del cielo combinada con la electricidad de alto voltaje fue un desafío técnico, pero lo logramos. Todo fue gracias a mi equipo; son tan buenos en lo suyo, que hacen que las situaciones más complejas resulten fáciles”.
El rodaje nocturno consistía en una secuencia de especialistas que era, en sí misma, compleja, a pesar de la climatología. El Protagonista y Neil tienen que acceder al ático fuertemente custodiado de un edificio de más de 20 pisos para hacer un contacto importante. Pero la única forma de entrar es desde el exterior. Cottle recuerda: “Estábamos buscando diferentes opciones y dije: '¿Y si los subimos por el costado del edificio?' Chris fue aún más lejos y dijo: '¿Y si hacen puenting?'. Y yo dije: '¿Y por qué no?' Pero una vez que lo dije, supe que con Chris no habría trampas. Se requirió mucha planificación para preparar ese montaje porque necesitábamos poder realizarlo de verdad y, como siempre, nuestra principal prioridad era la seguridad”.
El coordinador de especialistas y su coordinador de montaje, Chris Daniels, volaron a Mumbai para tomar medidas precisas y ver cuántos equipos se necesitarían. “Había 106 metros pies hasta donde necesitábamos llegar, así que la única forma era construir una armazón”, dice Cottle.
Un pequeño equipo empezó enseguida a preparar y probar el montaje. “Íbamos a estar menos de una semana en Mumbai, así que sabía que todo debía estar listo para cuando llegáramos. Pero los chicos aterrizaron allí en medio de un monzón, así que tuvieron que montar, probar y preparar todo bajo la lluvia más torrencial que jamás hayas visto”, señala Cottle.
Construido en el techo del edificio y hecho de aluminio súper fuerte, la armazón sostenía firmemente los cables para lanzar a los actores y después, a sus dobles, desde el techo del edificio vecino de siete pisos. Los dos hombres yacían boca abajo sobre el techo enganchados a cabrestantes mecánicos de alta velocidad que, como todo lo demás, habían sido cuidadosamente probados. “Después presionábamos el botón y los lanzaba 21 metros hasta tocar por primera vez el edificio”, describe Cottle. “Y cuando lo hicieran, volveríamos a lanzarlos hasta donde habían aterrizado. John David y Rob hicieron la primera parte del despegue. Después los paramos tras los primeros seis metros, así que cuando ves a los personajes salir del encuadre son realmente ellos. Fue increíble ver lo que hicieron”.
El Protagonista y Neil saltan haciendo puenting por un lado de la terraza, saliendo por donde habían entrado. Washington y Pattinson dieron el primer paso: saltaron a una red de seguridad que había debajo, antes de que sus dobles, Daniel Graham y Kyle McLean, respectivamente, tomaran el relevo. Ambos actores reconocen que, aunque tenían total confianza en la preparación y en las medidas de seguridad, ese salto inicial fue espeluznante. “Ahora nos reímos, pero yo estaba súper nervioso”, reconoce Washington con una sonrisa. “Había una plataforma de aterrizaje medio piso más abajo, pero aun así tienes que saltar. Después de eso, nada volvió a darme miedo”.
Pattinson coincide con Washington: “Aunque solo tuvimos que dar una especie de mini salto, en realidad es lo mismo que el gran salto porque estás en el mismo cable, a una altura de 20 pisos. Fue aterrador, pero divertido. Un momento absolutamente genial. Fue como hacer realidad una fantasía”.
“Cuando cuentas con artistas con tanto talento físico como en esta película, el realizador se siente liberado”, dice Nolan. “Me dio más libertad a la hora de rodar cosas diferentes y me vino muy bien”.
Mientras estuvieron en la India, el equipo de producción también rodó en la magnífica Puerta de la India que da al Mar Arábigo.
