|
SINOPSIS
Cuenta como cuatro mujeres que no tienen nada en común salvo las deudas que les han dejado sus difuntos maridos y derivadas de sus actividades ilícitas. La historia de estas mujeres dará un giro cuando deciden tomar las riendas del asunto y conspirar para labrarse un nuevo futuro con sus propias reglas...
INTÉRPRETES
VIOLA DAVIS, ELIZABETH DEBICKI, COLIN FARRELL, LIAM NEESON, JON BERNTHAL, CARRIE COON, DANIEL KALUUYA, GARRET DILLAHUNT, MICHELLE RODRIGUEZ, ROBERT DUVALL, BRIAN TYREE HENRY, LUKAS HAAS, JACKI WEAVER, KEVIN J. O'CONNOR, MANUEL GARCÍA-RULFO
MÁS INFORMACIÓN DE INTERÉS
PREMIERE
MÁS DATOS...
INFORMACIÓN EXCLUSIVA
NOTA DEL DIRECTOR...
Recuerdo perfectamente dónde estaba a mis trece años cuando por primera vez vi en televisión la serie de Lynda La Plante, Viudas. Estaba tumbado en el suelo de moqueta de la casa de mis padres, con la cabeza apoyada entre las manos –mi postura habitual para ver la tele por aquella época. El programa me transportó al instante a un mundo delictivo donde las personas más vulnerables y olvidadas eran las mujeres. Se entendía que la única capacidad que poseían era la de ser juzgadas por su apariencia, y, sin embargo, asumían desafíos que poco tenían que ver con sus estereotipos y se transformaban a sí mismas en fuerzas más que capaces, decididas a tomar las riendas de su destino. En ese momento de mi vida, me identifiqué con estas mujeres ya que yo también sentía que los demás me veían con una mirada similar. Sus adversarios consideraban a las viudas como personas incapaces de lograr nada, y lograron mucho. Dejó una gran huella en mí.
Para contar la historia ahora, cambié el telón de fondo de Viudas de Londres de principios de los ochenta al Chicago de la actualidad. Esto era vital para mí para poder comentar también la política, la religión, las clases, la raza, la delincuencia y el luto, y para ver la ciudad (en este caso Chicago) y revertirla cual telescopio para mirar al mundo.
Lo que me resulta especialmente poderoso de esta historia es que trata de cuatro mujeres de distintos estamentos –racial, social y económico– que unen fuerzas para conseguir una meta común. Comprendieron que si trabajaban juntas eran capaces de todo.
LA PRODUCCIÓN...
Basada en la popular serie de televisión homónima británica creada por Lynda La Plante, Viudas está dirigida, escrita al alimón y producida por el realizador ganador del Oscar® Steve McQueen, cuya cinta 12 años de esclavitud se hizo con el Oscar® a Mejor Película en 2013.
“Recuerdo haber visto la serie de televisión de Lynda La Plante Viudas a los 13 años” recuerda McQueen. El hecho de que estas mujeres lograran cosas cuando nadie las veía capaces dejó una huella en mi vida, sobre todo cuando en ese momento me sentía juzgado de la misma manera. Muchos años después cuando llegué por primera vez a Hollywood me sorprendió ver cuántas actrices con talento estaban sin trabajar. Fue entonces cuando decidí que, tras hacer una película sobre la esclavitud, quería hacer una película conducida por mujeres”.
Cuando McQueen aborda a la famosa guionista Gillian Flynn (Perdida) para escribir juntos el guion la guionista asegura que aprovechó la oportunidad y no se lo pensó dos veces. Recuerda, “Steve McQueen me llamó. ¡Qué fantástica llamada y tan inesperada! Sabía que yo vivía en Chicago, y quería hacer una película de un atraco con cuatro mujeres protagonistas. Ya pensé, ¡Cuenta conmigo! Luego, se rueda en una ciudad a la que adoro, mi ciudad, donde yo vivo, Chicago, que por cierto es una ciudad muy poco utilizada en el cine y que no lo merece porque es alucinante. Y encima, él quería incluir todos los barrios y que la ciudad fuera un personaje más. Y en realidad Chicago está muy poco vista. No se ve la Chicago real. Lo tenía claro y le contesté, ‘¿Dónde hay que firmar?’”
