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SINOPSIS
Chris se ha convertido en el mejor francotirador del ejército norteamericano. Su nueva misión le lleva hasta Irak para proteger a sus compañeros. La precisión con la que dispara salva muchas vidas, pero su reputación crece también tras las líneas enemigas y así ponen precio a su cabeza, convirtiéndose en un objetivo prioritario de los insurgentes. Pero este no es el mayor problema que tiene, pues en su hogar mantiene otra lucha abierta.
INTÉRPRETES
BRADLEY COOPER, SIENNA MILLER, JAKE McDORMAN, BRIAN HALLISAY, KYLE GALLNER, LUKE GRIMES, BRANDO EATON, SAM JAEGER, ERIC CLOSE, KEIR O'DONNELL, ERIC LADIN, OWAIN YEOMAN
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Por estadística, Chris Kyle podría haber sido uno de los millones de veteranos de guerra. Se alzó como uno de los francotiradores más letales de la guerra de Irak de toda la historia del ejército estadounidense, pero el director de ‘El francotirador’ se dieron cuenta de que también era muy importante, o incluso más, indagar en la vida de este famoso personaje. Clint Eastwood, director/productor del largometraje, comenta: "Ya he trabajado con historias de guerra, pero esta ha sido especialmente emocionante porque combina hazañas de Chris en la guerra con aspectos personales de su vida privada, lo que la hace incluso más interesante, ya que muestra lo que la guerra es capaz de provocar en una persona, pero también la presión que siente su familia. Es importante recordar lo que una persona se juega cuando va a la guerra y también hay que reconocer lo mucho que está sacrificando, y creo que todo eso hace que esta historia sea tan importante". Bradley Cooper, protagonista y productor de la película, añade: "En cierto modo, es una historia universal que narra por lo que tienen que pasar muchos veteranos: ese desequilibrio emocional que supone estar en la guerra para después volver a casa y llevar una vida 'normal'". El guion de ‘El francotirador’ está basado en la novela homónima co-escrita por Kyle, Scott McEwen y Jim DeFelice. No obstante, el guionista y productor ejecutivo Jason Hall mantuvo una charla con Kyle sobre la adaptación de su historia a la gran pantalla antes de que este escribiera la novela. Chris Kyle se regía por un código muy sencillo: Dios, su país y su familia. Para él no eran solo palabras, sino que formaban la base de una vida dedicada al deber y al servicio y de una firme consagración a algo cuya importancia sobrepasaba sus propios límites. Kyle se hizo famoso y llamó la atención de los productores Hall, Peter Morgan y Andrew Lazar. Morgan recuerda: "Habíamos oído hablar de sus logros como miembro de las Fuerzas de Operaciones Especiales de la Marina de EE.UU, y sabíamos que era un buen patriota, pero, cuando nos pusimos a indagar en su vida, lo que más nos llamó la atención era lo buena persona que era y lo mucho que le admiraban su familia, amigos y compañeros. Queríamos dar vida a una historia que reflejara los aspectos más emotivos de su vida, aquello que era verdaderamente importante para él". Antes de comenzar a trabajar en el guion, Hall viajó hasta Texas para conocer a Kyle. "Al principio no era muy hablador", comenta el guionista, "pero cuando me disponía a marcharme de su casa, sentí que había encontrado una manera para contar la historia y que me había ganado su confianza". En palabras de Eastwood: "Hay muchas escenas de acción muy intensas, pero la trama principal profundiza en las relaciones personales: las de Chris con sus compañeros en la guerra y, sobre todo, la relación entre Chris y Taya, quizá la más importante de la película. Chris está loco por ella, pero del mismo modo, también se ha comprometido a cumplir con los cometidos necesarios para servir a su país". El 2 de febrero de 2013 sucedió una tragedia inimaginable que convirtió el sentido de responsabilidad de los cineastas en una promesa. Chris Kyle, quien había sobrevivido a cuatro peligrosos servicios militares en Irak y había dedicado su vida a ayudar a sus compañeros cuando terminó la guerra, fue asesinado en un campo de tiro cercano a su casa, presuntamente, por un veterano al que estaba intentando ayudar. Según Cooper: "Todavía no le había conocido en persona; solo había hablado con él por teléfono, y, de repente, me enteré de que había fallecido". Después del funeral, Hall se puso en contacto con Taya y habló con ella por teléfono durante horas mientras esta le contaba cómo había sido su vida con Chris. "De pronto, la película se había convertido en una de las maneras mediante las que los niños podrían recordar a su padre, y Taya quería que las cosas se hicieran bien", cuenta Hall. Casi un año después, Clint Eastwood y Bradley Cooper viajaron a Texas para conocer a la familia de Chris. El director recuerda: "Para mí fue vital poder pasar un tiempo con ellos porque nos hicimos una idea mucho mejor de quién era Chris para su familia, formada por personas maravillosas".