Dimple Kapadia, que está muy familiarizada con las complejidades de rodar en su nativa Mumbai, comenta: “Nunca había vivido este tipo de rodaje. Venir a la India y prepararlo todo para un rodaje tan enorme fue absolutamente increíble. Estaba tan bien organizado y tan bien hecho que funcionaba como un reloj. Todo el mundo se quedaba boquiabierto ante lo que Chris y su equipo lograron allí”.
Países escandinavos: Dinamarca y Oslo, Noruega:
Al principio de “Tenet”, el Protagonista está aislado en una imponente turbina eólica de un gigantesco parque eólico marino, donde se entrena para su próximo movimiento… a la espera de saber cuál será. Tanto los exteriores como los interiores se rodaron en una turbina de verdad de un parque eólico en el Mar Báltico frente a la costa de Dinamarca.
En el agua, también se rodó en un gran barco rompehielos, donde la climatología también causó estragos en la logística. “Uno de los problemas más importantes que tuvimos rodando en esa parte del mundo fue la climatología", dice Neil Andrea. “Estábamos dentro de un parque eólico, así que sabíamos que iba a ser difícil. En algunas ocasiones tuvimos vientos de más de 40 nudos y oleajes de 1 a 3 metros. Pero ya teníamos experiencia después de trabajar en 'Dunkerque'. Así que estábamos preparados para hacer frente a cualquier cosa”.
El rompehielos era demasiado grande para atracar en el puerto así que estaba amarrado a una milla de la costa. El reparto, el equipo, las cámaras y otros equipos tuvieron que transportarse desde tierra en barcos de transporte con aguas agitadas que se suavizaban un poco a medida que se acercaban al rompehielos. Andrea lo explica así: “El rompehielos está equipado con un sistema de posicionamiento global dinámico y tiene propulsores a los lados para maniobrarlo y mantenerlo en su posición. Gracias a eso, pudimos girar el barco contra el viento, para que estuviera tranquilo cuando soplaba en la popa del barco. De esa manera podíamos subir y bajar a personas y equipos de forma segura”.
También rodaron durante un día en Oslo, Noruega, incluida una reunión entre el Protagonista y Neil en la azotea de la Ópera de Oslo, y una discusión sobre el "dramatismo" de estrellar un avión, que se rodó en una de la ciudad.
Estados Unidos - Sur de California:
Aunque se ambienta en Oslo, el dramático accidente de avión se rodó en el aeropuerto de Victorville, California, que se ubica en el extremo suroeste del desierto de Mojave. A pesar de que a Nolan le gusta también realizar las secuencias de acción más explosivas con la cámara, en un principio tenía la intención de rodar esa escena en concreto utilizando miniaturas y efectos visuales especiales, ya que parecía prohibitivo estrellar un avión de verdad y por muchas razones. Sorprendentemente, revela Thomas, "Hicimos números y resultó que era más rentable comprar un avión en desuso que construir una miniatura y una pieza a tamaño real del interior”.
Nolan, Crowley y Hayslip fueron al aeropuerto de Victorville, donde se almacenan viejos aviones de pasajeros que se convierten en chatarra. El avión que eligió Nolan era un jumbo jet 747... pero, lo más gracioso es que antes de poder estrellarlo tuvieron que restaurarlo. Scott Fisher aclara: “Cuando se da de baja un avión, se quitan los frenos y otras piezas, así que lo primero que hicimos fue sustituir los frenos porque parar el avión era lo más importante. También tuvimos que informarnos sobre el estado de la dirección, cuál iba a ser nuestro vehículo remolcador y asegurarnos de que todo funcionaba correctamente”.
Pero los realizadores necesitaban también la autorización del aeropuerto, así como de Boeing, el constructor del avión de quien necesitaban el hangar y el terreno porque formaban parte de la localización del set. “En la secuencia, el avión atropella coches, derriba postes eléctricos y acaba chocando contra un edificio, antes de incendiarse, es decir todo lo que un aeropuerto no quiere que suceda”, reconoce Hayslip. “Una vez que logramos que lo aceptaran, tuvimos que subir a bordo del Boeing para demostrar que no íbamos a dañar su hangar o los aviones que estaban almacenados allí. Contratamos a físicos para elaborar los cálculos. Queríamos saber si, teniendo en cuenta el peso del avión y la potencia de frenado, ¿a qué velocidad puede detenerse y dónde se detendrá? Les mostramos que, si presionas este botón, el avión recorrerá 7 metros y se detendrá, y nos dijeron que estaba bien”.
