 |
|
SINOPSIS
Violetta deja atrás su pasado para iniciar una nueva vida...
INTÉRPRETES
MARTINA STOESSEL, ANGELA MOLINA, JORGE BLANCO, LEONARDO CECCHI, MERCEDES LAMBRE, CLARA ALONSO, ADRIÁN SALCEDO, RIDDER VAN KOOTEN, FRANCISCO VICIANA
MÁS INFORMACIÓN DE INTERÉS
CRITICA
TRÁILER'S
BSO
CLIPS
CÓMO SE HIZO
VIDEO ENTREVISTAS
AUDIOS
PREMIERE
GALERÍA DE FOTOS
https://cineymax.es/estrenos/fichas/119-t/97765-tini-el-gran-cambio-de-violetta-2016#sigProId53efc75624
PREMIOS Y FESTIVALES
INFORMACIÓN EXCLUSIVA
Walt Disney Studios atesora una enorme tradición a la hora de encontrar talentos jóvenes y voces artísticas frescas, así que trabajar con Martina 'Tini' Stoessel no fue una decisión complicada para el reconocido productor Pablo Bossi, que se embarcó en el proyecto como fan y como productor.
“Soy un argentino que vive en España así que he seguido de cerca el fenómeno de 'Violetta' de Disney y la carrera de Martina ‘Tini’ Stoessel”, dice Bossi. “Como productor de cine, tenía muchas ganas de hacer algo con ella porque creo que estamos ante una auténtica estrella. Así que empecé a desarrollar un guión con Disney para llevar a Martina a la gran pantalla”.
El primer paso fue elaborar un guion que fundiera música y drama para contar la historia de un viaje interior transformador. El director Juan Pablo Buscarini se siente muy orgulloso de que cada fase de la trama, cada canción, cada baile y cada personaje formen parte de la película por un motivo importante. “La combinación de historia original y reto cinematográfico me entusiasmó", afirma.
La película empieza con Violetta regresando a su ciudad natal de Buenos Aires después de una larga gira por todo el mundo. Ansía descansar para centrarse en su futuro y volver a conectar con amigos y familiares, pero su manager Willy ya le ha organizado una apretada agenda que incluye la grabación de un nuevo álbum. Y sin tiempo para respirar, se enfrenta a la inesperada noticia que la obliga a cuestionarse todo y a tomar una decisión espontánea que cambiará su vida para siempre. “Los fans sólo ven el glamour que rodea su vida, y no ven la presión y el agotamiento que conlleva la fama. Y ahora Violetta está pagando el precio del éxito”, dice Buscarini.
Violetta acepta la misteriosa invitación de su padre para visitar a una vieja amiga de la familia en la otra punta del mundo. Así que deja atrás toda su vida para pasar un verano en un precioso pueblo costero italiano lleno de artistas y creatividad. Y mientras Violetta abre los ojos a nuevas e interesantes oportunidades, surgen nuevas amistades e influencias.
Se trata de un viaje que no sólo cambia la vida personal de Violetta sino también su vocación artística. Pablo Bossi afirma: “Es la historia de una crisis personal que lleva al descubrimiento de nuevos sentimientos, nuevos amigos y un estilo musical renovado y potente”.
Aunque la historia tiene suficiente drama, misterio y emoción para que sus personajes vivan experiencias en lugares nuevos e inesperados, también era necesario una apariencia y un feeling que reflejara temas más adultos y sacara partido a los espectaculares escenarios de rodaje de la película. Buscarini pidió a su antiguo colaborador Josu Incháustegui que se incorporara al proyecto como director de fotografía, y a él le entusiasmó la oferta.
“Josu comprendió inmediatamente que la película necesitaba personalidad y sensibilidad”, explica Buscarini. “Necesitaba un feeling visual brillante, pero sin olvidar el género y el tipo de público al que va dirigida la película. Josu logró el equilibrio perfecto, y supo dotar a la película de magia y refinamiento”.
“Juan Pablo y yo estábamos de acuerdo en sacar el máximo provecho a la increíble luz que hay en Sicilia”, reconoce Incháustegui. “Así que hicimos un montón de pruebas hasta que encontramos las lentes adecuadas que dieran a la película un aspecto naturalista”.
Todos los implicados sentían una gran ilusión por el proyecto, pero en el caso de Martina Stoessel, la estrella de cine, actriz y músico era mucho más personal.
“Había viajado por todo el mundo haciendo giras y espectáculos en directo y había rodado una serie de televisión cinco días a la semana, pero nunca había hecho una película", dice Stoessel. “Lo cierto es que es otro mundo, y superó todas mis expectativas. En televisión, solía rodar 15 escenas al día, mientras que en la película sólo dos, porque todo es más detallado. Me encantó, y me despertaba feliz todos los días gracias a un equipo y a un director increíbles”.
Con una historia que afecta a todos y a todo en la vida de Violetta, y una aventura de trotamundos con fantásticos actores internacionales, "Tini. El gran cambio de Violetta" cuenta con un reparto repleto de caras conocidas y de otras que seguro que se convertirán en ídolos de los fans.
El reparto de la popular serie que figura en la película incluye a Martina ‘Tini’ Stoessel (Violetta/Tini), Jorge Blanco (León), Mercedes ‘Mechi’ Lambre (Ludmila), Clara Alonso (Angie) y Diego Ramos (Germán).
El director Juan Pablo Buscarini insiste en la importancia que tienen. “Los personajes que hemos heredado de "Violetta" son absolutamente necesarios para conformar el argumento”, reconoce Buscarini. “Germán, el padre de Violetta, actúa como catalizador en su transformación emocional, Ludmila aporta la parte cómica que es fundamental. Por su lado, León crea parte del conflicto que lleva a Violetta a reinventarse a sí misma”.
La prueba del sutil equilibrio del guión es que cada miembro del reparto secundario de la serie es fundamental para el drama y además sirven para mostrar la evolución de sus personajes. A Jorge Blanco, que interpreta a León, el novio de Violetta, le entusiasmó la idea de explorar la exitosa pero complicada situación en la que se encuentra su personaje.
“León está en Los Ángeles grabando su álbum, rodando un vídeo musical e iniciando una carrera como cantante. Pero Hollywood y la fama son un mundo complicado y difícil, y no siempre está rodeado de gente que le conoce y le quiere", dice Blanco. “Está en un entorno muy profesional pero que no es muy estable a nivel personal. León y Violetta están separados y es difícil mantener una relación en esas circunstancias. Así que la cosa se pone interesante”.