Según Flynn, la historia ofrece un giro con respecto al género porque cada personaje viene de un origen étnico, económico y social distinto. “Lo que más me gusta de las cintas de atracos es cuando el equipo se une. Eso me encanta” apunta la escritora. “Ese rasgo lo he querido mantener, la sensación de que estas mujeres unen fuerzas, no porque a una se le da bien sustraer joyas y a la otra abrir cajas fuertes y esas cosas sino porque casualmente todas están relacionadas por sus maridos”.
Asimismo, McQueen abordó al productor Iain Canning en una fase inicial del Proyecto. “Él había crecido con el programa y le pareció poderosa la historia cuando la vio en televisión, una historia de un grupo de mujeres; era singular”, dice Canning “y me pareció interesante, un terreno nuevo en el que adentrarse Steve. Ha hecho películas increíbles de temas increíbles y parecía un buen momento para contar esta historia de un conjunto de mujeres corrientes en circunstancias extraordinarias que luchan por sobrevivir”.
Los realizadores reunieron a un elenco impresionante para la película. Dice McQueen que era importante que el reparto se sintiera cómodo y en casa, por así decirlo, “Es muy simple: todos son grandes actores y quieres crear un ambiente seguro en el que puedan experimentar y explorar. Eso es lo que intento, darles a los actores un lugar seguro donde poder darse de bruces, levantarse y volver a intentarlo en busca de alguna verdad”.
La oscarizada actriz Viola Davis es la elegida para el papel de Verónica Rawlins, la líder de las viudas que se ve en la necesidad de rehacer su vida tras la desaparición de su marido, Harry (interpretado por Neeson), que perdió la vida en un robo que salió mal.
Davis asegura que es un papel que jamás pensó que le ofrecerían. “Es un registro muy diferente para mí” exclama la actriz. “No me habría imaginado ser parte de esto. Primero, hay una bonita escena de amor. Luego hay mucha acción. No sé, simplemente no lo vi venir por lo que sí, el hecho de que Steve McQueen se me acercara y me dijera que me veía en este papel fue algo sensacional para mí”.
Tras la agradable sorpresa de ser la elegida para el papel, Davis descubrió que la historia le llamaba la atención tanto como su personaje. “Me gusta la evolución de Verónica” relata la actriz. “Me gusta el hecho de que sea un tanto misteriosa, pero a la vez me resultaba cercana y familiar. Me gusta el hecho de que hay una historia de amor de por medio. Me encanta verme en una historia amorosa porque ya sabes, he hecho de muchas abogadas y detectives y directoras de la CIA, y chicas por el estilo. Es una bonita historia de amor”.
El marido en la ficción de Verónica es un delincuente profesional, Harry Rawlins, interpretado por Liam Neeson. Cuando conocemos a la pareja descubrimos que han sufrido una gran pérdida. “Dicha tragedia los ha unido” explica la actriz. “Y luego muere Harry en un accidente durante un robo… y ella se queda sin nada. Lo pierde todo, no le queda nada en términos económicos ni en el plano emocional. Y, sin embargo, decide vivir”.
Decide vivir, ¿cómo? Terminando el atraco que Harry se había propuesto llevar a cabo. Primer paso: contratar a su equipo, las viudas de los cómplices de Harry. “No nos conocemos de nada”, prosigue Davis. “Pero nos une el hecho de que nuestros compañeros perdieron la vida en este incendio y que todos eran ladrones. Eso es lo único que nos une. Eso y el hecho de que estamos arruinadas y hemos de encontrar la manera de sobrevivir. Todas estamos en modo de supervivencia. Pero más allá de eso, no podríamos ser más distintas”.
Davis apunta que la química con Neeson fue algo natural, en especial las escenas ‘de alcoba’. “Sentí que era muy cercano. Fue bonito pensar para mí en ese momento, ‘Estoy en la cama’, y las implicaciones raciales que esto conlleva. Y lo digo sabiendo que habrá personas que me escucharán y dirán ‘¡Qué pesada!’ pero alguien tiene que decirlo. Porque, ¿en qué momento de la historia del cine has visto a alguien como yo y a alguien como Liam Neeson juntos en la cama, besándose, en actitud amorosa, enamorados, o casados?”