Por razones tanto de seguridad como de control, el avión no podía rodar por sus propios medios, así que Jim Wilkey, que tuvo que ir a la escuela para obtener una licencia especializada, condujo el vehículo remolcador que lo detiene en la pista antes de que se desvíe; después, un sistema de cable y poleas se encarga de controlar el impacto real. Cottle cuenta que: “Jim pasó un par de semanas con Scott y su equipo trabajando en el sistema y controlando el tiempo incluso antes de que nosotros apareciéramos”.
El avión lo pilotó un conductor en una cápsula situada cerca del hueco del volante en la bodega del avión. “Descartamos que hubiera alguien en la cabina, para mantenerlos lo más lejos posible de la zona de impacto y en el lado opuesto de la pirotecnia”, dice Fisher.
La secuencia del accidente del avión se rodó de noche y exigió un gran montaje de luces. Van Hoytema lo confirma: “Tenía que cubrir una zona muy grande, así que colocamos Condor Lights (grúas ultraligeras) y fuentes de luz encima de todos los edificios circundantes. Todo se veía a 1,6 kilómetros, así que fue un desafío porque se suponía que era un aeródromo en Oslo, y no queríamos que se viese el desierto seco de Mojave”.
Incluso cuando está en medio del rodaje de una secuencia tan elaborada, Nolan dice que tiene que mantener su ecuanimidad para que otros sigan su ejemplo. “Tengo que ser muy objetivo y no pensar en la envergadura. Tengo que verlo como una serie más de tomas porque los jefes de departamento y la gente que está montando algo tan complicado tienen que poder hacerlo con tranquilidad y seguridad. Si todo el mundo está demasiado entusiasmado con la envergadura, se producen errores. Tienes que estar muy centrado en la seguridad, así que debe haber mucha comunicación entre los departamentos para saber exactamente dónde nos van a permitir estar y dónde podemos colocar nuestras cámaras. Pero una vez que empezamos a ponerle el sonido, a montarlo y a ver la reacción de la gente, puedo disfrutar de la hazaña”.
Himesh Patel, cuyo personaje, Mahir, es una pieza fundamental de la escena, dice: “Chris hace las cosas a una escala gigantesca, pero todo está ligado a la historia. Él lo tiene todo planeado y tú sabes que estás en buenas manos. Es un espectáculo asombroso”.
Una terminal del Aeropuerto Internacional de Los Ángeles hizo las veces de una terminal del Aeropuerto de Oslo.
La secuencia más laberíntica de “Tenet” se desarrolla en una ciudad abandonada de Rusia, y el rodaje abarca tres lugares distintos. Los exteriores se rodaron en una mina de hierro ya desaparecida en la ciudad fantasma de Eagle Mountain, cerca de Indio. Nathan Crowley dice: “Queríamos edificios en ruinas en un paisaje árido, de tipo siberiano, sin árboles ni vegetación. Eagle Mountain tenía un grupo de estructuras que pudimos convertir en viejos edificios de apartamentos. También añadimos edificios para conservar el estilo brutalista que ha sido el lenguaje arquitectónico de la película desde Linnahall”.
Además de construir varios edificios a tamaño real, el equipo de Crowley diseñó lo que él llama "bigatures" —maquetas a gran escala— e incorporó una perspectiva forzada para hacer que ese inmenso conjunto pareciera aún más gigantesco. “Puedes engañar al ojo con una perspectiva forzada”, explica Crowley. “Podemos hacer que algo parezca que dura interminablemente, pero es una ilusión. En realidad, es una técnica antigua que ha sido sustituida por la pantalla verde en la mayoría de los casos, pero preferimos el enfoque físico. ¿Por qué? Porque es más divertido crear algo, así que, si podemos construirlo, lo hacemos, y si es imposible, confiamos en nuestros compañeros de VFX”.