Cuando empieza la película, Violetta y su mejor amiga Ludmila están en lugares opuestos del mundo. Lambre dice de su personaje: “Está viviendo en otro país e intentando poner en orden su vida. Ha madurado mucho, pero sigue siendo la misma. Sigue siendo igual de alocada y eso es maravilloso”. Cuando el drama se desencadena, Ludmila es fundamental para ayudar a Violetta en un momento de dificultad, y recurre a León para vivir una gran aventura. “Me encanta rodar con Jorge Blanco”, reconoce Mechi. “Nos conocemos desde hace cinco años y hay un química especial entre los personajes”.
Germán, el padre de Violetta, y Angie, su madrastra, la apoyan cuando las cosas se ponen difíciles. Germán decide invitar a Violetta a que vaya a visitar a Isabella (Ángela Molina) a su refugio de artista. Y eso dice mucho de la madurez de la relación padre-hija. La evolución del personaje de Violetta se identificaba con la de Martina ‘Tini’ Stoessel a muchos niveles.
“Cuando empecé a encarnar a Violetta sólo tenía 14 años, así que mi interpretación era muy natural y surgía del interior. Con el paso de los años tanto ella como yo hemos crecido, así que en “Tini. El gran cambio de Violetta”, quería mezclar a Violetta, a Tini y a mí en la misma historia”.
Aunque las circunstancias de Violetta son únicas, Stoessel cree que su estado emocional es universal. “Me identifico totalmente con Violetta. La vida va tan deprisa que resulta fácil olvidar lo que necesitas de verdad para ser feliz”, reconoce Stoessel. “Cuando esto le ocurre a Violetta, dice “Necesito saber quién soy”, y se embarca en un viaje de autodescubrimiento. Compone un tema titulado ‘Siempre brillarás’ que refleja su estado de ánimo y el nuevo camino que acaba de encontrar”.
La decisión de Violetta de dejar atrás su vida y viajar a Sicilia da paso a un nuevo grupo de amigos que son artistas y que causan un enorme impacto en ella.
“Es importante conocer a gente nueva, otras formas de pensar y nuevas culturas, y esto es lo que le ocurre a Violetta en la película. Cada uno de sus nuevos amigos tiene un talento especial, y le ayudan a tener éxito en su viaje de transformación. No quiere decir que todos canten y bailen; hay una fotógrafa, un DJ, una diseñadora de moda, dos artistas de efectos visuales”, dice Stoessel con gran entusiasmo.
El proceso de elección del reparto se realizó en todo el mundo y el resultado fue una mezcla de caras conocidas de Disney y nuevos e interesantes talentos. Adrián Salzedo es el atractivo y humilde siciliano ‘Caio’, Georgina Amorós es la espontánea fotógrafa ‘Eloísa’, Beatrice Arnera es la diseñadora de moda ‘Miranda’, Francisco Viciana es el introvertido DJ ‘Roko’, Ridder van Kooten es el genio tecnológico ‘Raúl’, Leonardo Cecchi su primo ‘Saúl’, y Pasquale Di Nuzzo es el fanfarrón ‘Stefano’.
El reparto también lo forman la legendaria actriz Ángela Molina en el papel de 'Isabella', la matriarca artística que acoge a Violetta y a sus amigos en su casa y fomenta su creatividad y también está Sofia Carson la estrella de "Los Descendientes de Disney", que interpreta a 'Melanie', una starlet de Los Ángeles que esconde un secreto que va cambiar radicalmente el curso de la vida de Violetta.
Los fans de Disney reconocerán a Leonardo Cecchi (“Alex & Co.” de Disney Italia y “Radio Alex”) y a Ridder van Kooten ("Jonge Garde” de Disney Channel Holanda) como los primos Saúl y Raúl, unos genios de la tecnología.
Aunque ambos actores eran perfectos para los papeles, había un pequeño problema: ¡Ninguno sabía hablar español! Van Kooten reconoce que fue un curso intensivo tanto de lengua como de confianza. “Tuve que aprender el idioma lo más rápido posible así que no tuve tiempo para asustarme. Fui a por todas, y aunque fue difícil, disfruté mucho con las clases y ha sido una experiencia muy enriquecedora”.
Pasquale Di Nuzzo (Stefano) tampoco hablaba español, pero el reto también residía en la personalidad de su personaje.
“Stefano es un gran personaje pero muy distinto a mí. Vive en un mundo diferente rodeado de dinero y lujo. Además cree tener siempre razón y hace lo que quiere, y eso le lleva a enfrentarse con el resto de los personajes”, cuenta Di Nuzzo.
Miranda y los habitantes del refugio de Isabella influencian la vida de Violetta de forma más emocional y creativa. “La ropa es el mundo de Miranda, pero le asustan los colores, lo que es una metáfora de tener que enfrentarse a la complejidad de los problemas de la vida", dice Arnera. ‘Violetta, Miranda y Eloísa comparten habitación y se hacen amigas enseguida”.
Eloísa es una fotógrafa muy espontánea, y un personaje que le ha gustado mucho interpretar a Georgina Amorós. “Eloísa está llena de vida, todo lo ve en clave positiva. Cuando Violetta llega a Italia, le faltan herramientas para encontrarse a sí misma y para disfrutar del momento. Eloísa le ayuda a abrir los ojos a la belleza que le rodea", dice Amorós.
Francisco Viciana completa el grupo de jóvenes creadores que se alojan en el refugio de Isabella y encarna a Roko, un personaje tímido pero muy interesante. “Roko es un DJ profesional al que le cuesta comunicar sus emociones así que se expresa a través de su música. Roko enseña a Violetta que lo más importante es escuchar a los demás, y que para encontrar tu propio sonido, tienes que escuchar”.
La mujer que reúne a todas estas complejas y fascinantes personalidades es Isabella, una artista bohemia retirada que interpreta la legendaria actriz española Ángela Mollina. Isabella utiliza el refugio para enriquecerse ella misma y para servir de inspiración a los demás. Molina adora el personaje y el mensaje que transmite la película. “Isabella se siente muy comprometida con lo que puede aportar a esos jóvenes artistas y les ofrece su villa para que puedan vivir, expresarse y encontrarse a sí mismos”, revela Molina. “Isabella no tiene nada que enseñar pero sí mucho que ofrecer”.
