, . |
|
CRITICA
Por: PACO CASADO
Los propios historiadores no se ponen de acuerdo sobre lo que es leyenda o historia con respecto al personaje del Rey Arturo.
El cine ha dado varias versiones del tema desde la sofisticada de Los caballeros del Rey Arturo (1953) de Richard Thorpe, con sus combates lanza en ristre en defensa del honor de la dama, hasta la más sobria y realista de Excalibur (1981) de John Boorman, por poner tan sólo dos ejemplos muy diferentes.
Tras años al servicio de Roma, Arturo está a punto de volver a su casa, ya que el imperio se retira de la Islas Británicas.
Pero antes, una última misión le llevará a él y a sus caballeros de la Tabla Redonda, Lancelot, Galagah, Bors, Tristán y Gawain, a determinar quién ocupará el trono Gran Bretaña cuando él parta.
El territorio necesita un rey, pero no sólo buscan a un hombre que los defienda de las fuerza invasoras sajonas, sino que también sea capaz de conducir la isla a una nueva era.
Se trata de una visión actualizada y algo desmitificadora de la figura del rey Arturo y sus caballeros de la Mesa Redonda.
Esta nueva versión promete acercase a la historia y lo que nos ofrece es una película de romanos, ya que la solidez de los apuntes históricos se nos antojan mínimos y superficiales.
El film viene marcado por su productor Jerry Bruckheimer, habitual de cintas espectaculares de acción, y de su director, Antoine Fuqua, todo un especialista en el género, por lo que priman las batallas y las luchas, marcadas con buenas dosis de violencia, realismo y crueldad.
En este sentido hay que destacar la espectacularidad de la batalla sobre el hielo.
El guion de David Fanzoni, autor del de Gladiator (2000), que está escrito en clave realista, es un canto a la amistad, pero no es muy clarificador, sino más bien dirigido a las exigencias del productor, con una historia viril y violenta de unos hombres que luchan por la supervivencia de la colectividad y la defensa de la tierra.
No hay nada de romance, tan sólo breves miradas, ni rivalidad entre Arturo y Lancelot por Ginebra, aquí convertida en una guerrillera que lucha por la libertad de Britania frente a los romanos o los sajones, en una realización oscura, apocalíptica, en la que Arturo es la luz de la esperanza.
En la interpretación destaca la elección de los actores que componen el reparto con el trabajo de dos buenos secundarios como Ray Winstone y Stellan Skargärd, así como la labor de los británicos Clive Owen y Keira Knightley, para una película discretamente entretenida.
Premio Hollywood a Keira Knightley. Premio Huabiao Film. Premios Iris del público a Keira Knightley y al maquillaje.
MÁS INFORMACIÓN DE INTERÉS
TRÁILER'S
BANDA SONORA
CLIPS
CÓMO SE HIZO
VIDEO ENTREVISTAS
AUDIOS
PREMIERE