Por su parte Michelle Rodríguez hace de Linda, una viuda que intenta mantener a su familia y a su pequeño negocio –una tienda de vestidos– a flote tras la muerte de su marido. Rodríguez reconoce que le daba miedo el papel en un primer momento. “Creo que mi problema era pensar que la mujer a la que yo interpretaba era débil, me daba miedo eso, proyectar una persona así al mundo”, confiesa la actriz. “Siempre he querido representar a mujeres independientes, en la medida de mis posibilidades, sobre todo la imagen de la mujer latina que además tiene que hacer frente al machismo de nuestra cultura. Para mí es importante”.
Al final, tomó la decisión de enfrentarse a su miedo a lo desconocido y se decidió. “Hablé con Steve un día y comprendí que es un gran artista” recuerda. “Le dije, ‘Vale, llevo haciendo esto quince años. Y me siento muy cómoda en mi pequeño nicho de hacer películas de acción. Pero así no voy a evolucionar. No hay espacio para crecer’”.
Rodríguez describe a su personaje como una mujer ingenua y confiada cuando la conocemos. “Linda era muy joven cuando se quedó embarazada y se casó con su novio del instituto, por lo que ha sido madre muy pronto. Por lo que realmente no ha tenido la oportunidad de decidir lo que quería hacer con su vida. Su gran manifestación es la historia que ves aquí” apunta Rodríguez. “Es una mujer leal, que ama a su marido y a su familia”.
Elizabeth Debicki, en el papel de Alice –la inmigrante polaca y mujer sumisa– dice que quería ser parte de la producción para trabajar con McQueen. “Steve es increíblemente cálido y generoso, sensible, y es igual de exigente e intuitivo de una forma fascinante. Es riguroso en su búsqueda de la verdad en su más crudo estado. Como actriz busco a alguien que me pida eso. Steve lo hizo a la vez que creaba un clima de cooperación, de empoderación y seguridad. Esta confianza te brinda una gran libertad. Trabajar con él es increíblemente liberador”.
Debicki describe a su personaje, casada con Florek (interpretado por Jon Bernthal), como la menos espabilada y más protegida de las viudas. “Cuando conocemos a Alice su mundo es muy pequeño y represivo. Ha pasado de vivir con su madre en un ambiente controlado donde es la muñeca de su madre, a ser dominada y controlada por su marido. Es muy sumisa, no puede concebir la vida de otra manera porque ha interiorizado lo que otras personas le han dicho –que no vale nada, que les necesita para sobrevivir. Le han dicho que ella no puede ser independiente emocionalmente, ni tampoco en el plano económico o social y ella se lo ha creído", explica la actriz. “Alice sufre un gran cambio en el transcurso de la historia. Pasa de ser una persona que ha aceptado lo que el mundo le ha dicho –que es hija y luego esposa, sin opiniones propias, una mujer que no ha de pedir lo que desea o necesita – a una mujer que toma las riendas de su vida”. Para Debicki el proceso que atraviesa al juntarse con las demás viudas y participar en el atraco le aporta una sensación de amor propio y autoestima.
Cynthia Erivo, en su primer papel principal en el cine interpreta a Belle, una aliada que ayudará a las viudas en la consecución de su misión. “Creo que es un gran voto de confianza por parte de Steve elegir a una actriz de poca experiencia para una película y un papel como este” dice Erivo respecto a la decisión de McQueen de contar con ella. “No es un papel pequeñito, es maravilloso y me lo ha confiado a mí”.
A Erivo le encanta que su personaje sea fuerte y complejo. “Es muy directa. Incluso en ocasiones diría que es estoica. Es del sur y no es ajena a lo que ocurre en su barrio”, apunta. “Es madre soltera, es peluquera, es inteligente y prácticamente no le teme a nada. Simplemente sabe lo que hay que hacer para sobrevivir. Este es su origen y cuando conoce a estas mujeres no se lo piensa dos veces y les brinda su apoyo”.
Un político que se cruza en el plan maestro de las viudas es Jack Mulligan, interpretado por Colin Farrell. Farrell confiesa que se compadece de su personaje, pues su vida está decidida por su historia familiar.
Hijo de Tom Mulligan, interpretado por Robert Duvall, se espera que Jack siga los pasos de su padre convirtiéndose en el próximo regidor del distrito 18 de Chicago. “Es evidente que seguiré la línea marcada por la familia y Jack Mulligan ha de tomar el testigo de manos de su padre, que a su vez lo cogió de su padre, pero realmente no es lo que quiere. No es lo que ha soñado hacer” explica Farrell.