Y lo que es más importante posee secretos de familia que son la clave para transformar el pasado, el presente y el futuro de Violetta. “Empieza con una amistad entre los padres de Violetta e Isabella que se ha enfriado. Es una historia tanto sobre el amor al arte y como sobre el amor entre dos jóvenes", afirma la actriz.
Otro papel muy importante es el de Caio (Adrián Salzedo), un pescador y recolector de fruta local que no ha salido nunca de la isla que Violetta visita ese verano. Sueña con convertirse en bailarín, y a medida que se van conociendo, su conexión cambia sus vidas en una forma que jamás habrían imaginado.
"Caio es un chico con mucha vitalidad y energía", reconoce Adrián Salzedo. “Siempre intenta hacer lo correcto para todos los que le rodean. Tiene amigos, familia y un trabajo así que no necesita dinero porque es rico de otra manera. Tiene todo lo que necesita una persona para ser feliz”.
La conexión entre Caio y Violetta obliga a ésta última a cuestionarse su vida y sus relaciones de forma sorprendente, y el director Juan Pablo Buscarini atribuye esta excepcionalidad al guión. “Refleja lo original que es el guión porque incluso a mí me resultó difícil describir a Caio como el rival de León”, apunta el director.
La mezcla de caras nuevas y otras de la serie de televisión planteó un reto excepcional, pero Buscarini admite que fue muy gratificante. “Las distintas personalidades y ámbitos artísticos del grupo dan cobijo a Violetta, y le ofrecen lo que necesita para avanzar en su vida", explica. “En un momento de la película, Violetta se coloca delante de cada uno de ellos y les dice lo que cada persona le ha enseñado”.
Aunque la música y el baile son pilares fundamentales de la película, y el elenco canta una serie de números musicales, el director Juan Pablo Buscarini se apresura a señalar que para él, "Tini. El Gran Cambio de Violetta " no es un 'musical'.
“Las comedias musicales como "Violetta" entran en un mundo de fantasía cada vez que hay una canción o una interpretación musical, pero yo sabía que ese enfoque podría entrar en conflicto con el drama y la historia emocional. Así que cuando Violetta canta en la película, siempre está cantando en una situación creíble", dice el director. “No se convierte en un mundo de fantasía con coreografías perfectas. Cada canción y cada letra ocupan un lugar en la trama. La música es lo que impulsa y hace avanzar la historia”.
El productor musical Francisco 'Pancho' Cia, que ha trabajado en estrecha colaboración con Martina Stoessel en "Violetta" de Disney y en espectáculos en directo de la gira mundial de "Violetta", creó arreglos adicionales para las canciones producidas por Hollywood Records, y subraya la importancia de que la música resulte realista. “Hablamos con Juan Pablo Buscarini desde el principio, y lo más importante fue hacer escenas musicales que fueran lo más orgánicas y naturales posible”, dice Cia.
Las canciones no sólo son importantes para que la narración general avance. Están estrechamente ligadas a la evolución del personaje de Tini, y le permiten expresar sus sentimientos más íntimos. Martina Stoessel se identifica con las frustraciones de su personaje en la búsqueda de su voz interior.
“Tanto para Violetta como para mí, la música es una de las cosas más importantes de nuestras vidas. Ya sea lo primero que hagas por la mañana o lo último por la noche, cantar una canción puede cambiar por completo tu estado de ánimo. A través de mis fans en las redes sociales, veo que la música puede unir al mundo, y eso es maravilloso", reconoce Stoessel.
Y añade: "La música es muy importante, es el vehículo de expresión de los sentimientos de Violetta y su forma de transmitir amor y afecto. Cada tema es importante porque representa un cambio en la historia”.
Los temas son una mezcla de estilos y géneros. Martina Stoessel canta cuatro canciones: ‘Se escapa tu amor’, ‘Confía en mí’, ‘Siempre brillarás’, y un dueto con Jorge Blanco, ’Yo te amo a ti'.
La película también incluye tres canciones adicionales grabadas por otros miembros del reparto. Incluyen ’Light Your Heart’, que canta Jorge Blanco, y dos canciones que no aparecen en la banda sonora, la canción original ‘Freeze Frame’, que canta Leonardo Cecchi, y una versión de 'Reality' de Lost Frequencies, que cantan Adrián Salzedo, Leonardo Cecchi, Ridder van Kooten y Beatrice Arnera.
Mio Vukovic es Vicepresidente Senior A&R y Jefe Creativo de Hollywood Records/Disney Music Group, así como director A&R de Martina, y ha participado activamente en el proceso de selección de las canciones. “Las canciones que hemos escogido encajan en el objetivo principal de la película, que es la transformación personal de Violetta. Esta evolución se aprecia cuando está escribiendo 'Siempre brillarás' e intenta hacer una canción redonda. Es entonces cuando se da cuenta que podría ser una artista de verdad. Si quiere elegir ese camino necesita canciones que tengan cierta sofisticación musical o de lo contrario sonarían falsas. Todas las canciones son un poco diferentes, pero el denominador común de todas ellas es que sus letras son emotivas y sinceras”.
No es de extrañar que, con ese peso emocional y la implicación personal que hay en cada tema, Martina Stoessel se involucrarse muy activamente en la selección de canciones. “Martina estuvo muy implicada durante todo el proceso", asiente Vukovic. "Tuve feedback suyo sobre cada canción y dio luz verde a todos temas que acabaron incluidos en la banda sonora”.
‘Siempre brillarás' es el colofón de la película, y sirve de puente musical y emocional entre su pasado y su futuro. Así que es lógico que la canción revista una importancia especial para la estrella. “El tema que más me gustó cantar fue ‘Siempre brillarás’. Es una canción que te pone la piel de gallina. Es genial que la cante una chica de 19 años como yo porque tiene un mensaje con él que se pueden identificar chicas jóvenes y adultos”, reconoce Stoessel.
Es un tema con un mensaje tan fuerte y universal que también es la primera canción que Stoessel ha publicado tanto en español como en inglés. “A Martina le gustan las canciones que tienen un mensaje positivo y 'Siempre brillarás' le encantó", reconoce Vukovic. “Es una canción muy positiva que representa a la perfección su viaje para convertirse en una artista, y ese momento final en el que todo encaja”.
Otro tema destacado es 'Yo te amo a ti', el dueto de Violetta y León, que trata sobre la distancia emocional y física entre la pareja. "Me gusta especialmente el dueto que canto con Violetta; es un tema precioso”, dice Jorge Blanco. “Las canciones matizan los momentos álgidos y las emociones, y añaden un extra a cada escena. Me encantan las composiciones”.