Además de varios de los actores principales de la película, la secuencia de Eagle Mountain contó con todo el equipo de especialistas y cientos de extras. Teniendo en cuenta las exigencias de la acción, así como la ubicación, George Cottle tenía una condición previa para los extras que formaban la masa. “Sabíamos que teníamos que buscar a antiguos militares porque esos extras iban a llevar uniforme militar completo con armas y todo el equipo, y usar todo eso durante 10 horas al día con el calor del desierto exige una mentalidad muy especial”. Además de esa tarea, debían correr por un terreno montañoso, lleno de rocas y trozos de hormigón de los edificios que han explotado, con detonaciones cuidadosamente colocadas a su alrededor.
Algunos interiores de la secuencia de Eagle Mountain se realizaron en el Plató 16 de Warner Bros., famoso por albergar un inmenso depósito. “El Plató 16 nos proporcionó la altura que necesitábamos porque el depósito te permite construir a 6 metros por debajo del nivel del suelo”, dice Crowley. “No hubiéramos podido construir este set en ningún otro plató. Verticalmente, fue el mejor con diferencia”.
La tercera localización era un antiguo centro comercial cerrado en la ciudad de Hawthorne, donde construyeron un torno enorme. “Es una entrada subterránea a un torno industrial, fuerte, hecho de hormigón. Lo construimos allí porque tenía ese estilo arquitectónico brutalista”, dice Crowley.
En total había cuatro tornos, cada uno con su propio diseño: uno se construyó en el almacén de Estonia; dos se construyeron en el Hawthorne Mall; y el cuarto se construyó en el Plató 23 de Warner Bros. “Esos sets eran extraordinarios”, dice Hayslip. “Piensa en una puerta giratoria, pero a una escala exponencial. Eran piezas de maquinaria increíbles que se mecanizaron para poder moverlas y articularlas. Algunas eran tan grandes que podías meter coches dentro”.
TIEMPO PARA LA MÚSICA...
La última pieza creativa de “Tenet” fue la banda sonora, compuesta por Ludwig Göransson, que dice que, aunque nunca había trabajado con el director, “Chris ha tenido un impacto colosal en mi forma de abordar y experimentar el cine. Hablando con él sobre su visión de la música, enseguida me llamó la atención la profundidad de sus conocimientos musicales y sus ganas de superar los límites en la música de 'Tenet.’ Cuando empecé a componer, esas conversaciones se convirtieron en sesiones de escucha en las que diseccionaríamos los sonidos, las armonías y las texturas para luego ir refinándolos poco a poco. Para cuando Chris se fue para rodar, se llevó dos horas de música para escuchar mientras viajaba por todo el mundo. Me escribía notas desde donde estaba con ideas sobre qué sonido pertenecía a qué personaje, o cómo la música podía interactuar de manera diferente con una escena que estaba filmando ese día”.
Al describir su proceso, Göransson dice: “Hay muchas fantasías sonoras en la música de esta película. Pasé muchísimo tiempo tomando sonidos familiares y manipulándolos después, tanto orgánica como digitalmente, para que reflejaran la totalidad del mundo de 'Tenet’. Una de las mayores dificultades fue cómo proporcionar al público una hoja de ruta musical mientras experimentan algo tan conceptualmente ambicioso y sin precedentes en el ámbito técnico.”
Emma Thomas afirma: “La música siempre es una parte tan importante de cualquier película, pero en las películas de Chris, la música casi se convierte en un personaje. Ludwig aportó una frescura y una energía diferente a la música de la película. Fue fantástico y nos encantó trabajar con él”.