Jack está lidiando no solo con sus demonios personales, sino que también ha de contender contra un enigmático adversario. “Podría suponer un cambio en la balanza del poder político. El candidato que compite contra mí es un señor afroamericano del distrito 18 precisamente, una persona que tiene un pasado delictivo” explica Farrell. “Pero ha enderezado su vida y se postula para el puesto de concejal. Y en este distrito al que me gustaría representar la población es predominantemente afroamericana por lo que mi personaje juega con desventaja”.
Para Farrell ha sido todo un honor trabajar con el legendario Duvall. “Es extraordinario y lo que he visto en primer plano, en persona, en las secuencias que hemos grabado, ha sido increíble. Es un icono cultural del cine y he tenido mucha suerte de trabajar con él”.
El sentimiento es mutuo pues para Duvall Farrell es un actor excepcional. “Hablamos y a la vez nos escuchamos, lo cual no es tan fácil” dice Duvall de su proceso actoral. “No es necesariamente fácil, sobre todo cuando hablamos de ciertos niveles emocionales, pero a Colin esto se le da muy bien y me encanta llevarme cosas de otros actores cuando crean algo real en el marco de unas circunstancias imaginarias”.
Duvall asegura que además de tener muchas ganas de trabajar con McQueen, le atraía su personaje por la complicada relación paternofilial de amor-odio.
“Es un hombre mayor achacoso que intenta de alguna manera mantener el control” explica Duvall. “A pesar de que su hijo – se odian, es una relación de amor-odio– es el que realmente manda. Él le intenta decir a su hijo que tenemos que mantener nuestra posición en esta ciudad, no dejarla escapar. Es nuestra ciudad. Nosotros la hemos hecho. Hemos de mantener el control y su hijo no quiere escuchar. Esa relación me gusta, es lo que hace interesante mi trabajo, pensando que tal vez pueda aportar algo diferente”.
Brian Tyree Henry, conocido por su trabajo en la aclamada serie de televisión Atlanta, es Jamal Manning, el adversario político de Jack en el distrito 18 y un hombre al que, según descubre Veronica, Harry le debe dinero. Henry asegura que tenía que ser parte de este ‘proyecto especial’.
“Qué duda cabe que me atraía la historia por el reparto y por el director. Pero también por el guion, es increíble” dice el actor. Según Henry la honestidad de su personaje es lo que más le atrajo del papel. “Este es su hogar,” añade. “Y se lo dice a Jack. Algo así como, ‘Sabes tu familia ha estado vinculada con este distrito, han hecho cosas, pero reconoce que realmente no ha avanzado a ninguna parte. ¿Qué nos habéis aportado en realidad?’”
“En cambio yo siento que sí tengo algo que aportar. Y eso es lo que tienen tanto Jamal como su hermano, son de la calle. Son del barrio. Realmente se interesan por sus vecinos. Y la política es así, hacen lo que tienen que hacer para llegar a donde quieren llegar”.
Henry dice que el actor Daniel Kaluuya, que hace de su hermano Jatemme, es ahora como un hermano para él tras la experiencia que han vivido durante el rodaje. “[Daniel] es una de las personas más fantásticas que he conocido nunca” asegura. “Y ahora siento eso, que es mi hermano, y eso ha repercutido en nuestro trabajo”.
Kaluuya, conocido por su papel en el aclamado thriller Déjame salir, es también el protector de Jamal. “Es fácil asociar a Jatemme al cachas, al malote o secuaz a las órdenes de Jamal, pero creo que Jatemme realmente quiere lo mejor para su hermano y quiere estar a su lado” explica Henry. “Jamal lo quiere con ternura y no quiero decir que lo esté utilizando cual peón, pero al final Jamal hará lo que sea necesario por llegar a donde quiere llegar. A pesar de todo hay una auténtica profundidad en su relación, ‘porque nos tenemos el uno y ya está. ¿Sabes lo que te quiero decir?”
Kaluuya entiende a su personaje como el alter ego callejero de Jamal. “Es el Jamal de la calle”, observa el actor. “Se ve básicamente cómo han llegado a donde están y Jatemme es una de las razones por las que han conseguido el apoyo de los vecinos, así como su financiación, es gracias a Jatemme por lo que sí, está haciendo cosas que no debería estar haciendo”.