Tras su éxito interpretando varias canciones en "Alex & Co.", la serie de éxito de Disney Italia, pidieron a Leonardo Cecchi que prestara su voz a "Night of the Fireflies", la gran escena final de la película.
“El tema se llama ‘Freeze Frame’, y es preciosa. Estoy feliz de haberla podido cantar", dice Cecchi. “Es un género que no había cantado nunca. Se escucha durante una fiesta en la playa, así que cuando la grabé tuve que imaginar que era un DJ que cantaba ante un público muy numeroso en una gran fiesta. La música es una parte muy importante de la película y no sería lo mismo sin ella”.
El tema de Cecchi sirve de banda sonora al número de baile más importante de la película, y el equipo quiso que la coreografía fuera espectacular. El coreógrafo Jerry Reeve, que ha trabajado con One Direction, Kylie Minogue y el UK X-Factor, se incorporó para ayudar a crear bailes tan fascinantes como las canciones.
"Intentamos integrar la música y el baile en todas las partes de la película. Hay unas cinco escenas de baile clave repletas de diferentes tipos de movimientos, escenas en las que baila todo el reparto, momentos en los que baila una pareja, y escenas donde baila la gente del pueblo. Las canciones también son muy diferentes, por lo que la coreografía de los bailes que hemos incluido añade una capa de emoción y pasión", dice Reeve.
El reparto ampliado estaba entusiasmado de participar en la escena de la fiesta ‘Night of the Fireflies’. “¡Pasamos dos días rodando la coreografía y la energía era fantástica!”, dice entusiasmada Georgina Amorós que interpreta a Eloísa. “La mayoría de nosotros no había bailado nunca en una película. Estábamos un poco parados pero cuando pusieron la música y los bailarines empezaron a bailar nos transmitieron muchísima energía. ¡Fue un subidón!”
Una parte importante del viaje personal de Caio es su deseo de convertirse en un bailarín profesional, así que la formación de Adrián Salzedo en ese campo resultó muy útil. Salzedo trabajó estrechamente con Reeve para asegurar que sus actuaciones fueran tan impresionantes como exigía su personaje.
“Tuve que trabajar más horas de lo esperado en el tema del baile”, reconoce Salzedo. “La primera secuencia que filmamos fue una de las más difíciles, ya que era el baile final en el que Caio muestra todo su talento. Tuve que practicar durante muchas horas para alcanzar el nivel necesario. He pasado toda mi vida haciendo artes marciales, y Jerry creó bailes con mucha fuerza para ayudarme. Es un coreógrafo fantástico”.
Reeve reconoce que se quedó alucinado con los movimientos de Martina ‘Tini’ Stoessel en la pista de baile. “No sabía muy bien quién era cuando empecé esta película, pero enseguida me di cuenta de que era una estrella absoluta y una mujer fascinante", reconoce Reeves. “En los últimos cuatro años se han hecho coreografías en "Violetta", pero queríamos apostar mucho más fuerte en la película. Tiene muchos ojos clavados en ella y se nota la presión, pero es una bailarina increíble.
Nunca se discutió la inclusión del baile y la música en la película, sobre todo teniendo en cuenta el descomunal éxito de "Violetta", que ha vendido más de 3 millones de bandas sonoras y 1,4 millones de entradas en espectáculos en directo hasta la fecha. Tanto Martina 'Tini' Stoessel como Jorge Blanco han fichado por Hollywood Records, y el álbum debut de Stoessel -que sale al mercado en abril de 2016- incluirá canciones de la banda sonora de la película y representa la evolución del talento musical de la estrella.
“Las canciones de la película son una especie de puente a las nuevas canciones que estarán en su disco en solitario", dice Vukovic. “A Martina le encanta bailar y salir de fiesta, y aunque tiene grandes baladas, el álbum en solitario será más bien un disco rítmico. Estamos trabajando con excelentes productores que han creado canciones con Maroon 5, Jason Derulo, Demi Lovato, Nick Jonas, Chris Brown, Kendrick Lemar, Flo Rida, Taio Cruz y muchos más”.
Jorge Blanco también aspira a tener una larga carrera musical, y le encantó tener la oportunidad de actuar y cantar en la película. “Me siento muy afortunado porque este proyecto abarca dos cosas que quiero hacer el resto de mi vida: la interpretación y la música", reconoce Blanco. “Después de este proyecto quiero concentrarme en mi música e iniciar una carrera en solitario, así que estoy entusiasmado. En mi tiempo libre me dedico a escribir y a componer mis propias canciones".
Vukovic también está trabajando con Blanco en su álbum de debut y está entusiasmado. “Jorge también está haciendo un disco muy rítmico, soul y pop, en la órbita de Derulo, Nick Jonas y Enrique Iglesias. Es un gran cantante y un buen compositor", afirma.
Está claro que el futuro musical de ambos artistas es muy prometedor, y aportan el mismo enfoque profesional y energético a su música que han aportado a la película. “Tanto Martina como Jorge trabajan muy duro y también se divierten. Te hacen sentir como una familia cuando trabajas con ellos, y es una experiencia maravillosa", dice Vukovic. "Ambos son grandes artistas”.
A la hora de elaborar una identidad, la moda puede expresar la creatividad tanto como la música y el baile. Así que cuando el director Juan Pablo Buscarini comenzó a pensar en el diseño de los looks de los personajes secundarios artísticos y la creación de una identidad estilística que marcara la transformación personal de Violetta, sabía que el proyecto necesitaba una mano experimentada que diera las pautas en el estilo de ropa que llevarían los personajes. Así fue como la diseñadora de vestuario Connie Balduzzi se incorporó al proyecto.
“Ya había trabajado muchas veces con Connie y sabía que era una diseñadora de vestuario excepcional", dice Buscarini. “Una película como ésta necesitaba alguien que conociera las tendencias y que comprendiera su complejidad. Connie aportó un enfoque innovador al proyecto, y la película puede presumir de contar con un vestuario de altísimo nivel”.
La combinación de la potente identidad expresiva de los personajes y del reparto internacional encajaba a la perfección con Balduzzi; así que le encargaron definir la identidad estilística de la película. “Fue apasionante crear un universo con el que todo el mundo pudiera identificarse", reconoce. “Cuando empecé a darle vueltas a los personajes, comprendí que cada uno proviene de partes diferentes del mundo, así que tenía que reflejar algo de todos esos sitios en cada personaje”.
