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CRITICA
Por: PACO CASADO
Entre secuelas y spin offs la historia de 'La Guerra de las Galaxias' se va a convertir en una saga realmente interminable si tenemos que conocer el pasado de cada uno de los personajes que intervienen en sus historias, aunque ya se empieza a notar el agotamiento puesto que los resultados en taquilla han flojeado en esta ocasión al no ser los que se esperaban.
El joven Han Solo sueña con ser piloto y trata de escapar con su novia del planeta donde vive, pero ella se queda retenida y él se une a una banda de ladrones para conseguir el dinero que necesita para comprar una nave y volver a rescatarla.
Esta es una nueva aventura del granuja y audaz Han Solo más conocido del espacio, a bordo del Halcón Milenario y en un viaje a una galaxia muy lejana donde se encuentra con un submundo criminal oscuro y peligroso.
Han Solo se hace amigo de su futuro copiloto Chewbacca y conoce al célebre jugador Lando Calrissian años antes de unirse a la Rebelión, en un viaje que marcará el camino a uno de los héroes más improbables de la saga Star Wars, y se embarcarán en una misión desesperada que les ayudará a dar forma a estos sinvergüenzas que los fans han admirado desde hace cuarenta años.
Esta vez el fanfarrón galáctico por excelencia, el contrabandista de corazón de oro que se convertiría en héroe, vuelve a la pantalla grande para darnos a conocer sus orígenes y la amistad con Chewbacca, para lo que no creemos que hiciera falta tanto metraje.
La película da un salto al hiperespacio en este nuevo capítulo a través de una serie de escapadas por el oscuro y peligroso inframundo criminal donde se forjarán nuevas amistades y revelarán secretos del pasado de uno de los héroes más valiente.
Este es el segundo de los spin offs de la saga de 'La Guerra de las Galaxias' que cuenta las hazañas de Han Solo como contrabandista y antes de conocer a Luke Skywalker en 'Star Wars: Episodio IV. Una nueva esperanza' (1977), con un humor sarcástico y con cierta tendencia a meterse en problemas aunque no está solo, ya que le acompañan Tobias Becket, su mentor, Qi'Ra, su novia y Chewbacca.
Solo es un personaje tan carismático y peculiar que nos cuesta reconocer en lo que se ha convertido en este film interpretado por el nuevo joven actor Alden Ehrenreich que ha recogido el testigo de Harrison Ford, que se defiende frente a la veteranía de Woody Harrelson o Donald Glover, lo que nos produce el primer desencanto junto con el guion escrito por Lawrence Kasdan y su hijo Jonathan con escenas sobrecargadas y artificiosas que resultan excesivas y no nos acaban de convencer, aunque tiene otras muy entretenidas como la huida del inicio o la del asalto a un tren.
Parte del problema quizás se deba a que se apartó de la dirección a Phil Lord y Christopher Miller por problemas con Kasdan ya que improvisaban demasiado, cuando ya tenían rodado casi tres cuartas partes, y la retomara el artesanal Ron Howard, que le da un diseño académico, más de corte clásico, que de alguna manera decepciona a los seguidores.
Se ha mantenido la estética de la serie, pero le falta fuerza a pesar de que tiene más acción que cualquiera de las anteriores.
Posee dos personajes femeninos muy potentes, por un lado la novia, que pelea mejor que los hombres, y una robot, L-3, que invita a sus compañeros a rebelarse.
En la banda sonora John Powell retoma fragmentos de las anteriores pero el nuevo tema de Han Solo lo hizo John Williams.
Tiene un look artesanal como de los años 80, pero con la presencia de los míticos personajes no basta, si no hay historia no resulta convincente y eso es lo que ocurre.
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