Además de ayudar a su hermano en el terreno político, Jatemme es el que intimida a Verónica para recaudar el dinero que Harry le debe a Jamal. “El difunto marido de Verónica hizo algo poco elegante y que no se hace entre hermanos”, explica Kaluuya. “Y quieren recuperarlo. No van a dejar las cosas como están. Pero en plena campaña política han de conducirse con discreción”.
CHICAGO, UN PERSONAJE MÁS...
Los realizadores decidieron desde el principio que Chicago sería el telón de fondo de la historia. En palabras de McQueen, “Hay tantas caras de Chicago que me interesan –política, racial, religiosa, policial y delictiva y todas estas redes se encuentran y se relacionan entre sí”.
Cuando el director de producción Adam Stockhausen se entrevistó con McQueen por primera vez hablaron de cómo incorporar a Chicago en la narrativa. Stockhausen recuerda la conversación: “¿Cómo se relaciona Chicago con la historia que cuenta la película? Y cómo unir ambas visual y temáticamente y hacerlo con legitimidad sin imponer nuestras ideas con respecto a cómo debería ser sino más bien intentar descubrir cómo es en realidad y buscar la verdad del lugar”.
Según el productor ejecutivo Bergen Swanson, McQueen tenía muy claro que grabaría en exteriores en Chicago y no utilizaría otra ciudad para hacer las veces de Chicago.
Hasta para los actores la ciudad es un personaje más. “Chicago es otro personaje”, apunta Davis. “Estamos hablando de una ciudad vibrante con restaurantes de primer nivel, hermosos rascacielos en Lakeshore Drive, explanadas ajardinadas preciosas y Dios, qué pedazos de artistas tiene Chicago. Pero hay más. Están las zonas como Lawndale, Garfield Parks, Inglewoods, hablamos de barrios con altos índices de delincuencia. Hay segregación y eso solo ocurre cuando hay corrupción”.
Según Swanson, McQueen nunca quiso trucar un exterior “…al igual que no hicimos trampa con Chicago en Atlanta,” explica. “Por ejemplo, un piso en Lawndale está ubicado en otra parte de la ciudad. Y de hecho hemos cambiado la historia un poco si había que matizar o precisar algo en el guion”.
El responsable de exteriores Nick Rafferty recuerda que la búsqueda comenzó con la llegada de Stockhausen. “Nos recorrimos todos los barrios en coche” recuerda Rafferty. “Adam quería ver la ciudad. Quería comprender qué ocurre cuando cruzas una línea y todo cambia, los barrios cambian. Al final, hemos querido representar cada parte de la ciudad y los personajes tienen orígenes muy diversos”.
La creación de escenarios múltiples y diversos dentro de la historia representó un gran reto para Stockhausen. “Lo que tiene de emocionante es que la historia de cada mujer, así como de Jamal Manning y también la de Jack Mulligan es diferente. No resulta nada fácil encontrar la historia de cada persona. ¿Cómo se hace? ¿Cómo marcar esas pequeñas diferencias visuales? En el caso de la arquitectura de Chicago, por ejemplo, muchos pisos son parecidísimos… así que dijimos, ‘Vale. ¿Cómo encontrar entornes totalmente diferentes para cada una de estas mujeres y que sean adecuados?’ Quiero decir, no decidiendo aleatoriamente sino buscar a cada personaje en un lugar distinto de una forma que tenga sentido, que sea lo que necesita el personaje”.
En el caso del hogar de los Mulligan, Rafferty señala que era un emplazamiento que exigía características muy particulares. La producción buscó por Hyde Park en la zona de Kenwood, un barrio histórico donde el expresidente Obama tiene una casa. “Buscábamos un lugar que comunicara desde el primer minuto que este concejal forma parte de un legado histórico. Que es parte de la clase dirigente de Chicago, de los terratenientes. Muchas de estas mansiones se edificaron para los capitalistas de Chicago y los magnates ladrones. Por ejemplo, la familia Sears Roebuck vivió aquí, la familia empresaria de artículos deportivos Wilson también construyó su casa aquí”.