La mayor parte de la película se desarrolla en un pueblo costero italiano de ficción donde Violetta se refugia para huir de la locura del mundo exterior. Elaborar el aspecto y el feeling de un paraíso como ese dio como resultado una mezcla de estilos clásicos.
“Me pareció que sería interesante crear un mundo intemporal, así que fui a un sastre y escogí un montón de ropa de los años 40, 50 y 60, y los mezclé con prendas actuales para crear un mundo que encajara con la película. Después de ver un montón de fotografías y localizaciones, y comprender lo que estaba creando el diseñador de producción Gianpaolo Rifino para la película, di con el tipo de estética que encajaba con el mundo que estábamos creando”.
Y continúa diciendo: "Escogimos paletas de color para cada escena y gracias a los diseños de Gianpaolo supe lo que tenía que hacer en esta película. Fue muy interesante reflejar el espíritu de cada uno de los personajes, e intentar darles un look especial”.
Aunque la personalidad de cada personaje brilla a través de su vestuario, Balduzzi quería que sus looks fueran realistas. "Estos personajes tienen muchos cambios de vestuario, pero no se puede tener 200 trajes, así que era más fácil crear un armario para cada uno, y luego empezar a mezclar las prendas y jugar con ellas, como hace la gente en la vida real. Aunque soy yo la que imagino el estilo de cada personaje y visto a los personajes, ellos son los que construyen el personaje, y aportan vida a la ropa", reconoce la diseñadora de vestuario.
Vale la pena destacar los estilos de Violetta, que cambian a medida que su personaje evoluciona. “La idea consistía en mostrar el crecimiento de Violetta y cómo se convierte en Tini, y eso queda patente en su vestuario. Cuando llega a Italia, pierde la maleta y se puede apreciar claramente su nuevo estilo, con esa libertad que siente al llegar a un sitio nuevo en el que puede por fin ser ella misma”, afirma Balduzzi.
“La paleta de colores de Violetta es muy llamativa y cuando se convierte en Tini los tonos son más pastel. No sé si su estilo evoluciona, pero está claro que ella se transforma. Todos atravesamos fases de transformación. Cuando empiezas a convertirte en adolescente y te vas haciendo mayor, encuentras cosas con las que identificarte, y eso se refleja en la película”.
Es una evolución en el estilo con la que Martina ‘Tini’ Stoessel podía identificarse. De hecho, disfrutó muchísimo colaborando con el equipo y aportando ideas para definir la evolución de la ropa de Violetta. “Me encanta aportar ideas a los looks de moda, así que fue genial trabajar con nuestra estilista para crear el vestuario de Tini. También trabajé estrechamente con Valentino que facilitó casi toda la ropa que llevo en la película", dice Stoessel.
“Quería que mi personaje cambiara de estilo, y Valentino me dio exactamente lo que necesitaba Tini. Cada momento de la película, ya sea romántico, dramático o musical, va aparejado con un vestuario que tiene sentido. Me encantaron sobre todo los vestidos que mi personaje lleva en los duetos de Violetta con Jorge Blanco, cuando descubre la verdad sobre la historia de su familia y cuando acaba componiendo ‘Siempre brillarás’’. ¡De hecho me los llevé a casa cuando acabó la película!”
Balduzzi afirma que los fans más versados en moda comprenderán mucho mejor a los personajes guiándose por su ropa. “Caio es un personaje oriundo de la isla que visita Violetta. Viene de una familia en la que su padre ha muerto así que trabaja para llevar dinero a casa y pensé que eso tenía que reflejarse en su vestuario. Cuando se conocen, lleva un uniforme del barco en el que trabaja y poco más", dice la diseñadora. “Caio es un personaje muy natural, así que su ropa es de algodón y lino, y lleva los típicos zapatos sicilianos”.
“El reto consistía en transmitir la esencia de cada personaje a través de su vestuario. En el guión, Roko es un personaje que viste de negro, así que tuve que encontrar una chaqueta que tuviera personalidad para que cuando lo vemos no pareciera sólo una persona que viste de negro, sino un personaje", apunta. “Eloísa es una fotógrafa un poco hippie, y eso se refleja en su ropa. Miranda es una diseñadora que tiene problemas con el color y que siempre va vestida de blanco y negro, así que tuve que crear una identidad muy definida para ese personaje”.
Beatrice Arnera (Miranda) ha sabido comprender la esencia de la lucha a la que se enfrenta el personaje y cómo se puede utilizar el estilo para ver el mundo de forma diferente. “La ropa es su mundo", anota. “Llegado un momento, Miranda intenta ayudar a Violetta utilizando una metáfora sobre ropa porque ese es su punto de referencia. Le dice a Violetta: 'Puedes llevar dos vestidos al mismo tiempo. Uno siempre por encima del otro. Pero tú sabes que sigues llevando uno debajo”.
La película también presenta a una serie de actores que trabajaban en la serie y que necesitaban otro tipo de identidades estilísticas.
“En el caso de León y Ludmila he intentado resaltar la evolución de los personajes pero haciendo referencia a los estilos que les caracterizaban en el pasado. León está en Los Ángeles, un mundo totalmente diferente, así que su ropa es mucho más llamativa. Queremos mostrar lo que puede ocurrir cuando te expones a cosas nuevas, las presiones para vestirte de cierta forma, y la ruptura que se produce cuando los personajes están en lugares diferentes. Así que cuando León llega a Sicilia, su vestuario es mucho más sencillo, sólo tiene una camisa, una camiseta y unos vaqueros", apunta Balduzzi.
“Ludmila ha empezado a viajar por el mundo así que me pareció importante enseñar sus cambios de estilo a través de su ropa”, continúa diciendo Balduzzi. “Para este personaje me inspiré en Chanel, Karl Lagerfeld, y en otros artistas y diseñadores”. Y es evidente que a la actriz Mercedes ‘Mechi’ Lambre le entusiasmó el nuevo y variado vestuario del personaje.
“En la película, Ludmila cambia mucho de ropa. Tiene un estilo clásico y adulto muy europeo. Es refinado e intemporal. A mí me encanta la ropa vintage. Tiene algunas prendas estilo alta costura y eso me encanta. No me pondría toda su ropa porque no es fácil de llevar de un lado a otro, pero algunas me chiflan. ¡De hecho, ahora llevo prestados unos pendientes de su vestuario!”
