Título:	COHERENCE
Tit. Orig.:	T.
Nacionalidad:	EE.UU., 2013
Dirección:	JAMES WARD BYRKIT
Guión:	JAMES WARD BYRKIT. Basado en una historia de JAMES WARD BYRKIT, ALEX MANUJIAN
Fotografía:	NIC SADLER, ARLENE MULLER
Música	KRISTIN OHRN  DYRUD
Interpretes:	EMILY FOXLER, MAURY STERLING, NICOLAS BRENDON, LORENE SCAFARIA, ELIZABETH GRAZEN, HUGO ARMSTRONG, ALEX MANUJIAN, LAUREN MAHER
Censura:	NO RECOMENDADA PARA MENORES DE 12 AÑOS
Duración:	87 MINUTOS

 Por  PACO CASADO

  En Finlandia en 1923 el paso de un comenta hizo que los habitantes de un pequeño pueblo quedaran completamente desorientados, originando comportamientos muy extraños, incluso una señora llamó a la policía alertando de que un hombre que estaba en su casa no era su marido.
 Décadas más tarde, un grupo de amigos, compuesto por cuatro parejas, recuerdan este caso mientras cenan, se divierten, brindan y se preparan para ver pasar un cometa y algo extraño vuelve a suceder con ellos.
 Lo que en principio se organiza como una tranquila y divertida velada entre amigos se complica enormemente.
 El paso del meteorito es una mera excusa para exponer una situación en el terreno de lo absurdo.
  James Ward Byrkit, procedente del mundo de los escenarios, debuta en la dirección de un largometraje con este thriller psicológico a caballo entre la ciencia ficción y el terror, que es todo un drama sobre las emociones y los conflictos humanos en esta sorprendente película de ciencia-ficción que tiene un cierto aire de intriga, que está realizada a lo largo de cinco noches, sin guion, con tan sólo ocho actores que prácticamente no salen de la casa en la que están cenando y reuniéndose comentando aquel hecho histórico mientras esperan ver el paso de un cometa.
 Cada actor tenía asignado lo que había de conseguir su personaje pero no sabían lo que habían de lograr los demás.
 De esta experiencia resulta un film totalmente improvisado, pedante, aburrido, realizado en tiempo real, sin ensayos previos, en torno a los giros de la trama y la progresión de la historia, de ahí posiblemente la incoherencia final en contra del irónico título, que se mete en disquisiciones sobre la metafísica de la mecánica cuántica, para terminar echándole la culpa al cometa.
 Lo que decimos siempre, los experimentos mejor con gaseosa para que no tenga que ser el espectador víctima del resultado de los mismos.
 La puesta en escena está prácticamente hecha a base de cámara en mano, con abundantes diálogos que incluso se atropellan entre sí los que hablan, con los que la lectura de los subtítulos a veces se hace imposible por la brevedad de exposición.
 El inexistente guion, a pesar de haber sido premiado, nos parece de una incoherencia y falta de comprensión propia muchas veces de las cintas de ciencia ficción.
 Un par de hombres de los reunidos, al apagarse la luz donde están, van a ver a una casa vecina que es la única que sí tiene energía eléctrica y encuentran una caja con las fotografías de todos los reunidos que tienen por detrás un número.
 Algún tiempo después una mujer vuelve a la casa y ve allí a los dobles de las personas reunidas.
  Situaciones de esta clase que no tienen explicación se suceden a lo largo de este argumento que imaginamos realizado con un exiguo presupuesto, que confesamos no acabar de comprender más que dentro de la fantasía y la ficción, sin más lógica, a pesar de que se dice que todos tenemos un doble en algún lugar del mundo.
 Premio al mejor guion en el Festival de Sitges 2013. Premio a la mejor película en el Festival de cine Fantástico de Bilbao 2014. Mejor ópera prima en el Festival de cine fantástico de Amsterdam.

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