Asimismo, Stockhausen tenía que recrear el distrito 18 real de este momento histórico. “Dimos con el distrito 18 mediante la combinación de historia y de realidad, con la dualidad de casas increíblemente sofisticadas en zonas donde hay edificios derruidos por el abandono y otros grandes problemas y todo ello en un espacio muy cercano”, explica.
Stockhausen dice que el Desarrollo del ático de Verónica conllevó mucho debate y colaboración. “Algo especial que lo caracteriza es que tiene ventanas enormes que van desde el techo hasta el suelo, y dejan entrar mucha luz por lo que la estancia puede ser muy, muy cálida o muy, muy fría” explica. “Podía ser expansivo y abarcar toda la ciudad, o podía ser una caja que simplemente refleja el interior. Creo que esa cualidad nos resultó emocionante a todos y al final convertimos las ventanas en espejos que a veces reflejaban la vida interior en lugar de dejar ver la ciudad al exterior”.
El director de fotografía Sean Bobbit trabajó de cerca con Stockhausen para traducir al cine los distintos espacios. “Hay muchas maneras sutiles de mostrar las diferencias porque la historia pasa de los ricos y poderosos a los miembros más pobres de la sociedad” explica Bobbitt. “Y con esa misma sutiliza la luz y la iluminación remarcan esa realidad. En el caso de los personajes ricos hay más calidez en su vida y los colores son más corrientes. En cambio, la pobreza opera en una paleta de colores mixtos donde se plasma el caos de este mundo”.
Lo que más admira el productor Emile Sherman de Bobbit es el ojo que tiene para representar en la gran pantalla tanto la acción como la calma. “Y lo otro que tiene de especial Sean es el movimiento y la quietud” observa. “Hay momentos con Viola donde estamos ante un mundo caótico, un mundo peligroso y aterrador, pero entonces hay otro momento en el que Sean decide detener la cámara y dejar que los actores se muevan libremente ante ella con una luz increíble. Es una forma de crear ese mundo en el que te dejas caer. Su estilo abarca tanto la restricción como el exceso y Sean ha encontrado el equilibrio perfecto”.
En aras de asegurar el realismo de la cinta McQueen contó con la instructora de dialecto Tanera Marshall para trabajar con los actores el acento de Chicago. La instructora describe el proceso así: “De primeras empezamos con una muestra real. Es decir, a partir de algo existente. Evitamos los estereotipos. A mí no me interesa recrear el sonido de una persona real mi tarea es encontrar muestras para que el actor y el director las escuchen y lo adapten al personaje que estamos intentando crear. Contemplo cuestiones de raza, etnia, edad, clase, aspiraciones, muchas cosas que influyen en el habla de una persona. Encuentro muestras que casan con estas ideas y reproduzco unas cinco, seis o siete para el director y el actor, y les pregunta cuál de todas ellas creen que mejor le va al personaje – y esto se convierte en nuestro objetivo”.
A continuación, según explica la propia instructora, trabaja con cada actor a título individual, a partir de sonidos, pronunciación, entonación musical, resonancia, y postura oral.
La diseñadora de vestuario Jenny Eagan tenía el desafío de diseñar el vestuario de un sinfín de personajes que habitan a su vez distintos mundos y para ello trabajó estrechamente con McQueen y Stockhausen. “Hay muchos personajes y habitan escenarios distintos, sea Lawndale, Lake Shore Drive, son telones de fondo muy diferentes en lo socioeconómico… además de distintos orígenes étnicos, razas, todo ello hay que aunarlo con el debido respeto y claro, hay que hacerlo bien, que se integre perfectamente, por así decirlo, que no sea una distracción vaya”.
Canning agradece el hecho de que Eagan se sumergiera en cada uno de los mundos que habitan los personajes principales. “Es estupendo trabajar con Jenny,” dice el productor. “Incluso si lo limitamos a las cuatro mujeres principales, su evolución es tal en esta película, y también en lo económico. Entender y reflejar cómo cambia su atuendo, su personalidad, y la vinculación o no vinculación de todo ello con la situación económica de cada una nos habla realmente de la construcción de los personajes. Jenny lo ha abordado con tal grado de pensamiento, de proceso, que lo ha mantenido dentro de lo natural, a la vez que se permitía introducir un punto de humor y diversión”.