El reparto y el equipo quisieron reflejar en la gran pantalla y con la máxima profesionalidad las nuevas amistades que hace Violetta ese verano. Pero nadie esperaba que se llevaran tan bien fuera del plató.
Encontrar el equilibrio en un reparto amplio de actores nuevos y consagrados, de diferentes nacionalidades y edades, era un reto considerable. Pero las relaciones que se tejieron fuera del plató dieron lugar a historias muy divertidas y a amistades muy fuertes hechas para durar después del estreno de la película.
Beatrice Arnera, que interpreta a Eloísa, recuerda una escena en particular. “Uno de mis recuerdos preferidos es cuando rodamos una escena en la que empujábamos un piano de cola por una colina para dar una sorpresa a Violetta. Sólo nos ayudaron en algunas tomas, ¡así que los cinco tuvimos que empujar ese piano enorme! Ha sido uno de los momentos más divertidos de mi vida, y nos reímos tanto que acabamos con agujetas", dice muerta de risa.
Cuando Ludmila y León se unen para encontrar a Violetta, se embarcan en una epopeya por tierra, mar y aire. También hicieron algunas amistades peludas que se convirtieron en recuerdos inolvidables para Mercedes Lambre y Jorge Blanco.
“Rodamos una escena en la que Jorge tenía que montar a caballo, pero el pobre animal no quería moverse y se quedaba parado", recuerda Lambre. “El veterinario daba de comer al animal para que se moviera, pero él hacía lo que le daba la gana. Fue divertidísimo. Rodamos otra escena en un barco en alta mar. Estaba lleno de ovejas, y una de ellas quería saltar al agua. Todo el mundo temía que si una saltaba las demás la seguirían. ¡Y la lana debe pesar un montón en el agua! Fue para morirse de risa”.
Si se le pregunta al reparto quien era el más bromista del plató, todos contestan lo mismo. “Jorge Blanco, por supuesto”, dice sonriendo Stoessel. “¡Siempre estaba haciendo gamberradas! Adrián Salzedo, que interpreta a Caio, también es hiperactivo, no puede estarse quieto dos minutos sin liarla”.
Salzedo está de acuerdo con Stoessel. “La persona más gamberra del plató era Jorge Blanco”, afirma el actor. “Le encantaba gastar bromas al reparto. Creamos grupos en WhatsApp y nos poníamos de acuerdo para gastar bromas a los demás”.
¡Blanco recuerda una broma que causó sensación y también bastante miedo! “Adrián y yo estábamos siempre de broma”, reconoce el actor. “Gastamos una broma utilizando una cabeza de maniquí y asustábamos a los actores en la oscuridad. La verdad es que daba muchísimo miedo. ¡Es una pena que no pudiéramos filmar sus reacciones!”
A medida que el rodaje avanzaba, el reparto iba intimando más y empezaron a reflejar a mimetizar las relaciones que tenían en la pantalla. Y eso sirvió para crear vínculos muy creativos. “No parábamos de cantar temas de Disney”, dice Beatrice Arnera, que encarna a Miranda. “Cantábamos temas de La Sirenita y hacíamos unos coros preciosos. ¡En el hotel había un piano y el propietario quería echarnos a la calle porque nos pasábamos el tiempo tocando!”, dice riendo.
Para Ridder van Kooten (Raúl) estas sesiones de canto son inolvidables. “No parábamos de cantar 'Bajo el mar'. Era muy divertido. Beatrice empezaba y todo el mundo la seguía. ¡Se convirtió en el tema estrella de las fiestas!", dice el actor.
Georgina Amorós dice que el reparto empezó a hacer migas con un juego de móvil. “Sólo llevábamos tres días juntos cuando rodamos la escena final del concierto. Jorge nos enseñó un juego de móvil que se llama ‘Heads Up!’ en el que tus amigos tienen que describir la palabra que está escrita en la pantalla del teléfono mientras tú lo sujetas en la frente. No nos conocíamos muy bien pero nos pasábamos horas con el juego”, confiesa la actriz. “Creo que fue en ese momento cuando nos convertimos en un grupo”.
Casi todo el rodaje tuvo lugar en Sicilia, en pleno campo. Así que no había muchas distracciones y el hotel donde se alojó el reparto se convirtió en un hogar lejos de casa.
“Nos inventamos un juego del escondite en el que sólo una persona se esconde y el resto tiene que buscarla", reconoce Pasquale Di Nuzzo. “Si veíamos a alguien, teníamos que escondernos con él. Beatrice Arnera se subió a un árbol, así que tuvimos que trepar a ese árbol y nos caímos. ¡Nos divertimos muchísimo!”
Ese ambiente familiar es lo que Adrián Salzedo quiso inmortalizar el último día de rodaje. Así que trajo un libro en el que todos tenían que firmar. “Sigo un ritual en todos los proyectos en los que trabajo. Llevo el guión al plató el último día de rodaje cuando están todos. Y hago que lo firmen", cuenta el actor. “Ponen lo que quieren, desde un garabato a una declaración de amor, cualquier cosa que deje huella. Después, cada vez que lo veo, los recuerdos vuelven”.
Gracias a sus dotes de liderazgo, el director Juan Pablo Buscarini reforzó aún más la química que había entre el reparto, creando un ambiente de colaboración y apoyo en el plató. “Juan Pablo es lo más”, afirma Mercedes Lambre. “Fue genial que confiara en mí y me diera libertad para hacer mi trabajo. Hubo una conexión fantástica entre todos nosotros y él tiene mucho que ver en eso. Es un director magnífico”.
Martina ‘Tini’ Stoessel se hace eco de ese sentimiento. “Juan Pablo está pendiente de todo. Es tremendamente responsable y respetuoso. Cuando llegué al plató no había ninguna presión. El ambiente era muy relajado. Me encanta como director”.
Es un sentimiento que también se hace extensivo a Martina Stoessel, de la que todos alaban su profesionalidad y su forma de ser tan entrañable.
“Cuando la cámara estaba en marcha, daba muestras de un rigor digno de una actriz que lleva muchos años en esto", reconoce Buscarini. “Canta maravillosamente bien, y sabe ser sutil en los primeros planos románticos o emotivos. Además también se le dan bien las escenas de acción. Es una perla rara con un potencial enorme”.