El rodaje de ‘El francotirador’ comenzó en Rabat, Marruecos, lugar que sirvió para dar vida a un Irak destruido por la guerra. Eastwood menciona: "La arquitectura marroquí es muy parecida a la de Irak. Se puede recurrir a la construcción de platós en cualquier lugar para conseguir un estilo determinado, pero esto resulta más complicado si quieres conseguir tomas amplias que reflejen la atmósfera de pueblos o ciudades, así que Marruecos resultó ser la mejor opción". El proceso de fotografía comenzó en Irak con un doble propósito, pues Marruecos no solo sirvió como un perfecto telón de fondo, sino que, en palabras de Cooper: "mantuvo a los actores que formaban parte de Equipo 3 de las Fuerzas de Operaciones Especiales de la Marina de EE.UU mucho más unidos que si hubiéramos tenido que regresar a casa todas las noches. Como estábamos en un lugar extranjero, esto nos permitió tener una idea mucho mejor de lo que se sentía al estar tan lejos de casa, así que sacamos mucho provecho de Rabat". El elenco y los cineastas también pudieron sacar provecho de la cooperación de las autoridades locales y los habitantes de Marruecos, quienes permitieron que la producción se extendiera por los diversos barrios de la ciudad. Incluso algunos miembros del ejército marroquí ejercieron de extras en determinadas escenas. Cuando se completó el rodaje en Marruecos, la compañía regresó a California para completar el resto de procesos de fotografía principal. James J. Murakami, diseñador de producción y colaborador habitual de Eastwood, y la también diseñadora de producción Charisse Cardenas, quien trabaja con el director por primera vez, recurrieron a un enfoque doble para este proyecto, pues Cardenas se centró en las secuencias militares y Murakami supervisó el frente estadounidense. Cardenas explica: "Tuve que buscar información sobre Irak, sobre todo de Ramadi, Faluya o Ciudad Sáder, y tomar nota de las descripciones que Chris Kyle hizo de sus misiones. El equipo de rodaje en Marruecos realizó también un gran trabajo y nos ayudó mucho a la hora de conseguir el aspecto que tenía la ciudad cuando Chris servía en el ejército". La producción se llevó a cabo en el estudio Blue Cloud Ranch de Santa Clarita, California, donde el departamento artístico tuvo que recrear un entorno urbano Iraquí parecido al de las ubicaciones de rodaje de Marruecos. Gran parte de las escenas en las que se muestran imágenes de las misiones de Chris en Ramadi se grabaron en este estudio. Una de las secuencias de batalla críticas se rodó en el pueblo desértico de El Centro, situado a unos 160 kilómetros al este de San Diego, en el árido Valle Imperial. Allí, el equipo de diseño se encargó de convertir una antigua planta de procesamiento de leche en una fábrica abandonada, donde Chris y su equipo se ven en peligro por culpa de dos frentes imparables. Para que el público pueda experimentar toda la acción en primer plano, Eastwood y el director de fotografía Tom Stern utilizaron las vanguardistas cámaras Blackmagic. Las cámaras, tanto fijas como de mano, estaban colocadas estratégicamente en los platós y, gracias a ellas, se pudo crear esa sensación que te transporta al centro de la batalla. Jason Hall comenta: "Clint tiene esa habilidad natural que le indica cuál es el fotograma más importante y además deja que el público lo identifique de la misma manera que él lo hace. Le ha aportado un aspecto crudo a la película, casi como sintieras que la arena te golpeara directamente, algo que daba una sensación de autenticidad y que no transmitía un intento desesperado por provocar emociones o manipular al espectador; simplemente deja que todo siga su curso y luego invita al espectador a que se sumerja en la aventura". El terreno donde Chris y sus compañeros entrenaban se dividió en dos lugares. En el Paramount Ranch de la Sierra de Santa Mónica se grabaron las escenas en las que Chris demuestra sus habilidades de puntería y el parque Leo Carrillo State Beach de Malibú sirvió de escenario para el famoso centro de entrenamiento para la demolición submarina de Coronado, California, donde se ponía a prueba a los candidatos y donde solo los mejores conseguían la insignia del tridente de las Fuerzas de Operaciones Especiales de la Marina de EE.UU. Aunque los actores no tuvieron que pasar por las duras pruebas que pasan los candidatos en la realidad, no se libraron de tener que realizar algunos exámenes físicos. "Fue muy duro que nos rociaran con agua mientras teníamos que hacer algunas maniobras de patada, sobre todo porque a veces Clint alarga mucho las tomas. Recuerdo que hubo un momento en el que miré a Dauber y pensé, 'Si Dauber para, yo también, pero no antes'", recuerda Cooper entre risas. Murakami se centró en el diseño de las casas en las que Chris y Taya iban construyendo su vida en común. Una modesta casita en Venice, California, sirvió para dar vida al hogar de la joven pareja en San Diego, donde Taya vivía durante las misiones de Chris. A la hora de diseñar el vestuario del largometraje, Deborah Hopper explica: "Hicimos un arduo trabajo de investigación y recopilamos una gran variedad de fotografías antiguas de Chris y Taya para que el vestuario fuera lo más fiel posible a su estilo personal". También los uniformes militares, sobre todo los de los miembros de las Fuerzas de Operaciones Especiales de la Marina, incluían pequeños toques personales. El departamento de Hopper tuvo que consultar a los consejeros militares para garantizar la verosimilitud de los uniformes y asegurarse de que todos los detalles eran precisos. Sin embargo, la diseñadora indica que los uniformes de los miembros de las Fuerzas de Operaciones Especiales de la Marina de EE.UU reflejan la personalidad de cada soldado.