Después de capturar con éxito las numerosas secuencias de especialistas de la película durante el rodaje, Nolan nunca hubiera imaginado que su obsesión con la seguridad también abarcaría finalizar la música en la posproducción; pero los recientes acontecimientos forzaron un cambio de sede para grabar la música. Göransson lo explica: “Terminar la música durante la pandemia fue una experiencia muy diferente. Tuvimos suerte y pudimos utilizar las grabaciones de una sesión orquestal inicial en Los Ángeles, pero nuestro plan de hacer otras dos semanas de grandes sesiones orquestales tuvo era imposible. Cuando el mundo cambió, Chris y yo decidimos terminar los aspectos orquestales de la música grabando a todos los músicos por separado en sus casas, un proceso que suena mucho más fácil de lo que es”. El compositor señala que una vez que se mezcló todo, "ambos estábamos encantados con los resultados”.
Thomas afirma: “No creo que nadie se dé cuenta de cómo se grabó la música porque suena absolutamente increíble”.
Ahora que “Tenet” está terminado, Thomas reflexiona: “Lo que más deseo es que sea un escape, que el público se vea transportado por esta historia. En los últimos meses, todos hemos echado de menos ese tipo de inmersión en otro mundo, y estoy deseando que la gente vuelva a disfrutarlo. Y esta película lo consigue magistralmente. Te sientas en tu butaca, te agarra por la nuca, y no te suelta hasta que se acaban los créditos finales”.
Nolan concluye: “Con 'Tenet', espero darle al público una razón para volver a acercarse y volver a experimentar el cine de acción, y en particular el género de películas de espías. Quiero ofrecerles una forma diferente de verlo, para que experimenten esa emoción que yo viví de niño viendo este tipo de películas. Queremos ofrecer al público una nueva experiencia que reinyecta esa sensación de lo desconocido en las secuencias de acción de una película. Tenemos muchas ganas de llevar a la gente a un viaje que nunca han experimentado”.
EL REPARTO...
Sobre la elección del papel principal del Protagonista, Nolan dice: “Necesitábamos un actor que pudiera apoderarse de la pantalla. Para mí, uno de los momentos más importantes en la concepción de 'Tenet' fue el estreno mundial de 'Infiltrado en el KKKlan' en el Festival de Cine de Cannes. No solo me impresionó la película, sino que, al ver a John David Washington, me llamó la atención su carisma natural, que es muy evidente en la pantalla. Tuve la certeza que podía llevar sobre sus hombros el peso de la película”.
Washington dice que lo primero que lo atrajo de "Tenet" se puede resumir en un nombre: “Christopher Nolan. He visto todas sus películas, así que haga lo que haga, yo estoy dispuesto a hacerlo también. Es un narrador muy dinámico y cinematográfico en su manera de encajar esos conceptos tan elevados y construye mundos absolutamente únicos. Lo que estás viendo te cautiva, ya sea la acción, los elementos del thriller psicológico, la música ... Pero en el centro están las conexiones humanas y la forma en que él es capaz de explorar la condición humana, nuestra necesidad de compañía y los sentimientos que experimentamos. En lo que más invierto siempre es en los personajes”.
El actor recuerda: “Cuando leí el guion, lo que me llamó la atención de inmediato fue que el Protagonista es el público en muchos sentidos. El público también va a realizar el viaje que él está realizando”.
“John David es una persona tremendamente generosa y entrañable”, dice Nolan, “pero se trata de lo que puede hacer como actor, cuál es su versatilidad, cuál es su fuerza y cuánto puede canalizar en una actuación. Eso se reduce al análisis y a la comprensión del guion. La lectura que John David hizo del guion fue inmediata, precisa y muy en sintonía con lo que necesitábamos, que era una nueva versión de la figura del espía, solo, viajando por el mundo tratando de evitar una catástrofe que nos destruiría a todos y a todo lo que le rodea a él. Creo que lo entendió perfectamente desde el principio”.