Los nuevos miembros del reparto conocían perfectamente su popularidad en todo el mundo, pero lo cierto es que superó todas las expectativas. “Antes de que me contrataran para hacer la película, ya sabía que Violetta era famosa en todo el mundo, así que me preguntaba cómo sería”, reconoce Adrián Salzedo. “Pone el corazón en todo lo que hace y tiene un talento brutal”.
La evolución de Stoessel tanto dentro como fuera del plató enternece especialmente a los que han crecido con ella. Están orgulloso de ver cómo la niña que conocieron se ha convertido en una mujer a la que todos admiran. “Es muy gracioso porque Martina siempre fue la hermana pequeña del grupo", dice Jorge Blanco. “Empezó a actuar cuando era muy pequeña, así que "Violetta" creció con ella. Es increíble ver que ya no es una niña pequeña. Ahora es ella la que enseña a los demás, como otros hicieron con ella. Me siento muy orgulloso de ver cómo han evolucionado mis compañeros porque somos como una familia. Es una sensación maravillosa”.
El viaje que emprende Violetta es geográfico pero también tiene una dimensión emocional. Acepta una invitación de Isabella para visitar su refugio en Sicilia, en mitad del campo. Así que cuando encargaron al equipo que buscara localizaciones para rodar, se decantaron por este lugar y todo el equipo de la película se trasladó a Europa durante tres meses.
Italia tiene lugares y paisajes maravillosos de norte a sur, pero la trama y el espíritu de la película nos llevó a Sicilia", afirma el director Juan Pablo Buscarini. “Conseguimos acceder a lugares en los que es muy difícil rodar como el anfiteatro de Taormina, que es Patrimonio de la Humanidad. Rodar el concierto que cierra la película en ese lugar le da un plus enorme a la producción”.
Fue un lugar que gustó desde el primero momento al director de fotografía Josu Incháustegui. Se quedó fascinado con el ambiente de la isla y con los maravillosos paisajes. “Sicilia es un tesoro. En la época que rodamos la película el sol está muy bajo y la luz es espectacular a todas las horas del día. La naturaleza es agreste y la arquitectura tiene ese sabor antiguo, así que la mezcla es muy especial. El reto consistió en cómo fotografiar y transmitir lo que sentíamos estando allí”.
En el rodaje se utilizaron tres localizaciones, incluyendo una espléndida villa en Giarre, que representa el refugio creativo de Isabella, una antigua 'tonnara' (pesquería de atún) en Scopello que sirvió para representar varias localizaciones en la isla de ficción, y el anfiteatro de Taormina, donde tiene lugar la escena final del triunfal concierto de la película.
La villa fue el lugar más accesible y fácil de utilizar. El productor Pablo Bossi cuenta que a diferencia del resto de las localizaciones que buscaron por todo el país, la villa la encontraron al lado de casa. “En la vida real, la villa de Isabella no suele servir de localización para rodar películas. Conocía a la gente que vive allí a través de amigos comunes", dice Bossi.
La villa del siglo XV tiene una arquitectura espléndida y prestaciones modernas como una piscina infinity y vistas alucinantes a campos de naranjos, viñas y el famoso volcán Etna. El lugar gustó tanto al director como al equipo de rodaje.
“Giarre es un lugar mágico y cumplía todas nuestras necesidades", reconoce Buscarini. “Era perfecto y nuestro diseñador de producción Gianpaolo Rifino dijo que si hubiera tenido que construir un plató lo hubiera hecho igual”.
En la película, la villa de Isabella es también el escenario de las intensas y conmovedoras composiciones al piano de Violetta. En realidad la escena se rodó en Scopello, al otro lado de la isla. Fue un rodaje más complejo de lo que muchos imaginan y desde luego más difícil que la divertida escena en la que sus amigos empujan el piano de cola colina arriba para encontrar el escenario perfecto.
“La escena con el gran árbol donde Violetta encuentra inspiración para su canción es uno de los escenarios más importantes de la película", afirma Gianpaolo Rifino. “tuvimos que construir un enorme árbol falos con resina y después traerlo hasta aquí desde Roma. ¡No fue nada fácil! Nuestro equipo hizo un molde de un árbol, le dio forma y después lo pintó y añadió el follaje. También tuvimos que construir una plataforma para recrear un césped de hierba para que los actores pudieran bailar libremente en una de las escenas. Algunos trabajadores locales nos ayudaron a construir un muro de piedra típico de la zona”.
Scopello fue la localización más versátil del rodaje y la utilizamos en muchas escenas. La ‘tonnara’ y sus platós contiguos sirvieron para la terraza exterior de la casa de Caio, el puerto al que llega Violetta, la tienda donde Violetta va a comprar, y la plaza donde Violetta canta ‘Confía en mí'. La cercana playa de Guidaloca sirvió para la escena de la fiesta de ‘Night of the Fireflies’.
“Scopello fue un lugar mágico, sorprendente, con un paisaje lleno de acantilados, rocas y aguas color turquesa", reconoce Buscarini. “Convertimos un pequeño puerto y una pesquería de atún en un pueblecito. ¡Su arquitectura tiene 1.100 años!”
Rifino y su equipo transformaron la facha y el interior del antiguo puerto de pesca de atún, con su muelle, playa, una plaza cerrada y una serie de edificios de piedra situados en diferentes lugares. “La ‘tonnara’ era un entorno maravilloso debido a sus aguas marinas increíblemente claras. Como la zona está protegida, tuvimos que construir un muelle flotante con materiales naturales que no contaminaran los fondos marinos ni los alrededores”, dice Rifino.
La última localización de la isla fue el marco de las escenas más impresionantes de la película. El anfiteatro de Taormina alberga la escena del concierto triunfal de Tini, que es un paso importante en la conexión de su pasado con su futuro. Merecía contar con un telón de fondo grandioso así que el equipo se esforzó por buscar el sitio perfecto.
"Las localizaciones son lugares históricos, muchos de ellos monumentos protegidos, así que son personajes en sí mismos. Nos dirigimos al sur de Italia debido a la historia y al clima, pero fue bastante difícil obtener permisos porque algunos lugares, como el anfiteatro en Taormina", reconoce Bossi.
“Fue complicado porque recibe cada día 5.000 visitantes de todo el mundo", confirma Buscarini. "Sólo podíamos rodar a ciertas horas en las que estaba vacío, pero nos las arreglamos para filmar un gran concierto y algunas escenas más. Contamos con tres localizaciones que se ajustaban perfectamente a las necesidades del argumento”.