Eagan explica que respecto al estilo de todos los personajes el de Farrell, Jack Mulligan, fue el más fácil de construir. “Lo clavamos desde el primer momento. Es un hombre que no es extravagante, pero sí de dinero por lo que luce trajes elegantes, aunque no de sastrería. Son más bien de prêt-à-porter de diseñadores americanos. Así es el hombre al que intenta representar, por lo que fue muy sencillo. [Colin] llegó, hicimos una prueba de vestuario rapidita y dijo: ‘esto es perfecto’”.
El personaje de Henry, Jamal, representa un diseño que no tiene nada que ver según Eagan. “[Brian] crea esta persona a la que desea representar y nos preguntamos, ‘¿Cómo es esta persona?’” dice la diseñadora. “Podía haber sido muy llamativo. Pero lo hemos mantenido dentro de la idea de lo que sería un político que ha ido escalando peldaños. Se trata de una persona que tiene que generar confianza entra la ciudadanía. Por lo que no teníamos mucho margen para exagerar. No queríamos salirnos de ese barrio, ni perder la conexión con personas que querían votarle. Él se mostró enteramente abierto y receptivo a todo ello”
LAS EXIGENCIAS DEL GUION Y EL REALISMO...
Según Swanson, McQueen tenía muy claro que la película tenía que ser realista, evitando caer en el error de los efectos excesivos. “Cuando ves la película te das cuenta de que la acción casi parece prosaica. Es cierto que ocurren cosas espectaculares pero todas ellas están basadas en la realidad porque ha sido una de las directrices de Steve a todos los departamentos”.
Son cuatro actrices principales, sus maridos y sus mundos diferenciados (algunos de los cuales no se cruzan). Swanson dice que la producción cuenta con más de ochenta personajes que tienen diálogo, cuarenta dobles y especialistas y más de ochenta exteriores. Reconoce haberse sentido impresionado con lo bien que McQueen y su equipo gestionaron los cambios continuos de horario, apuntando, “Con tantas partes movibles el más mínimo movimiento afectaba toda la programación”.
Canning reconoce que enfrentaron varios retos logísticos sobre todo con respecto al reparto, numeroso e internacional. “Lo bonito de trabajar con Steve es que hay muchos actores que quieren trabajar con él. Y creo que todos hemos sido tremendamente bendecidos por los diferentes actores de todo el mundo, en realidad, que querían ser parte de VIUDAS. Y considero que esto entraña un pequeño reto logístico porque todos están tan ocupados con sus programas de televisión y otras películas, pero a la vez desesperados por estar en esta cinta y por trabajar con Steve”, dice. Pero a pesar de los ocasionales conflictos de horario dice Canning que se ha producido una situación “de sobreabundancia porque contamos con los actores más increíbles del mundo en esta película”.
Una escena en la que figuran varias acrobacias y grandes efectos incluye una persecución en coche que desemboca en la mortal explosión de la furgoneta de Harry y la muerte de los ladrones. El supervisor de efectos especiales Michael Gaspar recuerda la conversación que mantuvo con McQueen. “Me pidió que hiciera algo diferente, más allá de la explosión típica y la llamarada de fuego de un coche en llamas”.
Gaspar explica el efecto, que es bastante complicado: “El morro se desprende del vehículo dando vueltas sobre sí mismo saliendo del almacén en llamas que por su parte ha de seguir en pie por cuestiones del guion … y la parte trasera de la furgoneta también se incendia y salta en una serie de explosiones.
Además de mantener la seguridad de la producción Gaspar y su equipo tenían que evitar los daños colaterales. “Lo más difícil fue sacar el morro de la furgoneta por la puerta y no dañar el edificio” recuerda. “Hicimos cálculos durante las pruebas y gracias a eso pudimos hacerlo … y luego sacar [parte del vehículo] y voltearlo hacia los coches de los agentes de la policía estacionados en la puerta. Sí, eso fue lo más crítico”.
Henry cree que Viudas va a gustar mucho al público. “Creo que será una de esas películas que te cuentan cosas que no veías venir. Sorprenderá”.
Davis dice que espera que el público salga del cine con una sensación de despertar. “Me encantaría que la gente creyera en ella, que se dejara emocionar, transformar por la historia y los personajes. Siempre deseo que se produzca un cambio” dice.
GALERÍA DE FOTOS
https://cineymax.es/estrenos/fichas/121-v/121975-viudas-2018#sigProIda7251f044a