“Se trata de un hombre que está dispuesto a morir, no solo por la misión sino por la gente por la que está luchando, y a mí me encanta ese tipo de papel”, afirma Washington. “Creo que dice mucho del tipo de persona que es. A lo largo de la historia, la forma en que ve la muerte se redefine un par de veces. Creo que descubre que, con esas reglas diferentes que rigen el tiempo, puede cambiar las cosas... y que podría salvar el mundo de una manera nueva. O tal vez que lo que sucede, sucede en realidad. Pero creo que nuestra forma de ver las cosas, cómo nos vemos a nosotros mismos, cambia para siempre al saber que eso es posible”.
El Protagonista cuenta con un compañero para ayudarlo en su misión. Se trata de Neil, y Thomas dice que Robert Pattinson “aporta una verdadera luz a la película, y eso es genial. Está claro que llevamos muchos años viendo y disfrutando su trabajo, pero sus películas recientes nos permitieron ver a un actor completamente diferente y despertaron nuestro interés. Fue emocionante ver cómo se las arregla para desaparecer en un papel, así que nos encantó que aceptara venir a trabajar en esta película. Es fantástico”.
Los antecedentes y las anteriores filiaciones de Neil no se revelan, y esa faceta del personaje intrigó especialmente a Pattinson. “Me interesó inmediatamente la relación de Neil con el personaje de John David”, afirma. “¿Es su amigo o su enemigo? ¿Cómo decides cuándo puedes confiar en alguien y cuándo te muestras escéptico? ¿Cómo saber si puedes fiarte de tus instintos? Son asuntos complicados en el mundo tal y como lo conocemos, pero me gustó ver lo exponencialmente complicadas que pueden volverse esas cosas cuando las reglas de la realidad conocida cambian y se invierten. ¿Cómo se cambia o se fortalece el lado humano de las cosas cuando ciertos personajes carecen de lo que conoces? Neil funciona con una combinación de pericia, experiencia e instinto. No consigues saber mucho, así que debes confiar en algo superior a ti mismo y hacer un acto de fe... y ese acto de fe es más interesante cuando no sabes en lo que crees o si lo que estás haciendo está bien o mal. Y eso me gusta”.
Para ambos actores, unidos en su primer gran largometraje de acción, la confianza no fue un problema. “JD es el mejor", dice Pattinson. “Fue un rodaje complicado, y él siempre aportaba una energía y una actitud positiva a prueba de todo. Así que fue genial”.
“Me encanta la forma de trabajar de Rob”, dice Washington. “Casi nunca necesitábamos hablar demasiado sobre lo que estábamos haciendo; dejábamos que las cosas sucedieran. Para ser sinceros, todo estaba escrito. Todo estaba en el guion. Sólo había que aplicarlo y estar abierto a los matices o sorpresas que se presentan cada día, darles la bienvenida con los brazos abiertos y seguir adelante”.
La persona que ocupa un lugar central en la misión del Protagonista es un poderoso oligarca ruso llamado Andrei Sator. “Como es lógico, tiene que haber un antagonista”, observa Kenneth Branagh, que interpreta el papel. “Cuando Chris y yo hablamos de él, me dijo que este tipo es tan malo como ellos, 'un espantoso trozo de humanidad', que es como lo definió. Sin embargo, lo que escribió le otorga una historia personal que es violenta y traumática y eso hace que no simpatices demasiado con Star, pero puedes llegar a entender por qué haría un pacto tan faustiano.
“La naturaleza estratificada de la historia es un rompecabezas atrapado dentro de un enigma que, desde mi punto de vista, comienza con Sator”, continúa diciendo el actor. “Es despiadado y egomaníaco y también tiene la cualidad más peligrosa en un personaje como este: tiene energía y es capaz de llegar hasta el final, así que es alguien a quien todos debemos temer. Ese tipo de amoralidad es realmente aterrador en un ser inteligente que es capaz de semejante imprudencia, y los riesgos que asume son lo que pone en peligro al resto de los personajes y a nuestro mundo”.