La mayor parte de la película se rodó en entornos de enorme belleza natural e histórica, pero también se utilizaron técnicas digitales para mejorar un par de escenas, empezando por la del concierto final. “Taormina planteaba muchas dificultades porque queríamos reflejar el aspecto de la arquitectura del teatro romano sin perder el estilo moderno del concierto de Tini", dice el director de fotografía Incháustegui.
El director Buscarini reconoce que aunque se utilizó la pantalla verde en la escena del concierto, la transformación de Tini tenía que ser impactante. “El concierto final exige un trabajo de postproducción, así que colocamos cortinas verdes mientras rodábamos, pero la escena funciona perfectamente bien tanto en el plano emocional como musical. El concierto de Taormina necesita buenos efectos porque es un mega-show, pero eso no es lo importante de la historia. Sólo es un complemento necesario", dice.
También se necesitaron efectos digitales en el escenario del piano de cola de Violetta ya que las imágenes generadas por ordenador añadieron puntos de referencia geográficos para representar un pueblo ficticio, como por ejemplo un faro, que se añadió digitalmente. Las escenas submarinas en las que Caio y Stefano compiten por rescatar la maleta hundida de Violetta, y la escena romántica en la que Caio y Violetta nadan en busca de una piedra de los deseos se rodaron en gigantescos depósitos de agua.
Se necesitaron otra piscina y pantallas verdes en una de las escenas más difíciles de rodar, en la que León rescata a Violetta después de que su barco de vela se estrelle contra las rocas de la costa. La escena exigió varias máquinas de hacer olas, la réplica de una roca a escala natural, un equipo de buceadores de apoyo, una cámara principal de seguimiento y una cámara submarina.
Rodar en Italia aporta a la película mucho más que bonitos paisajes. También ayudó a que el reparto se sumergiera en la atmósfera de la película y se identificara con el viaje que realiza Violetta fuera de su entorno familiar.
“Italia es maravillosa”, dice Georgina Amorós. “Los sitios donde rodamos eran fantásticos y el paisaje increíble. Había oído que Sicilia era preciosa, pero fue fantástico rodar allí. Las playas son tan hermosas. ¡Volveré!"
A Mercedes Lambre le gustaron sobre todo los paisajes rurales sobre después de todos los viajes que ha hecho. "Antes de que comenzara la producción, estuvimos de gira por toda Europa y siempre en el centro de grandes ciudades, así que me encantó estar lejos de la civilización. Sicilia es sobre todo naturaleza y nos alojábamos en el pequeño hotel de un pueblo rodeado de montañas", dice la actriz. “Me encantan los sitios con montañas y playa, y los paisajes mediterráneos son como un sueño. Estuve encerrada 20 días en un sitio sin ir de compras y fue maravilloso”.
Al igual que con todos los buenos hogares fuera de casa, Italia también dio el reparto algo mucho más importante que una vista panorámica: les dio ese sentido de la familia tan característico de la cultura italiana. Salzedo tiene una historia conmovedora que pone de manifiesto por qué Italia fue el escenario perfecto para una película sobre el amor y el apoyo que dan los amigos y la familia.
“Cuando estábamos rodando en Scopello, había un restaurante cercano al que el equipo y el reparto iba siempre a cenar. La gente del restaurante y nosotros acabamos convirtiéndonos en una familia", dice Salzedo. “Nos llevábamos tan bien que pasábamos casi todas las noches juntos. Aunque teníamos que rodar al día siguiente, nos pasábamos horas hablando, charlando y cantando. Le pedimos a la gente del restaurante que aparecieran en la película, ¡así que el tío, la tía y los primos de Caio en la escena familiar son la gente del restaurante!”
En el caso de Martina ‘Tini’ Stoessel, hay que señalar la recibieron con los brazos abiertos en todas partes. “Las localizaciones son espectaculares", dice la actriz. “He estado muchas veces en Italia de gira y siempre me han tratado con mucho cariño. Scopello fue maravilloso. También rodamos en Madrid, donde me siento como en casa porque se parece mucho a Argentina, mi país natal”.
Desde el primer día, la parte más importante de "Tini. El gran cambio de Violetta" siempre fue el mensaje que encierra. La evolución y la transformación de Violetta reflejan un mensaje más grande, de esos que cambian la vida, como dice el título de la impresionante canción de Tini titulada 'Siempre brillarás' en la que expresa su visión optimista del mundo. Es un mensaje que encierra una filosofía de vida.
“Es una película con un doble significado muy importante, un mensaje que es a la vez positivo y realista", dice el productor Pablo Bossi. "Encierra una historia sobre dejar atrás la adolescencia y entrar en la edad adulta, y sobre una mujer joven que atraviesa una crisis personal de la que sale transformada. Creo que la moraleja es que nada es imposible si te empeñas de verdad, y que las crisis son una oportunidad para evolucionar”.
“Creo que el mensaje es que tenemos que averiguar quiénes somos, estar contentos con nosotros mismos e intentar mantener esa actitud", apunta Leonardo Cecchi. “Somos los artífices de nuestra propia felicidad y de todas las aventuras que emprendamos en la vida”.
Pasquale Di Nuzzo cree que la sutileza de la historia y sus diferentes significados garantizan que sea una película para todas las edades. “Los espectadores van a ver una película que no se parece a ninguna otra. Es un cuento basado en valores importantes dirigidos a niños, adolescentes y adultos. Estoy seguro de que cuando la gente la vea también sentirá lo que nosotros experimentamos en el rodaje”.
Cuando “Tini. El gran cambio de Violetta” llegue a los cines en el verano de 2016, el público sentirá que se embarca junto con Violetta en su viaje, y estoy seguro de que saldrán del cine con ganas de ser más positivos en su forma de ver la vida.
A los fans de “Martina ‘Tini’ Stoessel les encantará ver a su ídolo en la gran pantalla, pero la película también encierra un mensaje claro y positivo que gustará a todo tipo de público y de todas las edades”, afirma convencido el director Juan Pablo Buscarini. “Todo el mundo experimenta momentos en los que la vida se vuelve insoportable, pero el mensaje de la película es que siempre se puede triunfar y volar más alto.
Es un mensaje claro y estimulante que guía a Violeta en su viaje de auto-descubrimiento, y que impulsa a Martina Stoessel a vivir su propia vida. “La moraleja de la película es que todo el mundo ha nacido para brillar. No importan las dificultades de la vida, tienes que luchar y encontrar la forma de ser feliz en la vida”.
