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CRITICA
Por: PACO CASADO
A lo largo de la historia del cine hay bastantes producciones que tienen a un perro como protagonista, incluso muchos de ellos se han hecho famosos, como son los casos de Rin Tin Tin, Lassie, Colmillo blanco, Beethoven, así como Dama y Vagabumdo de dibujos animados, entre otros, por no hacer la lista más larga.
En este caso Lulu, la perra coprotagonista de esta película, no se va a hacer famosa, pero sí nos va a ofrecer una bonita aventura en compañía de un exsoldado del ejército de los Estados Unidos.
Esta es la historia de dos ex miembros de los Rangers de las tropas norteamericanas los que se emparejan involuntariamente para hacer un viaje de 1500 millas por carretera, el más largo de sus vidas.
Ellos son Jackson Briggs, un joven guardabosques que trabaja sirviendo sandwiches, que pretende volver a entrar en el ejército, y Lulu, la perra K-9, un pastor de raza malinois.
Al primero se le encarga llevarla a un lugar determinado de Arizona, y de esa forma pretende hacer méritos para lograrlo.
Jackson tiene dañados el cerebro y la vista, debido a una acción de guerra, y de vez en cuando le dan ataques, que son los motivos que se le ponen como impedimento para reingresar en el ejército como es su deseo.
Ambos hacen un largo viaje en un viejo Ford Bronco de 1984 a través de la Costa del Pacífico, hasta Arizona, con la esperanza de poder llegar a tiempo al funeral de Ridley Rodríguez, un compañero soldado, que fue su mejor amigo, que era su dueño, que ese es el deseo de la familia, y todos se alegran al verla llegar.
El argumento de este film lo constituyen las muchas peripecias que ambos llevan a cabo a lo largo del camino, rompiendo algunas normas y burlando la muerte en alguna ocasión.
Al principio Lulu se muestra reticente manteniendo un cierto comportamiento un poco hosco con él, pero terminará bajando la guardia y haciéndose ambos unos buenos amigos.
Hay muchos momentos en los que los diálogos se convierten en monólogos ya que en las conversaciones que se establece entre Briggs y Lulu tan sólo habla él.
Esta cinta supone el debut en la dirección de un largometraje tanto de Reid Carolin como del actor Channing Tatum que comparten en este caso la realización de esta bonita y entretenida historia perruna.
La banda sonora compuesta por Thomas Newman adorna los momentos más sentimentales del relato.
Como curiosidad Channing Tatum se interesó en hacer esta película como homenaje a su propia perra, con la que él también viajó, antes de que muriera de cáncer en 2018 y se le puso el mismo nombre a la protagonista de este film en su memoria.
Ganó dos premios Cola de largometraje independiente.
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