Thomas comenta: “Creo que a Ken le atraía muchísimo el desafío de interpretar un papel que nunca había hecho. Es cierto que le he visto interpretar antes al malo, pero nunca en la forma de un hombre tan aterrador y tan espantoso. Pero más allá de todo eso, lo más impresionante de la interpretación de Ken es que es el hombre más atento y encantador y conocerlo es un verdadero privilegio. Fue genial tener una agradable charla con él en el set y después ver cómo se convierte en un monstruo en un abrir y cerrar de ojos. Y lo hace de manera totalmente convincente”.
Sator está casado con una mujer llamada Kat, interpretada por Elizabeth Debicki que, cuando leyó el guion por primera vez, se preguntó inmediatamente: “¿Por qué está con esta persona? ¿En qué se basa esa relación? Desde el principio, tuve muy claro que Kat era una mujer estaba ocultando muchas cosas sobre sí misma para poder sobrevivir y que estaba lidiando con un sentimiento de culpa y una confusión que la paralizan, aunque intenta de mantener la cabeza fuera del agua en todo momento. Siempre se está preguntando: '¿Cómo me he metido en esta situación? ¿Cómo he llegado hasta aquí?' A pesar de que no puede escapar y que lo soporta todo para estar cerca de su hijo, no siente una víctima de las circunstancias porque asume toda la responsabilidad que conllevar estar con Sator. Y esa dicotomía es una parte muy importante de su lucha a lo largo de la película. Las dificultades a las que se enfrenta este personaje están descritas con enorme fuerza y riqueza”.
Thomas afirma que le papel de Kat tuvo que volver a crearse para Debicki. “En un principio el papel era de alguien mayor, pero la había visto en 'Viudas' y su interpretación en esa película me impactó. Le pedí a Chris que pensara en ella para el papel y estuvo de acuerdo. Así que el papel de Kat se reescribió pensando en Elizabeth y está fantástica”.
“Tuve la sensación de que Chris había escrito el papel de una mujer muy fuerte y lo cierto es que su fuerza es su inteligencia. Kat es una negociadora muy rápida e intuitiva. Usa su inteligencia para manipular situaciones cuando lo necesita. Tiene ese tipo de inteligencia. Es capaz comprender lo que pasa en una habitación en un abrir y cerrar de ojos y le gusta ir por delante de ti. Así es como ha logrado sobrevivir”, dice Debicki. “Además tiene un sentido del humor sarcástico que Chris denominaría 'humor negro', que me encanta. Cuando te dan un guion tan profundo e interesante y un papel como el de Kat, y te pones a trabajar con alguien tan increíble como Chris Nolan, te dejas llevar. Porque ¿qué otra cosa puedes hacer? Nadie puede compararse con lo que hace Chris: Crea una epopeya de supervivencia y la entrelaza con una historia increíblemente humana. La vida no suele darte tantos regalos en el aspecto creativo. Y eso es lo que ha sido para mí esta película”.
Uno de esos regalos, dice, fue actuar junto a Branagh. “Fue un gran privilegio trabajar con Ken. Es evidente que es un actor excepcional, pero también es una persona amable, encantadora y muy divertida. Tenemos que internarnos en lugares oscuros con nuestros personajes, así que estoy agradecida de que mi Ken fuera mi compañero de escena. Ambos comprendimos la intensidad de las imágenes que estábamos trasladando a la pantalla al contar la relación entre estas dos personas”.
La admiración es mutua. “Ha sido un placer trabajar con Elizabeth”, afirma Branagh. “Tiene un dominio majestuoso de sí misma que no es muy propio de su edad, pero también tiene ese punto de descaro y de futilidad. Su interpretación es fascinante”.
La veterana actriz india Dimple Kapadia se incorporó a este elenco internacional al encarnar a Priya, una mujer que vive en Mumbai y que posee una información vital sobre Sator. “Estoy muy agradecida de formar parte de esta película; fue mi momento 'Cenicienta en Hollywood'”, dice la actriz. “Cuando leí el guion, me fascinó. Es Nolan en estado puro y es absolutamente espectacular”.
