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CRITICA
Por: PACO CASADO
Tras concursar en el Festival de cine de Málaga en español, llega a las carteleras comerciales 'Nieve negra' (2016) donde fue galardonado Leonardo Sbaraglia.
Los amigos los elegimos, pero la familia nos viene impuesta y aunque confundamos unos y otros siempre puede más la fuerza del cariño, aunque a veces haya roces.
Es la historia de Marcos y Salvador, dos hermanos en la Patagonia argentina en 1978, que es donde se sitúa la relación que se establece entre ellos.
Cuenta cómo un grave suceso marcó a estos personajes siendo niños y ahora ya de adultos los recuerdos vuelven a la memoria cuando los dos tienen que verse para depositar las cenizas de su padre, donde él dejó escrito que se hiciera en una carta, antes de morir.
Era un hombre con un carácter fuerte que marcó sus vidas, aspecto que vamos conociendo mediante flash backs, entre el frío de la nieve y la negrura de la desidia, la rabia, el engaño, la mentira y el poder del dinero.
El guion está inspirado en un cuadro familiar de donde surge esta historia enmarcada en un ambiente árido y gélido, que hemos visto muchas veces, de hermanos enfrentados por una herencia, que no se llevan bien desde hace tres décadas, agravada además por la separación en la distancia, ya que Marcos vive en España y viaja a Argentina en compañía de Laura, su esposa, para solucionar el problema de la herencia.
Salvador se encuentra viviendo aislado en una cabaña perdida en medio de la montaña, es un hombre con un carácter hosco, que habla poco y Marcos trata de convencerle que tras la muerte del padre, tienen la posibilidad de vender las extensas tierras por las que ofrecen una buena cantidad de millones de dólares que sería a repartir entre los dos y Sabrina, su hermana, que está enferma, internada en un psiquiátrico, necesitada de un costoso tratamiento.
Lo que comienza como una historia familiar de aliento trágico, se va convirtiendo en un thriller donde cada uno tiene una forma distinta de ver las cosas y, poco a poco, se van descubriendo los secretos que encierra este drama familiar que se fusiona con el cine de género en una historia entre el presente y el pasado que intenta desentrañar la verdad de un ayer que vuelve a resurgir, en el que los roles de víctima y asesino se revierten una y otra vez.
La nieve tiene aquí una significación de manto que recubre y oculta el pasado de los personajes, y une el tiempo vivido y el presente.
El título hace alusión al contraste de algo que es blanco y se vuelve negro, que es puro y se torna sucio, manchado.
Hay dos historias, la presente y el pasado contado a través de los flash backs, que se introducen de manera algo confusa, que el espectador tiene que ir descifrando qué personaje joven corresponde a cuando ya son adultos.
El director argentino Martin Hodara debutó en el largometraje con 'La señal' (2007), codirigida con Ricardo Darín, y ahora lo hace en solitario con 'Nieve negra' (2017), el segundo título de su filmografía con este melodrama de ambiente agobiante, que da lugar al enfrentamiento entre dos grandes nombres del cine argentino, Ricardo Darín y Leonardo Sbaraglia, como en un duelo del Oeste, y la breve intervención de otro importante como es Federico Luppi.
El guion resulta en exceso explicativo, con giros y golpes de efecto de la tragedia familiar, aunque con una interesante puesta en escena.
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