Su compañero de reparto Aaron Taylor-Johnson está de acuerdo. “Chris crea mundos en un reino de ciencia ficción, pero consigue que se asienten en la realidad. Todos tienen la sensación de que son personajes posibles y con los que se pueden identificar y sientes empatía por ellos”.
Taylor-Johnson encarna a Ives, a quien describe como “un especialista paramilitar en el campo de la inversión y un líder de equipo en la misión del Protagonista. Tuve la suerte de pasar tiempo con los asesores militares durante la preparación de la película. Cuando abordas cualquier papel, quieres darle la mayor autenticidad posible, y mi trabajo es tener listas esas herramientas para que un director las aproveche”.
El reparto principal de “Tenet” también cuenta con Martin Donovan, Fiona Dourif, Yuri Kolokolnikov, Himesh Patel, Clémence Poésy y el legendario actor al que Thomas se ha referido como su amuleto de la buena suerte y que no es otro que Michael Caine. “A estas alturas, una película no sería una película de Chris Nolan sin Michael Caine”, dice sonriendo Thomas. “Tenemos el privilegio de poder trabajar con él de manera continua”.
Aunque es habitual que los actores entrenen para una película, el entrenamiento para "Tenet" no tenía nada de habitual. Nolan lo explica: “Lo interesante de 'Tenet' es que, al entrar, se asume que puedes aprender las reglas intelectualmente y luego ser capaz de visualizar las cosas, pero ese no fue el caso. Tuvimos que definir las cosas y examinarlas continuamente oponiéndolas al conjunto de reglas, así que todo el mundo debía estar muy alerta. No era algo que pudieras comprender instintivamente; exigía trabajo y entrenamiento. En el caso de los actores y el equipo de especialistas consistía en comprender los conceptos, pero también debían desarrollar procedimientos para autocontrolarse y comprobar la lógica de lo que estaban haciendo”.
“Fue un entrenamiento de especialista muy innovador”, afirma Washington. “Debía ejercitarme y volver a ejercitarme más y más hasta que no pensaba en ello, solo podía reaccionar. Sabía que mi cuerpo podía hacerlo, pero eso requería un sinfín de repeticiones, día tras día. Mi experiencia como atleta me sirvió más que en cualquier otro proyecto en lo que se refiere a las exigencias físicas y también en la mentalidad de guerrero. La faceta física de lo que estaba haciendo también me dio mucha información sobre quién es el Protagonista, por lo que ese aspecto de trabajar el personaje desde fuera me vino muy bien en este caso en particular”.
El equipo de especialistas era responsable de enseñar al reparto, pero primero tuvieron que aprender a dominar los movimientos ellos mismos. El coordinador de especialistas, George Cottle, recuerda: “Hubo mucho ensayo y error; fue un proceso duro, pero también fascinante. John David era el que tenía más que aprender y lo cierto es que lo dio todo. Es imposible hacer más. Se entregó en cuerpo y alma y creo que eso se va a notar en la pantalla”.
“Fue genial porque George y todos los muchachos dijeron que nunca habían hecho algo como esto. Y ellos lo han visto todo y han hecho de todo”, dice Washington. “Fue estupendo que todo el equipo dispusiera del tiempo necesario para entrenar porque eso nos permitió conseguir fluidez y ritmo”.
A Nolan le impresionaron las habilidades físicas de Washington y estaba muy agradecido por el compromiso que mostró el actor. “Una película de acción y espías es muy exigente y el papel de John David es extremadamente físico. Después, cuando le añades la capa de inversión, le estás imponiendo aún más exigencias. Si no hubiéramos tenido un intérprete con tanto talento y energía, hay cosas que habría sido imposible hacer delante de la cámara. Es lo que sentí en esta película, sobre todo con John David, pero también con Rob Pattinson y Ken Branagh: cuanto más pudieran sumergirse en el espíritu de lo que iba a exigir esta película, más íbamos a poder hacer ante la cámara. De esa forma lograríamos la textura y la inmersión total”.
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